V e i n t i n u e v e
Hice de todo por intentar despertar a Taehyung, pero él realmente parecía haber fallecido de pronto.
Salgo de la oficina, y con lágrimas en los ojos, pude ver a Jungkook subiendo las escaleras. Él frunció su ceño extrañado de ver que acababa de salir de su lugar de trabajo, pero creo que también puede ser por la manera tan desesperada en la que estaba llorando.
— ¡¡Jung-kook!! —dije con mi voz entre cortada—. Algo le pasa a Tae. No reacciona.
— ¿De qué...
No dejo que termine de hablar y lo llevo conmigo a donde estaba Taehyung todavía en la misma posición en la que lo dejé.
—No reacciona y no siento su pulsación. Tampoco está respirando.
— ¿Qué pasó? —Preguntó mientras iba acercándose a Taehyung—. ¿Qué pasó, Blake? —volvió a preguntarme para obtener una respuesta inmediata.
— ¡No lo sé! —respondí exaltada—. Y-Yo... Yo simplemente vine aquí en la tarde para ayudar a Taehyung a encontrar a Yoongi. Luego, hace unos veinte minutos aproximadamente, estuve hablando muy bien con él mientras Taehyung bebía del té de esa taza. Te llamó, dijiste que vendrías a verlo y pensé que lo mejor sería que yo les diera su espacio para hablar; entonces me fui y luego me di cuenta que me faltaba mi celular. Regresé y Taehyung ya se encontraba así —hablé de una manera veloz, que hasta yo me sorprendí al escucharme—. Pensé que Taehyung estaba dormido, porque él me dijo que solía dormir con los ojos abiertos; pero luego me asusté cuando no respondía y...
—Está muerto. —El rostro de Jungkook evocaba total y completa serenidad mientras que yo trataba de mantenerme en pie luego de la noticia.
Por inercia a la noticia, empecé a reírme como una maldita loca que no tiene sentimientos de empatía a la persona que ahora se encuentra sin vida en la misma habitación. Jungkook volteó a mirarme confundido, vio que seguía llorando como hace minutos pero le confundía la intensidad con la que me estaba riendo.
—Esto es una broma. —Rápidamente me acerco a Jungkook y lo tomo de sus brazos—. Sí, esto definitivamente es una broma porque te quieres vengar de mí. Solo quieres joderme, es eso. —Él se mantiene serio mientras que la sonrisa que tenía en el rostro se iba desapareciendo poco a poco—. Jungkook, mírame, es... broma —Jungkook sigue con la misma cara de antes, no la cambia.
—Es mejor que salgamos, Blake.
Jungkook va haciendo que retroceda mientras me sostiene de la cintura, sin embargo, yo no quería irme sin antes volver a comprobar que Taehyung estaba sin vida.
—Suéltame —le digo mientra intento empujar sus brazos de mí.
—No, entiéndelo.
— ¡¡Que me sueltes, Jungkook!! —finalmente me separo de él y voy a donde está Tae—. Taehyung ya despierta, el chiste ya pasó.
— ¡No hay ningún chiste, Blake! —Replica irritado Jungkook. ¿Cómo podía verse de esa manera y no llorar cuando uno de sus compañeros ha fallecido?—. Tú misma ya lo comprobaste. Taehyung ya no existe, se murió.
— ¡Él no puede estar muerto, hace minutos se encontraba bien!
—Descubriremos la causa de su muerte —responde rápidamente—. Pero ya ven aquí antes de que dejes otra huella tuya y te tomen a ti como la asesina.
No me muevo de mi lugar hasta luego de unos segundos en donde Jungkook me ofreció un refugio entre sus brazos. Es ahí donde corro a él y oculto mi rostro en la curva de su cuello, mis lágrimas no dejaban de salir y eso provocaba que mojara la chaqueta de cuero que Jungkook traía puesta. Todavía me es imposible asimilar lo que está sucediendo ahora, no entiendo cómo es que pasó.
Jungkook no dijo ni una sola palabra luego de que saliéramos de su oficina. Todos los trabajadores del departamento se enteraron de la muerte de Taehyung ni bien Jungkook llamó a los forenses para que se encargaran de trasladar el cuerpo de Taehyung. Luego, los amigos de Jungkook llegaron a pocos minutos; en sus rostro se veía la preocupación y la pena.
Jungkook les contó lo que sucedió y Joo-kyung rompió en llanto. Se arrodilló ante la puerta de entrada mientras que sus gritos se encargaban de asustar a todos los presentes. Entre Jin y Namjoon lograron calmarla y hacer que se sentara en una silla.
Yo por mi parte, no dejaba de mirar hacia el interior de la oficina y fijar mi mirada en la taza de té que estaba cerca de Taehyung. Me llamarían loca si les digo a uno de ellos que sospecho de la taza, o del termo de metal que estaba en otro sitio junto a los sobres de té vacío.
¿Pero quién sería capaz de matar a Taehyung de esa manera? ¿Y si no era a Taehyung a quien querían matar?
Jungkook también acostumbraba a tomar café o agua de ese termo. Con eso se mantenía despierto para seguir trabajando.
— ¿Es verdad que Yoongi está en Daejeon? —se acerca Jungkook a preguntarme eso.
— ¿En serio vas a preguntarme por Yoongi cuando tu amigo acaba de fallecer? —Replico. ¿Hasta dónde es capaz de llegar la apatía de Jungkook ante situaciones trágicas como esta?
—Lo digo porque Taehyung me llamó para decirme sobre esa información —contesta serio, y molesto, gruñe por lo bajo cuando regresa a mirar el cuerpo sin vida de Tae—. Ahora que él ya no está vivo, solo me queda preguntarte a ti.
Iba a responderle a Jungkook lo que quería saber, pero en ese momento llegaron los forenses. Luego llegó el padre de Jungkook y se lo llevó a otra parte para hablar.
Más tarde, Mireu llega y se para enfrente de mí con su cara de seriedad, se cruza de brazos y mira de soslayo el trabajo que van haciendo los médicos forenses con el cuerpo de Taehyung.
Intento irme antes de escucharla hablar, pero luego ella me detiene y me fuerza a escuchar lo que tiene para mí.
—Que raro que le haya pasado esto a Taehyung mientras tú estabas con él —ella ladea su cabeza a un lado—. Estoy segura que el oficial Jeon me pondrá a mí este caso.
—Bien por ti —respondo cortante.
Otra vez intento irme de ese lugar, pero otra vez está ahí Mireu interponiéndose en mi camino.
—Y si yo me entero que tú tienes algo que ver en esto, no tendré piedad para encarcelarte —me amenaza—. De esa manera ya podré deshacerme de ti.
—En serio, consíguete una vida —replico aburrida de su palabrería—, ¿por qué estás tan obsesionada conmigo? Dame un respiro, por favor.
Y sin nada más que tolerar, dejo a Mireu molesta conmigo por haberla dejado con la última palabra en la boca. En serio que a veces me llegaba a estresar ese odio hacia mí. Que yo sepa, nunca le he hecho algo que pueda justificar su actitud conmigo; solo bastó que me viera cerca de Jungkook para odiarme.
Les doy una última mirada a todos los que me rodean y tomo la decisión de irme de aquí. Habían muchos que se vean preocupados por la muerte de uno de sus compañeros, otros se mostraban curiosos por saber cuál fue la causa de la muerte, y otros simplemente no les importaba mucho todo lo que estaba sucediendo. Yo no pertenecía a ninguno de esos grupos y por eso es mejor que me regrese a mi casa.
Estando ya afuera de la estación de policías, tomo un taxi que me lleva directo al edificio donde vivo.
Durante el viaje, mi celular suena entre mis manos. Una notificación de Jungkook me había llegado, era un mensaje que era para saber dónde me encontraba.
Dudé mucho en si responderle. Pero finalmente decidí que lo mejor era tomarme un tiempo para mí misma, tal vez de esa manera también aprenda a soltar lo que ya no es importante en mi vida.
Como Jungkook y nuestro problema.
Llegando a mi casa, y subir a pie ocho pisos, ya que el ascensor se le dio por no funcionar, voy a mi sala y me acuesto rendida. Siento un gran peso sobre mí cuando intento respirar con tranquilidad; pero sabía que eso iba a ser imposible, mi cabeza dolía mucho y las últimas imágenes que tuve de Taehyung con vida se reproducían una y otra vez como si no tuvieran un fin.
Luego pensé en algo triste, o al menos era triste para mí: ¿Cómo tomaría Se-young la repentina muerte de su padre? Lo último que escuchó de él fue el cuento que le contó por teléfono.
Siento que ella está muy pequeña para experimentar lo que realmente es la ausencia de una figura paterna. Me pregunto cuántas noches ella llorará por Taehyung cuando esté más grande; porque ahora es fácil engañarla diciéndole una mentira que suavice la fuerte situación de un fallecimiento; pero nadie sabe cómo es que se sentirá cuando vaya creciendo y vaya entendiendo mejor las cosas. Me pregunto si eso afectará su actitud con las demás personas, hay veces en las que algunos niños que han perdido a su mamá o a su papá siempre se sienten celosos de otros niños que sí los tienen todavía con vida. Y las fechas especiales para los padres es lo que más le afectará durante los años, quizá, ella ya no sienta el mismo entusiasmo que antes y eso hará que esa chispa de inocencia y alegría que caracteriza a los pequeños vaya apagándose y comience a sentirse sola e incomprendida.
Si la esposa de Taehyung me dejara ayudar a Se-young con esta nueva etapa de su vida, yo con gusto haría lo que sea por tan solo verla seguir siendo feliz.
Yo en mi momento necesité ayuda, pero nadie parecía entenderlo. Y aunque una nueva familia me acogió con mucho cariño, es obvio que no era lo mismo.
Decidí ya no darle más vuelta al asunto e irme a mi habitación para descansar un poco. Sin duda alguna este día había sido tan distinto a los otros, y más triste.
***
Pensé que este martes iba a poder descansar hasta las nueve de la mañana y luego atender a mis clases. Pero no me esperé que el aroma a tostadas quemadas fuera lo que me despertara a eso de las siete de la mañana. Esto era raro.
Me senté rápidamente en mi cama, todavía con mis antifaz de dormir en mis ojos. Intento oler una vez más y ese aroma seguía inundando mi departamento. Me quité el antifaz y rápidamente pensé que uno de mis vecinos había intentado hacer su desayuno pero algo le salió mal; no obstante, recuerdo que eso ya había pasado otras veces y el olor no había sido tan intenso como ahora.
Salí de un solo brinco de mi cama y fui a ver lo que estaba pasando.
Cuando llegué a la sala, noté que la chaqueta que Jungkook ayer estaba utilizando estaba tendida sobre el sillón individual blanco.
No sé si mi corazón estaba latiendo de la emoción o de la confusión que esto me causaba. Había pasado casi una semana desde aquel día en el que Jungkook decidió por su cuenta ya ni verme más, y ahora él mismo está aquí en mi casa dejando un olor a quemado por lo que sea que esté cocinando.
Voy a la cocina y ahí me lo encuentro botando las tostadas que se le habían quemado.
— ¿Necesitas ayuda? —le digo. Jungkook se voltea alterado y me mira con vergüenza—. Gracias por hacerme acordar que debo cambiar la clave de mi puerta por tercera vez.
—Quería algo de desayunar.
— ¿Y en tu casa no hay comida? —pregunto. Me acerco hacia donde está él para ayudarlo a preparar la tortilla de huevo y pan que se estaba intentando hacer—. ¿Por qué estás hurtando alimentos de mi cocina?
—Porque luego debemos ir al funeral de Taehyung. —Fue lo último que dijo antes de retirarse de la cocina.
No podía creer lo muy rápido que llegaron a hacer toda la autopsia de Taehyung para que en menos de 24 horas ya estuviese listo para su entierro.
Voy detrás de Jungkook tratando de que me diera más información sobre la causa de su muerte. Pero veo que él está exhausto y necesita un respiro, de seguro ya cayó en la realidad de los hechos.
—¿Ya saben de lo que murió? —Jungkook niega sin mirarme—. ¿Y cómo es que...
—Yeon-joo, la esposa de Taehyung, no quiere que le hagamos nada a su cuerpo —responde. Se acerca a mí y me mira fijamente—. Ella nos dijo que Taehyung estaba muy bien de salud, nosotros también confirmamos eso. Lo único que queda es como causa de muerte es el agua del termo y la taza de té que Taehyung estuvo bebiendo. Estamos esperando los resultados de laboratorio.
Por dentro me siento tan impresionada que lo que yo supuse puede que haya sido la verdadera causa de muerte. ¿Pero quién podría matar a Taehyung de esa manera?
—Entonces hoy es el entierro de Taehyung —reitero abatida—. ¿Y por qué estás en mi casa?
—Ya te lo dije.
—También me lo pudiste decir mediante un mensaje —zanjé.
Jungkook se queda en silencio mientras continúa mirándome. Su mandíbula se tensa y su ceño se frunce hasta mostrarse, según yo, enojado por la forma en la que le estaba hablando.
—Vas a ir conmigo a buscar al idiota de tu prometido. —Finalmente respondió—. ¿Alguna otra cosa que quieras preguntar?
—¿Por qué yo debo de ir contigo?
—Para que veas con tus mismos ojos cómo lo arresto y lo llevo a la cárcel —dice con un deje vengativo—. Presionaré tanto a tu novio y a su cómplice para que confiesen su crimen, se declararán culpables y tú estarás sola luego de eso.
—¿Entonces quieres verme sufrir por eso?
—Es lo menos que te mereces.
—¿Entonces me merezco más cosas? —replico. Jungkook se cansa de escucharme y es por eso que va caminando de un lado a otro por mi departamento—. ¿Por qué piensas que las merezco?
—Tú sabrás.
—No —digo molesta—, dímelo tú.
—Por haberme hecho daño.
—Yo nunca quise hacerte daño, Jungkook...
—¡Sí lo hiciste!
—¡Yo nunca te hice daño! —Grité hasta que la garganta me dolió—. ¡Yo te quiero, Jungkook, pero no de la misma manera en la que tú lo hiciste conmigo! ¡¿Piensas que no me dolió todo eso que me dijiste en tu oficina?! ¡¿Piensas que no me arrepiento por haberte ilusionado?!
Lo que menos quería que sucediera, pasó.
Otra vez me encontraba llorando por las palabras y la actitud tan necia y terca de Jungkook. Ahora me doy cuenta que él está tratando de victimizarse cuando está conmigo para que yo le diera la razón; pero yo sé muy bien que las cosas que no fueron como él las dice; a Jungkook solo le está importando creer la versión de sus hecho envés de analizar muy bien lo que sucedió entre nosotros.
—Jungkook, si tanto te afecta que yo "haya jugado con tus sentimientos", entonces ya no me busques más y déjame en paz —digo un poco más calmada. Jungkook no mueve ni un solo músculo y solo se queda mirando al piso mientras me va escuchando—. Pensé que ambos podríamos ser amigos, porque sé que tú tienes una buena capacidad de poder reprimir tus sentimientos; y, aunque eso esté mal, sé que es como un escudo protector para ti. —Vuelvo a acercarme a él y levantó su mirada para que hablemos bien—. Inténtalo conmigo, yo estaré bien. Oculta u olvida esos sentimientos que tienes por mí, o tan solo conviértelos en un cariño de amigos.
—Me interesas mucho, Blake —dice con su voz entre cortada—. Siento que contigo tengo una historia muy diferente y fuerte. ¿Por qué no te gusto?
Jungkook era totalmente alguien atractivo, no por nada puede traer loca a Mireu; o pudo conseguir lo que quiso con la recepcionista del centro psiquiátrico. O también con Dayeon.
A mí también me gustaba su físico, y sus sentimientos son los más tiernos que he podido percibir de alguien con un temperamento al igual que el suyo.
El problema era otro, y uno muy riesgoso para una relación sana.
—Somos distintos. Tengo pensamientos que me dicen que contigo podría morir en cualquier momento —le digo sincera—. Tengo miedo de ti y de lo que podría pasar si un día llegamos a estar juntos y discutimos. Simplemente no estamos hechos para entendernos de manera correcta.
—Eso es absurdo. ¿No dice la ciencia, en la teoría del magnetismo, que los polos opuestos se atraen?
—Nosotros no somos imanes, Jungkook.
—Desearía que fuéramos imanes —suelto una risa nasal antes de volver a verlo. Jungkook estaba triste, otra vez estaba siendo rechazado por mi—. Cámbiate, el funeral comenzará a las 8:30.
Asiento levemente y me separo de Jungkook para irme a mi habitación y encerrarme en esta.
Entro a mi baño y me echo un poco de agua fría para repeler las lágrimas que seguían brotando como nunca. En serio me estaba doliendo bastante que Jungkook me hiciera sentir de esa manera, me daba tanta pena por él, quería acercarme y consolarlo pero eso causaría que lo confundiera más. Y eso era malo. ¿Cómo puedo estar cerca de él sin su contacto? Hasta tomarle de la mano podría ser peligroso por la forma en cómo él se la tomaría.
Y ayer lo había abrazado para buscar consuelo inmediato ante la muerte de Taehyung. De seguro ese abrazo lo confundió y pensó que algo en mí había cambiado, que tal vez me enamoré rápidamente de él y por eso vino a intentarlo una vez más. Sin embargo, recibió la misma respuesta que ese día.
Me miro al espejo con lástima. Seco las últimas lágrimas que salen de mí con el dorso de mi mano y finalmente me voy a mi armario para sacar una blusa blanca de algodón y unos pantalones negros, también saco un abrigo overside para la terrible neblina que había aparecido esta mañana. De otra parte de mi armario, saco una gorra parecida a la que los carteros de años atrás utilizaban como parte de su uniforme.
Hoy no tenía tantas ganas de lucir muy elegante, pero tampoco me quería ver como una persona desarreglada que no pensó muy bien en lo que se pondría para la ceremonia.
En menos de media hora termino de vestirme y salir de mi casa junto a Jungkook. El había estado limpiando la cocina mientras que yo me fui vistiendo.
Bajamos hasta el primer piso y salimos del edificio para subirnos al auto negro de Jungkook. Durante el camino hacia el cementerio donde iban a enterrar a Taehyung, Jungkook no me dijo absolutamente nada; solo se había encargado de acelerar el camino y terminar de una vez por todas con este martirio de estar juntos en un mismo lugar.
Si no podíamos estar juntos en el auto para irnos a un lugar dentro de la ciudad, ¿qué será cuando vayamos juntos a buscar a Yoongi?
—¿Estas seguro de ir conmigo a buscar a Yoongi? —le digo sin despegar mi mirada de la ventana.
—Tú eres la única que ha estado con Taehyung cuando lo hallaron. Solo tú sabes en dónde se encuentra, por eso te llevo —responde gélido. No creí volver a escuchar ese tono de voz de Jungkook hacia mí—. Partiremos mañana a primera hora. No debo de perder ni un segundo más.
Regreso a mirarlo por unos segundos. Todavía se me hace difícil pensar que Taehyung haya muerto, posiblemente, tomando té. Si lo que sea que lo haya matado estuvo en el agua, o en la taza en sí, entonces cualquiera pudo morirse. Hasta Jungkook si hubiese ido a trabajar.
—¿Puedo decirte algo? —Jungkook asiente sin dejar de mirar la pista—. Creo que alguien quiso matarte. Desde antes que me dijeras sobre los análisis del agua del termo y la taza de té, yo también creí que algo debían de contener; probablemente el autor de este crimen no quería matar en sí a Taehyung, sino a ti. Es extraño que esto haya pasado en tu oficina y con las cosas que tú tienes ahí.
—¿Matarme a mí? —Repite confundido—. ¿Por qué?
—Algún enemigo que tengas y te quiera ver muerto, tal vez.
Jungkook me mira por unos milisegundos asombrado.
—¿Trataste de matarme?
—¡No, idiota! —Replico ofendida. Jungkook intenta no reírse, pero no lo logra y termina sonriendo de lado—. Aunque no lo creas, yo lloraría por tu muerte. —Jungkook finalmente deja de reírse de repente y se queda con su gesto neutral—. ¿No tienes a alguien que quiera verte muerto? ¿No has tenido problemas en estos días?
—Solo Mireu y mi papá —contesta sin darle importancia—, pero a ellos les pesa un dedo para al menos hacer un crimen como ese. No pudieron ser ellos.
—¿Y si fueron los del equipo de basquet? —Jungkook arquea otra vez su ceja, pero no sé ríe. Sabe que puede ser probable esa hipótesis—. Ya has visto que ellos están lo bastante dementes para matar a quien sea.
—Pudo que haya sido así, o puede que no. —Encoge sus hombros mientras vamos subiendo una colina, estábamos a nada de llegar—. Lo único que sé es que me salvé de una muerte inmediata.
—Claro, y estás feliz que Taehyung haya tomado tu lugar —replico sarcástica.
—Ese ya es tu comentario, yo nunca dije eso.
Finalmente llegamos al cementerio donde se enterraría a Taehyung. Pasamos por las rejas negras que protegen este lugar y Jungkook siguió manejando unos cuantos metros más hasta que finalmente llegó al sector en donde se encontraban bastantes carros parqueados a los extremos de la pista. Jungkook hizo lo mismo que los otros autos y salimos a la misma vez del vehículo.
A unos cuantos metros de nosotros se hallaba un toldo negro con el logo del lugar grabado con letras en blanco. Debajo de esta, habían muchas personas vistiendo los colores representativos del luto. La ceremonia parecía ya haber iniciado, ya que ahí mismo también se encontraba el padre que estaba realizando la paraliturgia.
—Me va a enfermar escuchar las creencias religiosas de Yeon-joo, pero todo sea por Taehyung. —Dice Jungkook antes de comenzar a caminar a mi lado.
—No hemos traído flores —le digo cerca de su oreja.
Jungkook toma sin permiso el arreglo floral de otra lápida como si realmente esas flores le pertenecieran.
—Ya las tenemos.
—Eres un grosero.
—Estoy seguro que Taehyung ahora mismo se está riendo desde arriba, si es que de verdad lo está —replica. Fuerzo para no sonreír y solo niego con la cabeza.
Nos acercamos más a toda la multitud que se encontraba reunida debajo del toldo. Divisamos a Jin y a Joo-kyung juntos mientras que Namjoon se encontraba un poco lejos de ellos dos, Jungkook se acerca a Namjoon mientras que yo me voy donde estaban Jin y Joo-kyung. Me saludo con la chica y con Jin a la vez en silencio.
Mientras íbamos escuchando lo que restaba de la paraliturgia, tuve curiosidad de saber si Sol, Yeon-joo y Se-young se encontraban por aquí. Miré por todas partes hasta que me encontré con la niña más encantadora del mundo vistiendo un vestido blanco y una vincha de flores rosas, aquel accesorios combinaba a la perfección con su cabello castaño y las ondas naturales de esta. Ella se encontraba abrazando su peluche de león mientras que una señora que vestía un enterizo negro y utilizaba lentes de sol negros iba fumando atrás de ella, de seguro ella debe see su madre.
—¡Mamá! —dice Se-young, alzando su voz y llamando la atención de la mayoría de nosotros—. ¿Ahí se encuentra papá? —señala el cajón marrón que estaba delante de mí.
Su madre asiente y luego la calla para que no interrumpiera más en la ceremonia.
Minutos más tarde, veo que otra chica más joven va acercándose a las espaldas de Yeon-joo. Ella aprecia ser de mi edad por las facciones tan delicadas que la caracterizan, lleva en sus manos un enorme ramo de flores mientras va evitando seguir llorando por cada paso que va dando.
—Ella es Sol —escucho decir a Jin. Él era el único que había visto a Sol cuando atrapó a Taehyung besándola—. ¿Yeon-joo sabrá de ella?
—Eso ya no importa. Ahora cállate —le responde Joo-kyung por lo bajo.
Sol llega en el momento indicado, ya que la paraliturgia había acabado y ahora se estaban colocando todos los ramos de flores a un lado del hoyo en donde estaría en cajón de Taehyung. Es en ese momento en donde Se-young se acerca con una cesta de paja para soltar algunos pétalos blancos sobre la tumba de su papá, Yeon-joo la ayudó a hacer eso a la misma vez que fue deshaciendo un ramo de rosas blancas y fue poniendo las flores sobre el cajón.
—Este no es un adiós, Kim Taehyung —dice el padre—. Cuando sea el momento de partir, de tus amigos, sé que los recibirás con tanta alegría en las puertas del reino de los cielos.
—¡Mamá! —vuelve a hablar Se-young—. ¿Dónde va a estar papá?
—En el cielo, cariño. Desde arriba te estará cuidando.
Se-young pareció no haberle gustado esa respuesta que le dio su madre, porque inmediatamente se alejó del cajón cuando este comenzó a bajar hasta llegar a lo profundo del hoyo.
—Pero yo quiero que mi papá esté conmigo ahora. —Replica con tristeza—. ¿Por qué no se puede quedar aquí con nosotras?
—Porque él ya está en un mejor lugar. —Intenta decir su madre con dulzura.
—¡Pero no cumplió con su promesa de estar conmigo para mi cumpleaños! —Se-young comenzó a molestarse y no demoró en soltar el primer grito que alarmó a todos—. ¡Él me dijo que íbamos a visitar a los tíos de Daegu!
—¡Se-young entiende que tu papá nunca más va a regresar! —Yeon-joo finalmente pierde los papeles y agarra fuerte a su hija de su brazo—. ¡Tu papá está muerto y ahora deberás de vivir con eso!
Todos los presentes se quedan asombrados por la manera tan cruel en la que Yeon-joo le habló a su hija cuando ella, en su inocencia, solo quería una respuesta clara a sus preguntas. Nadie puedo dejar de mirar hacia dónde se estaba dirigiendo Yeon-joo con la niña, una estaba molesta y otra estaba desgarrando su garganta llorando.
—Yeon-joo nunca fue buena madre para Se-young. —Chistó Joo-kyung. Namjoon y Jungkook se acercaron a nosotros para acompañarnos a seguir viendo el trato de la ex esposa de Taehyung con su hija—. Que alguien tenga piedad por Se-young y la salve de su madre.
—Ahora entiendo porqué Taehyung estaba con Sol —añade Jungkook sin ser precavido con sus palabras, justo la chica estaba pasando frente a nosotros para acercarse más a la tumba de Taehyung y llorar mientras veía cómo iban echándole la tierra sobre su ataúd—. Oups.
Ahora los cinco fijamos nuestra mirada en Sol y vimos cómo sus lágrimas brotaban con tanta facilidad mientras que con Yeon-joo no hubo ninguna lágrima de oír medio.
—¿Por qué tuviste que dejarme, Tae? —solloza la chica—. Teníamos todo planeado para cuidar a tu hija y a nuestros propios hijos, pero ahora todo se ha acabado... Te amo tanto, ningún otro hombre podrá reemplazarte. Eres el dueño de mi corazón y lo sabes.
Una corriente eléctrica pasó por toda mi espalda al escuchar sus palabras tan sinceras. Ellos sí se querían de verdad, la maquinaría del corazón de Taehyung puso en funcionamiento los sentimientos de Sol, y ahora ella está sola sufriendo por su otra mitad.
Alzo mi mirada hacia donde está Jungkook. Él notó que lo estaba observando y aplanó sus labios a la misma vez que encogió sus hombros.
¿Qué hubiese sido si Jungkook ahora mismo sea él quien esté bajo tierra sin vida?
No quiero imaginármelo y tampoco quiero pedir vivir esa situación. Jungkook merece seguir viviendo a su manera, y yo verlo disfrutar de esta.
Jungkook es como mi segundo Tokki, pero de una manera menos intensa.
*****
He estado escuchando música de Abba para este capítulo wtf JAJSJSJA 😂
Se nos fue Taehyung 😥
Les prometo que en su otra vida él será muy feliz con su otra "Sol"
¿Quieren que Jungkook y Blake sean como imanes? 7w7
Lo siento, últimamente he estado leyendo La teoría de Kim :')
Pd. Creo que no voy a actualizar tan seguido, ya que no me encuentro emocionalmente bien (y no es por La teoría de Kim). Hay algunas situaciones de mi vida que todavía me persiguen hasta la actualidad y me es difícil vivir con ellas, es por ello que estoy mentalizándome para ver cómo les digo a mis padre sobre que necesito urgentemente ayuda psicológica :/
Rogué por mucho tiempo estar bien, pero creo que llegué a mi punto de quiebre y es ahora en donde necesito ayuda de mis papás y de un profesional. Espero que hayan comprendido mi tardanza para actualizar :') de antemano muchas gracias por estar aquí leyendo esta historia <3
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro