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T r e c e

Taehyung

Abrí la puerta de mi habitación para irme a trabajar, Se-young iba gateando por el suelo mientras que mi esposa estaba en el balcón fumando su primer cigarrillo del día. Suspiré con tristeza al no saber exactamente cuando fue que mi esposa cambió repentinamente de actitud, antes de que ella empezara a fumar, siempre se cuidaba para mantenerse en forma y nunca caía en cualquier adicción como el tabaco, el alcohol o las drogas. Era completamente sana. Además de ser super cariñosa con nuestra hija y conmigo cuando estaba en casa, era una de las mejores mujeres con las que me he podido encontrar y enamorar, lo era todo para mí. Y lo sigue siendo, pero ya no de la misma forma en como lo era antes; ahora ya no me puedo acercar a ella sin querer huir por el mal aliento que trae gracias al cigarro, tampoco nos besamos como antes porque siempre para de mal humor y evita cualquier muestra de cariño de mi parte. La mujer dulce y amorosa que conocí hace unos cinco años se convirtió en una mujer malhumorada, está en sus treinta años de edad y pareciera que tuviera más de cuarenta por el descuido de imagen y su humor.

No me molesto en saludarla y me voy directamente hasta donde está mi hija. Acaricio su cabello mientras que ella está muy concentrada jugando con sus peluches de animales, Se-young era como el único alivio que tenía en mi vida y a la que siempre esperaba volver a ver luego de mi jornada de trabajo. Ella finalmente me da su peluche de ranita antes de darme un abrazo y regalarme un beso en su mejilla; no la merecía, mi hija era tan buena niña que hasta parecía irreal: sus bellos ojos miel, su piel tan pálida y ese lindo cabello castaño con ondas en sus puntas. A pesar de que casi nunca esté en casa cuando ella está despierta, siempre me muestra esa sonrisa pelada que tiene antes de decirme «Te he extrañado, papi», ¿y yo qué le doy a cambio? Nada. Absolutamente nada. No tengo tiempo para ella más que en las mañanas y me pone muy triste cuando ella me propone jugar y yo simplemente tengo que rechazarla para irme a trabajar. Tal vez en el futuro ella me odie y no me quiera tanto como quiere a su madre. Desearía que todo fuera diferente para ella y para mí, pero simple y llanamente no se puede.

— ¿Juegas conmigo, papá? —Se-young levanta su león de peluche y lo deja sobre mis manos.

—Ven, Se-young, hay que bañarte —dice mi esposa para ayudarme con ella—. Más tarde jugarás con papá.

Mi niña regresa a mirarme con sus ojitos de cachorro y ladea un poco su cabeza.

— ¿Lo prometes?

No me gusta prometerle cosas en vano a la gente, y menos a mi princesa porque sé que se llevará una mala impresión.

Intercalo miradas con mi esposa, ella se muestra seria esperando a que le responda a mi hija.

No me atrevo a decir ni una sola palabra, me esfuerzo por mostrar una sonrisa cariñosa antes de asentir. Se-young no pide más y se va con su mamá al baño, aprovecho para dejar el leoncito de peluche sobre el suelo e irme de mi casa cuanto antes.

Me subo a la camioneta negra que tengo y voy conduciendo hasta la estación de policías. Mientras que voy conduciendo, aprovecho en escuchar un poco de música de los años 50. La melodía de aquellas canciones a veces lograban deprimirme y otras veces parecía levantarme el ánimo, esta vez me deprimió cuando Only you de The Platters sonó en mi radio; ella apareció otra vez en mis pensamientos con su vestido negro corto y ese cabello negro con algunos mechones platinado.

Todas las personas tienen hasta sus secretos más oscuros y vergonzosos, aquellos que no te atreves a decírselo ni a la persona con la que tienes mucha confianza; bueno, mi secreto es que le soy infiel a mi esposa. Una noche conocí a una chica llamada Jung Sol en un bar de Itaewon, esa noche había bebido por casi ser despedido; entonces Sol se acercó a mí para hacerme compañía, al principio todo había sido muy tranquilo, no había ningún sentimiento de por medio con esta chica, por un tiempo fuimos amigos hasta que ella necesitó de mi ayuda y me invitó a su casa, lo que sucedió fue algunos ladrones entraron a su casa mientras que ella no estaba y se llevaron la mitad de sus cosas. Fue ahí cuando nuestra relación se fue poniendo un poco extraña, no sé cómo explicar lo que me pasó esa noche que todos los toques que le daba a ella se fueron convirtiendo en unos muy íntimos, al pasar de unas semanas ya no nos tratábamos como unos amigos, más parecíamos una pareja que recién iniciaba hasta que una noche no nos aguantamos más y pasamos toda una tarde llena de besos y caricias en su cama. Recuerdo que fue un domingo, ese día era mi aniversario con mi esposa y preferí estar con mi amante.

¿Y por qué Only you me deprime? Porque el significado de la canción siempre me hace recordar a Sol, y Sol me recuerda a que le estoy siendo infiel a mi familia.

Sigo conduciendo por más calles a la misma vez que la música de los 50 —un poco más alegres— me acompañan. Llego a la estación de policías luego de unos diez minutos y entro al edificio para encontrarme con una señora que está gritándole a uno de los trabajadores con respecto a la desaparición de su hija.

A veces las alertas de desaparición son un poco jodidas de seguir, puesto que, en mi opinión, no me parece justo que los familiares del desaparecido deban esperar 48 horas para así nosotros realizar nuestro trabajo.

—Señora, cálmese...

— ¡¿Que me calme?! ¡¿Usted me está pidiendo que me calme?! —Vocifera un poco más alto y golpea la mesa de la recepción—. ¡¡Mi hija lleva desaparecida desde el día de antes de ayer!! ¡Y para colmo pertenece a la universidad de Sogang!

No pude evitar interferirme esa conversación. Llevé a la señora a la sala de interrogaciones, ahí le pedí datos sobre su hija como su nombre y la ropa que llevaba. Tenía planeado pasarle este caso a Jungkook luego de que viniera a la estación de policías, y sabiendo cómo es que era él, sabía que me pediría toda la información que he recolectado en el tiempo en el que él no estaba.

Finalmente anoté lo último que la señora me explicó de su hija y leí todo lo que escribí: Kim Yi-seul. Cabello negro con mechones rosados, piel casi morena, 1.66 de estatura. La última vez que se vio vestía unos jeans rasgados de la rodilla y un suéter de lana color gris, tenía como peinado una coleta de caballo.

— ¿Mi hija aparecerá con vida? —pregunta la señora con lágrimas en sus ojos.

Está prohibido prometer cosas. Al igual que los médicos.

—Haremos todo lo posible para encontrarla.

La señora asiente dolida y caminamos juntos otra vez a la entrada. Luego de que ella se fuera de la estación, voy hasta recepción para pedir todas las patrullas disponible, también ordeno que llamen al equipo de búsqueda y rescate para que nos ayudaran por si hacía falta. Si la chica pertenecía a la misma universidad que Son Sunhee habían solo una manera de cómo encontrarla, y sería bastante doloroso para toda su familia.

Cuando las patrullas están listas, doy la orden de que cada patrulla vigile por todos los distritos de Seúl, ya sean del norte, sur este u oeste. No iba a descansar hasta que esa chica aparezca con vida. Junto a un compañero me subo a una patrulla, él va conduciendo mientras que yo voy intentando conectarme con Jungkook, era muy raro que él no me respondiera las llamadas.

Mi compañero decide conducir por la ruta que nos lleva al Río Han. Se volvió todo un dolor de cabeza cuando cuadras mucho más atrás de llegar al puente, el tráfico estaba muy congestionado. Sabía que íbamos a pasar unos largos minutos en estas calles, probablemente iríamos a paso de tortuga y ahora cada minuto importaba. Por mientras, vuelvo a marcarle a Jungkook y nuevamente termino en el buzón de mensajes, ¿dónde se había metido ese idiota? Debería de preocuparme, él jamás llega tarde a su trabajo, la estación de policías es su segunda casa.

El auto se mueve unos pocos metros, para este punto del tránsito, los conductores de comenzaron a enojarse y a gritar todo tipo de groserías e insultos a las personas que no se movían de su lugar. Podría haberme involucrado en esas quejas callejeras, pero tenía un trabajo y estaba durante el trabajo, un comportamiento de esa magnitud arruinaría mi reputación como agente detective. Los claxon de los carros se convirtieron en una sonata muy ruidoso y difícil de soportar, tan solo quería avanzar con mi trabajo cuanto antes.

Mi compañero también se cansa de tanto esperara y ver que los autos no se movían. Gira el timón para irse a la derecha y ganar espacio un poco más al frente; pero cuando llegamos, todo su plan se fue a la basura cuando vimos que hasta el inicio del puente había un gran alboroto y una muy mala congestión de autos. Aviso que saldré para controlar la situación, habían muchas personas haciendo un círculo cerca del borde del puente, algunos hasta llegan a mirar y quitar su vista horrorizados.

El puente Mapo se caracterizaba por los innumerables casos de suicidio que han sucedido. Mayormente los cuerpos a veces llegan a encontrarse en buenas condiciones, tal vez con la piel muy pálida por la baja temperatura del río y rígido, pero otras veces no se tenía tanta suerte y podíamos encontrar en cuerpo en su proceso de descomposición. Supuse que ahora este caso de la chica Kim Yi-seul era uno de esos y deberíamos de buscar el cuerpo cuanto antes.

Paso por toda la multitud hasta donde están todas las personas reunidas. Un grupo de muchachos de tres integrantes de la edad de Blake, tal vez, estaban mirando hacia el suelo, en donde habían unas zapatillas puma para varones; sin embargo, cuando estos chicos alzaron sus miradas hasta donde yo estaba, porque creo que había destacado por mis zapatos lustrados, ellos retroceden unos pasos y tratan de huir. No obstante, gracias a la aglomeración de las personas, llego a alcanzarlos y luego llevarlos hasta la patrulla. Servirían como posibles sospechosos para este caso.

Trato de comunicarme con Jungkook una vez más por su teléfono, timbra unas cuantas veces hasta que finalmente responde la llamada.

Pido de su ayuda y me asegura a que vendrá cuanto antes.

****

Jungkook

La congestión de autos por el Río Han era espantoso. Jamás he visto un tráfico tan grande como este que me sacara de quicio. Tamborileo el timón del auto para controlarme, Blake estaba a mi lado reposando su cara la palma de su mano mientra miraba aburrida hacia el resto de autos que estaban a nuestro alrededor.

Al final Blake accedió a acompañarme por el resto del día. Su malhumor por lo que sucedió con Sheldon se fue disipando mientra más tiempo íbamos pasando aquí en el auto, sin embargo, la única vez que me habló fue para decirme el por qué Taehyung me había llamado, luego de eso prefirió quedarse en silencio y tener un tiempo de paz con ella misma.

Por mi parte tampoco hice el esfuerzo de querer entablar una conversación con ella. Durante estas semanas me he dado cuenta que es mejor dejar sola a Blake cuando se muestra molesta o cansada.

Pasados unos minutos, finalmente llegamos a una cuadra antes de donde se sitúa el puente Mapo. No tenía planeado conducir hasta llegar al puente en sí, ya ha sido suficiente tiempo el que he esperado. Me estaciono a un lado de un gran edificio empresarial y salgo del auto con Blake a mi lado, ambos empezamos a caminar a pasos largos —Blake trataba de seguirme el paso—. Me di cuenta que mientras más nos acercábamos veía a todas las personas rodeando las cintas amarillas.

— ¿Entrarás conmigo? —le pregunto a Blake.

Ella me mira con sus ojos bien abiertos y parpadea unas veinte veces, como máximo. Luego baja su mirada y juega con las uñas de los dedos de su mano.

—Supongo.

Llegando a la escena del suicidio, Blake se sostiene fuerte de mi brazo derecho y pasa conmigo hasta el otro lado de la cinta. Un especialista forense nos da unos protectores para los zapatos —a pesar de que eso ya no sirva si otras personas han pisado el lugar— y unos guantes de látex por si a uno de los dos se le ocurre tocar los fierros del puente.

Ambos caminamos hasta donde está Taehyung mirando el río, luego gira vernos cuando siente mi mano en su hombro. Inmediatamente me señala hacia dónde estaba viendo, tomo su lugar y veo que casi se puede ver el cuerpo de una persona en la profundidad del río, de hecho puedo identificar a seis o siete cuerpos ahogados.

— ¿Cuál es el informe? —le digo a Taehyung mientra seguía observando el río.

Taehyung está dispuesto a contestarme, pero se detiene para fruncir su ceño y señalarme. Todavía estaba con el uniforme de enfermero.

— ¿Por qué estás vestido así?

—El informe —repito mascullando.

Taehyung levanta sus manos a la altura de sus hombros en son de paz.

—Kim Yi-seul está desaparecida, han pasado más de 44 horas desde que no llegó a su casa. Su madre fue a darme un poco de información, dice que estudia en la universidad Sogang y que antes de ayer, por la mañana, Yi-seul, pasó todo el día en la casa de una de sus amigas. La señora dice que ella no había llegado a la hora que prometió, al día siguiente pensó que su hija ya estaba en su habitación descansando y luego se fue a trabajar —dice Taehyung leyendo todo lo que tenía apuntado en su libreta—. Cuando regresó a su casa, eso había sido aproximadamente a las 20 horas de la noche, vio que el cuarto de su hija estaba igual a como lo había dejado el día anterior. Llamó a la casa de la amiga y ella le dijo que Yi-seul sí se había ido de su casa a la hora acordada. La señora llamó a su hija mientras que la iba buscando por todas partes hasta que finalmente, en la madrugada, fue a la comisaría para reportar la desaparición.

Luego Taehyung camina hacia otro lado para señalarme unas zapatillas que estaban cerca del puente.

—También se encontró esto. Probablemente haya sido un suicidio colectivo, o es que alguien los haya empujado. Tenemos a tres sospechosos en custodia que ahora han sido trasladados a la estación de policías para rendir declaraciones.

—Desde ahora yo me encargo. Tú ve a por esos chicos y haz que te digan todo lo que saben. —Taehyung asiente y se marcha del lugar hasta llegar a una patrulla.

Kim Yi-seul.

Por supuesto que no me he olvidado de ese nombre, debería tener amnesia por si lo llegase a olvidar. La chica que encontró el cadáver de Son Sunhee ahora está desaparecida, o posiblemente muerta por el mismo asesino de Sunhee.

Jamás pensé que este criminal le quitaría la vida a una chica que no haya estado bastante entrometida en el caso de su primera víctima. En todo caso, si quisieran matar a alguien sería a Blake; es decir, ella es una chica muy chismosa y me ha demostrado que sabe de la vida de las demás personas, ella puede saberlo todo con tan solo decirme cómo son tales personas. Blake es más propensa a recibir un ataque de homicidio que cualquier otra persona, supongo que el criminal no sabe que ella está apoyándome en esta investigación y por tal motivo la está dejando vivir; ¿y qué pasará cuando el asesino se entere del secreto de Blake? Supongo que ahora debo de añadir un punto más al contrato que tengo con ella y ofrecerle protección para cuando esté en peligro.

Hoy hasta casi se muere en manos de un esquizofrenico.

Vuelvo a pensar en la posible causa de muerte de Kim Yi-seul. Cuando la conocí no parecía ser del mismo círculo de amigos que los de Sunhee, por lo que no sabía nada con respecto a cualquier cosa muy polémica que me ayudara en el caso. Yi-seul parecía ser la chica más lejana a toda la situación; pero las casualidades ocurren en cualquier momento. La primera deducción aparece en mi cabeza y se trataba básicamente que ella se encontró cara a cara con el asesino, lo escuchó confesar su delito, entonces el asesino al sentirse amenazado esperó a la oportunidad perfecta para matarla; mi segunda hipótesis es que probablemente Yi-seul sí haya sido del grupo de amigos de Sunhee y yo me esté equivocando, algo así como la chica Hye-ji de los mensajes, debió de suceder una situación como la anteriorme planteada como para que alguna amiga de Sunhee y del asesino haya querido matarla, o hasta probablemente ella, con toda la culpa que sentía, no podía más y terminó suicidándose en este puente.

Los de equipo de búsqueda y rescate llegan hasta donde estoy yo. En el cielo se escucha las hélices de un helicóptero acercándose hacia la parte derecha del Río Han. Las corrientes del agua por el momento de ven un poco calmadas pero eso no quita el hecjo de que estuviera moviendo los cadáveres de un lado a otro.

Finalmente doy la orden a su equipo de buceo para que entraran al agua y pudieran sacar todos los cuerpos que van flotando, con suerte uno de esos cuerpos sería Kim Yi-seul.

Sabía que todo esté proceso de sacar los cuerpos, meterlos a una bolsa y llevarlos a la morgue sería bastante largo. Además que el sol radiante ya estaba quemándome, mi piel se sentía caliente y el uniforme de enfermero no me estaba ayudando en nada. Busco con la mirada a Blake hasta que la encuentro mirando cómo es que los de equipo de búsqueda se estaban preparando para entrar a las bajas temperaturas del agua.

—Blake —ella regresa a mirarme. Sus labios están abultados y camina hacia mí—. Vayamos a tu casa, necesito mi ropa. Luego iremos a la estación de policías.

— ¿Y qué pasa con esto?

—Va a demorar mucho a que saquen los cuerpos uno por uno. Además, probablemente Yi-seul ni se encuentra aquí hundida —le digo—, debo seguir buscando.

Ella asiente y nos regresamos otra vez el auto. Estoy lo suficientemente cansado como para conducir hasta la casa de Blake, siempre que pasaba cosas así le pedía a la persona que me acompañaba si podía conducir por mí pero como este no era el caso, ya que no sé si Blake conduce, aguanto todo mi cansancio y enciendo el auto con dirección a Gangnam.

Exitosamente salí del tráfico en menos de diez minutos y seguí conduciendo. El auto volvía a estar en silencio como antes, pero esta vez Blake ya no tenía esa mirada tan perdida y pensativa que antes, mas bien parece un poco tranquila; supongo que su mal humor ya ha desaparecido por completo.

— ¿Sabes lo que me parece raro y gracioso? —me pregunta a la misma vez que jugaba con la tira del cinturón—. Tú pareces ser un hombre bastante frío, haces parecer que no tienes sentimientos y no te importa nadie más que tú. También te crees un sabihondo y haces parecer como que nadie es mejor que tú. Pero aún así tienes ese pequeño corazón que te motiva a ayudar a las personas.

— ¿Ayudar a las personas? —Frunzo mi ceño sin entender a lo que se refería.

Blake tuerce sus ojos y niega con la cabeza.

— ¿Por qué te gusta tanto tu trabajo? —inquiere curiosa.

—Porque me gusta resolver acertijos y me gusta saber que a las personas a las que estoy atendiendo no hablarán porque están muertos. —Respondo sin mirarla—. ¿Por qué la pregunta?

— ¿O sea, me vas a decir que nunca te nació del corazón ayudar a alguien? —evita responder mi pregunta para lanzarme otra.

—No sé qué es lo que estarás pensando; pero te pondré mi respuesta un poco más fácil. Así como a ti te gusta diseño de moda para hacer tus propias prendas y luego venderlas, a mí me gusta divertirme con los cadáveres humanos porque en ellos puedes encontrar una gran historia a través de su muerte y también porque es mi manera de cómo no aburrirme. —Vuelvo a decirle. Blake chista sus dientes antes de volcar sus ojos hacia otro lado—. Nunca he hecho algo por alguien más, jamás, y no es porque luego me sirve de excusa como si esa persona ahora me estaría debiendo un favor. Me quiero evitar las quejas de los demás por si un día llego a hacer algo más.

—Pensé que eras más distinto —dice Blake en un murmullo, casi como si estuviera decepcionada.

No volví a insistirle sobre el tema, dejé que el silencio reinara entre nosotros hasta que lleguemos a la casa de Blake.

***

El reloj ya iba anunciando las doce de la noche del día domingo, Blake se había ido casi hace media hora de mi oficina porque el sueño le estaba ganando. Yo continuaba aquí encerrado en cuatro paredes, solo, esperando a que me dijeran que el cuerpo de Kim Yi-seul había sido encontrado en el río Han, porque el equipo que mandé a inspeccionar los bosques en donde mayormente se enterraban a las personas dijeron que ella no se encontraba por ningún lugar y tampoco habían rastros de pisadas. Mandé a buscar hasta en los lugares más absurdos, como los contenedores de basura de toda la ciudad, y no se hallaba por ningún lado. Era com si la tierra se la hubiese tragado.

Por otro lado, Taehyung hizo mal su trabajo y atrapó a tres chicos de 18 años que solo eran espectadores de la escena del suicidio. No obstante, pudo salvarse de un regaño mío cuando trajo a la amiga a la cual la madre de Yi-seul se estaba refiriendo; sin embargo, lo único que nos dijo fue que su amiga no tenía ningún problema con cualquiera otra persona, que no era parte del grupo de Sunhee, entre otras cosas más. No teníamos ni un indicio que nos llevara a la desaparición de Kim Yi-seul.

Mi única salvación en estos momentos eran las cámaras de seguridad del puente; pero vaya mala noticia cuando me entero que la más cercana a la escena del suicidio estaba averiada desde la semana pasada. La única que quedaba era una que estaba a unos ocho metros lejos del punto exacto, así que va ser muy difícil reconocer el rostro de Yi-seul desde esa distancia.

Cierro mis ojos soltando un suspiro pesado, la noche anterior no había dormido por el insomnio, y creo que esta noche iba a ser igual que las anteriores. A veces me parecía increíble la resistencia que tengo para mantenerme despierto todos los días y no sentir cansancio en las mañanas, supongo que eran por las tazas recargadas que café que tomaba a la media mañana.

La puerta de mi oficina se abre abruptamente exaltándome en el proceso. Taehyung aparece muy contento y camina hasta donde yo estoy, de seguro ya encontraron el cuerpo de Yi-seul por cualquier parte de la ciudad; sin embargo, lo que me extrañaba era ver a Taehyung aquí cuando se supone que debería estar en su casa con su familia.

— ¿Qué haces aquí? —le pregunto.

—Siempre he estado aquí. No entiendo de qué hablas.

—Tú siempre te vas a las 10 de la noche para ver a tu hija —replico. Taehyung tuerce sus ojos y ladea su cabeza—. ¿Ya encontraron el cuerpo?

—Bueno...

Ahora Namjoon aparece golpeando la puerta y acercarse hasta donde estoy. Así como lo hizo Taehyung.

— ¡Amigo ya encontraron el cuerpo! —dice emocionado y con una sonrisa en su rostro.

Reparo en Taehyung, él me mira y encoge sus hombros.

— ¿Qué me ibas a decir tú? —Le digo a Taehyung.

—Cierto, ya encontraron los videos de seguridad. Todo apunta a que fue un homicidio.

Frunzo el ceño y me levanto de mi silla.

—Necesito ver el cadáver. —Les digo a la misma vez que los tres nos vamos yendo de mi oficina.

Fuimos hasta el estacionamiento y nos subimos en mi auto, solo que Taehyung se ofreció a conducir hasta la morgue.

Si fue un homicidio ya no había duda que haya sido el mismo asesino que Sunhee. Lo que todavía no entendía muy bien es por qué. Algunos matan por venganza, otros matan para no ser descubiertos, y otros matan por distracción; si en los próximos días aparecía alguien más muerto, entonces ya se estaría hablando de un patrón consecutivo que este asesino está tratando de seguir. Algo así como solo asesinar a mujeres.

Llegando a la morgue y ser identificados por los empleados de ese lugar, nos llevan hasta donde está el cuerpo de Kim Yi-seul. Según lo que nos dijeron es que hace 20 minutos la habían traído del río Han, así que no trataron de quitarle absolutamente nada hasta que yo apareciera, cosa que no entendía muy bien si los protocolos no eran esos; pero lo entendí cuando por fin pude verla sobre la mesa de metal.

Kim Yi-seul estaba totalmente pálida por causa del agua fría. Su boca estaba rodeada de plástico envolvente y en el centro de sus labios se encontraba un papel amarillo doblado. Bajando un poco más la mirada pude ver ese corte de cinco centímetros en su cuello, aquel que le quitó la vida, aquel que parece haberse hecho con una hoja de navaja; y un poco más abajo se encontraron las puñaladas en el abdomen. Tal y como se había encontrado en los cuerpos de Nina y su madre, sólo faltaba hallar si es que su sangre había algún tipo de veneno.

—Quiero análisis de su sangre. Si hay un componente maligno, como veneno. Háganmelo saber —ordeno a los médicos forenses que ya empezaron a quitarle la ropa a Kim Yi-seul—. Taehyung, llama a la familia; Namjoon, diles al equipo de búsqueda que encuentren el arma homicida.

Ambos asintieron del lugar a la misma vez que los médicos quitaron el plástico de la boca y me dieron la hoja de papel.

Querida familia:
Por favor discúlpenme por despedirme de esta manera de ustedes, pero ya no quiero seguir viviendo. No soy feliz, odio mi vida y más parece que soy un estorbo entre ustedes. Lo mejor será que ya no esté más con ustedes.

-Yi.

Y todavía tuvieron el descaro de hacerlo pasar como suicidio.

*****
Pareciera que la historia de Taehyung al principio es irrelevante en la trama, pero en serio, les juro que es importante :D

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