Narra Mily.
—Ayuden a Lucas —dije descendiendo las escaleras, para llegar hasta Vicky.
La tomé de las manos, parece que ya se quedó inconsciente, que estupidez intentar escapar de aquí.
—¡Ale! —grité, supongo que Vicky le hizo algo, jale a Vicky de las manos, para llevarla hasta abajo otra vez.
Oh Dios, no podía creer lo que mis ojos estaban viendo, era Alejandra, y estaba muerta, toda su cabeza estaba destrozada en el suelo, la sangre estaba esparcida por todo el piso.
—¿Qué paso? —preguntó Ginny llegando hasta abajo. —¡Oh por Dios! ¡Está muerta!
Asentí mientras cubría mis ojos, Vicky tendrá que pagar por esto, y qué mejor que hacerlo ahora mismo.
Ginny me ayudó a sentar a Vicky en la silla, luego la amarramos como estaba antes, de sus pies y de sus manos.
—¿Qué tienes planeado? —preguntó Ginny sonriendo. —Si aún no tienes nada, yo propongo que la ahorquemos, una agónica muerte, y lo mejor de todo es que nos estará mirando mientras pasa, demasiado satisfactorio.
Oh mierda, debo admitir que la idea de Ginny es por mucho lo mejor de todo lo que estaba pasando por mi mente ahora mismo, obviamente haré lo que ella dice.
—¡Gabo! —grité llamando su atención, él rápido se acercó a mí, esperando que yo le dijera algo. —Por favor, necesito unas cuerdas, si no estoy mal, están en el armario de aseo.
—Enseguida las traigo —dijo Gabo alejándose de mí.
Miré a Vicky y esta parecía que estaba comenzando a despertar.
—Hola princesa —dije para luego reír. —Parece que llegó la hora de que termines de sobrevivir, la tercera siempre es la vencida, lamento decirlo.
Gabo llegó hasta mí, y puso las cuerdas en mis manos.
—Esto será muy divertido —dije sonriendo.
—¿Qué me vas a hacer? ¿Ahorcarme? —Vicky comenzó a reír. —Siempre quise intentarlo, gracias por hacerlo por mí.
—Lo mejor de todo es que yo seré la última persona que veas antes de morir, eso es lo mejor.
Vicky solo sonrió y agachó la cabeza, creo que no está dispuesta a implorarme que la deje viva, pero de igual manera eso sería una pérdida de tiempo, no lo haría.
Lucas, Ginny Y Gabo se acercaron a mí, es hora de empezar.
Puse la cuerda en el cuello de Vicky, ella tuvo la iniciativa de moverse, vaya, que pacifica esta, pero eso desaparecerá.
—No voy a pedirte nada —mencionó Vicky de pronto.
—Como digas —respondí acercándome a ella, tome las cuerdas de sus muñecas y deshice el nudo, para que se liberara de la silla, seguido puse sus manos por detrás de su espalda y volví a poner la pequeña soga.
Ahora hice lo mismo con sus pies, pero esta vez no volví a amarrarlos, puesto que necesito que se suba a la silla.
Lucas terminó de atar la cuerda al techo, y Vicky por fin estaba sobre la silla, lo único que la mantenía aún con vida.
—Hasta nunca, Vicky —dije sonriendo, cuando estaba por mover la silla, ella habló.
—Espera —dijo ella asustada, podía notarse en su voz. —No lo hagas, por favor.
Mire hacia arriba, oh Dios, que tierno, creo que ha llegado el momento de arrepentimiento y a donde se fue la Vicky valiente.
—Mily, por favor —mencionó Vicky mientras lágrimas corrían por sus mejillas.
—¿Hablas en serio? ¿No quieres que te mate? —pregunté, ella asintió mientras agachaba la mirada. —¡Tú asesinaste a Ale, ahora es tu turno de morir!
En un rápido movimiento moví la silla, Vicky cayó de golpe, esto es genial, Vicky comenzó a retorcerse por la falta de aire en su cuerpo.
—Debo admitir que se ve graciosa —dijo Gabo riendo.
Tomé mi celular y entre en la conversación con Pablo.
"Uy malas noticias, parece que Vicky no es tan fuerte como imaginé"
***
Narra Leonardo.
Los policías terminaron por escuchar mi versión de los hechos, más lo que estos chicos tenían por decir, estoy seguro que Daiel se pudrirá en la cárcel, y que mejor.
—Estoy muy seguro de lo que vimos, ese chico Daiel, fue el asesino de Lola —mencionó nuevamente Adrián.
Christian entregó un pequeño papel, donde había anotado la dirección de la casa de Pablo, esta misma noche irían por él, pero para que no fuera a escapar serían muy discretos.
—Nos mantendremos en contacto contigo, todos tendrán que participar en el juicio contra el joven Daiel —mencionó uno de los oficiales. —Pueden irse.
—Gracias —dijo Khyan para luego caminar a la salida.
Vaya, esto fue más rápido y sin problemas de lo que imaginé, supongo que la ayuda de estos dos fue de gran ayuda.
—¿Qué hacemos ahora? —preguntó Adrián.
—Si gustan pueden venir con nosotros, no nos queremos perder el arresto —dije para luego reír. —¡Dios! Ya quiero ver la cara de ese pobre pendejo.
—Iremos —mencionó Khyan tomando de la mano a Adrián.
***
Narra Felipe.
Escuchar eso inmediatamente me hizo sentir mal, yo lo iba a hacer, iba a matarla para poder saber la identidad del asesino, pero ahora todo está perdido.
—Vicky no puede estar muerta, la necesito —dije nervioso.
—¿Para qué? —preguntó Nahuel confundido. —Tenemos que llamar a la policía ahora mismo, Mily debe pagar.
—¡La policía no hace nada! —gritó Pablo molesto. —Debemos hacer justicia nosotros mismos.
Vaya, en verdad Pablo estaba demasiado molesto, todos nos quedamos callados al escuchar que Pablo mismo quiere matar a Mily.
—¿Hablas enserio? —preguntó Daiel. —Porque si es así, yo te ayudaré sin problema, es más, deberíamos hacerlo ahora mismo, antes de que escape o algo.
Pablo asintió, luego se alejó de nosotros. ¿Y yo que haré? Mi familia está en peligro, y ahora mismo a nadie en esta casa le interesa el asesino que lleva semanas jodiendonos, solo les importa Mily, esa estúpida arruino todo.
—¿Alguien irá con nosotros? —preguntó Daiel.
Tyler y Nahuel levantaron la mano, al igual que Alexis.
—Iremos todos —dijo Lalu algo nerviosa.
***
Narra Christian.
—¿Estás seguro que por detrás nadie nos verá? —preguntó Leonardo confundido.
Asentí y nos dirigimos al patio trasero de la casa, lamento decepcionarte Leo, pero Daiel no irá a la cárcel por lo que quizá le hizo a Lola, no lo hará porque lo mataré antes.
—La puerta está cerrada —mencionó Leo asomándose hacia adentro.
—Eso quería —dije tomando la cabeza de Leo, y rápido la estrellé contra la ventana, el vidrio rápido se hizo añicos, y Leo terminó inconsciente en el suelo.
—¡Oh Dios! ¿Por qué hiciste eso? —preguntó Khyan asustada.
—Fácil, soy el psicópata en whatsapp —dije riendo. —Y ahora todos estarán muertos.
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Espero les haya gustado. :3
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