Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Día 10

Digamos las cosas así tal cual. No dormí en la noche, no fue hasta la mañana que caí del agotamiento sobre el piso del comedor. No recuerdo dónde dejé mi ropa, espero que James no encuentre el perico en el bolsillo de mi chaqueta. Anduve dando jugo con la guitarra hasta que el pecho no me diera más, mis dedos están todos reventados, pero en un momento me dio arritmia y me asusté, no recuerdo mucho cómo o en qué momento caí dormido.

— Vaya, reviviste —Comentó James—. No creo que quieras unirte.

Parpadeé atontado por harto rato hasta percatarme mejor de lo que sucedía: Están a mi alrededor estudiando. La loza ya está lavada y muchas cosas ya guardadas, la cámara enfocaba.

— Haremos como que lo que hallé en tu chaqueta no pasó por ahora —Prosiguió, se le veía muy molesto—. Mejor que Cliff te cuente el panorama de hoy.

— Después de estudiar, iremos de excursión al cerro —Aclaró Burton—. Comeremos allá. Tú puedes ir a empacar por mientras. No tienes cara de ser capaz de estudiar.

Ouch. Siento el rechazo como una apuñalada. Me siento demasiado débil para luchar. Me encerré en mi cuarto e hice caso a tal orden. Me imagino que nos vamos después de esto. Mejor mantenerme callado y evitar conflictos. Aproveché de cambiarme, en realidad mi cuerpo se sentía impuro. No debería ni tengo energías para nada. Salté hacia la cama cuando acabé de empacar mis cosas, fui el último en ello, se nota que ellos cometieron harto movimiento en la cabaña porque está igual como la encontramos.

El padre de Cliff vino a buscarnos en su enorme camioneta. Acomodamos nuestras pertenencias, bueno, ellos lo hicieron, me negaron esa acción bajo la excusa de que andaba débil. Saqué una bolsa de papas fritas que sobró y procedí a comer entretanto ellos hacían la labor pesada. Necesitaba algo de picar por lo menos, mi estómago lo agradeció. Parezco un cadáver.

Dentro del coche, los chicos se tomaron muchas fotos y no me incluyeron, quiero llorar. Cerré los ojos y fingí dormir, cualquier movimiento en falso causaría lágrimas infinitas.

¿La subida al cerro? Asquerosa. Menos mal me están haciendo la ley del hielo porque...

Chillé.

Íbamos subiendo, yo con algo de dificultad, cuando siento que Lars me abraza por detrás. ¿Por qué me ignoró por varias horas y de la nada me viene con esto? Lo aparté asustado, mis mejillas ardían de rubor. No más ilusiones.

— Ánimo, nos queda poco para la subida —Levantó el pulgar y sonrió con una ternura que me derritió el alma.

— Eh, sí... —dije confundido. ¿No está enojado conmigo? Qué raro.

— Último día nadie se enoja —Dio unas palmaditas en mi espalda, es como si hubiera leído mis pensamientos y prosiguió la subida como si nada.

Estoy desorientado a cagar, más allá de lo físico, ¿qué mierda? ¿Por qué no me incluyen en sus planes? ¿Y me miran feo? ¡Y luego Lars me abraza por detrás, agarrándome de la cintura! ¿Él es consciente de lo que significa tocar a alguien ahí? Ya no soy capaz de entender si me están tomando el pelo o no.

En la cima, nos sentamos sobre unas piedras y procedimos a degustar unos sándwiches que nos preparó el padre de Cliff. Sentí el calor en el instante en que el señor se preocupó por mi alimentación, pues me hizo dos panes vegetales. Mi moral aumentó un tanto gracias a ello. Cuando decidimos bajar, de nuevo estuve hasta atrás, con un par de metros de distancia, por mi mal ánimo, aparte de que Hetfield parecía contenerse por lo que hice ayer. ¡Sí, sé que fui un imbécil al meterme perico! ¡No soy idiota! He estado muy ido, concuerdo, y siento que a partir de ahora podré estar en paz, ¿por qué lo digo? Ya no veré a Lars en un tiempo y eso me curará.

Dentro del coche, fingí dormirme otra vez, los chicos conversaban y cantaban canciones que sintonizaban en la radio. Requiero regresar a mi casa lo antes posible. No creo que los chicos me delaten con mi madre sobre la bolsa de cocaína, voy a rezar por ello.

Respiraba 'normal' dentro de que cabía, teniendo en cuenta que tengo restos de sustancias en mi sangre y que subimos un cerro, no obstante, se me fue el aire por un segundo. Yo iba situado en la esquina derecha de la parte trasera, Lars al medio, James a la izquierda y Burton con su papá adelante. Mi cuerpo se tensó y mis vellos se erizaron porque Ulrich se acomodó sobre mi pecho, abrazándose a mí como si fuera su almohada.

— Vaya tórtolos... —Comentó el rubio.

— Deben venir super cansados —Opinó el dueño de la camioneta.

— Sí, hemos salido y tomado harto estos días —Justificó Clifford.

— Uhh, como ellos son mucho más bajitos les debió pegar el triple.

— Así mismito.

Logré respirar normal al escuchar esos diálogos reconfortantes, aún así, mi corazón latía rápido. Debo poner límites con Lars si quiero seguir siendo su amigo y superar que rompiera mi corazón hace unos días.

Confieso que fue incómodo a cagar separarme de los chicos y que me ayudaran a bajar mis cosas del maletero.

— Nos vemos —Forcé una sonrisa y sacudí la mano hacia los lados, ellos me devolvieron el gesto. Tenemos mucho que discutir a futuro.

Al momento de cerrar el portón de mi casa, corrí a los brazos de mi mamá y me eché a llorar lo que llevaba aguantando desde que desperté.

— Es que... te extrañé mucho —Mentí cuando me preguntó qué pasó. Ella acarició mi nuca y nos mantuvimos en esa posición por bastante tiempo.

Esa catarsis me hizo percibir como una persona nueva y reformada. Todos estos días estudiando valieron la pena, en mi cuarto redacté mi parte del reporte (me gusta ocuparme de casi todo y mantener el control de la situación) y se lo envié por fax a James. Aproveché de enviarle otro mensaje por fax pidiéndole disculpas por mi consumo de sustancias, prometí no volver a cometer esa gilada. Los chicos sabrán qué más mierda agregarle, Lars estará encargado de editar los vídeos. A mí me queda descansar.

Volteé al teléfono de pared de mi cuarto. La música fuerte del estéreo mientras me ocupaba del fax me distrajo de las muchas llamadas perdidas que tenía, más de las que me gustaría admitir. Eran quince. ¿Por parte de quién? Oh, ya saben. Presioné la opción de reproducir el mensaje de voz que dejó:

— Kirk, habla Lars... Kirk, ah... No sé qué sucede, que de la nada ya no quieres hablar conmigo —Tose—. La tortura terminó, eres libre... No más ataduras del estudio ni de las cámaras, puedes ser tú mismo —Realizó una ligera pausa—. No te mates estudiando: eres inteligente y capaz de salir victorioso, te vamos a ayudar en lo que sea para el reporte, no te lo dejes todo para ti. Tómate un descanso. Y, bueno... No tomes más cocaína, te hace mal... —Otro silencio que se tornó incómodo— ¿Cuánto tiempo me queda? Um, quiero salir contigo. Te extraño. Mañana a las once iré al cine del centro comercial, ¿quieres acompañarme? Estás cansado, está bien si no quieres, pero se va a estrenar una película romántica y me gustaría verla contigo. Eso. Buenas noches, cariño, nos vemos.

Jalé de mis cabellos en frustración. ¿Qué mierda le pasa? Pensar en él me enferma el doble y no deja de meter el dedo en la herida. Jamás podré sanar de este modo. Tal vez necesito un amor de vacaciones antes de que tenga el valor de mirar a Ulrich a los ojos de nuevo.

------

Nota: El siguiente capítulo será el final de la historia, espero que lo estén disfrutando hasta ahora uwu

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro