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Capítulo 12: Soarta

21 de septiembre, 2099

Zona residencial del centro, Ciudad Odisea

3:30 AM

Esa palabra "Guerra" palpitaba en mi corazón provocando una irritación que nunca había experimentado, era real, a mi padre lo habían despedido – Por querer defender la paz en tiempos de guerra- Tal cual esas fueron sus palabras. Lo peor de todo era que mis sueños empezaron a volar por mi cabeza durante toda esa madrugada, lo que se suponía era una reunión familiar para "Compartir juntos" Se convirtió en una cárcel mental donde viese a donde viese no dejaba de preguntarme ¿Los protegeré? Era aún de noche, Vanessa, Bianca, Mamá, Dan ellos estaban casi ebrios cantando de manera tonta y con movimientos excéntricos, un momento así de gracioso normalmente sería para disfrutar... Pero no fue el caso. Papá y yo estábamos sobrios e incluso la bebida que teníamos en el césped se calentó, derritiendo el hielo - ¿Por qué papá? – Aquel frío de la noche creaba un sentimiento extraño en mí, entre inquietud y la necesidad de un desenlace para tales pensamientos – Mike... Durante años he luchado por la paz en todas esas asambleas, y a cuestas lo he conseguido. Ayer llegó mi agónica derrota cuando el general convenció a los embajadores para tomar las armas.

Con un suspiro prosiguió diciendo – Este planeta hijo mío, ya no puede con tantas personas... La mitad de áfrica murió y toda américa del sur está en catástrofes y guerras internas en sus países. Sólo parte de Europa y el Norte de américa se han salvado de tantos problemas, pero nada es eterno Mike- Su voz era tan desalentadora... La mirada en sus ojos era derrotada – Los asiáticos han movido barcos a solo unas millas náuticas de esta isla, eso es considerado una declaración de guerra en todo su esplendor, por lo cual, de ahí nació mi despido y la toma de armas por parte de los países que apoyaron este proyecto... A la isla artificial que "Salvaría a la humanidad"- Odiaba la política, y mi padre sonó muy político en ese momento.

-Incluso en una guerra, papá, moriría por intentar salvarlos a ustedes- Estaba decidido a hacer lo que hiciera falta por mantener a mis personas amadas protegidas - ¿Te estás escuchando? Hijo pisa tierra por un momento, eres astrónomo, ni cerca estarías de ver un arma – Tenía mucha razón, pero como ya saben ustedes, terminé pisando una granada... Aún no llegamos a esa parte – Papá el general estuvo hoy en el observatorio, quería apresurar el "Proyecto Odisea" – Hice comillas con las manos encogiéndome de hombros dando a entender que no tenía idea lo que era esa cosa – Ah...- Si la sorpresa fuese una persona, les aseguro que en ese momento hubiese sido mi padre. Quedó impactado al escucharme, tanto así que no habló ni hizo nada más que verme – Ey – Lo empujé del hombro a lo que esté se alejó un poco de mí negando con su cabeza – En serio lo va a hacer... - Tras un largo suspiro termino por calmarse.

- No puedo hijo... No puedo contarte- Iba a preguntarle a que se refería con ese "Proyecto" y como pueden ver, ni siquiera me dejó preguntar - ¿Por qué papá? ¡Siempre haces lo mismo! Nunca nos has contado nada.

- Es complicado Mike, pronto lo sabrás de alguna manera, lo siento hijo- Este levantó su vaso de alcohol y entró a la casa para ponerle hielo, si mi padre era misterioso, en ese momento fue la persona más desconfiada que pude conocer.

Sinceramente no supe en qué pensar, mi vida estaba comenzando y ahora no sabía cuánto iba a perdurar, daba pasos tontos mientras pateaba una piedra que estaba en el piso hasta llegar a la mecedora que estaba bajo el árbol del patio – Debo pensar...- Lancé mi trasero sobre la silla y empecé a mecerme viendo la ebriedad de mi madre y la pequeña familia de Vanessa – Diablos... Dan, no pareces tú- Dije en voz baja, viendo cómo los tragos le cambiaron el ánimo, se reía y contaba chistes de los que se reían mi madre y Bianca las que, por cierto, tenían las mejillas rosadas y hablaban comiéndose algunas palabras – Quisiera estar ebrio en este instante- Posé los pies en el piso lo más fuerte que pude para poder tomarme un buen trago de alcohol, pero como ya estaba caliente se sintió horrible, hasta me raspó la garganta – Ay... Qué asco- De la rabia aventé el vaso unos dos metros de mí secándome la boca en el proceso pues tenía trago en los labios.

Noté que Vanessa había quedado noqueada en el césped, cerca de donde mi ebria madre estaba riendo con mi cuñado y suegra – Dormir es un buen plan- Repetí en mi mente y así fue como me acosté en la mecedora dejando salir mis recuerdos.

5 meses antes

08 de abril, 2099

Observatorio Norte

1:34 AM

Uno de tantos recuerdos, me llevó al día en que descubrí aquel lejano planeta en Andrómeda ¿Por qué me tardé tanto en enseñárselo al señor Gabster? Fácil, me parecía imposible poblar ese lugar puesto que estaba a más de dos mil millones de años luz a la distancia.

Aquella sensación al observar ese pequeño planeta con tonalidades rosadas y doradas en la superficie me hizo imaginar cómo era, lo idealicé con muchas flores e incluso llegué a estudiarlo un poco tratando de no llamar la atención para que no reportaran el descubrimiento. Ese planeta era casi un cien por ciento parecido a la tierra en las condiciones para albergar vida –Demonios, como quisiera poder conocer ese lugar- No despegaba el ojo del gigantesco telescopio.

Una de las mejores etapas de la vida es la niñez, cuando crees que todo es posible sin importar la locura que transcurra por la mente, así me sentía en ese momento, creyendo que en algún instante viajaría a ese sitio aun estando a tanta distancia.

-A ver... Un poco más- Trataba de calibrar el telescopio para tener la imagen más nítida posible del planeta al que llamé "Soarta" – Ya casi- Sin despegar el ojo del lente de aquel telescopio tan inmenso – Es precioso... Cómo quisiera estar allí- Rosado, un planeta de ese color acompañado de tonos dorados, azules y una estrella gigante azul. Muy irreal ¿No creen? Distancia perfecta para poder estar vivo, aquel planeta era una anomalía en el espacio.

Actualidad

Zona residencial del centro, Ciudad Odisea

21 de septiembre, 2099

3:47 AM

Agité la cabeza para salir del pensamiento, el sueño me afectaba y lo único que me mantenía despierto era el cielo estrellado, aquellos puntos intermitentes de luz me hacían preguntar ¿Qué habrá allá arriba que no hayamos encontrado todavía? Y para mejorar la situación, pude distinguir una de las colas de la vía láctea en el firmamento, era realmente hermoso, tanto así que olvidé momentáneamente la preocupación que tuve por lo que me contó papá.

-Una guerra, que bien- Tenía sueño y estarme meciendo aumentaba la sensación – Sueños... Sueño... ¿Qué son? – Ya había soñado con un conflicto mundial años antes y en reiteradas ocasiones, ahora parecía posible, tenía los parpados pesados – Espero que sólo sean sueños...

Horas antes

20 de septiembre, 2099

Observatorio Norte

– Entonces ¿Cómo se supone que funcionará esto? – Agregó uno de los miembros del equipo de Vanessa – Fácil pequeña amiga, Jake será la respuesta. Tenemos que entender cómo manejar el espacio y el desplazamiento de las moléculas- Dijo Gabster, Sí, es cierto ¿Cómo lo había olvidado? La métrica de Alcubierre se podía aplicar en la nave, Pero ¿Cómo? – Usaremos la Métrica de alcubierre, Jake nos ayudará ¡Tenemos que visitar otros mundos! - Casi como si leyera mi mente le respondió a la chica que le había preguntado.

Actualidad

Era impresionante como aún no me había dormido – Moléculas... Luz...- Estaba tan cansado que apenas podía articular algunas palabras a raíz de los recuerdos que estaba teniendo – Quisiera no preocuparme tanto, casarme y ver estrellas- Mi boda, imaginé a Vanessa con su vestido blanco mientras la esperaba en el altar – Que reluciente te ves- Esas fueron mis palabras – Gracias- Ella rió tal como siempre lo hacía- Observé a mi alrededor, estábamos en una iglesia, los robots atendían a las personas dándoles bebidas y comidas, el sacerdote estaba a punto de casarnos. Tenía el corazón acelerado mientras sujetaba sus delicadas manos sólo esperando la ansiada pregunta – ¿Algo que quieras decirme antes de ser oficialmente mi esposo? – Agregó mi linda prometida al apretar mis manos y sonreír una vez más.

-Te amo en este y en todos los universos- Estaba calmado, tanto que olvidé que eso no era más que un pensamiento -Mike Sivat ¿Prometes amar y respetar a tu pareja en las buenas y las malas, la salud y la enfermedad? – Solté una pequeña carcajada – Claro que acepto.

La luz del sol molesto mi visión, haciendo que me despertara - ¿Dónde?... - Estaba tirado sobre la mecedora, aparentemente me había quedado dormido – ¡Carajo! Justo en mi boda- ¿No les ha pasado que sueñan con algo agradable y de pronto vuelven a la realidad? Eso era justo lo que me estaba sucediendo.

10:44 AM

Había sido una noche larga, apenas dormí, mamá y Bianca se encargaron de hacer un buen desayuno para Vanessa y Dan. Quienes tenían jaqueca por la borrachera, mi padre por otro lado se mantenía distante, pero no por ello dejaba de compartir con nosotros.

Era un lunes por la mañana por lo cual todos teníamos que trabajar, Dan aprovecharía la oportunidad de viajar con nosotros para que lo dejásemos cerca de la fábrica en la que estaba laborando, ya Francin había enviado un mensaje de voz citándonos a todos los astrónomos a las 12 PM, era sofocante tener tanta presión encima – Vane ¿Puedes venir?- Todos estábamos en la cocina y quise hablar con mi pareja a solas por lo cual fuimos a mi habitación, nos tumbamos en la cama acurrucándonos en el proceso – Oye ¿Deberíamos decirles que nos vamos a casar? – Quería saber su opinión. Podía sentir su respiración en mi cuello – Ya seguro se lo esperan- Ella me abrazaba, su voz era pequeña casi como si estuviera recién levantada – Quiero que nos casemos lo antes posible, te parece ¿En un mes? – Tal vez era precipitado solamente quería tener esa experiencia de organizar una boda – Es algo rápido- Dijo ella.

-Lo sé- La raíz de tanta prisa fue lo que me contó papá – Entonces, por mí está bien, será en un mes- Levantó su rostro y me beso la mejilla, luego agarrándome la mano me levantó corriendo de la cama hasta salir del cuarto y llegar a la cocina – Familia, Mike y yo nos casaremos en un mes – Todos quedaron perplejos, incluso yo, la verdad no me esperaba esa reacción tan precipitada.

Nos quedamos viendo a Vanessa quien estaba despeinada – Así es, en un mes, escucharon bien- Mamá y mi suegra, Bianca se alegraron, por otro lado, Dan no dijo nada y mi padre pues... Me observaba casi queriendo decirme algo.

El desayuno fue una mezcla entre la comida italiana de mamá y el toque campestre de Bianca, joder, que recuerdo tan memorable... Quisiera volver a esos tiempos.

1:04 PM

Ya se hacía tarde, debíamos trabajar, hacía mucho calor y los ánimos no estaban en sintonía para estar horas encerrados en un laboratorio. Pero no se podía hacer nada por lo cual al poco rato nos subimos al vehículo, antes de salir de la ciudad debíamos dejar a mi cuñado en la fábrica. Por alguna razón el tráfico estaba congestionado, ya llevábamos casi una hora de haber salido y seguíamos en media ciudad – Entonces Dan... ¿Qué era lo que hacías? – Pregunté mientras acomodaba la foto de la graduación que tenía pegada al volante – Reparo robots, Mike- él iba en el asiento del copiloto, quizás fue mala idea dejárselo la verdad me tenía malhumorado por su manera de hablarme. Traté de ignorarlo viendo por la ventana - ¿Soldados EDA?- Habían militares caminando por las calles y naves sobrevolando la ciudad, el ruido de los motores nucleares era fastidioso – Esto no es normal- Agregó Vanessa afincándose en mi asiento desde atrás intentando ver algo por la ventana – Jodido tráfico ¿Por qué no avanzamos? Llegaré tarde...- A Dan le preocupaba más llegar a tiempo que todo lo que ocurría fuera.

Al estar en media ciudad estábamos rodeados de hologramas que transmitían publicidad, robots que daban indicaciones y muchas tiendas, todas estas cosas fueron interrumpidas de golpe, la ciudad se paralizó unos segundos y de pronto – Buenos tardes queridos ciudadanos, algunos me conocerán y tal vez otros no... Soy el General Manowar, principal diligente y encargado de nuestra defensa, no es secreto que en los últimos días hemos tenido... Inconvenientes, los asiáticos están a pocas millas náuticas de acá pasando por alto todas nuestras advertencias- Este se aclaró la garganta tosiendo un poco y sacándole brillo a sus medallas – La paz, una estrategia armoniosa que hemos usado durante algunos años ya no sirve... debemos actuar o actuarán antes que nosotros- Su voz era grusa y añeja. Este se apartó un poco del foco dejando ver un holograma al fondo – Cómo pueden ver, esta es nuestra famosa isla "Artificial" Un objeto tecnológico que supera todos los estándares de la ingeniería humana y la que por muchos años, incluso antes de ser construida, levantó revuelos por su simple contexto... ¿Acaso proporcionar un entorno digno para la vida es algo malo? El mundo cree que sí y a tan solo cinco años de haber abierto sus puertas a una pequeña parte de la población, a ustedes los afortunados, ha empezado la hostilidad- Alrededor del mapa de la isla aparecieron puntos rojos, muchos puntos rojos en el mar y puntos verdes sobre la isla- El color rojo, denota a nuestros queridos asiáticos, como se observa han movido gran cantidad de barcos. Por otro lado, están los puntos verdes quienes son nuestros Escuadrones de Defensa Avanzada... Lamentablemente nos superan en número y aún estamos a la espera de confirmación para que nuestros aliados envíen tropas, no tenemos tiempo para esperar, ciudadanos, por lo cual he decidido reclutar a todo hombre mayor de dieciocho años para la defensa de este naciente pedazo de tierra- La transmisión se entrecortaba y el audio dejó de entenderse hasta que la señal se perdió y los hologramas se apagaron junto con los robots.

Dan, Vanessa y yo solamente nos veíamos las caras con desconcierto hasta que un punto de luz se divisó en el cielo – Eso...- Trataba de distinguirlo, detrás traía una estela de humo - ¡Es un misil carajo! – El grito de Dan se sofocó con el abismal sonido de la explosión. De la nada salió otro misil que interceptó al que venía. La gente salió de los vehículos despavorida y los soldados empezaron a someter a todos los hombres que se cruzaban.

Uno de ellos golpeó el vidrio del parabrisas de mi vehículo agregando – Hola reclutas...

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Próximo Capítulo 30/10/22

*Sonido dramático* Empezó el desmadre.

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