En uno de los apartados anteriores te hablé sobre los retos de escritura y te dije que escribiría una parte acerca de cómo puedes darle un giro creativo, así que en el siguiente texto te daré algunos consejos sobre cómo puedes darle ese giro creativo a los retos de escritura que, incluso, podrás aplicar a sus propias ideas.

Todos los retos de escritura son la base de un texto, y, todas las ideas o premisas que surgen para escribir una historia, son la base de la misma. Saber esto es importante, ya que, conocer la base de tu texto hace que no te alejes de tu objetivo principal, porque tendrás claro el camino que debes o quieres recorrer con esa idea. Así que, el primer consejo que te daré es que tengas presente de donde estas partiendo y hacia donde se dirige o hacia donde quieres llevar el reto o tu historia. Puedes anotarlo o simplemente pensarlo, pero tienes que tenerlo claro, porque, probablemente, el reto de escritura te pida: escribir sobre unas vacaciones en un hotel misterioso;, y para darle un giro creativo no puedes cambiarlo a: unas vacaciones en una casa cerca del lago; porque habrás olvidado la base del reto y de la idea. Lo mejor es trabajar partiendo desde esa base y, a partir de ahí, agregarle aspectos de tu propia creatividad.

Una de las cosas que recomiendo al momento de escribir, ya sea, un reto de escritura o una idea propia, es ponerle algo tuyo a esos escritos, lo cual se puede relacionar con los aspectos que más te gustan de una trama o los que te gustaría representar en tu historia. Puede ser el género, un tema especifico, un personaje que tenga algunos rasgos específicos (físicos o psicológicos), un final específico, etc. Eso lo decides tú.

De esta forma, siguiendo con el ejemplo del reto anterior "Escribir sobre unas vacaciones en un hotel misterioso", ya que la base de ese reto no dice nada sobre un género en específico y a mí me gusta el romance, puedo hacer que esa historia esté centrada en el romance y la pareja principal se hospede en el hotel misterioso o también podría elegir la fantasía y hacer que el hotel sea misterioso porque te transporta a un mundo en donde existe la magia o también puedo hacer que el tema sea belleza o el equilibrio y tenga como protagonista a un chico que es feo y el desenlace sea trágico... Perdonen, tuve un momento de inspiración (creo que ahora tengo una idea para una historia corta, jaja).

Me di cuenta de que probablemente voy muy rápido y tengo que explicar más a detalle y con más ejemplos los consejos anteriores. No tienes que usarlos todos, con solo un aspecto de estos probablemente podrías darle un giro interesante a una sola premisa, no te abrumes tratando de agregar cada uno de estos aspectos a solo reto de escritura o idea:

Piensa en tu género favorito o del que más te interese escribir, puede ser el terror, el romance, la fantasía, la ciencia ficción, la ficción general, el género histórico, etc. en realidad hay muchos géneros de donde elegir, incluso puedes hacer una fusión de los dos que más te gusten o interesen.

Piensa en un tema que haya estado rondando por tu mente, puede ser eso que llevas mucho tiempo pensado o eso que recordaste en la mañana, incluso, puede ser eso que leíste en un libro o de lo que se habló en una de tus clases en la escuela, no importa, lo que importa es que sea algo que te interese o te guste. Puede ser tan simple y cliché como la belleza, el amor, la amistad; o tan complicado, personal y nuevo como las inteligencias artificiales, la forma en la que se desarrollo el desayuno que tuviste en la mañana o el tema del chisme del que te enteraste hoy.

Piensa en un rasgo físico o psicológico para un personaje, puede ser un personaje o persona que conozcas, que te guste o que te interese, pero solo un rasgo o un par de estos, porque son estos rasgos los que van a caracterizar a tu o tus personajes principales. Puede ser rasgos físicos como la altura, la belleza, la nariz o la musculatura o rasgos psicológicos como amabilidad, sensibilidad, irritabilidad o inteligencia. También puedes pensar en conceptos que tienen varios rasgos en uno como el Badboy.

Piensa en el tipo de final que más te guste o interese escribir, puede ser un final abierto, uno trágico, uno cómico, un cliffhanger, un final cerrado o, incluso, puedes pensar en dar varios finales. Eso es algo que decides tú y que puede darle un giro interesante a la historia.

Pero, lo que realmente quiero decir con estos consejos es que puedes agregarle lo que tú quieras, lo que más te guste o interese escribir o narrar a los retos, mientras no olvides la base principal y que no debes cambiarla, por ejemplo, al inicio dije que la premisa era: escribir sobre unas vacaciones en un hotel misterioso y, entonces, no se podía cambiar a: unas vacaciones en una casa cerca del lago, pero, la verdad, es que si puedes agregar esta frase al reto y volver la premisa más larga que quedaría de esta manera: "unas vacaciones en un hotel misterioso que está al lado de una casa cerca un lago". Y con esto les recuerdo que estamos trabajando con la creatividad, así no hay reglas, bueno, en esta ocasión solo existe una, no cambiar la premisa base o idea principal.

Bien, ahora llegamos a la parte en donde tienen que contestar preguntas y en esta ocasión son las siguientes: *Recuerden ser respetuosos con los demás*

¿Cuál es el género que más escribes y cuál es del que nunca escribirías?

Escribe un tema que haya estado rondando por tu mente:

¿Cuál es el rasgo físico o psicológico que se te hace más interesante en una persona o personaje?

¿Cómo te gusta que sean los finales de las historias que lees?

Y eso es todo por este apartado, espero que hayan entendido el punto de darle un giro creativo a un reto de escritura o una idea propia y que encuentren su propia manera de hacerlo, es decir, que no se resume solo a los aspectos que les expliqué, porque hay muchas otras formas en las que pueden hacerlo, pero no puedo detenerme a explicarlas todas (y es mejor incentivar su curiosidad y, por lo tanto, su propia creatividad).

Recuerden que no siempre le tienes que dar lo mismo de ti a todas tus historias, ya que tu existencia no se resume en un solo aspecto, ni en cuatro o diez; siempre hay algo nuevo que contar e interesante giros creativos que darle a las premisas de tus historias.

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