Dicen que ciertos momentos de tu vida o mismamente el tiempo te hacen ser más fuerte, también puede darse lo contrario y crear un ser más débil. Dentro de esos dos tipos de personas, yo siempre fui el ser fuerte, el que veía las oportunidades y derrumbaba a los demás.Cuando por fin me dieron el alta de la clínica, aproveché cada día en volver al laboratorio principal. Mi pequeño centro de diversiones había sido calcinado, pero pude recuperar los datos de todos los proyectos abiertos. Hoy tenía un largo día por delante, antes de poder hacer nada debía visitar a la psicóloga a cargo de las sesiones grupales. Solo quedaba yo, Erika había estado recluida en el laboratorio después de hacerse cargo de los bebés. La mantendría hasta mi conveniencia, luego ya podría usarla o deshacerme de ella.En la cocina me esperaba mi madre con el desayuno listo, podía escuchar con claridad lo que estaba escuchando en la televisión.

"-Hoy hace exactamente una semana que los jóvenes hermanastros Mario Pardo Santos y Erika Saavedra Nuñez desaparición en extrañas condiciones. No han dejado rastro y la policía no sabe que están buscando exactamente, el último día fueron vistos. La misma mañana que la joven Alicia Vázquez Morales era vista con vida por última vez, a día de hoy se desconoce qué es lo que ocurrió la noche que fue hallada sin vida en la bañera de un piso de protección oficial. La joven estaba embarazada de 39 semanas, de gemelos. Se desconocen el paradero de los bebés, una sospecha es que su padre los llevará algún lado. Ese sería el joven Mario Pardo Santos. Se pide a los ciudadanos que, si ven alguno de ambos jóvenes, con las características de las fotografías que están en la pantalla. Llamen al número que os dejamos a continuación. - En pantalla se puede ver la imagen de Mario y Erika, y después variantes con gorras o gafas de sol."

Mario fue todo este tiempo un fiel compañero, hasta que volvió a ver a esa estúpida de Alicia. Recordó ese supuesto enamoramiento que sentía y se olvidó cuál era el lado correcto al que seguir. Pero una temporada en una de las celdas del lado este del laboratorio le harían recordar que después de todo el pasado, soy yo quien está con él. Si no... ¿Por qué acabar con Ernesto?

-Mamá, ya no es necesaria la terapia, en parte a mí no me funciona. Sabes que yo estoy bien, ¿Para qué seguir con la tapadera?-Mi madre me mira confundida, después frunce el ceño y resopla.

-Nereida, por las pruebas que me han podido pasar han llegado a considerarte sospechosa. La psicóloga tiene dudas en tu comportamiento, y tu padre y yo no podemos tapar durante más tiempo en el juzgado las cosas. Haz el favor de aguantar un poco más, hasta que se calmen las cosas. Tu comportamiento debe continuar igual que hasta ahora y pásame el edulcorante, por favor. -Con un golpe de muñeca desde el armario que hay cerca de la ventana le lanzo a mi madre el bote que me pidió. Esta lo pilla de manera sorprendente al vuelo.

-No juegues conmigo, si tan adulta crees que eres... maneja sola la situación. En bastantes problemas nos hemos metido ya por el laboratorio y tus caprichos de niñata consentida. -Aprieto mi puño con fuerza y el vaso por el que está bebiendo mi madre estalla en mil pedazos, unos pequeños cortes aparecen en su rostro. En su mano otra cortadura comienza a sangrar de forma más intensa, mi madre se la tapa deprisa y sale corriendo para curarse las heridas. Yo voy al botiquín a por un ungüento de mi creación, de rápida cicatrización. Antes de darme la vuelta mi padre aparece por detrás, cortándome el paso. Este me agarra del brazo y me acerca un poco a él.

-Relaja ese temperamento Hija mía, no consentiré que pases por encima de nosotros. Quiero que vayas hoy al laboratorio y acabes con los dos, puedes proseguir con el "Proyecto Tectalan". Después cierra el laboratorio y no habrás más estudios.

- Yo asiento, es mejor darle la razón. Pero hasta mi propio padre sabe que nadie tiene el control en mí, hace tiempo que gane yo esa batalla. Después ambos volvemos a la cocina, yo agarro la mano de mi madre donde se hirió y le extiendo un poco de la crema curativa. Antes de marcharme mi padre se acerca a mí para pedirme algo más, yo me tenso. Es cierto que desde que volví del zulo nuestra relación se tensó, no soporta que podamos ser descubiertos y no me perdona como todo se fue de mi control.

-Antes de ir al laboratorio, quiero que vayas a ver a la psicóloga. Sé natural. -Yo asentí, después me monté en el coche dirección a la consulta.En la puerta de la psicóloga decido hacer mi papel como hasta ahora. Calculo las palabras que voy a decir y pienso en la credibilidad de las mismas.

***

-¿Qué tal estás semanas sin vernos? ¿Has estado bien? -Dijo ella tanteando el terreno.

-Alicia ya ha salido de cuentas, debe de haber dado a luz, si no, no se explica que no sepa nada de ella. Espero que me enseñe una foto del bebé, ya que me dijo que de inmediato sería llevado a otra sala, con sus nuevos padres. El chico, Mario tampoco ha vuelto a llamar. -Ella me mira confundida, yo continúo con el paripé que parece ser creíble.

-¿Cuánto hace que no hablas con Alicia? ¿No has visto la televisión estos días? -Yo niego con la cabeza, mientras hago fricción con las uñas para calmar un poco mis nervios.

-¿Estás bien? -Sé que está estudiando cada movimiento que hago y que tengo que tener cuidado. -¿Me puedo marchar? Quiero volver a mi casa. -Me levanto de forma rápida para irme, pero ella me frena de nuevo. Agarra mi brazo y al girarlo ve las marcas realizadas de forma más reciente, unos cortes en la cara interna de mi antebrazo están ya casi curados. Ella los observa con detenimiento.

-¿Nereida? ¿Estás lesionándote de nuevo? -Yo me suelto el agarre, cuando ella intenta agarrarme de nuevo le doy una bofetada en el lado derecho de la cara. Maldita ilusa, si supiera que mis lesiones son por cosas más complejas que un auto secuestró inventado, se dejaría de tanta tontería y me trataría con más respeto. Cuando se gira hacia mí tocando su cara tiene un corte en el labio. Ella no controla sus nervios y me devuelve el golpe, lo que provoca que mis nervios sean mayores y yo estalle en cólera. Intento calmarme, pero ya es tarde. Un fuerte grito sale de mi garganta. Es entonces cuando la psicóloga acaba contra la pared empujada de forma muy brusca, con una gran fuerza es golpeada en la cabeza. Acaba cayendo al suelo a cámara lenta y de su cráneo comienza a salir un líquido carmesí, durante un momento me quedo maravillada viendo salir la sangre e incluso me agachó para verla más de cerca. Un ruido no muy lejos del despacho de la doctora me avisa que debo salir de allí, recojo mis cosas y me voy al laboratorio.

***

Me encuentro tumbada en una de las camillas principales, rodeada de cables que conectan mi cabeza y leen la actividad cerebral que está ocurriendo do en este instante. Vamos a empezar el estudio principal de cambio genético en mi cuerpo y los poderes generados. Cierro los ojos y comienzo la cuenta atrás, sabiendo que recordaré algo desagradable.《Un sol brillante entra por la ventana, este me ciega y no me deja seguir durmiendo. Me giro hacia el lado contrario y mi cara da de frente con su cara, rozando su nariz con la mía. Sonrió como una ilusa, pensando que algún día podría pasar algo más... Le observo mientras duerme, se ve tan perfecto dormido. Ernesto entre abre un ojo, sé que sabe que lo observo.

-Para de mirarme piruleta. -Odiaba ese mote y él lo sabía.

-Lo dijo el lienzo andante, tú también me estás mirando. -Él se queda callado y pareciendo imposible por el espacio, arrima su cuerpo un poco más a mí. Su mano comenzó a rozar mi brazo, subiendo despacio por el hasta llegar a mi hombro y pasando por mi clavícula. Yo trataba saliva, y continuaba observándole esperando que algún momento dijese algo. Un pequeño susurro salía de mi boca y eso provocó que él se mordiese el labio inferior, era imposible hacerse más en este momento. Tenía ganas de sentir su boca devorar la mía y que sus manos tocarán cada parte de mí, pero se sentía tan prohibido que fuese él y a la vez tan excitante al mismo tiempo.

-Sabes qué no debemos, siempre hemos tenido reglas.

-Las reglas están para romperse, y sabes que quieres. -Le dije yo. Comencé a sentir su mano izquierda por la parte baja de mi espalda, acercándome lo máximo posible a él. Su contacto caliente hizo que de me erizara cada parte por donde pasaba, despertando cada instinto primitivo en mí, queriendo cada vez más de él. Me acerqué a su oreja para susurrarle.

-Si comienzas algo acábalo, esto sabe a poco ya. -Con la punta de la lengua roce su lóbulo de la oreja y note como él se estremeció. No me dejo esperando ni un segundo más y se abalanzó sobre mí, sin ningún tacto y con deseo devoró mi boca, introduciendo con habilidad su lengua en mí invitando a la mía a unirse a ella. Yo pronto me uní a su beso y con el mismo anhelo me aferré a él. Aproveche cada segundo de ese beso, no quería que acabase nunca y finalmente terminó. Después de unos roces y picos más, nos separamos y él se fue a su casa. Dejándome con más ganas que nunca. 》

***

Al levantarme de la camilla la cabeza está algo confundida, pero dentro de los parámetros mis constantes están dentro de la normalidad. Mi cuerpo no parece haber sufrido grandes cambios y eso es de agradecer. Me dirijo hacía el ordenador y un aviso por experimentos fallidos en los contenedores del sótano dan el aviso para controlarlos. Uno de los científicos que controlan el laboratorio sube bastante ajustado.

-¡Señorita! ¡Señorita! ¡Rompió la bolsa y escapó! ¡Fallo! - si es cierto lo que dice, otro monstruo fue despertado y ahora andaba suelto por el sótano.

-¡Quédese aquí arriba y del aviso! Yo bajaré. -Antes de poder bajar a comprobar el sótano sello y conecto las puertas de seguridad. Y voy a comprobar que Erika y los proyectos están en perfectas condiciones.Al entrar en el dormitorio del laboratorio veo a Erika mirando por la ventana acunando algo en sus brazos, mientras canta una nana de manera muy suave. Del otro lado hay unas cunas, en ella hay otro pequeño bebé. No lo había podido ver antes, me acercó primero al recién nacido de la cuna. Este tiene unos carrillos rellenos y colorados, unos preciosos rizos color canela y un extraño color de ojos color miel violáceo. Por otro lado, el bebé que sostiene Erika tiene el pelo completamente blanco y unos ojos demasiado oscuros, no llegó a distinguir bien el ojo. Podría llegar a decir que el rostro es igual al de Alicia, pero no soy muy buena poniendo parecidos a nadie.

-Estos niños no son gemelos sino mellizos. ¿Averiguaste si tienen algún poder? -Le pregunté a Erika con curiosidad, ella negó.

-Necesito que ahora te quede aquí aislada hasta que te lo puedas, hubo un escape de... Gas en el sótano. -No me fije cuantas bolsas soltó Alicia, cogí a los bebés y me marché. No hizo falta sacárselo de forma brusca, ni haciéndola daño externo. Y respecto a los poderes pasa algo extraño, ellos son capaces de transmitir emociones de una manera diferente. Tanto las suyas como las del resto de personas. -Erika comenzó a cantar de nuevo, fue en ese momento cuando el niño de cabellos negros comenzó a reírse y Erika comenzó a brillar como una estrella con luz propia. Durante unos minutos se quedó en trance, esperando que la acción terminase.

Al abrir los ojos no solo tenía otro color de piel, se veía más contenta e incluso diría que su estado de ánimo era distinto también. Cuando intenté acercarme al otro bebé este me dejó bien claro un par de metros atrás que me quería bien lejos.

Podía percibir miedo a distancia y pronto rompería en llanto y decidí marcharme a la zona baja de los laboratorios, necesitaba inspeccionar la zona y comprobar que todo estuviese correcto.Según comenzaba a bajar los módulos del sótano, aseguraba la zona para que nada saliese a mi paso.

Cuando llegué a la zona de vientres artificiales pude comprobar que lo que se había escapado no era un experimento fallido. Y desde luego lo habría preferido, no sé hasta que punto estaba preparada para afrontar verle la cara tan igual y con su mente situada en este nuevo cuerpo virgen en todos los sentidos.Camine por los pasillos desesperados por encontrarle, aunque dentro de mí no tenía ganas de encontrarle realmente. Sentía la necesidad de regresar mi caminó y no sufrir más por sus tira y afloja, sus desplantes, su manera de usarme o como y cuando a él le apeteciese. No sé en qué momento se me ocurrió elegirle a él como prototipo de clonación, pero ya era demasiado tarde para lamentaciones.

-¿Me buscabas Piruleta?

¿Qué os ha parecido el último capítulo?

Estamos llegando al final

¿Qué os parece la clonación?

¿Creéis que Nereida esta fuera de control?

¿Qué os parecen los mellizos?

¿Qué nombre les queréis poner?

¿No tenéis dudas sobre dónde están Mario,Elliot y Alicia?

Si queréis saber algo más preguntar.

Besos oscuros

Aneizar