Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Internum Pugna( Lucha interna) [+extra Erika]

El tiempo va pasando, para unos más rápidos que para otros. Todos avanzamos, pero sin gran mejoría. Me gustaría que fuese más fácil volver a la normalidad, pero continúo peleando con Elliot cuando nos vemos. Desde que esa noche lo vi al final de la calle, no pude perdonarle que lo hubiese dejado pasar. Así que fui en busca de él para encararle, y la respuesta fue demasiado amarga.Al poco de mi desaparición el empleo de su madre mejoró y se mudaron al vecindario donde está nuestra casa provisional. Mi madre me contó que casa día pasaba por la puerta de nuestra casa principal, que se quedaba allí por un rato y después sé marchaba. Después de un tiempo dejo de hacerlo y ya no volvió.La noche que le vi de pasada, parecía sorprendido. Tampoco hizo nada por verme, se dio la vuelta al igual que hice yo. Unos días después volví a verle mientras daba una vuelta por el lugar, nos pasamos uno frente al otro. No supe que hacer, nos quedamos quietos sin decir nada. Finalmente es él quien rompe el hielo.

-¿Estás bien? -Me pregunta, luego hace el amago de acercarse, pero no se mueve del lugar.

-¿Realmente te importa? -Mantengo las distancias por algo, me sigues importando. -Parece sincero, aunque no sé hasta que punto podía creerle. Me acerco a él para rozar su rostro, después de tanto tiempo necesitaba ver que era él, sentirlo y escuchar su voz durante más rato. Cuando la punta de mis dedos toca su rostro, él se mantiene apoyado en mi palma por unos segundos y luego sé retira para evitar que le toque más.

-¿Me echaste de menos?Después de ese día, si nos encontrábamos no éramos capaces de decirnos ni una buena palabra. Dentro de mí quería volver a abrazarle, besarle y estar junto a él. Pero mi orgullo era más fuerte y no era capaz de perdonar que me dejará de lado.

***

Unos meses después...Recorriendo el pasillo de un lado a otro, cuento mis pasos para distraerme.Pasados unos meses sigo sin asimilar las noticias que me fue dando el doctor. Estoy esperando en la sala de espera para poder hacer otra ecografía más. Inconscientemente toco mi vientre ya bastante abultado.De las semanas de embarazo aumentaban en cada ultrasonido, los bebés eran cada vez más grandes y yo estaba más asustada por lo que pasaría. Esta situación no permitiría que el embarazo llegará a término, y después llegaría la separación. Una decisión que me derrumbo por completo, pues muy clara que la tuviese. Era algo difícil y muy duro, pero ya tenía claro que después de todo este proceso, darlos en adopción sería el siguiente. Aunque puestos su naturaleza, seguramente se criaran en un laboratorio. Al igual fueron creados. No quería saber ni sus sexos, cuanto menos me involucra mejor. Después de la eco, el médico nos esperaba en su despacho para comentar algunas cosas, dentro esperaba Mario junto a él.

-¿Qué hace el aquí? -Mi madre y yo preguntamos a la vez algodesconcertadas, no podíamos pensar lo que venía ahora. -Él tiene que ver entodo esto, no se preocupen. Siéntense y escúchenme. -El doctor parecía másnervioso que nosotras.

-Pues no es fácil de decir la verdad, llevamos realizando varias ecografías esta semana Alicia, y los resultados son inconclusos. La placenta de los fetos está gruesa que nos impide verlos e incluso escuchar sus latidos. -Estaba curiosa por lo siguiente que tuviese que decir, no me sorprendía dado la genética de los bebés. Nadie decía nada.

-Llegaron los exámenes del médico forense que estuvimos esperando, como sigue siendo una investigación abierta no debe de salir de aquí. En efecto no fue víctima de agresión sexual. Ya supimos que al estar ambos modificados genéticamente, pudieron... ¿Ser consentidas? - Ambos nos miramos, fue Mario quien contestó.

-Lo cierto doctor, es que en el tiempo que estuvimos en el búnker no hemos estado juntos. Fue anterior al secuestro. -Es mi madre la que queda sorprendida por su respuesta, es el médico quien toma la palabra de nuevo.

-En realidad las fechas del principio mostraban que por el tiempo de gestación fue unas semanas antes del rescate. Mucho después del secuestro. Pero por los resultados de hace un mes, se podría decir que tiene casi a término el embarazo.Sabemos que no te quedaras con ellos, así que te ayudaremos con elproceso de adopción, decidiendo si lo queréis cerrado o abierto. -Dejo deescuchar todo lo que el doctor dice, escuchando solo bla, bla, bla, la cabeza empieza a llenarse de palabras sin ningún sentido para mí. Demasiado agobiante y confuso, también eran las palabras para describir el rostro deMario.

-¡PARE! Por favor espere un segundo, son muchas cosas para decidirlas de golpe. Déjemeque pueda ordenar todo en mi cabeza. -Salgo de la consulta para tomar aire, noté que me faltaba con cada palabra que avanzaba y saqué la cabeza para respirar despacio por la boca. Cada vez son más grandes las circunstancias que nos tocan vivir y más difíciles de asimilar. Las estamosdescubriendo de golpe y eso hace que mi cabeza explote. Pude escapar de aquel lugar donde me mantenían cautiva, pero mentalmente sigo encerrada en este otro. La psicóloga me ha hecho entender que de todo este lodo que me embadurna, pronto no quedara nada y podré volver a ser yo.Con mucha paciencia y poniendo algo de mi parte pronto volveré a salir de la oscuridad en la que, obligada, he tenido que quedar oculta. Que deberíade ver las cosas buenas que esto me ha traído. Sigo pensando que, pero quenunca deje que la inmensa nada me cubra más. Algunas de las terapias lashacemos en grupo, junto a Nereida, Erika y Mario. Sigo trabajando con la hipnosis para las sesiones con la policía y poco a poco mi mente se abre.Nereida tiene todo más distorsionado, por todo el tiempo que estuvo en coma (o eso dice... siento que a veces se contradice) y Mario es todo lo contrario, tiene detalles muy concretos de lo que vivimos los cuatro.

Erika es punto y aparte, se niega a hablar con nosotros. En, la última sesión Nereida nos pudo contar lo que habían avanzado los médicos, que ella también fue portadora y como de manera repentina lo perdió. Creen que esto va más a ya de una obsesión de Ernesto por nosotras, ya que Mario, explico que esto tenía algo más complejo y gente más peligrosa detrás de él. Y eso estaba claro, habíamos sido ratas de laboratorio todo este tiempo, y por mucho que nos decían que viviéramos el presente, estaba segura de que volveríamos a estar como en el pasado. En cambio, Nereida le decía que dejara de fantasear, que nadie quería perder el tiempo con nosotros. Pero otros retos le daban la razón y eso me dejaba pensando en lo que realmente creía.

***

Hace un mes más o menos comencé a escribir un diario, para apuntar todo lo que se me venía a la cabeza.22/08/2018Tengo muchos recuerdos desordenados en mi mente, están alterados y difusos. No sé cuáles son reales o no, el orden que siguen o si poder volver a ser yo después de recordarlos. Y aunque la hipnosis ayude y haber avanzado, sigo sin ver la claridad de estos al 100%.Era una extraña manera de sobrevivir mentalmente en ese angosto zulo, donde esas cuatro paredes eran mi salvavidas. Cada día despertaba varias veces soñando algo bonito, viendo que la realidad era la pesadilla.Ya después de un tiempo y variasvisitas al laboratorio, hubo una vez que no fue como el resto y en ese momento no le di ninguna importancia. Llegue a una conclusión después de las sesiones grupales. Y con nuestras teorías unidas averiguamos lo mismo. Como nos robaron la mente y dejamos de soñar.

《 -Entonces Mario, cuéntanos la rutina que seguías una vez más. -Dijo la psicóloga, el resto mirábamos expectantes. Erika era la única distraída, sin participar.

-Dejaba unos días de margen para debilitarnos, llevarnos al laboratorio y revivirnos. -Dijo él muy seguro de sí mismo. -Pude recordar un día concreto en el que no me llevaron al laboratorio, fui devuelta a las cajas de madera en las que había una botella de agua y un bocadillo... -Me quedé absorta por un momento, pensando en ese recuerdo sin decir nada al resto del grupo y quedándome callada. Ese día solo pensé que fue un castigo, por mi constante rebelión. Pero va más allá, las voces que ese día creí oír de otros que como yo pensé que estaban cautivos. Y no era así, en mi mente se van ordenando sus conversaciones y ahora me va cuadrando más la teoría de Mario y la gente al mando de todo lo que está pasando. Pero de forma distorsionada sus voces sonaban iguales y no lograba saber quiénes eran.

-Alicia. -Me llamó la psicóloga llamando mi atención, por ese momento de distracción. -Perdón, me quedé en blanco. -Mentí. Algo dentro de mí no terminaba por fiarse de ellos. Recogí mis cosas y salimos de la terapia. Cuando salí fuera para esperar a mi madre vi la cara de Elliot, estaba apoyado sobre su coche. Cuando me vio se acercó a mí. Quise ignorarle, no tenía ganas de discutir. Fue inútil.

-Sube, te llevo yo a casa. -Dice él abriendo la puerta del copiloto, mientras detrás de mí sale el resto y se quedan mirando la escena. No sé por qué, pero cuando siento que Mario se va a acercar monto en el asiento del copiloto. Elliot cierra la puerta, después monta y nos vamos. La cara de Mario es de pura decepción y la de las otras dos chicas eran de odio.El trayecto en coche está siendo algo incómodo, me animo y soy yo la que decide hablar primero.

-¿Qué haces aquí? -Le dije algo enfadada. El giro el volante y freno de golpe el coche. Al principio intenta hablar en varias ocasiones, pero el mismo se corta para volver a empezar. Me pilla desprevenida, yo creo que ni él sabía que iba a hacer eso. Aferrado a mí me abraza apretándome contra su cuerpo.

-Pensé que te había perdido. -Dijo susurrando en mi oreja. Y de nuevo profundizó el abrazo, dejando su rostro bajo mi cabello. Ninguno de los dos forcejeamos por separarnos, la verdad que después de tantos días peleando sin saber por qué... Me sentía a gusto con su toque. Note como por mi rostro caía una lágrima, seguida de algunas más. Nos quedamos por unos minutos más así. Cuando me voy a separar un poco él me acerca de nuevo.

-Un poco más. -Siento como una pequeña sonrisa se escapa de mis labios. Cuando por fin nos separamos la hora de ir a casa se estaba echando encima y pronto mi madre llamaría. No tardo en aparcar cerca de su casa y acompañarme andando hasta la puerta de lo que era ahora mi hogar. No podía creer que él estuviese de nuevo aquí conmigo, me hizo falta todo este tiempo. Y las peleas que teníamos solo hacían que le echará más de menos. Los dos sentíamos esa ansia de volver a estar juntos, la necesidad de no dejarnos y de huir del tiempo para que no finalizará este momento. Sin pedir permiso, sin delicadeza y sin esperar la ocasión. Tiro de mi camiseta atrayendo hacía él.

Apretó su boca contra la mía y metió su lengua para acariciar la mía, yo tampoco pensé en tener cuidado y dejándome llevar mordí su labio inferior pidiendo más ahí y ahora. Maldecía en mis adentros haber salido del coche, las opciones se reducían a subir a mi dormitorio sin que se diera cuenta mi madre. Pero fue un intento fallido.

-¡Alicia a casa! -Una fuerte y autoritaria voz me ordenaba en dirección opuesta. Sabía bien quien era. Con las bocas todavía pegadas Elliot se quejó.

-¡Mierda! Llego el señor sargento, a él no lo eche de menos. - Me separé un poco de él y comencé a reírme. -Tendremos que dejarlo para otra ocasión. -Dije yo.

-¡Alicia! -Grito más fuerte mi padre.

-Ya voy, no chilles. -Elliot se dio la vuelta para irse y yo fui directa donde estaba mi padre.

-¿Has vuelto con ese chico? -Dijo alzando una ceja.

-Es solo un amigo papá. -Yo no beso así a tu tío Tomás...-Se le escuchó decir entre líneas.

-¿Qué? No te escuche.

-Anda pasa, que tenemos que cenar. - Y juntos fuimos directos a la cocina.La cena pasó rápida, sin ningún tema raro de conversación. Antes de bajar de nuevo al salón aproveché para recoger un poco el escritorio. Deje la hoja con mis últimos recuerdos en el cuaderno y baje las escaleras hacia el salón. Encendí la televisión, antes de buscar cualquier canal donde ver una película y pasar otra cosa, el telediario explicaba como en este año más de 10.000 personas desaparecidas, las cuales 6.000 eran menores de edad, con un mínimo porcentaje por huidas y el mayor porcentaje eran secuestrados. Seguidamente la chica del telediario daba paso a su compañera,que se encontraba en la calle de una zona residencial, junto a una familia.Comenzó a contar como una chica de 20 años había desaparecido hace52 horas y no sabían nada de ella. No creían que fuese una huida, ya que nose había llevado nada, ni faltaba dinero. Seguidamente, en la parte derechasuperior del televisor, aparecía una, fotografía suya. Esa chica de pelo negro y ojos claros, me era muy conocida, marque el número de Nereida. Ella me contesto rápido a la llamada.

-Estoy viéndolo, es María Ruiz estaba un curso por debajo de nosotras en el conservatorio de danza. Suhermana mayor salía con mi hermano. Mi madre me ha dicho, que nuestrasdesapariciones fueron iguales. De repente y sin dejar rastro de nada, sin coger nada y el teléfono sobre la cama apagado. Todo igual que nuestros casos. -Trago saliva, escucho cada palabra que me cuenta. Yo no sabía nada de como los medios llevaron nuestros casos, nunca quise. Pero la verdad, no puedo dejar de escuchar todo lo que Nereida me cuenta. Como después de esto nuestro mundo cambio y se juntaron nuestras vidas, ya que nunca fuimos amigas. Ella jamás pudo soportarme y yo a ella tampoco.

-Nereida, tenemos que recordar el lugar y hay que ayudar a esa chica. - Mi padre me quitan el teléfono y cuelga, su rostro está muy serio.

-¿Qué quieres que te vuelvan a coger? No sabes si saldrás de allí de nuevo. Piensa lo que dices, esa chica lo mismo no está allí. Y mucho menos involucres al resto en tus pensamientos locos. - Las palabras que Nereida dijo vuelven a resonar en mi cabeza,"es igual a nuestra desaparición".

-Papá, antes dijo que fue igual que nuestra desaparición. La tienen que tener ellos. - Parece que lo comprende, me mira con los ojos brillos y con preocupación. Sé que, aunque no me entiende lo intenta.

-¿Cómo piensas encontrarlo? ¿Vas a luchar? -La paranoia me está haciendo enloquecer y sé que esta locura puede matarme. -Confía en mí. Papá ayúdame averiguar quiénes son, sé que Ernesto está muerto. Lo sé.

-¡ESTO NO ES UNA PUTA PELÍCULA! ¡Alicia hija despierta de una vez! Sigues viva de chiripa. Deja de pensar que eres Wonder Woman y de que tienes un jodido avión invisible, para que no nos vean. Eres una chica corriente que dará clases de defensa personal. No quiero perder a mi hija de nuevo. -Tiene razón, pero la policía no va a hacer nada. No llegan acreer nuestras historias, creen que Ernesto cometerá un fallo. Que lo cogerán y que todo acabara. Sé que se equivocan y que Ernesto no puede volver de entre los muertos. Pero cada vez estoy más convencida que todo esto es un iceberg y que solo nos muestran el puntito. Mi padre se ve preocupado y ponerlo en esta tesitura le altera mucho más.

-Quiero empezar ya la práctica. -Mañana a primera hora.

-Contesta.-Ahora sube a descansar.Le hago caso, y me acurruco en mi cama enseguida. La barriga ya me impide dormir en cualquier posición e intento ponerme lo más cómoda posible. Son muchas cosas las que están pasando en mi cabeza ahora mismo, pero sé que podríamos ayudar mucho más si la policía nos dejase. Siento la necesidad de llamar a la inspectora, de presentarme voluntaria. Viendo la hora es tarde y mi padre estaría atacado de nervios. Quiero pensar que este es el único embarazo que estará a término y que fallaron igual que el de Nereida. Erika es un claro ejemplo de que con ella ni experimentaron. ¿O es que no les dio tiempo? Eso sería lo más posible en toda esta locura.Pero no dejaré el tema, mañana tendrá que oírme y dejarme ayudar. Por mucho que mi padre se resista a que eso ocurra.

***

-¡Arriba dormilona! Hay que mover ese cuerpo perezoso. -Primero abro un ojo y luego el otro, veo por el rabillo del ojo a mi padre vestido con un chándal y excesiva energía. Cuando abro el otro ojo veo que en el despertador apenas son las cinco.

-Papá, ni siquiera hay luz. -Él tira de mis mantas hacia atrás y yo con mucha pereza me levanto y después estiro mis brazos mientras doy un gran bostezo.

-Vamos a coger fuerzas y después comenzaremos en el garaje con el entrenamiento. Ponte ropa cómoda, te espero abajo. -Cuando sale de la habitación busco entre mis cosas y cojo unas mallas y una camiseta un poco ancha. Mientras me desvisto me miro en el espejo de cuerpo entero, siento como una pequeña culebra pasa poner mi tripa una y otra vez, como tira con pequeños golpes de mi piel hacia delante. Lo siguiente que siento es extraño, una sensación muy diferente dentro de mi pecho y a la vez en mi mente. Puedo sentir la unión con los bebés y como se sienten ellos dentro de mí, como se comunican entre ellos de alguna forma extraña que asusta. ¿Es esto real?ErikaNereida me ha invitado a su casa para contarme algo, creo saber que es. Al resto habrá podido regalarles, pero yo sé que es la misma zorra manipuladora de siempre. No me apetecía ir a verla, pero sabía hasta donde era capaz de llegar para obtener lo que quisiese y eso me asustaba mucho. Era muy calculadora y sabía bien como dominar al resto y ocultar la verdad. Hasta ahora lo había hecho muy bien, y nadie se había percatado de nada. Hasta Mario había llegado a perder cierta capacidad de recordar, el golpe que Alicia le propinó hizo que olvidase su culpabilidad hasta cierto punto, recordando solo los hechos omitiéndose a él y al resto. Parecía que el mismo creía en esa estúpida versión, en la que un joven de buena familia decidió hacer cosas raras con sus amigos. Pero al igual que ellos jugaban su papel, yo hice lo mismo con el mío. La pobrecita niña traumada que se le olvidó hablar. Y así me funcionaba bastante bien.Estaba cerca del centro comercial cuando una voz a mis espaldas me llamó, era el demonio en persona. Nereida. Estaba montada en su mini rojo, mirándome mientras se acercaba.

-Erika monta que te invito a tomar algo. -Dijo ella demasiado sonriente. Yo obedecí y me monté en el asiento del copiloto. Después se pudo en marcha y en cuanto salimos de ese lugar tan transitado empezó con los ataques. -Recuerda lo que sé y como puedo arruinar tu vida, más no podía ser posible.

-Cuando de la orden espero que obedezcas, sea lo que sea. Si no es así darás tu vida a cambio. - Sabía que no estaba jugando conmigo, su amenaza era real.

NOTA DE AUTOR
¿Tenéis alguna pregunta?
¿Algo que queráis aclarar?

Este es vuestro momento.

A

lo largo del día subiré la siguiente parte... la cosa se pone peor.

...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro