Entonces, pienso en el comienzo,
y se oye el eco de una chispa,
y recuerdo la mágica electricidad.
Luego, miro a mi corazón,
hay una luz en la oscuridad,
aún hay un destello de la esperanza
que tú me diste primero,
que quiero que guardes.
Por favor, no te marches.

— Flicker, Niall Horan.

Pocas eran las cosas de las cuales Shinsou se arrepentía de haber hecho en su vida, una de ellas, y la que más le pesaba; era haber dejado a Denki cuando ambos estaban en la universidad.

Shinsou había tenido miedo de fallarle, que la maldita forma en la que lograba inspirarse terminará lastimandolo, tarde o temprano iba a necesitar más y más ideas, e ingenuamente creyó que él no iba a lograr ser suficiente.

Fue una suerte que Bakugou le pidiera ser su padrino de bodas, sinceramente creyó que el más indicado para ello sería Midoriya, después de todo eran amigos de infancia; le causo un poco de gracia cuando Katsuki le dijo: ni loco, es mi venganza por poner a la cara redonda como su dama de honor y no a mi. En un principio estaba reacio a la idea, pero en cuanto mencionó el nombre de Denki las manos comenzaron a temblarle y por un momento dejó de respirar, no creía en las segundas oportunidades ni mucho menos tener la suerte suficiente como para que se le fuera otorgada una, pero aun así, si había la más mínima posibilidad...

Y la hubo, Shinsou agradeció internamente a todos los dioses existidos y por haber. Esta vez la historia no se repetiría, había aprendido su lección.

***

Shinsou se sintió tranquilo hasta que dejó a Denki junto a su hermana y su padre, se encontraba exhausto pero aún le faltaba firmar algunas cosas antes de irse, por experiencia propia prefería dejar la mayoría del papeleo listo antes de irse, y sobre todo, aprovechar que los compradores de sus obras aún se encontraban en el lugar.

Cuando estuvo todo listo y estaba por marcharse alguien lo intercepto.

— ¡Jiro! — exclamó con sorpresa y se acercó a dejar un beso en la mejilla de la chica — Pensé que no ibas a venir, la mayoría de la noche vi a Momo sola junto a mi padre.

La chica le sonrió algo apenada y acomodó el bolso que llevaba sobre su hombro izquierdo.

— Llegué hace poco, —respondió calmadamente — tuvimos una sesión en el estudio y no pude zafarme de ella hasta hace una hora, ¿Como estuvo el evento?

— Excelente, si quieres puedo ir a buscar a Momo — se ofreció al ver el rostro cansado de Jiro — la vi ir rumbo a la bodega, por lo pronto puedes esperarla en el salón que esta a la izquierda de la recepción, mi padre y mi esposo deben estar allí.

— ¿Te casaste? — preguntó con sorpresa.

— Es una larga historia — le sonrió — Iré a buscar a Momo, tu ve y descansa.

No espero una respuesta, se dio la vuelta y emprendió rumbo a la bodega.

***

Al entrar a la habitación no pensó encontrarse con Setsuna Tokage.

— ¿Qué haces aquí?

La mujer frente a él sonrió y comenzó a acercarse.

— Tu padre me invitó — respondió tranquilamente — quiere que vuelva a trabajar para él.

Hitoshi hizo un gesto disgustado — que no pasó desapercibido para Setsuna —.

— ¿No te alegra verme de nuevo, querido? — Shinsou se quedó estático al sentir los dedos de Tokage recorrer sus hombros.

Setsuna Tokage había trabajado para su padre hace un par de años, al igual que Hawks, se dedicaba a la escultura pero decidió probar nuevos aires en otro lado y abandonó la galería.

Shinsou no la odiaba, antes ni ahora, simplemente se volvió una persona demasiado problemática para su gusto. Había comenzado a salir con ella un par de veces — nunca nada demasiado formal — en cuanto se unió a la galería, sus encuentros no pasaban de una noche en su casa o en la de ella.

Pero ella quería más, y Hitoshi no estuvo dispuesto a dárselo.

— Setsuna — habló con advertencia.

Ella rió junto a su oído y se detuvo frente a él.

— Escuché que te casaste. — esta vez su semblante cambió a uno más serio — Creí que tú no buscabas nunca nada serio. 

— Contigo no. — respondió. — ¿Viste a Momo por aquí? Es a quien estoy buscando.

— Hitoshi, Hitoshi — comenzó a susurrar su nombre — ¿Sabe sobre todas tus aventuras? Tu extraña forma de inspirarte, ¿Crees que él va a ser suficiente?

—¡Setsuna, ya es suficiente! — exclamó enfadado. — Si vas a volver a la galería espero que te mantengas alejada de mí, creí haber sido demasiado claro cuando nuestros encuentros acabaron.

— Aún no decido. — volvió a sonreír — Quizá acepte la propuesta de tu padre, tal vez no.

— Quisiera decir que fue un gusto verte de nuevo pero sería demasiado hipócrita de mi parte. — dio un paso atrás — Si ves a Momo dile que Jiro la está buscando.

Setsuna lo ignoro por observar algo a su espalda, Hitoshi quiso seguir su mirada pero le fue imposible, fue jalado del cuello de su saco y los labios de Tokage se estamparon contra los suyos.

Pasaron varios segundos para que Shinsou pudiera reaccionar, se alejó de golpe y el enojo comenzó a invadir su cuerpo.

— ¿¡Qué demonios, Setsuna!? — susurró, eliminando con la palma de su mano los rastros del beso sobre su boca.

— Oh, Hola — Setsuna sonrió. Shinsou se tenso al escucharla y volteó rápidamente hacia la entrada — Denki, ¿verdad? Supongo que buscabas a Hitoshi.

Ninguno de los dos habló, Shinsou mantuvo su mirada en Denki pero el rubio no despegaba sus ojos de Setsuna.

— Bueno, fue un gusto hablar contigo, querido — Setsuna comenzó a caminar a la salida — Nos veremos después.

Cuando se encontraron solos Shinsou intentó acercarse al rubio pero este levanto su mano, deteniendolo.

— Denki, no es...

— No — lo interrumpió — No hables.

Hitoshi se mantuvo en silencio, impotente. No le agradaba para nada la mirada que Denki tenía, parecía impasible, prefería verlo enfadado; de esta manera sabría que es lo que pasaba por su mente.

Sintió un poco de alivio al verlo acercarsele, hacer algo más aparte de observarle indiferentemente. Estaba a punto de volver a hablar cuando sintió un ardor en la mejilla y su cabeza se ladeó bruscamente.

— Esta vez no me voy a quedar con las ganas de darte un golpe. — escuchó al rubio — Eres un...no, yo soy el idiota, mira que dejarme engatusar de nuevo — su estómago se encogió al escuchar la risa que dió Denki — Dios, necesito salir de aquí.

— Espera, Denki...

Shinsou intentó seguirlo pero al salir alguien lo detuvo, intentó zafarse del agarre pero este aumentó su presión.

— Dejalo — escuchó la voz de Aizawa a su lado — Creo que ya hiciste suficiente.

Todo volvía a repetirse, pero esta vez, Hitoshi no tenía nada que ver.

Es el karma, pensó amargamente.

***

Shinsou lo tenía todo preparado.

Después de que Kaminari saliera del dormitorio tomo su celular y marcó el número de uno de sus amigos — si es que podían llamarse así—, la única manera de mantener alejado al rubio era rompiéndole el corazón. No había otra manera, si simplemente lo alejaba, él iba a encontrar la forma de volver a él o viceversa, Kaminari era un sol que merecía ser amado y admirado por alguien mejor que él.

Ademas, aunque lo intentara, estaba seguro que no duraría mucho. Ciertamente, estaba un poco sorprendido de sí mismo, llevaba ya varios meses saliendo con el rubio — exclusivamente—, nunca había hecho algo igual, por lo regular, no pasaba de un par de semanas con alguien — hombres o mujeres, daba igual —; pero con Denki, simplemente no tenía suficiente de él, había logrado entrar en su corazón sin que se diera cuenta, no lo amaba, ni lo quería, más bien le tenía afecto y quizá un poco de cariño, el amor para él era algo demasiado intenso y que llevaba demasiado tiempo para florecer, no creía tener la misma suerte que sus padres.

Sabía de primera mano cómo se veía el amor, logró comprenderlo gracias a sus padres, pero él no se consideraba lo suficientemente afortunado como para tener algo así.

A sus diecisiete años descubrió algo que lo maravillo.

Descubrió el santo grial de la inspiración.

El placer, el deseo sexual y las historias de sus amantes lograban que pintara los cuadros más hermosos que jamás había hecho. Una vez que lo descubrió se convirtió en su mayor herramienta.

Y, una vez que lograba obtener toda la inspiración...los botaba, —hoy en día no se sentía para nada orgulloso de su pasado—; pero cuando Denki le dijo que lo amaba, simplemente sintió que estaba haciendo algo mal, había estado tan concentrado en otras cosas que ignoro por completo los sentimientos que comenzaron a formarse a su alrededor, necesitaba alejarlo antes de que su instinto pidiera mas y mas; y al final terminara destruyéndolo por completo, era mejor hacerlo ahora que sus sentimientos estaban frescos y no cuando echaran raíces en su corazón, aunque una parte de si se negara a hacerlo.

Lo planeo todo, quedó de verse con uno de sus ex amantes a las afueras de su facultad, Kaminari le había dicho por mensaje que pasaría a buscarlo para ir a comer algo fuera del campus, lo único que tenía que hacer es esperar el momento correcto para terminar con todo esto.

Sí, era una manera cobarde de terminar con él, pero consideraba que era la mas rápida y practica; al final, Kaminari no iba a querer volverlo a ver en su vida.

Estuvo varios minutos hablando con el chico de temas random, tratando de hacer tiempo para que el rubio hiciera acto de presencia, comenzaba a impacientarse, a veces le era un poco difícil seguir el hilo de la conversación, sobre todo por que no recordaba el nombre del chico, en sus contactos lo tenía registrado como "cabello plateado 09/00" y definitivamente no iba a preguntarle su nombre.

Al final su plan funcionó.

A lo lejos observo la cabellera rubia de Kaminari acercarse a donde ambos se encontraban, no lo pensó dos veces, ignoro el saludo que el rubio le dio a lo lejos e ignorando la radiante sonrisa que Denki tenía en su rostro, atrajo hacia sí al chico frente a él; observó el momento exacto en el que el rubio detuvo sus pasos y quedo estático a metros de llegar a él, Shinsou mantuvo sus manos en la cabellera del chico y sus labios juntos; pero sus ojos, sus ojos siempre estuvieron sobre los de Denki.

Había logrado alejarlo de él, le había roto el corazón y en ese momengo, sin ser consciente de lo que había hecho —por lo menos no en ese instante—, una parte de si se fue con el rubio cuando este volvió sobre sus pasos.

Una parte de sí que no logró recuperar hasta varios años después.

Holis ✨
No me maten 🥺

Al fin sabemos qué pasó jejeje
No se como explicar el capítulo, 🤔 no se si quedó claro así que lo voy a explicar concisamente.

Shinsou lograba obtener inspiración acostándose con cualquier cosa que se moviera jejej por lo menos hasta que llegó Denki, encontró la inspiración más pura pero fue lo suficientemente ciego como para no verlo y lo dejó ir, agregándole que tenía miedo a perder la única forma que tenía para crear cosas maravillosas, pensó que Kaminari no sería suficiente después de un tiempo, si le agregamos que Denki ya estaba súper coladito por él y en si su relación no era algo oficial...

Yo soy alguien que no perdona infidelidades pero me encanta leer sobre ellas, mi gusto culposo 😅

Pero bueno, si tienen alguna dudita déjenmela por aquí 👉🏻

al igual los errores que encuentren, me puse a hornear brownies y se me olvidó que tenía que terminar el capítulo hoy, lo terminé en tiempo récord.

Por cierto, la historia tiene 16k leídas 😭 mil gracias por leer este intento de escritura, sus votos y comentarios me motivan bastante, sobre todo los comentarios JAJAJAJ son bien ocurrentes 💕

Nos leemos luego con el penúltimo capítulo 🥺