NO LO VALE

Lincoln: dime Rita... ¿vale la pena... perder a uno de tus hijos solo para intentar recuperar a otro?

Rita: no... no lo vale.

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Lincoln: ve la hora en su celular, aún es temprano, ve a Lily durmiendo, quien como tu pequeña perezosa.

Continuando con el relato anterior, logramos observar a nuestro albino protagonista saliendo de un gran edificio que almacena una amplia y basta cantidad de información en formato impreso, cargando con una pequeña niña rubia que hace solo unos minutos se encontraba despierta, acomodo su mochila y a la bebe para la comodidad del viaje y continuo su aventura, rumbo a una institución para personas de avanzada edad, ahora mientras el emprende su caminata nosotros nos trasladaremos a otro punto, la casa Loud, donde las hermanas intentaban sin ningún éxito hacer las actividades que según ellas mismas seria "pan comido", expresión utilizada para referirse a la sencillez o facilidad de una acción o actividad, pero por desgracia para las hermanas hace tres meses que dejaron de usarla.

La ausencia del único sujeto dispuesto a participar en las múltiples y desgastantes actividades de las hermanas comenzaba a notarse más con el inicio y culminación de cada día, y por obvias razones el no regresaría a ayudarlas, o por lo menos según ellas hasta que consiguieran su perdón, ahora dirijámonos a la hermana mayor y por lo tanto la que debió ser desde un principio el pilar y apoyo del resto de sus hermanas, cosa que nunca sucedió si tomamos en cuenta que ella también se aprovechaba de la amabilidad del pobre muchacho, suceso actualmente sin importancia, pero que decidí agregar para alargar el capítulo, ahora continuemos, al igual que el capítulo anterior seguía pegada a su celular, con la notoria diferencia de no encontrarse en las típicas redes sociales que suele frecuentar, si no una página de ventas online buscando algún artículo que sea del agrado de su joven hermano, para de esa forma intentar conseguir su perdón, un buen plan ante su punto de vista tomando en cuenta lo materialistas que son todas sus hermanas y ella, además de recordar que en su pequeño ataque de ira destrozo varias cosas dentro de su habitación, con la posibilidad de incluir algo importante o que ocupase con frecuencia, por lo cual considero que tal vez necesitaría cosas nuevas, pero no lo sabría bien al menos que entrase a su habitación y lo comprobara ella misma, cosa que no haría para evitar enojar aún más a su hermano, por lo tanto estaba en debate si comprar algo a su gusto, o necesidad, debate que solo se complicaba más al ver los descomunales precios de los artículos que observaba actualmente, llegando a la conclusión de que sería mejor y más barato hacer un viaje con él y comprara algo a su elección, pero tomando en cuenta su comportamiento actual es obvio que se negaría, sin más que hacer dio un suspiro y salió de su habitación para dirigirse a la cocina por un vaso de agua, mientras consideraba la idea de conseguirse un empleo para obtener los suficientes recursos para el obsequio de disculpa para su hermano, sin duda alguna sería una época complicada, sus estudios diarios, sus estudios para la universidad, un trabajo e intentar que su hermano las perdone, sin duda alguna sería algo por demás estresante.

Apenas dio un pie fuera de la habitación el ambiente cambio radicalmente, se escuchaban algunos sollozos y quejidos por todo el pasillo, todos de diferentes habitaciones, pero el que mas le impacto fue el que provenía de la habitación de su hermano, ¿lloraba por enojo? ¿tristeza? O... ¿será que ya las había perdonado y buscara una forma de disculparse por ser tan frio? Pese a que la curiosidad era mucha y realmente quería consolarlo, no podía darse el lujo de estropear el momento de desahogo de su hermano, por lo que decidió investigar el motivo del llanto que se generaba detrás de las puertas del pasillo, cada imagen que veía detrás de cada puerta era sumamente deprimente, luan lloraba sin consuelo, no solo había perdido a su hermanito, si no al único miembro de la familia que se dignaba en asistirle, en su negocio de servicio de cumpleaños, y sin él, el negocio comenzó a decaer, recibiendo llamada tras llamada para cancelar sus servicios, Lori no sabía qué hacer, así que solo la dejo ahogarse en sus propias penas, la siguiente puerta fue de la habitación de las gemelas, donde podemos ver a una pequeña rubia llorando de rabia y frustración por no poder hacer algo tan simple como una rutina, en un golpe de ira comenzó a destruir muchas de sus tiaras, todas ganadas gracias a la ayuda de su hermano, se sentía indigna de ellas, indigna del cariño que el tanto les regalaba y ellas despreciaron, del otro lado del pasillo se encontraba una pequeña genio sentada en el borde de su cama, mientras sostenía un trofeo, un pequeño trofeo, diminuto si lo comparamos con los gigantescos premios que gana actualmente, sin embargo este era por mucho mas el mas valioso para ella, ese había sido el primer premio de ciencias que gano, un premio que logro gracias al sacrificio de su hermano, pues cuando creaba aquel experimento la vida de su hermano mayor estuvo en riesgo, y aun así jamás dejo de ayudarla, dando como resultado ese pequeño objeto de color dorado y una puerta abierta al amplio y competitivo mundo de la ciencia, pero ahora, sin su hermano, la puerta que el había abierto comenzaba a cerrarse.

Lori se dirigía hacia las escaleras cuando la puerta de la habitación de su hermano se abrió, dejando ver a un pequeña niña de cabello negro, la cual paso llorando a un lado de Lori para dirigirse a su habitación, dejando unas hojas regadas a su paso, la rubio tomo un par de hojas del suelo y leyó lo que tenía escrito, una era un poema de Lucy incompleto, el otro era uno muy similar solo que estaba escrito por Lincoln, se acercó a la puerta de su hermano y observo todo el desorden que había por lo poco que tenia de suelo en ese diminuto espacio, y encima de todo un comic, un comic diferente a cualquiera que haya visto de su hermano, completamente rasgado, lo tomo y leyó un poco, no entendía por qué había hecho esto a algo que le gustaba tanto, no fue hasta que leyó el nombre de Lucy que lo entendió, este había sido escrito por ella, lo dejo justo donde lo tomo y cerro la puerta, sin percatarse del trofeo que se encontraba en el escritorio.

Regreso a lo que estaba haciendo y se dirigió al piso de abajo, para seguidamente ir a la cocina, apenas se servía el agua cuando escucho un quejido proveniente del patio trasero, al observar por la ventana observo a una Lynn en el suelo que se sobaba el brazo, sin duda alguna su cuerpo había llegado a su límite, dio un suspiro bebió su agua y se dirigió de nuevo a su habitación, pero, apenas dio un paso fuera del comedor logro observar a una pequeña rubia llorando en el patio delantero enfrente de un gran charco de lodo, ese fue su límite, ¿Qué estaba haciendo? Se supone que es la mayor y debía actuar como apoyo y guía para sus hermanas, cosa que dejo de lado al observar que su hermanito podía hacerlo, creyendo que siempre estaría ahí con su apoyo incondicional, para así ella poder llevar una vida más cómoda, aun si resolver el problema con Lincoln era su prioridad, no podía darse el lujo de ver a sus demás hermanas sufrir, es la mayor y actuaria como tal, sabia que sus hermanas también estaban sufriendo por este problema, pero jamás espero que decayeran tanto.

El orgullo, uno de los siete pecados capitales y actualmente la mayor condena de las hermanas Loud, después del problema del vestido las hermanas decidieron alejar a su hermano, ¿Por qué? Simple, puro y mero orgullo, las hermanas Loud son orgullosas hasta los huesos, tanto que nunca han aceptado la culpa de todas las cosas que han hecho, por otro lado Lincoln Loud, el único hermano varón siempre ha sabido aceptar sus errores, creando de forma inconsciente un chivo expiatorio que sus hermanas no dudaron ni un segundo en usar, de esa forma siempre culpando de sus errores al pobre eh inocente niño, pero después del incidente del cumpleaños se dieron cuenta de algo, sin su chivo expiatorio no les quedaba otra cosa mas que aceptar sus propios errores, y admitir que todo lo que tenían fue gracias al sacrificio de esa pobre alma que despreciaron durante meses, oh por lo menos eso es lo que pensaba Lori Loud, la cual tenia ante sus ojos su mayor error, nunca actuar como la hermana mayor, sus hermanas todas sin dudar acudían al único hijo varón por ayuda y no a ella, la unión y hermandad se debía al único hijo varón y no a ella, la alegría y el triunfo de sus talentos se debía al único hijo varón y no ella.

Sin el todo era más complicado, además de que sus hermanas son lo suficientemente orgullosas como para pedirse ayuda entre ellas, nunca se mostrarían débiles entre ellas o admitirían que necesitan ayuda, por eso Lincoln era tan esencial, a él le podían decir ordenes mas que pedir favores y lo hacia con una sonrisa, dando una falsa sensación de grandeza en ellas, al sentir que podían hacerlo todo sin ayuda y Lincoln solo estaba ahí por mero gusto para alabar su grandeza, que equivocadas estaban, Lori dio un suspiro y decidió terminar con esta racha de orgullo, actuando como la hermana mayor que era, comenzando por la pequeña rubia que se encontraba frente a sus ojos.

Mientras esto sucedía en la casa Loud la madre de la familia se encontraba conduciendo de regreso a su hogar, después de llevar a su esposo al trabajo y conversar unas largas horas con él con la intención de idear algo con el para contentar a su hijo, estando incluso dispuestos a gastar grandes sumas de dinero para comprar su perdón, aun con el riesgo de que fuera un gasto inútil, pero su hijo lo valía, las palabras de su hijo aun resonaban fuertemente en su cabeza, y sin duda alguna le afectaban, claro que les importaba, ¿entonces por que se olvidaron de el? ¿acaso realmente así es como lo veían? ¿Cómo alguien desechable? No, eso no es posible, Lincoln siempre ah sido parte importante de sus vidas, un chico simple y tranquilo, que nunca ha destacado en nada, siendo apocado por sus sumamente talentosas hermanas que acaparaban la atención de ambos padres a tal grado que se olvidaron de él, ¿realmente así es su hijo?, sin duda alguna lo medito un largo rato, no conocían lo suficiente a su hijo, solo sabían que le gustan los comics y los videojuegos, pero... ¿y qué más? Lo desconocían totalmente, en los tres meses que fue abandonado demostró ser mucho mas listo y maduro que cualquiera de sus hermanas, ese pequeño ataque de ira fue por perder algo preciado, pero... ¿realmente era solo eso? es como si solo observaran lo que quería que observaran, como si el chico carismático fuera solo una máscara para ocultar sus verdaderas habilidades y talentos, pero... ¿Por qué?, no lo sabía, solo sabía que de una u otra forma recuperaría a su hijo, su niño de blancos cabellos, su hombre del plan, comenzando con una charla para darle a entender que es importante en su vida, aun si estaba enojado su hijo aún tenía modales, cosa que demostró al devolverle el saludo en la mañana, y estaría dispuesto a escucharla si se lo pedía amablemente, y en cuestión de segundos la madre de familia llego a su hogar, solo para encontrarse... con un campo de batalla.