[CAZADORES DE TESOROS]
como siempre, recomendandoles que sigan mi pagina de facebook:
https://www.facebook.com/TheLockyWorld/
[CAZADORES DE TESOROS]
FORTALEZA DE LA SOLEDAD.
DOMINGO, 4:37 PM
¿alguna vez has sentido que te ganaste la lotería? Que todo lo que deseas esta al alcance de tus manos, y con solo pensarlo todos tus sueños se harán realidad en un santiamén... pues eso es lo que sienten un grupo de cinco chicos, los cuales están sentados enfrente de una considerable montaña de billetes.
─
Lincoln: -contando billetes- 700, 800, 900, y 1000... -deja un fajo en el piso- y con esto son $3,738.
Rusty: -traga saliva- ¿realmente es tanto?
Zach: -coloca una mano en su frente- cuando nos contaste de esto...
Liam: -notoriamente nervioso- creímos que sería menos dinero.
Clyde: -toma el hombro de Lincoln- ¿y dices que esto es solo el principio?
Lincoln: -toma el hombro de Clyde- así es, este es un plan prácticamente improvisado, -pone una mano en su frente- incluso tenía mis dudas de que funcionara.
Liam: -observa a Lincoln- debes estar bromeando.
Lincoln: no, -sonríe- esa es la verdad, -se acuesta en el piso- además mi siguiente plan será más grande.
Rusty: -sudando- si esto lo improvisaste...
Clyde: -observando a Lincoln- ¿Qué es lo que estas planeando?
Lincoln: no puedo decirles hasta que esté terminado, -sentándose- lo único que necesitan saber es que necesito mucho capital para un proyecto tan grande, y para eso seguiré requiriendo de su ayuda, así que... ¿Qué dicen? ¿me ayudaran? -pone una mano enfrente de el-.
Rusty: -coloca su mano sobre la de Lincoln- si seguimos juntando tanto, ni lo dudes.
Liam: -sonríe- con esto podre comprar ese collar para cerdos que tanto quería -coloca su mano sobre la de Rusty-.
Zach: -coloca su mano sobre la de Liam- no puedo esperar.
Clyde: -coloca su mano sobre la de Zach- tú sabes que siempre puedes contar conmigo Lincoln.
Lincoln: bien... -observa a los cuatro- pues prepárense, porque esto no es ni la punta del iceberg.
─
Flashback.
ESCUELA PRIMARIA DE ROYAL WOODS.
LUNES, HORA DEL ALMUERZO.
─
Lincoln: -con una sonrisa- gracias chicos, -con un rostro que demuestra firmeza y confianza- escuchen bien, a este plan lo llamo... [cazadores de tesoros].
Clyde: ok... ¿y de que trata?
Lincoln: Zach, -observa al pelirrojo de lente- ¿les dijiste lo que compre la semana pasada?
Zach: -con una mano en su barbilla- ¿los comics?
Lincoln: -señalándolo- exacto.
Liam: no entiendo.
Rusty: si, los comics los podemos comprar prácticamente en cualquier parte.
Clyde: -pensando- los comics... -observa a Lincoln- te refieres ah...
Lincoln: así es, -saca una bolsa de su mochila y la coloca sobre la mesa- observen.
Liam: -observa el comic- ¿Qué tiene?
Rusty: es solo otro del montón.
Lincoln: no, este es especial, -toma el comic- es una edición especial limitada a solo 100 piezas, y además, esta es de las únicas 10 que salió con un error de impresión, lo cual lo hace algo genuinamente escaso, por lo que su precio actual para coleccionistas es bastante elevado.
Liam: genial, si lo vendes tendrás bastante dinero.
Lincoln: no pienso venderlo.
Rusty: ¿vas a esperar a que valga más? Muy bien pensado.
Lincoln: no, -guarda el comic- este me lo pienso quedar, solo quería darles un ejemplo de los tesoros que podemos encontrar en ventas de jardín.
Zach: Lincoln se que tuviste mucha suerte como para conseguir un tesoro de este calibre, pero no creo que sea algo que se pueda repetir.
Lincoln: no es solo el tesoro, también podemos hacer reventas.
Liam: ¿Cómo qué?
Rusty: cierto, -se cruza de brazos- en las ventas de jardín ponen cosas que uno prácticamente no necesita.
Lincoln: observen y verán, -se pone de pie- ¿Dónde estás...?, -observa a los lados, hasta que encuentra a una joven castaña de cabello largo, que usa un suéter color molado- hay.
─
En ese momento el alvino comenzó a caminar hacia la joven castaña, la cual conversaba con sus amigas sobre un tema que llamo especialmente la atención del albino, pues ella buscaba un regalo de cumpleaños para su madre, razón por lo cual decidió acercarse para poder sacar provecho y así demostrar su punto a sus amigos, además de abrir la puerta para una futura alianza para su próximo proyecto, pues la joven castaña era sumamente reconocida por su habilidad de repostería, y con un proyecto que abarca tanto bebidas, alimentos, como postres, su futura ayuda le vendría como anillo al dedo.
─
¿??: -decaída- pues si... ¿ideas?
Lincoln: hola cookie.
Cookie: -voltea a ver al peliblanco- ¿Qué pasa Lincoln? ¿necesitas algo?
Lincoln: bueno... -desvía la mirada- escuché que buscabas un obsequio para tu madre, -se rasca la nuca- y... bueno... pensé en darte algunas ideas sobre que regalarle.
Cookie: gracias, es que su cumpleaños se acerca, -agacha la cabeza- y realmente necesito que le guste.
Lincoln: -la observa- ¿Por qué?
Cookie: es que... accidentalmente rompí su juego de té, y no me gusta que este enojada conmigo.
Lincoln: -rascándose la barbilla- ¿y por que no le regalas un juego de té nuevo?
Cookie: el suyo era bastante raro, y no tengo tanto dinero como para comprarle uno igual... son demasiado caros.
Lincoln: ya veo, veré si te puedo ayudar en algo.
Cookie: gracias Lincoln.
Lincoln: de nada, -alejándose- nos vemos luego.
─
Una vez terminada aquella conversación regreso con sus amigos para poder terminar aquella conversación.
─
Lincoln: -sentándose- ¿escucharon? Ya tenemos nuestro primer pedido.
Rusty: si, un juego de té solamente.
Liam: no creo que eso de mucho dinero.
Lincoln: no están viendo el panorama completo, escuchen, la idea de este plan es comprar cosas que puedan valer bastante para un coleccionista, -señala a su mochila- como este comic, o algo que las personas ocupen, -señala a su espalda- como cookie y si juego de té, o algo que quieran, o algo que estemos seguros de que alguien más querrá.
Clyde: eso tiene sentido para mí.
Zach: no lo se Lincoln, ¿realmente crees que funcione?
Lincoln: funcionara mientras sepamos que buscar, por ejemplo... el tipo de la tienda de música del centro le gustan tanto los discos antiguos que prácticamente compra el que sea, aun si ya lo tiene, o el papá de Rusty, le encanta coleccionar trajes antiguos.
Rusty: ya veo.
Liam: pero... ¿no seria raro que solo lleguemos a sus casas a vender las cosas y ya?
Lincoln: tranquilos, -se señala a si mismo- de esa parte me ocupo yo, pero ahora vamos a lo importante.
Clyde: tu no puedes salir de tu casa verdad.
Lincoln: no, estoy castigado, por eso quiero su ayuda, para que sean ustedes los que compren la mercancía y la entreguen a aquellos que la compren, se que seria un abuso que ustedes hagan todo el trabajo físico, pero créanme que serán bien recompensados.
Rusty: bueno, siempre podemos intentarlo.
Liam: si, además nos es como que nosotros tengamos que poner dinero.
Lincoln: bueno... -desviando la mirada- necesito que todos pongan $250.
Todos: -abriendo los ojos como platos- ¿Qué?
─
Después de aquella impactante noticia los chicos decidieron dejar el tema por el momento, y procedieron a terminar de comer mientras conversaban de temas completamente triviales, como lo aburridas que consideraban las clases, o sobre los rumores que aún se esparcían sobre el alvino, así continuaron, hasta que sonó el timbre que indicaba que las clases debían reanudarse, las clases continuaron con normalidad hasta terminar, y así fue el resto de la semana, completamente monótona y aburrida.
Pero cabe aclara que, Lincoln decidió no quedarse solo de brazos cruzados, por lo que decidió insistir a sus amigos para que lo ayudasen con su plan, cosa que logro a duras penas.
FORTALEZA DE LA SOLEDAD.
DOMINGO, HORA DESCONOCIDA
Y sin mas el día predilecto llego, sus amigos se reunieron en la casa Loud como acordaron, pues el alvino tenía rotundamente prohibido salir, y la verdad lo ultimo que deseaba era entrar en conflicto con los cabecillas de la familia... otra vez.
Los chicos llegaron sin problemas, el plan era simple, cada uno iría a una distinta dirección, donde había ventas de jardín, la idea era reunir artículos de interés y mandarle fotos al alvino, para que este investigara o evaluara su valor, si les era útil lo comprarían para después llevarlo a la casa Loud, donde Lincoln lo ofrecería a posibles clientes, y una vez todo reunido, procederían a entregar los artículos a sus nuevos dueños.
Una vez repasado el plan este comenzó a efectuarse sin problemas, dejando una sola indicación, pues si alguno encontraba alguna caja fuerte de tamaño reducido debían traerla para él, articulo por el cual el obviamente pagaría, los chicos iban y venían contantemente, solo para dejar la recién comprada mercancía, y uno a uno terminaron con su capital, por lo que decidieron descansar en la habitación del albino, pasaron algunos minutos en los que conversaron sobre todo lo que había transcurrido en la semana, y cuestionaban el plan del peliblanco, pues no veían la mercancía como algo que alguien ocupase o gustase siquiera.
Y una vez terminado el descanso los chicos partieron a dejar la mercancía, siendo Rusty el último en salir, pues Lincoln debía conversar con él.
─
Lincoln: Rusty, -colocándose frente a la pueta- necesito un favor.
Rusty: -sonriendo- claro Lincoln.
Lincoln: -alza una caja- toma esto y llévaselo a cookie, -saca algo de su bolsillo- y también le das esta nota.
Rusty: -toma la carta- así que te gustan dulces eh.
Lincoln: -sonrojándose- no es por eso, es solo que la necesito para mi siguiente plan.
Rusty: por supuesto, -toma la caja- yo le daré tu carta romeo.
Lincoln: -abriéndole la puerta a Rusty- que no es para eso.
─
Dicho y hecho el mensajero pelirrojo partió para hacer entrega de un articulo completamente desconocido para él, pero que abriría las puertas de uno de los futuros negocios más éxitos y remunerados de la ciudad, y del propio estado de Michigan.
─
Rusty: veamos... es aquí -toca el timbre-.
Cookie: -abre la puerta- buenas tardes ¿se le ofrece algo? -observa al pelirrojo- ¿Rusty?
Rusty: el mismo.
Cookie: ¿Qué quieres?
Rusty: Lincoln me dijo que trajera esto, -le entrega la caja- no se qué es, pero parece ser bastante frágil.
Cookie: gracias, pero... ¿Por qué no lo trajo el?
Rusty: está castigado.
Cookie: ya veo.
Rusty: y otra cosa, -busca en su bolsillo- ¿Dónde está? -saca un sobre de su bolsillo- también manda esto -deja el sobre, sobre la caja-.
Cookie: ¿una carta?
Rusty: así es, -se monta en su bicicleta- suerte cookie.
Cookie: si, gracias -entra a su casa-.
─
El pelirrojo solo siguió con su camino repartiendo varios artículos, además de recibir el pago de ellos, para después ir a la casa del alvino y continuar repartiendo hasta que no quedase ninguno, al igual que el resto de sus amigos.
Mientras que la pequeña castaña entro a su hogar y se dirigió a su habitación para revisar la carta y el objeto misterios que había recibido, tomo la caja y la coloco en su cama, sin duda alguna el contenido era frágil, se sentó a un lado de ella, abrió el sobre y procedió a leer el contenido.
Cookie, no se si esta era igual a la que rompiste, y puede que para tu mamá no signifique lo mismo, pero estoy seguro de que la hará feliz, no por lo que vale, si no por la intención con la que estas dispuesta a obsequiársela, espero que sea de tu agrado, y que a tu mamá le guste... mas que nada por que es realmente valiosa, no por nada es un juego de te japones... ¿en que estaba? Ha si, no te preocupes por pagármela, es un regalo para ti, ya que espero que algún día podamos trabajar juntos, sin nada mas te deseo un lindo día, atentamente Lincoln.
Una vez terminada de leer la carta, la guardo en su sobre y procedió a abrir la caja para observar el contenido, topándose con un juego de te de 13 piezas, una tetera, y seis tazas con su respectivo plato para evitar derrames, la chica quedo completamente asombrada, pues ese juego de te era por mucho mas hermosa y por lo visto aun mas valioso que el que ella había roto accidentalmente, una vez terminada la conmoción decidió guardarlo en un lugar seguro, donde reposaría hasta el día en que ella lo entregase, y una resguardados los valiosos objetos, esta decidió reposar en su cama, mientras meditaba las palabras que su amigo le había dicho, dio una sonrisa y solo pudo pensar una cosa.
─
Cookie: será un gusto trabajar contigo.
─
Una vez terminadas todas las entregas los chicos se sentaron en circulo y colocaron todo el dinero en el centro, una vez entregado todo, el peliblanco procedió a contarlo para poder repartirlo como habían acordado, lo cual nos lleva has este momento.
ACTUALIDAD.
─
Lincoln: y bueno, según lo acordado, cada quien tendrá de regreso sus $250, -coloca 4 fajos en el suelo- dejándonos con $2,738, por lo que cada quien recibirá $500 -deja 5 fajos en el suelo-.
Liam: -toma su parte- ¿y que haremos con lo demás?
Lincoln: -coloca el resto en el centro- pueden quedárselo.
Clyde: -toma su parte- eso no sería muy justo.
Zach: cierto, -toma su parte- ¿Por qué no lo dividimos en partes iguales?
Lincoln: bueno... -toma su parte- yo no considero que este siendo justo con ustedes, es cierto que es mi plan, pero son ustedes lo que lo hacen posible, por eso quería darles un bono o un extra por el esfuerzo físico, además de que yo no puse nada para comenzar.
Rusty: -toma su parte- suena razonable.
Liam: es cierto que tú no pusiste dinero.
Clyde: pero no habríamos conseguido tanto sin tu ayuda.
Zach: pero si es tu decisión.
Clyde: la vamos a respetar.
Lincoln: gracias chicos, son los mejores, -sonríe- y les prometo que esto solo ira mejorando.
Liam: no esperaba nada menos del hombre del plan.
Clyde: bueno, es hora de irnos.
Lincoln: si, el tiempo sigue avanzando y mis planes no se hacen solos.
Rusty: -se pone de pie- por cierto, -saca algo de la mochila- aquí tienes lo que me pediste -se lo entrega al albino-.
Zach: ¿Qué es eso?
Lincoln: -observa bien el objeto- una caja de seguridad.
Liam: ¿vas a guardar los comics más raros?
Clyde: bien pensado.
Lincoln: no exactamente, verán, los certificados de los concursos tienen valor curricular, y si me pueden ayudar mas a delante es mejor conservarlos en buen estado ¿no?
Zach: y mas con tu hermana que vuela su habitación cada tercer día.
Lincoln: -comienza a reír- sí, me pregunto cuanto tardara antes de volar la casa.
─
Una vez concluida la charla, Lincoln acompaño a sus actuales socios a la entrada de la casa, por donde procedieron a retirarse.
─
Rusty: -saliendo- hasta mañana Lincoln, espero que el negocio siga tan bien como ahora.
Liam: -se cuelga la mochila- seguro virginia te agradecerá por su collar.
Zach: gracias por el comic, te lo regresare cuando lo termine.
Lincoln: puedes quedártelo.
Clyde: hablamos antes de dormir.
Lincoln: por supuesto.
Todos: -se despiden con la mano- adiós Lincoln.
Lincoln: -les devuelve el gesto- nos vemos mañana chicos.
─
Habiendo terminado aquella despedida, el peliblando cerro la puerta, fue a la cocina para tomar un vaso de agua y de ahí se dirigió al segundo piso, fue a su habitación, cerro la puerta una vez que este estuviera dentro, se recargo en ella y observo a los ductos de ventilación.
─
Lincoln: Lucy, -cierra los ojos- si las demás se enteran que tengo dinero... se que lo sabrán por ti, y yo ya estoy castigado, -sonríe- así que toma en cuenta que ya no tengo nada que perder... -abre sus ojos, que mezclados con esa siniestra sonrisa lograron Asustar a la pelinegra- pero tu sí -se escuchan ruidos en la ventilación-.
─
Tras aquellas palabras la gótica sintió un escalofrió recorrer todo su cuerpo, por lo que opto por huir por ahora, el peliblanco al sentirse completamente solo decidió tomar los certificados y el dinero y guardarlos en su nueva caja fuerte, una vez hecho eso opto por guardarla en un lugar que aunque visible a simple vista, sin duda alguna sería el más seguro si Lisa llegara a explotar su habitación... otra vez, y una vez terminado, fue a cenar algo antes de que todos llegasen al comedor, tomo un baño, fue un momento con Lily para contarle un cuento hasta que durmiera, y una vez terminadas todas las actividades del día fue a dormir, de esta forma despidiendo este bastante fructífero fin de semana, y dando inicio a una nueva semana, con todo lo que ello implica.
6 semanas después... diciembre.
FORTALEZA DE LA SOLEDAD.
LUNES, 6:00 AM.
─
Lincoln: -abre los ojos- libre... -sonríe- por fin libre -comienza a reir-.
─
.
.
.
.
.
Lori: eres un maldito, ¿como pudiste acostarte con carlota cuando ya tienes a ronnie ann?
Lincoln: y tu que sabes, entre ella y yo nunca hubo nada, y menos desde que la descubri con alguien mas.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro