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Pseudoinstintos y cuidado con las sectas

—Entonces... Dices que utilizaste la vejiga de una de las ratas como morral para guardar tus piedras mágicas.

Alexander estaba sorprendido, por un momento pensó que Yoshira había vuelto a la era de los cavernícolas.

—No me veas así, ¿dónde se supone que las iba a guardar? Dejamos nuestros bolsos en los casilleros de la entrada, además no se ve tan mal.

Alexander nuevamente hizo una mueca de asco para expresar su insatisfacción.

—Oh vamos, no recuerdas que tú mismo me lo contaste, los primeros métodos anticonceptivos fueron hechos a base de intestinos de ovejas, entonces si ellos pudieron meter el amiguito allí, por qué yo no puedo meter mis piedras de maná en una vejiga.— preguntó Yoshira como si lo que dijera tuviera sentido.

[El sistema valora tu ¿creatividad?
Se han otorgado 10 puntos por ser la primera en crear un artículo.

De ahora en adelante los artículos creados recibirán puntos en función a sus características]

—Ves Lex, incluso el sistema reconoció mi idea.

Lex no estaba tan seguro de aquello.

[Por ser el primer artículo creado se le mejorará algunas funciones.

Nota: El artículo creado es muy ordinario, intenta mejorar para la próxima]

—¡Oye, estás despreciando mi trabajo!

Yoshira se quejó en voz alta, pero el sistema decidió ignorar su arrebato y se puso a trabajar en el artículo, se podría decir que le dio una mano porque el objeto en sí era muy lamentable como para dejarlo, además de que era el primero durante el tutorial.

[Bolsa de ratburb

*Primer artículo creado durante el tutorial
*Resistencia intermedia (se puede mejorar)
*Capacidad X 50 veces el tamaño original (beneficio del título "primero")
*Reduce el peso del equipaje (beneficio del título "primero")
*Apariencia no memorable (todos lo ignoran por su aspecto ordinario)

Descripción: Un artículo creado en medio de una necesidad y sin ninguna expectativa ni conocimiento previo por manos inexpertas, podría ser un fracaso/vergüenza para cualquier artesano, sin embargo el material empleado es uno de calidad intermedio-raro y al cumplir la función de almacenamiento se volvió el primer artículo creado, por tanto recibe los beneficios relacionados con el mencionado título.

Nota: Se hizo lo que se pudo ┐⁠(⁠ ⁠˘⁠_⁠˘⁠)⁠┌]

Por un segundo, tanto Yoshira como Alexander quedaron sin palabras por lo ocurrido.

—¡Wow! ¡Conseguí beneficios por crear un artículo!

Yoshira celebraba con emoción lo ocurrido, ignoró por completo las duras calificaciones que se hicieron a sus habilidades y solo se centró en las recompensas recibidas, por otro lado la cabeza de la Alexander estaba repartida paralelamente en distintos pensamientos y en todos ellos trabajaban tanto que era posible que le saliera humo por las orejas.

Primero, el comportamiento de Yoshira era cada vez más voluble que era difícil predecir sus reacciones, por un momento era tan despreocupada que se tiró en la cubierta y cerró los ojos para descansar y al otro segundo estaba machacando a los valientes que se colaron al velero y haciendo un desastre como marcando territorio, otras veces contemplaba un punto fijo perdida en sus pensamientos, también se acercó a Alexander de forma tan sigilosa que éste no lo notó hasta que se vio inmovilizado como la presa de una boa, para que ella le oliera el cabello y finalmente le acicalara el cabello como si fuera un gato.

Alexander estaba consternado, preocupado y un poco avergonzado, aunque las acciones de Yoshira eran tan erráticas y aleatorias, él comprendía que en realidad eran una respuesta a sus instintos.

‘El maná está presente en toda la naturaleza, tener la capacidad de sentirlo es un don con el que se nace o se entrena para obtenerlo, una vez que lo sientes puedes controlarlo y cuando no es suficiente debes incrementar tus reservas propias de maná, ése es el método común. Puede haber variaciones o atajos. Sin embargo, tu hermana hizo exactamente lo contrario, consumió maná crudo y sin refinar, se obligó a controlarlo o su cuerpo no lo soportaría y en consecuencia no le quedó de otra que sentirlo, ahahahaha aún no puedo creer que lo lograra, estoy seguro que más de uno la va a querer disecar para ver cómo funciona’

Alexander se tensó cuando las letras de la pantalla azul brillaban ante sus ojos, él comprendió entonces la urgencia que sentía su hermana cuando trataba de protegerlo. Apretó los dientes y los puños mientras que en su cabeza surgían un pensamiento tras otro.

Fue por eso que a pesar de estar avergonzado e incómodo por lo que su hermana le hacía, no la apartaba. Incluso si ahora ella le olía el cabello y le daba suaves mordiscos en la cabeza como cuando jugaban.

La ingestión de piedras de maná es exclusiva para bestias o monstruos, hay una razón para eso y se debe principalmente a que tienen un instinto natural para absorber maná pues está muy ligado a su parte biológica-orgánica, en cambio para los humanos entre otras especies es un acción completamente del pensamiento conciente’

Yoshira dejó de morder su cabeza y un sonido parecido a un gruñido salió de su garganta.

Garrrwww Garrrrrrrwww

Alexander buscó a qué se debía ese cambio cuando sus ojos se toparon con el recién llegado.

Tu hermana se está haciendo de un pseudoinstinto y como aún es inestable es probable que solo se guíe de sensaciones básicas como conservación, hambre, sueño o peligro’

Un monstruo parecido a un hipopótamo con cuernos y varios ojos se acercaba hacia ellos y antes que pudiera hacer algo, Yoshira corrió para enfrentarse al intruso.

Cada vez que derrotaban a uno, otro más grande aparecía, Alexander se preguntaba cuánto tiempo más tendría que pasar para salir de la cueva.

Yoshira no le quitó los ojos de encima y siguió gruñendo, la bestia por el otro lado también empezó a gruñir parándose frente a ellos, cuando su postura cambió a una más agresiva, Yoshira finalmente lo soltó y cargó hacia adelante antes que Alexander pudiera hacer algo.

GAAARKKK

ARRRGGHH

Uno de los cuernos del monstruo se incrustó en el brazo de Yoshira y ella usó el otro brazo para arañar tantos ojos como tuviera a alcance. Mejor dicho la energía roja formó unas garras que le permitían abrumar a su oponente.

La batalla entre los dos seguía en curso bajo la atenta mirada de Alexander, sin embargo para él la palabra "batalla" no describía lo que sus ojos le mostraban.

Una pelea de perros sería más adecuada, incluso si ambos eran de diferentes especies. No había lectura de patrones de ataque o técnicas solo pura brutalidad... Brutalidad y salvajismo.

Alexander al ver la energía roja en las manos de Yoshira sentía náuseas y malestar, pero no fue tanto como su preocupación. Cada vez que Yoshira la usaba, le tomaba más tiempo recuperar el sentido.

Solo le quedó mirar de lejos y esperar que terminara rápido.

La pequeña luz que se veía al final de la cueva como una luciérnaga seguía manteniéndose pequeña a pesar que había pasado un tiempo.

Tal vez sería más fácil si volara la mitad de este lugar... espera un momento ¿Realmente pensé en eso?

Alexander se sorprendió a sí mismo.

Responder con brutalidad en vez de racionalidad, al parecer estar en esta cueva también le estaba afectando.

GAAAAAAARRRHHH

El monstruo al fin cayó y Yoshira tenía un cristal naranja en la mano.

Todo habría terminado con tranquilidad si no hubiese sido por un pequeño detalle. Yoshira no se retiró con su botín como las veces anteriores, se quedó observando el cadáver del hipopótamo mutante durante un tiempo absorta en ello.

Lentamente se aproximó como poseída por algo y acercó su boca al cuerpo del monstruo.

[Detenla]

No fue necesario que Alexander leyera el mensaje, ya había corrido hacia su hermana con una sensación ominosa dentro de él, supo de inmediato que si no lograra llegar a tiempo sería demasiado tarde.

Concentró el maná en su cuerpo y utilizó la fuerza del aire para llegar más rápido, fue difícil controlarlo mientras se estabilizaba, se las arregló como pudo y llegó cerca cuando su hermana ya tenía la boca dentro del cuerpo del monstruo e intentaba desgarrar con sus dientes la fibrosa carne.

—¡Yoshira! ¡Escupe eso ahora! ¡Escupe!

Alexander gritó y regaño a su hermana como quien lo hace con una mascota traviesa ‘¡Firulais no comas eso!

Yoshira al inicio mostró los dientes, pero ante el feroz ataque de Alexander bajó la cabeza y pareció soltar un gemido.

Después de una serie de regaños ella pareció recobrar el sentido y miró a su hermano totalmente confundida.

—¿Eh?

Yoshira al parecer no lo entendía, sus pensamientos parecían enredarse como una bola de estambre además de que no entendía el porqué le gritaban.

Lo último que recordó fue que luchaba contra los monstruos, trató de decir algo pero cuando abrió la boca sintió el espeso olor metálico en su garganta y unas náuseas fisiológicas.

—¡ESCÚPELO! ¡ESCÚPELO!

Por un lado estaba su hermano quien no dejaba de gritar y hacer alboroto a su lado. Alexander ahora estaba detrás de ella presionando su estómago y haciendo maniobras para hacer que devuelva lo que se había tragado. Le bastó una mirada entre el cadáver de allí al lado, los regaños de su hermano y las piezas faltantes en su memoria para completar el enigma de lo que sucedía.

Yoshira en cuanto se dio cuenta vomitó todo lo que tenía en el estómago, el niño volvió el rostro para otro lado y calmó sus recientes náuseas.

Fue asqueroso, Alexander nunca olvidaría aquella escena.

Después de un rato tanto Yoshira como Alexander se tranquilizaron.

—Mierda, no puedo creerlo en serio me lo comí...

Yoshira hablo de ello con un tono de auto reproche y la cara en blanco. Alexander por su parte suspiro cansado, ahora por lo menos Yoshira estaba conciente.

—Pero qué demonios me pasa, comer carne cruda... Debí haber perdido la cabeza.

—...

—¿Qué?

—¿En serio es eso lo que te preocupa?

Alexander tenía una cara incrédula para su casi inexpresivo rostro.

Creo que todavía no volvió en sí. Así es, debo haberme equivocado”

—Me preocupan muchas cosas, ahora mi cabeza está tratando de reconstruir mi memoria, se siente como recuperar un archivo de la caja de seguridad.

Alexander la seguía viendo con desconfianza.

—No me veas así, sé que hice cosas muy raras, por cierto perdón por babearte la cabeza, pero oye encontrar restos de un monstruo en tu estómago es otro nivel.

“No es tan extraño comer carne de monstruos, hay varias referencias en laa novelas que leí”

Alexander se estremeció y trató de limpiarse el cabello con la manga de su ropa.

—No te preocupes, no volverá a pasar.—se golpeó un par de veces en el pecho para mostrar confianza, pero Alexander vio a través de ello. A pesar que Yoshira sonreía despreocupadamente ella no tenía idea de qué hacer.

Alexander pensó en la propuesta de Merlín y aunque tenía aires de estafador era la única pista que tenía.

—No será sencillo, incluso es probable que las cosas empeoren.— respondió frustrado.

—¿Hmm? ¿Por qué estás tan seguro? ¿Sabes algo?

Alexander se encogió y desvió la mirada, allí estaba esa mirada de alcón, ese detector de mentiras humano.

—No, qué voy a saber si tú no lo sabes.—reapondió con rapidez para evitar sospechas.

—Hmm... Mientes, esa es una respuesta muy normal para alguien orgulloso cómo tú.—y no sirvió de nada.

—¡¿Cómo es que piensas de mí?!

—Pienso que eres muy inteligente y no me daría una respuesta mediocre.

—Hmph, supongo que tienes razón, no hay forma que yo de respuestas mediocres.

Y allí está su lado orgulloso”

—Así que... Dime qué sabes, mi inteligente hermano.

Yoshira sonrió con tranquilidad, por alguna razón esa sonrisa se parecía a la de su madre.

—¿Pusiste grasa en tu lengua? No soy tan fácil.

—¿Cuando decir la verdad es eso? Me ofendes Lex, aunque te entiendo, no debo ser alguien digno de confianza con todo lo que pasó.

Yoshira parecía estar debutando en un drama porque era la viva imagen de una heroína trágica, cualquiera podría decir que estaba exagerando, el único que podría tragarse eso era...

—¡Hermana no digas eso! ¡Si no confío en ti en quién lo haría!

Exacto, ese niño que a pesar de ser muy inteligente caía o fingía caer en las torpes trampas de su hermana.

—No, está bien, no tienes que decirme, me sentiría mal si te obligara.

—¡No me siento obligado! Es solo que... pretendía reunir más información porque por ahora solo tengo una pista de Merlín.

[El Anciano de la barba enredada” salta sobre su asiento agitado y dice que no menciones su nombre imprudentemente]

Yoshira abrió los ojos sorprendida.

¿Merlin? Si lo pienso, si tiene sentido es el único que puede tener información valiosa y está cerca de nosotros, lo que me molesta es...

—Estoy segura que no te lo dio por caridad.

[El Anciano de la barba enredada” se indigna y menciona que él es un gran ser muy bondadoso]

—No me dijo una solución definitiva por lo que no me cobró, pero a cambio de la información me pidió que considerara unirme a un tipo de organización para magos cuando lleguemos a Gaia.

[El Anciano de la barba enredada” lo niega]

—Viejo aunque digas eso...

[El Anciano de la barba enredada” dice que eso era un secreto entre los dos]

[El Anciano de la barba enredada” se enoja y se da la vuelta]

—Mira a este tipo tratando de seducir a un niño, degenerado.

[El “Anciano de la barba enredada” se enfurece y dice que no tiene esa intención impura, piensa que el participante Alexander debería ser nutrido en un buen lugar como la Torre mágica]

“Oh, miren ya aparecieron las "Torres mágicas" Entonces ¿estoy en una novela de fantasía? ¿esas que contienen dragones, elfos y furros? No espera, ese no es importante ahora”

—Lex, ¿aceptaste?— El niño no cambio su expresión, pero sus ojos parecían decir “¿Crees que soy tonto?”.

—No hay forma que me una a un lugar de que no tengo información confiable ¿Y si es una secta rara?

[El “Anciano de la barba enredada” exclama con ímpetu que la Torre mágica no es ninguna secta ¡Es una casa de estudios! ¡Una casa de estudios!]

Ahora que Lex lo dice, las torres mágicas de las que leí son grupos cerrados, creencias muy arraigadas, tienen una jerarquía, un código de conducta, usan túnicas raras y hacen experimentos (algunos cuestionables) Eso a grandes rasgos... Sí, parecen una secta”

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