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Después de casi tres meses más de amista y discretos toques se ha vuelto costumbre pasar la tarde juntos y al final ir a la casa del mayor para cenar ─e incluso TaeHyung duerme junto a él, con las piernas y brazos enredados entre las cobijas─. Hoy están allí, la noche comienza a caer y lo único que les ilumina es la televisión. 

A TaeHyung le apasiona el cine y el teatro, por lo que no puede evitar criticar cuando ve un trabajo de malísima calidad. Como aquella película que ambos escogieron. Es una película de acción que no aporta nada, incluso los efectos son malos y la trama es peor...

Sigue gruñendo mientras recoge los platos y vasos en los que había comida barata. HoSeok lo mira entretenido, soltando pequeña carcajadas por su forma de gruñir

TaeHyung sigue reprochando mientras lava los trastes. El mayor lo mira desde el umbral.

«no sería malo ver esto diario»

Piensa HoSeok mientras se acerca y lo abraza por la cintura, estar con TaeHyung diario, tener pláticas cotidianas mientras preparan la cena o el desayuno, saludarse con murmullos en las mañanas mientras se cepillan los dientes no suena mal... 

Mientras lo imagina y se ilusiona gira el cuerpo de TaeHyung entre sus brazos. Siente el hueso de su cadera sobresaliendo de su holgada ropa de dormir, mira sus ojos sorprendidos, sus labios rosas y sus mejillas tinturadas, y sin pensarlo más junta sus labios como si ya estuviera acostumbrado. Corta pero suavemente.

No es un beso de novela, pero es real.

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