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« Hola. Seguramente ahora mismo has estar odiándome por el desastre de tu casa, pero no encontraba tu vieja máquina de escribir, y desordené tus cajones. Si escribo a mano tardaré más. 

Quiero que sepas que nada es tu culpa... yo no encajo aquí, realmente es difícil decir esto, aunque sean sólo letras. 

La primera vez que te vi estabas bailando despreocupado. Yo regresaba de visitar a mi madre, y allí estabas, con la música inundándote. No fue difícil obsesionarme con verte, a veces era feliz con sólo mirarte... paseándote con tu tazón lleno de comida. A veces me gustaba mirarte después de la ducha, perdón si te incomoda pero me gustaba verte. Tu sencillez era algo que anhelaba, pero jamás conseguiría.

Hoy te escuché llorar, HoSeok, no sabía qué te había pasado, pero cuando besaste esas zonas... lo supe... que soy una carga para ti. Yo no quiero serlo, no quiero opacar lo más bonito que he visto. HoSeok, ojalá no me odies demasiado. Yo... no encuentro motivos suficientes para quedarme, sólo veo que perjudico.

Quizás él, mi ex... tenía razón. Quizás sólo soy un inútil, quizás... quizás no me esforcé demasiado por mi madre. Quizás no trabajé lo suficiente para pagar sus tratamiento. Quizás debí aferrarla a a vida, podríamos haber salido de esta juntos ¿No es así?

HoSeok... perdóname... sé que no debí volver, sé que debí alejarme para siempre, pero... HoSeok, te amo. No puedo hacerlo, sólo quería verte, sólo quería escuchar tus lindas mentiras sobre cuán atractivo soy, o sobre lo mucho que te gusta mi risa. Sólo quería verte sonreír, anhelaba ver tus ojos.

Quería empezar de nuevo contigo. Pero al escuchar tus sollozos sólo supe que también te dañé... sólo soy una carga.

HoSeok, perdona que lo haga aquí, pero de verdad, no tengo fuerza ni siquiera para levantarme e irme a arrojarme en algún puente. El café que amablemente me dejaste en la mesa... se enfrió, ojalá puedas tomarlo tu después, invitar a alguna persona linda, ver una película y hacerle el amor... 

HoSeok, entregarme a ti ha sido una de las pocas cosas correctas que he hecho.

HoSeok. Perdón.

Perdón...

Te amo

Perdón

Per»

La tinta pareció acabarse pues las siguientes letras están desvanecidas. Aún hay oficiales, seguramente quieren descartar que fuera un crimen... una manta cubre sus hombros mientras un paramédico revisa su pulso.

HoSeok se sienta en su sillón, ha leído la carta unas diez veces, trata de encontrar la razón del por qué, pero lo único que halla es la tristeza de TaeHyung que le distorsionó la visión. HoSeok llora como infante en su sillón, mirando el café que, efectivamente, estaba encima de su mesa frío como sus sentimientos. 

Grita preso de la agonía... grita anunciándole a TaeHyung lo tonto que fue... haciéndolo hasta desgarrar, no sólo su garganta, sino también su alma... y es que... claro que habían cosas por las que seguir.

El hecho de que HoSeok estuviera a punto de pedirle que vivieran juntos era una.