Esto se acabará pronto, y este capítulo es para:

SildreyFrancia

¡Comencemos!

Enero 20, 2017
08: 17 de la noche

  Desde que habíamos salido del centro comercial, Corina no había parado de preguntarme por el chico misterioso de ojos cálidos...

Enero 20, 2017
05: 00 de la tarde

  Estábamos en casa de Andrea tratando de procesar muy bien la información, y porque no habían permitido que me fuera a casa sin antes contarles lo sucedido en el centro.

− ¿Rodrigo? ¿Por qué jamás me habías hablado de él? – Corina parecía ofendida. Claro, si era una del grupo, era obvio que debía contarle sobre él.

− No lo sé. Se me escapo – dije descuidada, arrollando mis piernas en la silla mecedora.

− Cosas así no se escapan, July. Anda cuéntame.

− Ya te he dicho; lo conocí en la secundaria, nos gustábamos pero las cosas no se dieron – dije un poco triste. Pero no podía permitir que eso me afectara −... hace un tiempo comenzamos a hablar y... − las observé −... no sabía que había vuelto.

− ¿pero porque se fue? – Pregunto Bianca – Colombia... Dios, eso está muy lejos.

− Sí que lo está. Dijo que mañana iría a mi casa.

La chispa en la mirada de Corina se había avivado – Pues aprovéchalo, nena.

Sonreí ante su comentario – Claro. Siempre y cuando llegue.

– Espera. – habla Kim. Todas la observamos, esperando a lo que dirá – ¿Estabas con Tony aun cuando seguías queriendo a alguien más? – Bueno, esa pregunta me ha avergonzado.

Enero 20, 2017
08: 12 de la noche

Hace algunos minutos me había sentido un poco mal por Tony. De repente se me había venido a la cabeza su recuerdo, y no me había sentido para nada mal. No es como que tenía que, al fin de cuentas quien me engañó fue él y no yo a él. Pero con solo la idea de que Rodrigo estaba aquí, hacía que empujara la idea de Tony hasta el fondo de mi cabeza, tal vez hasta ya lo había formateado. Toda la tarde había pasado con la idea de que mañana lo vería. Eso era increíble, así sin más; algo que aún no podía creer.

El: ¿estás ahí?

Yo: ¿puedes hablarme de tu mismo número estando aquí?

El: bueno, aun funciona. Espero que siga así.

Yo: oh.

El: bueno... ya vi que estás ahí.

Yo: sí. Entonces...

El: llegare mañana ¿está bien?

Yo: ¿mañana?

El: sí. Te lo dije.

Yo: es que...

El: ¿es que, qué? ¿No vas a estar? No puedes hacerme esto.

Yo: no. No se trata de eso.

El: ¿entonces?

Yo: aun no creo que estés aquí.

Yo: es... Wow.

El: jajaja. Wow. ¿Así describes mi venida?

Yo: ¿y cómo quieres que la describa? Hace tiempo que no te veo. Y para serte honesta, ya había decidido parar de chatearte para siempre.

El: oh, oh. Espera ¿y eso porque?

Yo: porque eres un idiota.

El: sí. Lo leí. Pero... ¿Por qué?

Yo: por Dios, Rodri. Siempre me dejas en visto.

El: sabes que tengo que dormir temprano, July.

Yo: no seas un mentiroso. Siempre quedas conectado horas después que me has dejado en visto o me has mandado a la porra.

El: ¿a la porra?

Yo: que me corres, pues.

El: Lo siento.

Yo: no sabes cuánto detesto eso.

El: Lo siento, perdón. En serio.

El: pero mañana hablaremos.  :)

El: puntos a tu favor.

Yo: sí, claro. Puntos a mi favor.

Yo: ¿Qué haces aquí?

El: ¿no crees que si te cuento todo hoy, mañana no tendremos nada de qué hablar?

Yo: ¿y qué tal si no vienes? No sería raro que otra vez me dejaras "esperando"

El: vale, que no lo haré. Ya te lo he dicho; iré a verte. Y ahora te lo estoy prometiendo; mañana iré a tu casa.

Yo: ¿y si te pierdes? ¿Y si ya olvidaste donde vivo? ¿Cómo sabes que no me he mudado?

El: supongo que ya me lo habrías dicho. No te has mudado ¿verdad?

El: y claro que recuerdo donde vives.

Yo: muchas cosas y casas han cambiado por aquí.

El: me imagino.

El: si me pierdo, lo más que puede pasar será que saldré en las noticias en la sección de los desaparecidos. Entonces, ahí es donde entras tu e iras a rescatarme.

Yo: a la porra con irte a rescatar. Te dejare ahí en venganza por todos los vistos que me has dejado.

El: y realmente lo creo ¿eh?

Yo: oye. No soy tan mala.

El: tú lo dijiste, no yo.

Yo: como digas.

Yo: ¿a qué hora te pasaras por aquí?

El: a las cuatro ¿te parece?

Yo: cuatro. Claro. Te estaré esperando.

El: prometo no dejarte en "visto"