Noviembre 14, 2016
08: 13 de la noche

Tony: ¿entonces ahora si puedo llamarte amor?

Desde que nos despedimos. Que fue a las cinco de la tarde. No hemos parado de hablar.

Yo: no lo sé.

Tony: ¿Cómo que no lo sabes, amor?

Yo: se siente extraño.

Tony: ¿Qué?

Yo: ya sabes... esto. Tú y yo.

Yo: ¿Qué pensaran mañana los chicos de nosotros cuando nos vean?

Tony: por suerte ya le informe a Bianca.

Yo: Dios mío. En serio, no debías hacerlo. Fue muy tonto.

Tony: solo quería hacer las cosas bien contigo.

Yo: si de verdad deseabas hacer las cosas bien conmigo, a quien debes informarle sobre esto es a mis padres.

Tony: ¿tus padres?

Yo: sí. Eso si hubiera sido más inteligente de tu parte.

Tony: ¡vamos! No te burles, solo lo hice y ya.

Yo: bueno, olvidemos esa parte.

Tony: sí. Tienes razón, amor.

Yo: ¡Oh, rayos!

Tony: ¿Qué?

Yo: ya me gusta cómo suena que me llames amor.

Tony:  amor.

Noviembre 14, 3016
09: 16 de la noche.

  Aún sigo hablando con Tony. Es increíble. No puedo parar de hablar con él. Aunque lo quiera (importante aclarar que no quiero parar de hablar con él)

La verdad, me asusta enamorarme perdidamente de él.

El: Lo siento. Las cosas han estado un poco difíciles por acá, así que... tal vez por eso no he hablado contigo.

Mi corazón se detiene y algo dentro de mi estómago cosquillea. Cuando veo el mensaje de Rodrigo, olvido instantáneamente a Tony ¡Rayos! Observo el mensaje sin abrir por un rato. No quiero abrirlo. Quiero que vea que estoy en línea pero no deseo abrir su mensaje.

Pero fracaso...

Y lo leo...

Y respondo...

Yo: no me vengas con eso. Eso no te impedía al menos explicarlo, lo hubiese entendido.

El: tienes razón.

Yo: ya olvídalo.

Tony: ¿amor? ¿Dónde fuiste?

El: lo siento.

Yo: ya. Te he dicho que lo olvides.

¿Soy una tonta otra vez? (argumente su respuesta)

Si. Porque él me deja un hermoso y adorable VISTO.

Tony: ¿Juliana?

Yo: lo siento, debo irme. Te veo mañana.

Tony: ¿todo está bien?

Por pura venganza de dejar a alguien en visto. Lo hago. Tony sufre las consecuencias.

Noviembre 15, 2016
07: 43 de la mañana

Bianca llega muy temprano

− ¿entonces de verdad estas saliendo con él?

Volteo lentamente. Hace quince minutos que había venido, me había estado ignorando.

− Más o menos... − le respondo viendo la última conexión de Rodrigo.

− ¿más o menos o sí? ¿Sabes que él me pidió mi consentimiento para poder andar contigo?

− ¿y que le dijiste? – ninguno de las dos nos vemos. Es una especie de platica-discusión-pacifica.

− Que no tenía que hacerlo.

Me estoy decidiendo, no sé cómo reaccionara. No me importa. Lo hago.

− ¿Por qué lo odias tanto? – le digo tomando su celular. Solo así sé que llamare su atención.

− Él ya te lo ha dicho. Le rompió el corazón a mi hermana – se calla y me ve por un segundo, luego continua −... y cuando éramos amigos, dijo que tú eras la próxima.

− ¿entonces porque dejaste que anduviera con tu hermana? – sé que la pregunta debió ser otra. Algo así como: ¿y porque no me lo habías dicho? O ¿ustedes hablaban de mí?

− Sabes cómo somos las mujeres de testarudas. Hasta que les destrozan el corazón.

− Debiste habérmelo dicho antes, en cambio te molestaste conmigo. Y no tenía ni la menor idea.

− Si, lo sé. Lo siento – me dice tomando su móvil y sonriendo, solo levemente.

− Gracias...

− ¿Por qué?

− Por preocuparte.

− Si. Claro – me dice sumergido otra vez en el fantástico mundo del móvil.

Noviembre 15, 2016
09: 18 de la mañana

  Tony y yo estamos en el muro que queda frente a nuestra sección, muchos de nuestros compañeros están aquí también.

Para nuestra alegría, ya hemos pasado el bochornoso escándalo de que todos se den cuenta de que estamos juntos.

Noviembre 15, 2016
08: 04 de la mañana

  La sección está llena de todos los alumnos, muchos están haciendo la tarea que no hicieron en casa. Incluido Kim. Corina no vendrá el día de hoy. Que mal. De repente Tony llega y me besa. Como si tuviéramos meses saliendo.

Es inevitable no devolverle el beso. Así que con mucho gusto lo hago. Tony me muerde y yo rio y hago lo mismo.

− Oye, yo también me alegro de verte – me dice con su labio inferior entre mis dientes.

Es cuando escucho.

− Oh my God! No puedo creer lo que mis dulces ojos están viendo – dice la chica que se cree la abeja reina de la sección. Para mi mala suerte, una de las amigas de Tony.

Yo me separo de Tony y sonrío avergonzada. En un millón de años hubiera querido que esto pasara.

− Ellos ya lo saben – me susurra Tony y me besa otra vez.

La abeja reina se acerca y nos ve con una horrenda sonrisa en su rostro.

− ¿entonces ustedes están juntos? ¿Pero cuando sucedió esto?

No, solo estamos intercambiando saliva porque queremos. Pienso contestarle, pero eso sería muy odioso de mi parte. En cambio, solo sonrío, tratando de ser amable.

− Si – responde Tony.

− ¿Por qué no nos habías dicho? – le pregunta. Sus brazos en jarra.

Porque su novia soy yo. No tú, reina abeja tonta. Pienso otra vez.

Tony solo se encoje de hombros, y le sonríe. Luego se voltea y me da un último beso como si supiera que el maestro está a punto de entrar.

− Buenos días jóvenes – habla en maestro.

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Ellos, saliendo.  Ahahah