Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

~ Capítulo Final ~

Dos años después

Aquel restaurante pequeño estaba lleno, el ambiente dentro estaba acompañado de música alegre, personas conversaban o pedían más vino. HyeLin estaba de pie en la puerta con su delantal negro puesto, hace un año exactamente que trabajaba allí con JiSoo, aquel empleo se había vuelto en una manera de mantener su mente activa y sana, Hye apenas tenía tiempo para dejar que las voces de su cabeza aparecieran atormentándolas y cuando todo estaba en silencio se sentía muy cansada como para escucharlas.

Un grupo de jóvenes llegó riendo y bromeando entre ellos, Hye se acercó con una reverencia ofreciendo sus servicios. Los guió a una mesa grande en medio del salón, comenzó a colocarles el menú a cada uno, pero se detuvo al reconocer una de las chicas.

— Vaya, vaya, hace mucho que no te veía.

— Lo mismo digo, Jennie—forzó una sonrisa—Les dejaré unos minutos para que escojan del menú—se dirigió al resto para luego retirarse.

Respiró profundo un par de veces manteniendo la calma, hace dos años esa muchacha la humilló y la llamó loca, Hye no necesitaba que le dijeran lo contrario porque estaba segura de no estar loca, además, tenía dos años trabajando en cómo quererse así misma, una chica como ella no vendría a hacerle sentir menos.

Claro que no.

Inconscientemente la muchacha pensó en Jimin, sonrió de lado admitiendo una vez más que lo extrañaba, solía hablar con él por video llamadas o mensajes, como era de esperarse, Jimin era un excelente profesor además de bailarín, resulta que se acostumbró muy rápido, se veía feliz y contento, pero cuando hablaba a solas con Hye se mostraba un poco triste, ambos se extrañaban de sobremanera.

Jimin siempre le preguntaba cómo se sentía, como estaba y que hacía. Cada día la chica despertaba con un mensaje de su novio, porque sí, la última noche que pasaron juntos Jimin le pidió que fuera su novia, decirlo en voz alta le hizo sentir emocionada. Tontamente emocionada.

La atención de Hye fue dirigida a la mesa donde Jennie y sus amigos estaban, la chica la había llamado cuando sus platos fueron servidos.

— ¿Sucede algo? —Hye debía ser educada, aunque no quisiera.

— Sí, este pescado está muy crudo, no puedo comerlo así—hizo una mueca de desagrado—Llévatelo.

— Lo siento, pediré que lo cambien—lo tomó llevándolo a la cocina. Rápidamente explicó lo sucedido y regresó con otro plato más cocinado, pero de nuevo, Jennie se quejó comenzando a molestarle.

A la tercera vez, Hye simplemente sonrió con falsedad.

— Lo siento, creo que no podremos atenderla, señorita.

— ¿Disculpa? —Jennie bufó—Te estoy pagando, loca, tienes que hacer lo que te diga, este plato está peor que los otros dos.

— No, la verdad es que no.

Jennie se levantó llamando la atención, sus amigos simplemente tenían la misma mentalidad de ella.

— ¿Crees que tienes muchas agallas? —levantó una de sus cejas—No me digas, tu noviecito está por ahí cerca.

— ¿Hye? —JiSoo intervino— ¿Todo bien?

— No, no está bien—Jennie fue quien respondió—Exijo hablar con su jefe, una de sus trabajadores me ha tratado muy mal.

HyeLin sonrió mirando al suelo.

— Creo que esto se puede arreglar sin...

— Tranquila—Hye interrumpió a JiSoo—La señorita sufre cierto toque de locura—aquello sorprendió a sus compañeros.

— ¡¿Qué dijiste?!—A Jennie casi le daba algo— ¡Haré que te despidan! ¡Exijo hablar con tu jefe! Maldita loca.

Y entonces su rostro se colocó muy serio.

— ¡Ya! —alzó la voz—Han pasado dos años desde la última vez que nos vimos, madura un poco y piensa antes de abrir esa boca—reprendió—Te he traído tres veces el mismo plato cada vez más cocido, si quieres un pescado perfecto te sugiero que lo cocines tu misma—dio un paso hacia ella—Y para tu información, estás frente a la dueña del restaurante.

— ¿Qué?

— Ya que alteras el ambiente tranquilo de mi negocio te sugiero que te retires con tus amigos, opacan la alegría de los clientes—sonrió con inocencia—Es una pena que esa cabecita siga siendo hueca.

JiSoo estaba sorprendida, era primera vez que Hye respondía así. Lo mejor fue cuando Jennie con sus amigos se levantaron abandonando el lugar.

֎֎֎

— ¿Enserio le dijiste aquello? —la señora Park reía con lo que HyeLin le contaba, ésta sonreía orgullosa sin arrepentirse de nada. Las chicas estaban en aquella mesa tomando la cena, pero, un nuevo miembro los acompañaba y era el hijo de Rose, el pequeño DoJae tenía dos años recién cumplidos, era adorable y muy tranquilo, siempre obedecía a su madre.

Taemin era su figura paterna, aunque la relación entre Rose y Taemin iba más que bien, ella tenía miedo de dar el siguiente paso, vivir juntos.

— Hiciste muy bien—Rose la felicitó limpiando la boca del pequeño que comía sentado a su lado—Jennie nunca ha estado en una situación así, me pareció excelente lo que le dijiste—y añadió—Sobre todo lo de ser la dueña.

Hye se sonrojó un poco, la realidad era que Hye se había vuelto muy amiga de la dueña del local, ésta había salido del país por asuntos personales y dejó a HyeLin a cargo del restaurante (aunque JiSoo la ayudaba mucho)

— No podía dejar que se saliera con la suya de nuevo.

— Esa es mi chica—la señora Park le sonrió orgullosa—Hiciste bien en devolverle su jugada, así se calla a esas personas.

֎֎֎

— ¿Estás ocupada? —Rose tocó dos veces la puerta entreabierta, Hye salía del baño luego de haber cepillado sus dientes y con su pijama puesto. La pelirroja se acercó queriendo contarle algo.

— ¿DoJae de nuevo tiene problemas para dormir?

— No, ahora mismo duerme como bebé—la miró—Quería hablar contigo unos minutos, ¿Puedo?

— ¿Estás embarazada por segunda vez?

— ¡No! —rio nerviosamente sentándose en la cama—No habrá bebés por un tiempo, créeme.

— ¿Taemin y tú discutieron? —se sentó a su lado.

— No, es sólo que...él realmente quiere que probemos viviendo juntos por un tiempo, quiere ver si podemos sobrevivir a ello—indicó—Sé que el niño lo ama, desde que tiene memoria es el hombre que más ha visto y fue su primera palabra—sonrió un poco.

— ¿Tienes miedo de que Taemin te engañe?

— Suena terrible si lo dices así.

— Es normal tener miedo en tu situación—comentó— ¿Hablaste con tu psicóloga?

Rose había comenzado a ir a sus citas cuando comenzó a sufrir de ansiedad luego de tener a DoJae, eran ataques de pánicos que solía tener cuando estaba rodeada de tantas personas, cuando la pelirroja comenzó a aceptar la ayuda entendió más como se sentía HyeLin y se sintió terrible cuando el karma le hizo probar una cucharada de su propia medicina.

Aunque Hye nunca la juzgó, siempre la apoyó.

— Sí, le comenté, ella sabe lo mucho que Taemin me ha ayudado, me siento segura a su lado—ambas se miraron—Y me gusta que mi hijo se sienta seguro a su lado.

— Puedes probar a vivir con él—opinó—Siempre tendrás el temor de caer o fallar, pero creo que vale la pena intentarlo, ¿No crees? Terrible sería que nunca cometieras errores, ¿Cómo podrías aprender sin ellos?

— Creo que la vida sería más sencilla sin ellos.

— Te equivocas—Hye sonrió un poco— ¿Sabes algo del padre de DoJae?

— Hace un año que se fue al extranjero—su mirada se perdió en algún punto de la habitación—Nunca se interesó en su hijo, me duele al recordarlo, pero Taemin me ha hecho entender que ese no era el hombre para mí, puede ser el padre de mi hijo, pero el único padre que DoJae conoce es Taemin.

— Has sido una excelente madre para ese niño, Rose.

— ¿Enserio? —la chica volteó a verla—Es extraño, mamá me dijo lo mismo hoy, no me considero buena pero cuando es DoJae quien me lo dice parece convencerme.

— Es tu hijo, si él está feliz entonces tú lo estarás—la abrazó—No tengas miedo, Taemin ha demostrado no ser como ese tonto.

— Gracias, Hye—correspondió el abrazo—Por escucharme.

— No hay de qué.

— Te dejaré para que hables con mi hermano, de seguro está por llamarte—señaló la laptop. Hye asintió y una vez sola en la habitación tomó asiento frente al escritorio, se colocó los auriculares conectándolos al ordenaron, sonrió cuando recibió una video llamada, acomodó su cabello largo y oscuro aceptando.

Jimin había dejado el rubio para pasar a un castaño oscuro.

Sea como sea ese chico seguía viéndose hermosamente. HyeLin en ocasiones olvidaba que ese era su novio, Park Jimin. El chico que nunca rompió su promesa.

El próximo es el epílogo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro