Ambos chicos se encontraban sentados en una de las mesas de la pequeña cafetería del hospital.

-Entonces Boss, he estado pensando en varias preguntas que quiero hacerte.

Boss sonrió.

- Dispara.

-Bien, primero...podrías explicar porque le hice esto a mi cabello -dijo con un tono de voz gracioso - porque hoy me vi en el espejo y lo encontré un desastre...me veo horrible.

-Esa es una opinión bastante subjetiva - dijo con una leve sonrisa- lo cortaste asi ya que sentías que el cabello te gustaba más y dijiste que no molestaba al pintar en el taller.

Noeul se encontraba con el cabello corto, y castaño, peinado hacia un costado. Para los ojos de Boss, el ojimiel se veía perfecto.

- ¿Pintar? ¿Yo, pinto? — pregunto el ojimiel con los ojos muy abiertos - ¿Un taller?

-Si, pintas cuadros preciosos y tienes un taller en casa.

-Mierda, no recuerdo querer ser un artista desde la secundaria.

-Bueno, lo eres hoy. Trabajas para una galería y ahora llevarán tres obras tuyas para exponerlas en Florencia.

-i¿QUE?! -Grito Noeul e inmediatamente tapo su boca con una de sus manos.

Boss río con ganas, después de días eternos y melancólicos, por fin reía junto a Noeul.

-Fue un concurso, participaron varios chicos y ganaste. Eres muy bueno en ello Noe.

-¿Qué pasó con la escuela de derecho?

Boss se tenso.

- La dejaste, cuando te conocí estabas estudiando historia del arte.

- Al parecer había dejado bastantes cosas cuando te conocí Boss -dijo Noeul con el entrecejo fruncido y con un tono de voz incrédulo.

-Pues si, eras alguien distinto a quien recuerdas para cuando nos conocimos.

El castaño soltó una bocanada de aire, y comenzó a pararse de la mesa. El azabache se paró a su lado rápidamente.

-Me pasas el bolso por favor, quiero sacarme está ropa de hospital

-Claro- dijo Boss y le tendió el bolso en el que traía la ropa el cual habían dejado en una tercera silla.

Noeul lo abrió para mirar que había dentro y su boca se abrió por la sorpresa o el desagrado, Boss no lo sabe muy bien.

-¿Esto es mío?- pregunto levantando casi sin tocar un pantalón deportivo Adidas

-Si, amas ese estilo de ropa deportiva.

-¿Y mis camisas? - lo miró y torció su - boca- ¿En quien me convertí Boss? Esto es confuso como la mierda.

- Solo cambiaste un poco tu estilo, a mí me gusta -se encogió de hombros.

- Puedo verlo, esto al parecer es muy tu estilo - dijo mirando la ropa del azabache, dándole una sonrisa fingida.

Boss se miró a si mismo, con la prisa y el poco tiempo que ha tenido a optado por vestir solo ropa deportiva, su cuerpo aún se encuentra magullado y por ello a dejado de lado las camisas y jeans que tanto ama. Se a molestado un poco por el comentario de Noeul, ha podido notarlo algo despectivo, pero una vez más prefiere callarse, sabe que con quién habla es un Noeul totalmente distinto a SU Noeul.

- Es más tu estilo que mío- fue lo que respondió, mientras le daba una sonrisa.

Noeul lo miro asintiendo y ambos caminaron de vuelta a la habitación.

Cuando Noeul ya estuvo cambiado de ropa, se rescosto en la cama y Boss se sentó a su lado.

-¿Nos amabamos mucho?- pregunto el castaño.

-Muchisimo- contesto Boss con un tono de voz melancólico -Somos esa clase de pareja que sabes estarán juntos siempre.

-¿No discutimos? - pregunto el castaño con cara de incredulidad.

-Muchisimo- dijo Boss soltando una risa- peleamos por estupideces la gran parte del tiempo, pero nos amamos más. Cuando discutimos nunca pasa más de 30 minutos sin disculparnos mutuamente -se encogió de hombros - - ya sabes, demostrar que nos amamos.

Noeul abrió la boca sorprendido, aguantando una risa.

-¿Estás hablando de sexo Boss Chaikamon?

Boss inmediatamente se tenso y busco el rostro del contrario para asegurarse que no había cruzado una linea, al ver su rostro apunto de sonreír, respondió.

- Es algo que tenemos muchísimo también.

-¡Oh por dios Boss! —dijo Noeul tapándose el rostro cambio de tema por favor.

- Bien bien bien - dijo soltando una carcajada - Lanza otra pregunta.

-¿Sabes porque finalice mi compromiso con Luke?

La sonrisa en el rostro de Boss se esfumó en un segundo, carraspeó para despejar la garganta y poder hablar bien.

-No sé mucho -mintió- no hablabas de
él nunca.

- Pero debo haberte contado porque rompimos ¿No?

- Alguna vez creo que lo mencionaste, pero no lo recuerdo - mintió otra vez- lo siento.

Noeul asintió mordiendo su labio superior.

-Perdón, no debería preguntarte estas cosas a ti. Se supone eres mi esposo...lo siento.

- Está bien, soy quién está aquí para responder tus dudas.

-Gracias Boss

-De nada Noe

-¿Aún mi comida favorita es la lasaña boloñesa?

Boss rio suave.

-Lo es, de hecho la comemos una vez a la semana si o si. Tu favorita es la que hace mi madre.

-¿Vemos seguido a tu madre?

-Se podría decir que sí, el día del accidente habíamos cenado con ella.

-¿Reunión importante? ¿Algo que celebrar?

Boss lo miro un momento, quería decirle que su madre celebraba que su adopción estaba casi aprobada, pero sabía sería mucha información para un Noeul aún perdido.

-No necesariamente. Solo la visitamos todas las semanas o semana por medio sin razón alguna, solo para verla.

El castaño asintió.

- ¿Hace cuanto no cortas tu cabello?

- Un año, creo. ¿No te gusta? - pregunto casi temoroso a la respuesta.

- Te ves bien, solo...siempre estuve en desacuerdo con ese estilo de cabello ¿Cuando te conocí lo tenías corto, verdad?

El azabache se comenzó a sentir incómodo.

-No tanto como ahora, lo tenía un poco más arriba de los hombros.

-¿Yo como me veía cuando nos conocimos?

- Tenías tu cabello tal como lo recuerdas, un poco largo y peinado, pero despeinado— sonrió- Vestias una camisa celeste y unos pantalones ajustados.

-¿Cómo nos conocimos?

-Yo estaba en la hora de almuerzo junto a Fort, mi mejor amigo. Estábamos parados en un parque y tú ibas caminando apurado, no me viste y chocamos, pediste disculpas muy avergonzado y cuando viste que yo estaba con la ropa toda sucia con pintura y otras cosas entraste en una especie de pánico - soltó una risa, mostrando su blanca dentadura- y comenzaste a hablar muy acelerado que no podías ensuciarte que ibas a una entrevista de trabajo en una galería y tenías que lucir bien, yo me reí y te dije que estabas bien pero que ibas en sentido contrario a la galería. Después de eso, me ofrecí a acompañarte para que no te perdieras, sonreiste y aceptaste - se encogió de hombros - cuando llegamos fuera de la galería te pedí tu número de teléfono, me lo diste todo sonrojado. Ese día en la noche nos escribimos y al día siguiente tuvimos nuestra primera cita.

Noeul asintió sonriendo levemente.

-¿Por qué estabas con la ropa manchada? ¿También eres artista?

-No -río - trabajo pintando casas o haciendo carpintería

La cara entre asombro y disgusto de Noeul fue notada por Boss inmediatamente, aunque el castaño intento sonreír y disimularlo.

-No es un mal trabajo, y ganó lo
suficiente para darnos una buena vida. — habló rápidamente Boss, intentando no avergonzarse de su oficio.

-Por supuesto - dijo Noeul sonriendo

Boss no pudo decifrar si era sarcasmo

- Señor Chaikamon — hablo una enfermera ingresando a la habitación - la hora de visita a terminado, debe retirarse de la habitación por favor.

Ambos chicos se sobresaltaron al escucharla, ya que no la habían sentido entrar.

- Si claro - dijo levantándose de la silla -Iré a casa, mañana te traeré otro cambio de ropa- se acercó levemente al castaño -¿Puedo? -pregunto señalando la mejilla del castaño.

-Si- respondió con una sonrisa en los labios.

Así que Boss se acercó y depósito un beso suave en la mejilla de su esposo, duró más de lo necesario, pero nadie puede culparlo por ello.

- Hasta mañana Boss

Y el azabache salió de la habitación con una sonrisa en sus labios, sintiendo que aquel pequeño acercamiento era algo grande para ellos y para las circunstancias.

Noeul modo clasista 🥀