Capítulo 5: La Perfecta A
Jungkook estaba sentado respirando agitado y con los ojos cerrados, intentando recuperar el aliento, luego de su rutina de ejercicio. Cuando los abrió de nuevo, no pudo evitar sentirse irremediablemente atraído por la visión que tenía. Seokjin. Sí, también estaba Namjoon, pero era Seokjin quien llenaba ahora lo que sus ojos abarcaban. Precioso, perfecto, con sus hombros anchos, su boca semi abierta y sus brazos musculosos. Entonces, se puso duro. Se avergonzó. ¿Cómo podía ponerse duro, mientras miraba a su compañero de banda? Su amigo. Tal vez estaban un poco más distanciados, pero, al fin y al cabo, seguía siendo su amigo. Su hyung.
Había pasado un mes desde aquella conversación y la relación entre ellos se había suavizado. Seokjin evitaba mencionar el nombre de Jun- Ho delante de cualquiera de los miembros de la banda y JK no preguntaba sobre la relación. Era lo mejor. Así sería más fácil curar lo que se había lastimado en aquella ahora, lejana discusión.
Sin embargo, ambos sabían que las cosas ya no eran como antes. Bromeaban todo el tiempo, se empujaban, iban al gimnasio juntos. Pero la intimidad se había perdido. Desde aquella noche que habían dormido juntos, nunca más volvieron a estar tan cerca.
Jungkook había dejado de tocar a Seokjin. Los masajes, los abrazos y otros toques íntimos y que antes eran normales ya no existían. Tampoco había conversaciones en susurros o secretos entre ellos.
Seokjin se daba cuenta que mientras estaban trabajando, Jungkook era dulce y risueño con él. Bromeaba y estaba a su alrededor, pero una vez que volvían a casa, se alejaba. Ahora pasaba gran parte de su tiempo libre en su propio departamento y casi no lo veía si no era en la agencia o durante sus horas de trabajo en fotografías o filmaciones. JK había salido de su vida privada.
Ahora, se encontró con su mirada en el gimnasio. Su cuerpo vibró. La forma como lo miraba...era...con deseo..., se ruborizó. Era un hombre con experiencia y sabía cuándo un hombre gay lo miraba de esa forma. Entonces Jungkook rompió el contacto y se dio vuelta para salir de ahí.
—¿No me vas a esperar JK?, pensé que hoy podríamos comer algo juntos —le gritó antes de que el maknae dejara el gimnasio. Namjoon levantó la vista aún con una pesa en su brazo y miró también hacia Jungkook y luego miró a Seokjin. Cerró sus ojos preguntándose una vez más porque el destino lo hacía siempre estar entre esos dos.
—No. Voy a casa de Jaehyun. Lo siento hyung, pero hemos planeado esto hace días y al fin ambos tenemos espacio para hacerlo. ¿Por qué no comes con Nam-hyung? Estoy seguro que estará feliz de acompañarte.
Seokjin se dio vuelta para mirar a Namjoon, quien le ofreció una sonrisa solidaria. Cuando iba a replicar a Jungkook, éste ya había abandonado el gimnasio.
—No va a ser fácil recuperar su confianza hyung. Jungkook ya no es el niño inocente que simplemente te seguía a todas partes y confiaba ciegamente en ti. No es mi intención juzgarte, porque no me corresponde, pero por lo que Yoongi me contó, lo heriste. Sé que él te perdonó, porque Kook tiene un corazón puro y no es rencoroso, pero eso no significa que todavía esté listo para que todo sea como antes.
—Yo lo sé—Seokjin sintió que sus ojos de pronto picaban porque algunas lágrimas se querían escapar—Jungkook me pidió tiempo y se lo estoy dando. Sé que debemos reconstruir la confianza otra vez. Pero él tampoco me facilita las cosas. He intentado acercarme a él, pero aparte de bromear y preocuparse por mi salud diaria, no hay nada más. Claro, antes ni siquiera me hablaba..., pero ahora...no sé si es mejor que cuando eso sucedía..., no quiero sólo un amigo para jugar...él es mucho más para mí y debería saberlo...
—Estoy seguro que el tiempo va a hacer que las cosas vuelvan a su curso normal. Sólo te pido que no lo vuelvas a herir de esa manera y que tu actual pareja tampoco intervenga en tu amistad con él o con cualquier de los otros miembros.
—Jun-Ho quiere cambiar eso. Él sabe que no causó una buena impresión. Pero Nam..., es un buen tipo. Yo lo quiero. Ha sido un gran apoyo para mí..., también quisiera que ustedes le dieran una oportunidad...
—Si él quiere una nueva oportunidad, estoy seguro que todos estarán dispuestos a dársela, incluyendo a Jungkook. Sólo deja que las cosas fluyan naturalmente.
Salieron del gimnasio. Seokjin sentía que miles de preguntas se acumulaban en su cabeza. La forma en que Jungkook lo había mirado..., la forma cómo siempre se habían relacionado... ¿acaso alguna vez JK había dejado de lado esos sentimientos que le había confesado hacía ya tantos años? Él había conocido cada uno de los chicos con los que había salido. Ninguno fue gravitante en la vida de Kook, excepto por Sung Yeung, pero eso había sido distinto. JK simplemente se había volcado a él...porque tenían poco tiempo..., pero al final de todas formas habían terminados separados. Todos esos pensamientos en su cabeza...tal vez estaba siendo demasiado presumido. JungKook había sido un niño cuando le dijo aquello...y él simplemente le había pedido que lo olvidara. Y al parecer eso fue lo que pasó o ¿no? ¡Ridículo! Se dijo a sí mismo.
Era estúpido pensar así. Jungkook no estaba enamorado de él.
Eran cerca de las nueve. Jimin y Taehyung jugaban en la sala, cuando Jungkook entró y apenas los saludó.
—¡Detente un minuto Jeon Jungkook! —gritó Jimin desde el sofá—¿Podemos saber que te pasa? No me digas que te peleaste con hyung otra vez. Hasta donde recuerdo bajaron muy contentos al gimnasio hace un rato.
—No me he peleado con él. Estoy apurado. Voy a salir y necesito ducharme. Lo siento. No quise parecer grosero.
—Y ¿Seokjin? Pensé que subirías con él—preguntó Taehyung, en forma despreocupada.
—Se quedó con Namjoon-hyung. Yo me vine antes. Si quieres puedes ir a buscarlo—. Eso había sonado muy sarcástico. No sabía por qué se ponía así con Tae, cada vez que éste demostraba interés por Seokjin.
—¿Sabes qué? Me parce excelente que salgas. Espero que sea alguien con quien vayas a follar, porque realmente te hace falta. Tu humor es bastante desagradable—. Jimin escupió sus palabras, sin pensar demasiado.
—No, no voy a follar Jimin. Sólo iré con Jaehyun. Lamento si mi humor te afecta. Por eso no me gusta estar aquí y prefiero vivir solo.
Jimin y Taehyung se miraron. Lo conocían perfectamente y sabían que Jungkook no estaba pasando por su mejor momento. No lo era desde la pelea con Seokjin y aunque aparentemente las cosas estaban mejor, muy en el fondo, sabían que no era así.
—Kook..., no nos gusta cuando te vas. Hobi se preocupa mucho y los demás también. Entiendo que quieras pasar tiempo solo, todo lo hacemos..., pero no digas que prefieres estar sin compañía, porque sabes que no es verdad. Me alegro que salgas un rato a divertirte. No fue ni mi intención ni la de Tae molestarte.
—Lo lamento...Taehyung, siento haberte hablado así...yo...lo lamento hyung, no volverá a suceder.
—Jungkook hace años que no me llamabas hyung..., somos amigos...y sabes que puedes confiar en mí y más aún en Jimin. Sabemos que aún estás dolido, pero ¿no deberías tratar de arreglar más las cosas con Seokjin?
—Estoy intentándolo. ¿sí? Nada es tan fácil. Y ahora si me disculpan, de verdad me tengo que ir.
Entró a su habitación, se sacó la ropa y se metió a la ducha. No había nadie más en el departamento lo que lo alivió. No quería hablar con nadie. Estaba confundido. Odiaba sentirse así. Odiaba haber tenido una maldita erección por Seokjin y odiaba que las cosas no fueran como antes. Tal vez Jimin tenía razón. Quizás debería tomar a Jaehyun y arrastrarlo a algunos de esos bares que conocían y que estaban ocultos para los demás. Bares gay donde famosos y no tan famosos iban para conocer gente, y con suerte terminar enredados en el baño o con mejor suerte en alguna pieza de hotel. JungKook jamás había llevado a nadie a su casa. Excepto a Sung Yeung. Pensando en eso, se vistió de forma provocativa y una hora más tarde, estaba listo para subir a su Mercedes.
Cuando iba saliendo, se cruzó con Seokjin y Namjoon que venían recién del gimnasio. Nam, ni siquiera lo pensó y fue rápidamente a su dormitorio. La sala estaba vacía. Jimin y Tae habían ido a la cocina, luego de recibir el delivery que habían encargado.
—Te ves precioso—. Él no pudo evitar decirlo. Jungkook lucía realmente hermoso. Su pelo azulado resaltaba en su rostro bellamente maquillado, la camisa negra ajustadísima y los pantalones entallados—. Él es muy afortunado. Sólo ten cuidado, ¿está bien?
—¿Él? —preguntó Jungkook con su corazón a mil.
—Tu cita. No vas con Jaehyun, vas a ver a alguien. No te arreglas así para ir a ver a tus amigos.
—Me tengo que ir—. Te veo mañana hyung—. Fue todo lo que contestó. Pero no contaba que Seokjin tomaría su brazo y le impediría moverse.
—Espera un momento. ¿Por qué siento que me evades, cada vez que estamos solos? Pensé que habíamos retomado nuestra amistad. Pero cada vez que puedes huir de mí, lo haces. ¿Qué pasa JK? ¿Todavía estás enojado conmigo? ¿acaso nunca me vas a perdonar del todo?
—No te estoy evadiendo. Y si somos amigos. Sólo quiero ser más independiente. Estoy madurando y quiero hacerlo a mi manera.
—Siempre te dije que lo mismo deseaba yo. Que crecieras por tu cuenta, que te dieras cuenta tú mismo del camino a tomar, sin sentirte
influenciado por mí..., pero madurar no significa que ya no quieras estar con tu hyung...
—Lo sé. Siempre has enfatizado lo de "mi propio camino". Y es lo que hago. Tú tienes tu vida, yo la mía. Creo que ya crecimos lo bastante, como para ser tan dependiente el uno del otro ¿no crees? Además, sigo siendo cercano, me preocupo por ti. Respondo tus bromas, vamos juntos al gimnasio..., por ahora no me pidas más.
—Está bien. No voy a pedirte nada más. Es sólo que a veces...—Seokjin dudó por un momento. Su cabeza le decía que no era el momento de sacar otra vez el tema. Que otras veces había sido motivo de broma y burlas del uno al otro, pero últimamente se preguntaba...—¿Puedo preguntarte algo?
—Estoy atrasado, qué más quieres saber.
—Hace años, cuando me dijiste...
—No vamos a hablar de esa estupidez...no entiendo qué sentido tiene...ya te has burlado suficiente de eso...no tiene importancia, era un niño que no entendía nada..., y no sé porque lo traes ahora...
—¡Porque a veces siento...!, no lo sé, la forma en que me miras, tus reacciones—Jungkook comenzó a reír muy fuerte. Seokjin era increíblemente presumido.
—Seokjin... ¿de verdad crees que todavía sigo pensando que estoy enamorado de ti? Por favor...sé que te sientes el más guapo y perfecto ser sobre esta tierra y que Jun-Ho te lo repite cada vez que tiene ocasión..., pero pensar eso es...totalmente equivocado y demasiado engreído de tu parte. No estoy enamorado de ti, nunca lo estuve y nunca lo estaré. ¿Suficiente para ti? Se supone que estamos tratando de arreglar esto y tu vienes con tus comentarios estúpidos. —Jungkook respiró y siguió hablando—Voy a salir. Voy con Jaehyun. A sugerencia de Jimin es probable que hoy me deje follar por un bien dotado hombre que probablemente conozca en el bar a donde pienso arrastrar a mi amigo. Definitivamente no estoy enamorado de ti. Eres demasiado mayor para mi gusto. Me gustan más jóvenes.
Seokjin se sintió herido y molesto, pero sabía que había sido su culpa ¿Por qué había dicho eso? Obviamente iba a molestar a Jungkook... su estúpida boca...tal vez tenía razón, su ego lo había traicionado. Por supuesto que no había esa clase de sentimientos.
—Yo lo siento. Soy un ton... No alcanzó a decir nada más, cuando Jungkook lo abrazó. Éste sabía perfectamente que había sido duro con él y realmente no quería discutir más. Estaba cansado de pelear con Seokjin.
—Lo lamento, no debí ser tan duro contigo. Pero es que dices tantas tonterías , eres mi amigo hyung y te quiero muchísimo y estoy cansado
de discutir y decirnos cosas hirientes. Por eso me mantengo un poco alejado. Porque no quiero que nos volvamos a lastimar. Por eso juego contigo y busco tu risa fácil. Porque estamos reconstruyendo ¿recuerdas? Y así fue como comenzó nuestra amistad...
Seokjin cerró sus ojos. Jungkook olía y se sentía maravillosamente bien. Él no debería disfrutar tanto a un hombre que no era Jun-Ho de esa forma. Por mucho que fuera su mejor amigo. Sin embargo, cedió y lo abrazó, porque lo extrañaba y añoraba sentirlo cerca.
—Yo también lamento haber sacado ese tema. Tienes razón es tan tonto y engreído de mi parte decirlo... Perdona. Sólo cuídate ¿sí? No te metas con cualquiera...
—Tranquilo hyung. Me vestí así, pero ya no quiero ir a ninguna parte. Además, estoy seguro que Jaehyun tampoco. Creo que está saliendo con alguien...Me quedaré en su casa, tranquilamente ¿está bien? Y ahora ve a ducharte. Estas sudado—. Dejó de abrazarlo, pero le ofreció su hermosa sonrisa.
—Hyung, eres tan lindo..., incluso así, todo pegajoso...te quiero mucho—. Y como antes, como muchas veces sucedía, le dio un ligero beso en la punta de la nariz. —. Descansa.
Jungkook se fue, dejando a Seokjin en un mar de confusión, de sentimientos que iban y venían. Nada estaba bien, desde esa pelea. Nada parecía funcionar dentro de su cerebro. Nada que tuviera que ver con Jungkook.
El lujoso departamento de Jaehyun estaba a la vista de Jungkook. Entró al estacionamiento subterráneo, para luego marcar el piso 21, donde vivía su amigo. Ya se había anunciado, para que lo dejaran entrar, por lo que cuando tocó el timbre la puerta se abrió de inmediato. Jungkook se sorprendió al ver un atractivo chico detrás de la puerta.
—¡Hola Jungkook-ssi! Realmente es un honor conocerte. Eres mucho más lindo en persona que a través de la pantalla—. La sonrisa brillante y alegre de Jeong Seung Won, hizo ruborizar a Jungkook. En ese mismo instante Jaehyun asomaba la cabeza y sonreía a su invitado.
—¡Jungkook!, entra. Este idiota está bloqueando la entrada—. Entonces Seung Won se hizo a un lado para hacerlo pasar.
Jungkook se quedó un momento en la entrada, tímido por la forma en que Seung Won lo miraba. El tipo también era mucho más atractivo que las fotos que su amigo le había mostrado. Era mucho más alto que él e irradiaba una confianza absoluta en sí mismo. Jaehyun desde siempre le había hablado de su amigo de la infancia, que ahora era un publicista brillante en una importante empresa en Tailandia, donde había vivido los últimos cinco años. Lo que no sabía era que lo encontraría en el departamento de su amigo y mirándolo casi como si se lo fuera a devorar.
—Jungkook, te presento en forma oficial a mi querido amigo desde que usamos pañales, Jeong Seung Won. Publicista Junior de Keystone Marketing Company con sede en Thai y recientemente transferido a Seúl. Seung Won, este es Jeon Jungkook, mi amigo incondicional de los últimos años, famoso integrante del famoso grupo BTS.
—Jaehyun me ha hablado mucho de ti—. Dijeron ambos al mismo tiempo y una sonrisa terminó la frase—. Es un honor conocerte—continuo Seung Won—, espero que también seamos amigos.
Jungkook le sonrió y de pronto se dio cuenta que todo su cuerpo se había puesto en actitud coqueta. Tuvo conciencia de la forma como se había vestido y recordó algo que su amigo le había dicho...Seung Won era gay.
Pasaron a la sala, donde quedaron solos. Seung Won le explicó que había surgido una vacante en la oficina de Seúl y él había querido regresar a su país. Sus padres, habían retornado un año antes y extrañaba un poco a su familia.
—Volví sólo hace una semana y estoy buscando un lugar, así que mi gran amigo y casi hermano, me ofreció quedarme con él, mientras encuentro el ideal.
Jungkook lo observaba mientras le hablaba. Era realmente atractivo.
La noche transcurrió en medio de una agradable conversación. Seung Won tenía un montón de anécdotas vergonzosas que contar de su amigo, por lo que Jungkook rio mucho esa noche y se olvidó completamente de todos sus problemas, especialmente los relacionados a Seokjin.
—Tailandia es mucho más liberal con la comunidad LGTB, pero, aun así, todavía falta. Sé que en Corea es todo lo contrario, ya lo viví en mi adolescencia, pero, aun así, es mi país y quería volver. Allá podías salir con tu pareja sin temor. Tampoco importaba mucho en la empresa. Aquí será diferente. Creo que tendré que volver dentro del closet.
—Lo entiendo—dijo Jungkook—, no es fácil. Supongo que sabes que soy gay—Seung Won, asintió—, pero aparte de mi familia, los miembros y algunas personas cercanas, nadie más lo sabe. Ni pensar que las fans lo sepan. La agencia nos prohíbe hablar de esos temas en público. Jamás hemos mostrado nuestras relaciones. Ni siquiera los chicos que son heterosexuales. Supongo que es un precio que debemos pagar.
—Bueno, pero eso no significa que discretamente no podamos salir ¿verdad? Jaehyun me dijo que hay algunos lugares donde podemos ir y divertirnos.
—¿Ya quieres encontrar algún bonito chico con el cual enredarte? — pregunto Jaehyun.
—No. Yo creo que ya encontré un bonito chico, con el cual me gustaría enredarme...—contestó Seung Won mirando a Jungkook. Éste sólo se mordió el labio y sonrió ruborizado y con su corazón latiendo un poco más rápido de lo normal.
Una semana después, las cosas aún no se "enredaban". Si bien había existido una química, Jungkook estaba con agenda completa que le impedía vida social. Estaban en pleno proceso de grabar Butter, la que sería lanzada en mayo, por lo que tenían sólo unos pocos meses para preparase. Eso no había impedido que se escribieran y hablaran frecuentemente. Lo que le gustaba de Seung Won era que, se mostraba muy interesado en él, pero desde una perspectiva totalmente distinta a ser el integrante de BTS. Es más, le había confesado que amaba el hard rock en inglés y que nunca había sido un fan del pop. Le gustaba que siempre estuviera preguntando acerca de sus intereses y gustos fuera de la banda.
—¡Vamos Jungkook! Ya dinos quién es. Aunque pongas tu teléfono en silencio, nos damos cuenta que has estado hablando más de lo habitual y que sonríes mucho...no seas así. No puedes engañar a tu hyung...— Hobi lo rodeó con sus brazos y comenzó a presionarlo para que ya contara.
Estaban todos en una pequeña sala, solos, esperando la filmación de una parte de Butter. Ya habían terminado las fotografías y el coreógrafo había pedido que intentaran formar la palabra ARMY, para el MV.
Seokjin sólo lo miraba en silencio. Él también lo había notado, pero no se atrevió en ningún momento a preguntarle. Jungkook no le había dicho nada, aunque lo había escuchado hablando con Jimin acerca de un chico que había conocido a través de Jaehyun.
—No sean tontos. No hay nada que contar. Sólo es un chico lindo que conocí hace unos días. Con esta sobrecarga de trabajo, ni siquiera he tenido la oportunidad de volver a verlo. Además, ustedes saben que no me gusta hablar de estas cosas.
Y así era. Jungkook jamás hablaba de su vida personal o intima. Los únicos que siempre se enteraban de todo eran Jimin y Seokjin. Este último especialmente. Era con quien tenía la confianza suficiente para hablarle incluso de su intimidad sexual y pedirle consejos. Bueno eso había sido antes. Desde Jun-Ho, nunca más hablaron tan confidentemente. Por lo mismo y ante la mirada que Seokjin les dio, nadie dijo nada más.
Y en realidad Jungkook no quería hablar, porque no sabía bien en que pie estaba. No estaba seguro de embarcarse en una relación. ¿El principal motivo? Uno que había asumido hacía muy poco: Seokjin.
Estaba confundido acerca de sus sentimientos hacía él. Era una extraña mezcla de ira, amor incondicional, admiración rabia y...celos. No podía negar que cada vez que lo veía se quedaba largos minutos mirándolo.
Seokjin era hermoso sí, pero para JungKook que lo conocía tanto, había mucho más que un rostro bello. Era todo lo que su hyung significaba para él. Lo que siempre había representado y que ahora, luego de esta separación un tanto forzada, se había exacerbado. ¿Estaba enamorado de él? Era una pregunta que tal vez al menos una vez al año, se la hacía, desde que tenía dieciocho años. Durante todos estos años, la respuesta siempre fue un "No" así, con mayúsculas, pero ahora a su veinticinco no estaba tan seguro.
—¡Listo muchachos! Vamos por ARMY—. Uno de los miembros del staff ingresaba a la salita de estar para que volvieran al estudio.
—Jungkook y Seokjin formarán la A—dijo el coreógrafo y ambos se miraron sonriendo. Jungkook no lo podía creer. Siempre reclamaban porque nunca los dejaban formar equipo en nada, pues siempre se distraían demasiado el uno con el otro y ahora que tenían la oportunidad de estar juntos, no estaba seguro de querer hacerlo. Pero Jin lo miró con tanta seguridad, que simplemente gritó un "Ok".
Seokjin entonces lo tomó del brazo y comenzó a formar la "A". La idea del coreógrafo era que se tomaran de los brazos, se inclinaran y juntaran sus frentes. Fue como una chispa. Ambos se dieron cuenta lo cerca que estaban. Jungkook simplemente bajó la vista y se quedó en silencio, mientras Seokjin le daba indicaciones. No podía mirarlo. No podía su estúpido corazón dejar de latir a mil, mientras veía la boca de su hyung a unos centímetros de la suya. Él quería besarlo. Y eso lo asustó y se puso nervioso y simplemente quería huir de ahí. Pero Jin lo sujetaba y lo miraba tratando de entender que le pasaba.
—Vamos Jungkook tienes que ponerte de puntillas, los dos a la vez—. Le repetía Seokjin con una preciosa sonrisa.
—¿Y si intentamos formar la A de otra forma? —preguntó ingenuamente, intentado que todo fuera menos "intimo".
Lo intentaron, pro a nadie le gustó.
—No, tiene que ser así—Jin volvía a tirar de él—. Esto sí parece una A. Lo haremos. Tu ý yo podemos.
Jungkook estaba seguro que sí podía, y lo intentó con todas sus fuerzas, porque quería que la tortura terminara lo antes posible.
Cuando al fin resultó y el coreógrafo se fue para revisar el resto de la formación, Seokjin lo tomó de la mano y lo llevó aparte. Jungkook simplemente se dejó hacer.
—Sólo quiero saber si estás incómodo con esto. Todavía podemos decirle a Tae que cambie contigo. Es casi de mi porte y...
—¡No quiero cambiar con Tae! ¿Por qué dices eso, no quieres hacerlo conmigo?
—Al contrario, estoy feliz de formarme contigo, pero tú pareces incómodo y no quiero que te sientas así. Últimamente no dejas que te abrace..., no lo sé, pensé que te molestaba que te tocara.
—No es así. Lo siento. Estaba nervioso, porque quería que resultara bien. Que nos viéramos bien. Estoy feliz que nos hayan escogido. Hyung...—Jungkook lo abrazó. Lo necesitaba.
—No me habías dicho nada de ese chico... ¿Quién es? ¿Te gusta?
Jungkook lo último que quería en ese momento era hablar de Seung Won, pero tampoco iba a negar el tema.
—Es un amigo de Jaehyun. Es agradable, hemos hablado. Sé que él está buscando algo más..., pero yo no sé...
—Seokjin-ah...—la voz de uno de sus manager rompió ese pequeño momento—tu amigo Jun-Ho está aquí. Le dije que aún no te desocupas ¿Quieres que lo haga pasar a una de las salas de descanso?
Seokjin se tensó. Había esperado tanto por este pequeño momento de intimidad con Jungkook y justo tenía que aparecer su novio. Lo había olvidado completamente. Hacía unos días, le había dicho que quería ir para hablar con los otros miembros y hacer un "acto de amistad"
—Gracias. Si por favor hyung. Dile que estaré libre en una media hora más.
Seokjin miró a JungKook quien tenía esa mirada de dolor que siempre ponía cuando el nombre de su pareja se pronunciaba. Aun así, era tan hermoso. Su pelo largo, su vestimenta. Todo en Jungkook gritaba una masculinidad que le encantaba, pero a la vez una dulzura y fineza que lo hacía todavía más atractivo. El chico dual. Delicado y masculino.
Perfecto.
—Quiero que me cuentes más... después, ¿almorzamos juntos mañana después de la grabación?
—Sí me gustaría—contestó Jungkook.
—Vamos a grabar—gritaron en el estudio y JungKook y Seokjin volvieron.
La grabación fue exitosa. Jungkook y Jin formaron una A perfecta, con unas hermosas sonrisas.
Lástima que esa sonrisa se borró, cando vio a Jin entrar con Jun-Ho al estudio. Estaban todos, más algunas personas del staff que todavía daban vueltas.
Jun-Ho estaba de la mano con Jin y se notaba un poco nervioso. Su mirada fue directamente hacia Jungkook.
—Chicos pueden venir un momento por favor. Jun-Ho quiere hablar con ustedes—. A Seokjin le temblaba un poco la voz, mientras todos se acercaron y lo saludaron educadamente. Jungkook se quedó atrás de Hoseok y de Namjoon.
Jun-Ho comenzó entonces a hablar.
—Sé que cuando nos conocimos no les causé una buena impresión. Tal vez dije cosas que para ustedes no fueron del todo agradables y lo lamento. Nunca fue mi intención ofenderlos. De verdad sé que hacen un gran trabajo y sé que son importantes para mi Jinnie—JungKook puso los ojos en blanco, sólo quería salir de ahí—. Por esa razón y para comenzar de nuevo, me gustaría que fueran a mi casa el próximo jueves. Sé que tendrán libres unos días. Haré una pequeña celebración por mi cumpleaños. Sólo ustedes y algunos de mis amigos más íntimos. Todos ellos saben de Seokjin y son personas muy discretas. Algunos incluso ni siquiera han salido del closet públicamente, si me entienden..., entonces me gustaría que fueran. Incluso pueden llevar una amiga o amigo...como les digo es algo pequeño y muy discreto. Para mí sería importante.
El silencio que siguió aquellas palabras fue verdaderamente incómodo. Seokjin miró a sus compañeros esperando una respuesta. Después de todo su novio había dado el primer paso.
—No puedo hablar por todos, pero yo estaré ahí. Y te agradezco la invitación—Jimin fue el primero en hablar.
—Yo también—continúo Tae—. Sé que para nuestro hyung es algo importante.
—Gracias chicos—habló al fin Seokjin—. No es obligación de todas formas, sé lo que significa una noche libre..., mas ahora que estamos con tanto trabajo y si quieren hacer algo para ustedes...obviamente lo entenderemos—Miró a Jungkook que estaba mirando su teléfono y luego miró a Jun-Ho—¿nos vamos?
—Claro amor, vamos—. Ambos salieron. Jimin miró a JungKook y lo abrazo. Él lo sabía, aun cuando su amigo no lo dijera en voz alta.
Cuando salieron al pasillo, Seokjin y Jun-Ho se estaban besando. Jungkook sintió un dolor de estómago y quizá también un dolor en su corazón. Miró su teléfono y decidió entonces, contestar el mensaje que hacía un momento había recibido de Seung Won.
Seung Won
¿Entonces...cuando te vas a decidir a enredarte conmigo?
Jungkook
¿Qué te parece esta noche? Esta es mi dirección
Jimin vio el mensaje y comprendió. En ese momento no le dijo nada. Jungkook ya no era un niño. Tomaba sus propias decisiones. Quizá se equivocaba, quizás no. Después de todo era joven y él también se acostaba con chicos o chicas sólo por diversión. Era difícil para ellos, establecer relaciones estables. Por eso admiraba en cierta forma la tenacidad de Jun-Ho con Seokjin. Tiró de JK, y alcanzaron a la pareja. Seokjin miró a Jungkook y éste murmuró un "adiós" apenas audible.
Jun-Ho no dejó pasar la forma como Seokjin miró a Jungkook. Maldito mocoso que siempre estaba entre ellos.
Jin, en tanto, se preguntó por primera vez si lo que estaba haciendo con su vida sentimental era lo correcto. Él no podía negar todo lo que JK significaba para él. Lo atractivo y adictivo que se hacía cada año que pasaban juntos. ¿Por qué siempre bloqueaba esos pensamientos y sentimientos? Sabía la respuesta, la edad, el género, la sociedad...y la promesa "no relaciones entre los miembros". Sacudió su cabeza. ¿Cómo siquiera podía pensar en una relación con Jungkook? Era absurdo.
—¡Seokjin! —Jun-Ho estaba tratando de llamar su atención—debemos irnos.
Seokjin caminó hacia el ascensor, convencido que estaba con el hombre correcto y que todo estaría bien.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro