A D V E R T E N C IA S

Esta historia contiene:

—Problemas mentales
—Obsesión
—Muerte de personajes
—Asesinatos
—Violencia implícita y explícita
—Abuso físico y mental
—Amenazas
—Abuso infantil
—Mutilacion propia
—Pensamientos Sádicos, obscenos y perversos
—Dependencia emocional
—Y cosas que iré agregando dependiendo de mi ánimo, eso puede llevar a torturas con descripciones gráficas o puede que al final lo borre y no lleve a nada, así que deben esperarse cualquier cosa desde el cap de la confesión en adelante

Todo el inicio se va a desarrollar lento y sano, pero después todo se empezará a volver turbio y los personajes no serán lo que crees que son, la línea de tiempo cambiará, personajes que debían morir podrían vivir y personajes que vivirían morirán.

Eso es todo, disfruten de estos capítulos vainilla antes de que todo se vaya a la mierda 😘✌️♥️

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Capitulo 1
¡Te entrenaré!

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Zoro sintió como una venita de irritación se alzaba en su frente y sus dientes rechinaban con fuerza a la vez que seguía entrenando hasta que ya no pudo soportarlo más y las rocas que levantaba cayeron pesadamente al suelo en un ruido sordo, denotando con fuerza su molestia.

—¡¿Cuánto tiempo más vas a seguir observándome entrenar?! ¡Ya han pasado tres semanas! ¡¿Se te perdió algo o qué?! —Zoro estaba bastante molesto, había vuelto a perder contra Kuina de una manera más humillante que la otra.

—Lo siento, me gusta la forma apasionada en la que entrenas por ser un espadachín —habló la niña mirando hacia el peliverde el cual parpadeó ligeramente confundido—. Se siente bien ver como alguien lucha tan fervientemente por su sueño siendo apoyado en vez de bajoneado.

La niña bajó de la roca en la que estaba mirando al peliverde, era una altura bastante considerable, pero ella salió ilesa y miró al niño de cabellera verde con emoción.

—¿D-de qué hablas? —habló ligeramente sonrojado por el repentino acercamiento de la niña, no estaba acostumbrado a esto, la única interacción con una niña era Kuina haciéndolo puré o ridiculizándolo.

—Mi sueño también es ser una espadachina, pero nadie me apoya —suspiró con tristeza y desgano—. Dicen que el camino de la espada no es para una mujer, que en vez de eso debería estar aprendiendo y haciendo cosas de chicas.

Zoro frunció el ceño.

—¿Y porque no entrenas por tu cuenta? ¡Eso solo me suena a escusas! ¿Y qué si tus padres no te enseñan? —habló el niño molesto por la actitud de la chica, si quería ser espadachina, ¡Debería entrenar por su cuenta! No inventarse escusas patéticas.

—No es tan fácil, espadachín-kun —habló con desgano la niña—. No importa lo que haga, no importa cuánto ruegue porque me entrenen, nadie me acepta por ser una mujer, ni siquiera Koshiro-san me quiere entrenar, ¡Y lo encuentro tan injusto! Su hija es una gran espadachina y tiene un futuro brillante, ¿Por qué debo ser diferente? Si mis padres me vieran sosteniendo una espada de entrenamiento ellos seguramente la romperían y luego me castigarían, encerrándome en mi habitación sin comida y agua o algo así.

La niña hizo una mueca de disgusto.

—¡Lo encuentro tan frustrante! ¿Solo por ser mujer no puedo ser espadachina? ¡Les demostraré lo contrario! Pienso escaparme cuando sea grande y ver si en otra isla tengo suerte con que me entrenen en el camino de la espada —suspiró la niña con resignación.

—¿Y por qué no empezar a entrenar ahora? —preguntó Zoro curioso.

—¿No me escuchaste? ¡Me encerrarán durante no sé cuánto tiempo! Dios, odio a mis padres por eso, ¿Por qué no puedo seguir el camino de un espadachín? Si solo alguien en esta isla quisiera entrenarme... —suspiró con decepción la niña.

—¡Deja de lamentarte y no hacer nada! ¡Es patético! —exclamó el niño enojado— ¡Si tanto te lamentas entonces te entrenaré! ¡Pero deja de observarme desde la distancia de manera tan espeluznante!

—¡¿De verdad?! —exclamó esperanzada la niña y Zoro asintió antes de sonrojarse hasta las orejas por ser abrazado por la niña y recibir un ruidoso beso en su mejilla— ¡Gracias, espadachín-sensei!

—¡Gah! ¡No me llenas la cara de saliva! —exclamó asqueado el niño antes de que se limpiara el rostro y desviara su mirada sonrojado— ¡Y es Zoro! ¡Roronoa Zoro! ¡Recuérdalo bien!

—¡Sí, Zoro-sensei! —exclamó feliz la niña juntando sus mejillas y el niño refunfuñó ligeramente.

—Por cierto, ¿Cómo te llamas? Nunca me dijiste tu nombre —preguntó el niño cuando la chica se separó de él.

—Oh... hum... y-yo... —la niña se sonrojó nerviosa mirando a otro lado y temblando ligeramente.

—¿Y bien? —preguntó con impaciencia el peliverde al ver como ella estaba todo el rato dudando y mirando a otro lado soltando balbuceos.

—S-sakurai... —murmuró la mujer.

—¿Eh? ¡Dilo más fuerte!

—¡Sakurai Bubblegum! —exclamó la niña roja y con lágrimas en sus ojos.

Vamos, ¿Qué clase de padres eran los suyos? ¡La llamaron de un nombre tan ridículo como Bubblegum! ¡Odiaba su nombre! Enserio, ¡Chicle! ¡Chicle de todas las cosas en el mundo existentes y por existir! No le importaría si le hubieran puesto Sakura incluso si sonaba demasiado redundante "Sakurai Sakura" ¡Ella no quería ser conocida como un chicle toda su vida! No había niño que no la molestara por su estúpido nombre.

—¿Eh...?

—¡Lo sé! ¡Es estúpido! ¡Ríete si quieres! —exclamó desanimada la niña conteniendo sus lágrimas a la vez que apretaba fuertemente sus puños.

—Ah, no, solo pensaba que tu nombre va con tus ojos —habló el niño mirando a la niña roja—. Tus ojos son rosas como el chicle y a la vez como los cerezos, pero tu cabello es como el tronco de los cerezos, oscuro, casi rojizo, pero no rojo ni negro —habló el niño mirando a la niña frente a él que abrió su boca incrédula.

—¿D-de verdad? —preguntó la niña aturdida.

—Sí, ¿Por qué mentiría? —se encogió de hombros.

—D-de cualquier forma, ¿Podrías no llamarme Bubblegum? No sé, pensar en algún apodo o algo así... —habló tímidamente la niña y Zoro arqueó sus cejas, pero al final se encogió de hombros.

—Bueno, pero dejas de llamarse "sensei".

—¡Muy bien, Zoro-kun!

Bubblegum sonrió felizmente y siguió a Zoro el cual empezó a hablarse sobre el acondicionamiento físico primero y como le haría algunas pruebas para ver cómo estaba su estado físico para ver si necesitaban entrenar eso de cero o si podría entrenarla un poco más fuerte desde el principio. Por supuesto la niña dio todo de sí misma para pasar estas "pruebas" ¡No quería decepcionar a su nuevo maestro! ¡Él creía que ella podía ser espadachina y ella no lo decepcionaría!

Zoro miró bastante interesado el hecho de que la niña parecía una persona muy apasionada por los ejercicios a la que la sometía, al parecer ella de verdad quería ser una espadachina con toda la pasión de su alma, por lo que Zoro la trataría con respeto por su devoción al camino de la espada a pesar de que hace unas horas atrás pensaba que ella era una niña patética que solo ponía escusas para no lograr sus objetivos.

Bubblegum era una persona interesante, ¡Así que él le enseñaría todo lo que pudiera!

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Capítulos Fluff que lentamente se irán tornando oscuros y con temas serios, así que... Bueno, no se verá hasta el capítulo en dónde muera Kuina y... Y pues de empezará a notar como la mentalidad de Zoro lentamente se va rompiendo hahahha