Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 11

El público presente enloqueció al escuchar el nombre de Victor Nikiforov anunciarse y todas las cámaras presentes apuntaron hacia la entrada de la pista donde se encontraba él y su esposo.

-Yuri, estaba buscando la oportunidad para darte esta sorpresa. –Sonrió. –Hice esta coreografía para ti y nuestro bebé.

-Victor.... –El azabache sonrió dulcemente.

-Espero que te guste amor y espero un gran beso como recompensa.

Yuri no pudo evitar soltar una pequeña risita y con algo de atrevimiento, paso sus brazos por encima de los hombros de su esposo.

-Quizá te premie con algo mejor que eso. –Le susurro con delicadeza al odio del ruso. Asegurándose que Victor pudiera sentir su respiración caliente para dejar claras sus insinuaciones.

El corazón de Victor se aceleró rápidamente y sus mejillas se tiñeron de un leve color carmesí. Últimamente a Yuri le gustaba provocarlo en público. Se insinuaba de una manera tan excitante que a Victor a veces le costaba mantenerse bajo control.

Yuri atrapo los labios de su esposo en un cálido beso y Victor lo profundizo un poco.

Gritos y los flashes de las cámaras se escucharon rápidamente.

-Eso es jugar sucio señor Nikiforov. –Susurro Victor con una sonrisita de medio lado mientras separaba sus labios de los ajenos y se acercó al oído de su esposo. –Definitivamente te hare el amor toda la noche.

Yuri solo asintió con una sonrisa y Victor se agacho para besar la gran panza de su esposo, la cual había crecido bastante. Faltaba poco para que ya tuviesen a su bebé entre sus brazos.

-Espero que te guste a ti también mi príncipe o mi princesa.

La audiencia estallo en gritos al ver como Victor besaba y acariciaba con ternura el vientre de su esposo y los flases fueron aún más estruendosos.

-Estoy seguro que también le gustara amor. –Contesto Yuri.

-¡Ya entra de una vez a la pista anciano! –Grito Yurio desde las gradas.

Victor se levantó y le deposito un beso en la frente a Yuri, seguido de un 'te amo' y se adentró a la pista.

Sin perder tiempo, Yuri comenzó a caminar hacia las gradas para descansar un poco y poder observar mejor la rutina de su esposo, pero inesperadamente sintió un jalón en su brazo derecho que hizo que se asustara un poco y perdiera el balance por algunos segundos.

-Disculpa Yuri Katsuki, ¿Tienes un momento? –Soltó el joven con una gran sonrisa.

Yuri se paralizo por algunos segundos ante el agarre de aquel sujeto. Era un joven de tez blanca y cabello rubio, su estatura se asemejaba a la de Victor y portaba un traje algo casual. Yuri bajo su mirada para observar el gaffet que colgaba de su cuello. No le puso atención al nombre del chico, lo que más llamo su atención era que tenía la palabra "Prensa" en letras grandes.
Se suponía que ningún periodista podía acercarse a él, ¿cómo es que ese joven había podido evadir la seguridad?

-Disculpe, pero ahorita no tengo tiempo y además me está lastimando. –Yuri soltó el agarre de ese sujeto.

-Oh vamos señor Katsuki, solo serán unas simples preguntas.

Ambos desviaron la mirada hacia la pista cuando escucharon una relajante y hermosa melodía de piano. Victor había comenzado a moverse y a dar giros de una forma espectacular.

-La rutina de mi esposo acaba de empezar, si me disculp-

-¡Solo unas cuantas preguntas, por favor! –Interrumpió el joven.

-No quiero ser grosero señor, pero como ya dije antes, no contestare ninguna de las preguntas hasta terminar mi embarazo. Por favor no insista. –Contesto Yuri y siguió su camino hacia las gradas. Ya se estaba un poco frustrado por estarse perdiendo esa maravillosa rutina que su esposo se había esforzado en hacer para él y su bebé.

El periodista le siguió los pasos a Yuri mientras le suplicaba responder aunque sea una pregunta.
Mientras tanto Victor seguía deslizándose delicadamente dentro de la pista, sus movimientos contaban la hermosa historia de amor que tenía con su esposo. Estiraba sus brazos con tanto anhelo y los atraía hasta él, como si fuese algo preciado lo que tenía entre sus manos. Llevo su mano derecha a su cara y beso su anillo de matrimonio, mientras que su mano izquierda tocaba su pecho, justo donde se encuentra el corazón. Siguió deslizándose con una gran sonrisa en su rostro y todo el público grito cuando Victor simulo una pose como de acunar a un bebé, para luego tomar más velocidad para los saltos.

-¡¡Yuri!! –Grito Yurio

Victor había acabado de saltar pero el grito de Yurio lo desconcentro, causando que tuviera un mal aterrizaje y callera rodando y chocara contra la protección de la pista. Por puro milagro no se lesiono por semejante golpe. Levanto la cabeza rápidamente en busca de su esposo pero lo único que pudo captar fue a Yurio, a Phichit y a Otabek corriendo a toda velocidad y en un punto el moreno y el rubio se agacharon, mientras que Otabek aprisionaba a un sujeto.

Victor se incorporó lo más rápido que pudo, sin importarle el dolor que tenía en todo su cuerpo y patino desesperadamente hasta donde se encontraba Yurio.

La música dejo de sonar y toda la multitud quedo en silencio.

Cuando llego hasta el lugar donde estaban sus amigos, se quedó en shock por unos segundos al ver a su esposo en el suelo, inconsciente y un charco de sangre rodeando su cabeza. En la cara de Victor se formó un gesto del más terrible dolor y miedo.

-¡¡Yuri!! –Grito y salto la protección de la pista y se puso de rodillas junto a su esposo mientras sus lágrimas descendían ferozmente. –¡¡Una ambulancia por favor!!

Victor se veía destrozado, sus manos comenzaron a temblar mientras acariciaba con cuidado la cara y el vientre de Yuri.

-V-as a estar bien mi amor, vas a estar bien mi amor. –Repetía una y otra vez como si estuviese perdido en otro mundo. Su desesperación era más que evidente.

-La ambulancia está en camino. –Dijo Chris mientras se acercaba a su amigo. –Yuri va a estar bien, tranquilízate Victor.

-¡Como me pides que me tranquilice! –Grito Victor, era estúpido que le pidieran eso cuando estaba en juego la vida de su esposo y su hijo. –Ellos son lo más importante en mi vida, no... ¡puedo estar tranquilo!

-¡Todo esto es tu culpa imbécil! –Yurio se levantó con furia, el hombre iba a decir algo pero el rubio no le dio oportunidad y le dio un gran golpe en la cara.

-Yurio, cálmate. –Se acercó Mila para sostenerlo por la espalda. –Otabek, llévate a ese hombre con la policía.

El kazajo solo asintió y se llevó al tipo a rastras.

Phichit también se encontraba arrodillado a lado de Yuri y al igual que Victor, sus lágrimas descendían mientras repetía el nombre de su amigo una y otra vez.

Victor seguía perdido, con su mirada fija en su esposo pero ya no tenía ningún brillo. Sus lágrimas no paraban. La desesperación y el miedo por perder a lo más importante en su vida lo estaban consumiendo por dentro ferozmente. La impotencia de no poder hacer nada por su esposo y su bebé lo hacían sentir responsable de todo lo que había pasado.

Le había prometido a Yuri que siempre cuidaría de él y de su hijo y no había cumplido. Había roto su palabra y ahora sus vidas corrían mucho peligro.

Por órdenes de Yakov, todas las cámaras fueron apagadas, los guardias sacaron a empujones a los periodistas y reporteros que querían aprovechar la situación para hacer polémica.

-Ya llegó la ambulancia. –Dijo Chris y todos se apartaron, excepto Victor, que se negaba a alejarse de su esposo.

Yurio tuvo que alejar a Victor de Yuri a base de jalones para que los paramédicos hicieran su trabajo.

-¡Maldición Victor, deja que atiendan a Yuri! –El rubio trataba de sostenerlo y contener más sus lágrimas que también descendían lentamente sobre sus mejillas.

Rápidamente los paramédicos subieron a Yuri a una camilla con extremo cuidado.

Victor se quitó lo más rápido que pudo los patines, el atuendo que traía dejaban ver unos moretones que se había hecho a causa de su caída, pero a él poco le importaba lo que le había pasado. Estaba aterrado ante la idea de perder a su familia.

Victor y Yurio se subieron a la ambulancia que llevaría a Yuri al hospital. El camino a pesar de ser solo algunos minutos, fue una eternidad para ambos rusos. Victor había aprovechado para llamarle al doctor que reviso el embarazo de Yuri desde el principio y le explico el estado en el que se encontraba el azabache.

En el transcurso, Yuri nisiquiera había dado señales de movimiento, solo se podía notar su respiración agitada, sangre que salía de su cabeza y su ritmo cardiaco muy acelerado.

Cuando llegaron al hospital y bajaron al azabache de la ambulancia. Victor y Yurio iban a ambos lados del japonés, hasta que llegaron a una puerta que no les permitían pasar.

-¡Señorita por favor! –Le imploro Victor a la enfermera que les prohibía el paso. –Es mi esposo, por favor déjeme estar con él.

-Siento mucho lo que está pasando señor, pero no puede pasar.

Después de insistir por unos minutos más, no le quedó más remedio que aceptar y comenzar a llorar mientras repetía el nombre de su esposo una y otra vez. Se maldijo nuevamente por no haber cuidado de lo más preciado que tenía.

-Si tan solo hubiese cuidado de él... nada de esto hubiera pasado. –Murmuraba el ruso mientras sollozaba.

Yurio con lágrimas encharcadas en sus mejillas, solo observaba a Victor. Jamás se hubiese imaginado ver a Victor en ese estado de desesperación y dolor. Se veía como si le hubiesen arrancado parte de él.

El doctor llego corriendo y Victor se giró rápidamente para encontrarse con él.

-Doctor, por favor salve a mi esposo y a mi hijo. –Suplico mientras trataba de limpiar desesperadamente las lágrimas de su rostro.

-Tranquilo señor Nikiforov, permítame hablar con la enfermera.

El doctor camino hacia la enfermera y tuvieron una pequeña conversación en voz baja. La enfermera dejo al doctor para entrar por donde se habían llevado a Yuri y donde le habían prohibido el paso a los rusos.

-¿Qué sucede? –Soltó Victor rápidamente.

-Trate de tranquilizarse señor Nikiforov, ahorita nos informaran sobre el estado de su esposo y su hijo.

-Cálmate un poco anciano, Yuri y el bebé van a estar bien. –Le siguió Yurio, tratando de darle ánimos a Victor.

Después de unos minutos, en los que Victor aprovecho para llenar un formulario sobre su esposo, la enferma volvió y por la cara que traía, no parecía traer buenas noticias.

-Señor... -Tomo el formulario y lo leyó rápidamente. –Nikiforov-Katsuki... lamento decirle que él estado de su esposo es muy crítico.

Ambos rusos y el doctor pusieron atención.

-¿Qué sucede con mi esposo? –Pregunto rápidamente Victor.

-Lamento decirle que... entro en estado de coma. Son bajas las posibilidades de que ambos se salven.

Victor callo de rodillas shokeado y tapo su rostro con sus manos. Comenzó a llorar de una manera muy dolorosa. –Esto... no puede estar pasando... Mi esposo y mi hijo son lo más importante para mi.... –Victor estaba derrotado, su mundo se estaba derrumbando lentamente frente a sus ojos y él no podía hacer nada. No podía imaginar una vida sin Yuri y su pequeño, se negaba rotundamente a perderlos.

Yurio retrocedió dos pasos y el doctor le tuvo que ayudar a sostenerse o también iba a caer. El rubio se quedó sin habla, no podía creer lo que estaba escuchando.

-Lamento lo que voy a decir pero los doctores dijeron que era necesario preguntar. -Los tres hombres voltearon a ver a la enfermera y ella continuo. –Me pidieron que le preguntara que... usted a quien prefiere salvar ¿a su hijo o a su esposo?

-----------------------------------------------------

Hola -no me maten plox :'v-   

Prometo mañana subir el de Stripper, ya casi lo termino.

¿Fueron a la Concomics a ver a nuestras diosas? ¡Estuvo todo genial! Pero no conseguí autógrafo :'v

Gracias a las chicas que me tomaron fotos y elogiaron mi Cosplay de nuestro amado Katsudon.

(Alice con su Cosplay y haciendo Yuuyu 7u7)









Gracias por leer.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro