Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 10

-¿Hablaste con él en la mañana? -Pregunto Yurio. Aunque siempre mantenía una cara de malhumorado, se notaba que estaba bastante preocupado y eso lo pudo percibir perfectamente Victor.

-No, le mande mensajes pero no me contesto, pensé que seguía durmiendo.

-Maldición... ese cerdo ni siquiera contesta el celular.

-¡Yuri! -Grito Phichit al distinguir a su amigo a lo lejos, provocando que todas las miradas se centraran en el azabache.

Cuando Victor estaba a punto de voltear a ver a su amado Yuri, una mano le tapo bruscamente la vista.

-¿Qué haces Yurio?

-Tks, ¿Qué parte de "no debes verlo hasta que estén en el altar" no entendiste?

-¡Pero quiero verlo!

-¡Ya deja de hablar anciano! -Hizo una pausa y soltó un pequeño suspiro de alivio. -El katsudon está bien, así que ya tienes que entrar. -Dijo mientras lo guiaba dentro del salón.

La preocupación de Victor se esfumo casi por completo cuando escucho esas palabras de Yurio, lo que más le importaba era el bienestar de Yuri.

El japonés venia caminando muy rápido, se notaban sus ansias por querer correr pero por alguna razón se abstenía de hacerlo. Eso fue algo raro para todos pero él sabía que en las condiciones que se encontraba, correr era muy mala idea.

Sin perder más tiempo todos los invitados entraron al salón donde al fin ese par de enamorados unirían sus vidas en matrimonio.

Y por más que Yuri insistió en que no eran necesarios tanto adornos ni un salón grande para la ceremonia ni el banquete, no pudo detener a Victor con los preparativos. El ruso no quería presumir su dinero, solo quería que fuera todo perfecto en su boda.

"Voy a casarme con el amor de mi vida, así que todo tiene que estar perfecto para mi Yuri". -Eso decía el ruso.

Cuando Victor vio a Yuri entrar al salón acompañado de su padre, sus ojos se humedecieron.

Si hubiese algo más hermoso que un ángel, seria Yuri en ese momento.

El japonés portaba un traje blanco muy elegante que se había comprado a petición de su prometido. Su pelo, sus labios, sus ojos, sus manos y la forma en que se sonrojaba eran perfectos y hermosos.

Victor quería correr hacia él y abrazarlo, quería decirle una y otra vez lo mucho que lo amaba a él y a su príncipe y que estuvo muy preocupado. Susurrarle al oído lo feliz y honrado que se sentía de tenerlo a su lado.

Para Yuri todo era tan perfecto que parecía un sueño. Si alguien algún día le hubieran dicho que se casaría con nada más ni nada menos que Victor Nikiforov, la leyenda del patinaje, el hombre considerado un príncipe perfecto y el cual siempre admiro, seguramente se reiría y diría que dejaran de bromear, que no había ninguna posibilidad de que pasara eso. Sin embargo ahí estaban, a punto de unir sus vidas en matrimonio y con un angelito en camino que día con día crecía dentro de él.

Cuando al fin Yuri llego hasta donde su prometido lo esperaba, este lo recibió con un delicado beso.

-Amor, ¿estás bien? -Susurro Victor mientras el sacerdote comenzaba con la ya típica charla sobre el matrimonio.

-Sí, disculpa por haberme demorado. -Respondió Yuri disimuladamente para no interrumpir al sacerdote.

Intercambiaron miradas, de esas que solo ellos se podían transmitir con todo su amor.

Y así fue como después de algunos minutos llego el momento tan esperado por todos los presentes.

-Muy bien, señor Katsuki y Nikiforov por favor digan sus votos. -Dijo el sacerdote con una sonrisa. Había unido la vida de muchas parejas, pero nunca como la que estaba presenciando, se podía notar que estaban muy enamorados.

-Yuri Katsuki, mi amado Yuri. -Sonrió mientras sus ojos se cristalizaban y tomaba las manos de su novio. -Quisiera poder encontrar las palabras correcta para describir todo este amor que siento por ti, pero creo que ni todas las palabras del mundo me bastarían para hacerlo. Antes de conocerte pensé que mi mundo tenía todo para ser feliz, pero todo cambio cuando te conocí, me di cuenta d lo vacío que era mi mundo sin ti y mi propia vida ya no era capaz de hacerme feliz. Amo todo de ti Yuri, me encanta cuando me dices que me amas y la forma en la que me miras como jamás nadie lo ha hecho. -Su voz se cortó un poco por las ganas inmensas que tenia de llorar de la felicidad. -Me enseñaste el verdadero sentido del amor y a tu lado me siento el ser más afortunado de la tierra. Prometo estar contigo en las buenas, en las malas y respetarte todos los días de mi vida. Escucharte, apoyarte y amarte con todo mi ser. Sé que todos los novios se prometen lo mismo pero yo quiero prometerte algo más. Me comprometo a escuchar lo que tienes que decir, a tomar en cuenta tus puntos de vista y respetar todos tus gustos. Me comprometo a abrazarte cuando las cosas se pongan difíciles, a estar allí apoyándote en todos tus sueños y tus metas. Prometo admitir cuando me equivoco e intentarlo nuevamente. Prometo que intentare llevarte flores aunque no sea primavera, que estaré contigo incluso cuando no puedas verme y día con día encontrare una razón para amarte más. Prometo ayudarte a amar la vida, y tener la paciencia cuando las cosas se pongan difíciles. Hablar cuando se necesite y compartir el silencio cuando no. Tenerte es lo mejor que me ha pasado y no puedo imaginarme una vida sin ti. Te amo y estoy profundamente orgulloso de que desees compartir tu vida conmigo. -Victor no pudo soportarlo más y sus lágrimas fueron más abundantes. Pero a pesar de todo, sus palabras fueron tan claras que se ganó la hermosa sonrisa y también las lágrimas de felicidad de su amado Yuri.

Victor Nikiforov, -Yuri trato de aclarar su garganta. -Este es un día inolvidable y siempre quedará grabado en mi mente. Es el día en que, delante de los aquí presentes, no tuve ningún temor de gritar a los cuatro vientos lo mucho que te amo. -Entrelazo con más fuerza sus dedos con los de Victor. -Cuando me tomas de las manos me das tanta seguridad, que haces que me sienta protegido y amado a tu lado. Ante estos testigos prometo amarte y cuidarte durante el resto de nuestras vidas. Te tomo con todas tus virtudes y tus defectos, del mismo modo en que me ofrezco a ti con todas mis virtudes y mis defectos. Te apoyare cuando necesites ayuda, y te pediré ayuda cuando la necesite. Sé que siempre permanecerás a mi lado y te prometo cuidarte y ver por ti y por el hogar que a partir de hoy estamos formando. Prometo amarte ferozmente en todas las formas ahora y para siempre. Prometo no olvidar que este es un amor de una vez en la vida y que siempre en la parte más profunda de mi alma, sin importar los retos que vengan, siempre estaremos juntos. Te elijo como la persona con la que quiero compartir mi vida para siempre. -Las lágrimas descendían por sus mejillas sonrojadas, al igual que las de Victor. Ambos con una sonrisa reflejando el más sincero amor que se tenían

Todos, absolutamente todos los presentes estaban conmovidos por los votos de los novios. Incluso el sacerdote estaba conmovido, definitivamente ellos no eran de las típicas parejas que había visto.

-Yuri Katsuki y Victor Nikiforov, han venido hoy aquí a intercambiar sus votos.

Ambos asintieron con una sonrisa.

-Victor Nikiforov, ¿aceptas a Yuri Katsuki como esposo, para serle fiel en lo bueno y en lo malo, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y la enfermedad todos los días de tu vida?

-Claro que acepto. -Mostro su característica sonrisa.

-Yuri Katsuki, ¿aceptas a Victor Nikiforov como esposo, para serle fiel en lo bueno y en lo malo, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y la enfermedad todos los días de tu vida?

-Sí, acepto. -Dijo con una sonrisa y unas mejillas sonrojadas.

-Los anillos, por favor. -Volvió a decir el sacerdote.

Minako le dio el anillo a Yuri y Yurio le dio el anillo a Victor.

-Yuri, acepta este anillo como signo de mi amor, de mi fidelidad y mi deseo de que seas mi esposo a partir de este día. -Victor le puso el anillo a Yuri.

-Victor, acepta este anillo como signo de mi amor, de mi fidelidad y mi deseo de que seas mi esposo a partir de este día. -Yuri le puso el anillo a Victor.

-Si alguien puede mostrar causa justa por la que esta pareja no debe unirse, hable ahora...

Todos voltearon a verse. Yurio se puso en guardia, parecía dispuesto a atacar si alguien se le ocurría la locura de decir algo, pero nada paso.

-Muy bien. Con el poder que se me otorga, yo los declaro esposos.

-¿Ya puedo besarlo? -Dijo Victor ansioso.

El sacerdote sonrió y asintió. -Ya puede besarlo.

La recién pareja de casados se sonrió y sellaron su promesa de amor con un tierno beso casto.

Todos celebraron, gritaron y aplaudieron por la felicidad de los novios.


Durante la noche, los recién casados y los invitados se encontraban en el salón de banquetes, celebrando.

Yuri había quedado asombrado por todo lo que Victor había preparado para él, definitivamente era una boda de ensueño.

Afortunadamente Phichit se encargó de tomarle foto a todo, así que todos los fans y admiradores pudieron apreciar un poco de la celebración de los recién casados.


Cuando estaban en plena celebración y todos felicitaban a los novios, Victor pudo apreciar como su esposo se escabullo sigilosamente por una puerta que conducía al jardín.

Al salir del salón para seguir a su esposo, se encontró con un lindo jardín guiado por un camino de luces y flores blancas. Yuri era como un pequeño ángel jugando bajo el cielo nocturno y la naturaleza. Pudo apreciar como su esposo recorría lentamente ese camino.

Continúo siguiendo a su esposo, solo para ver cómo se detenía en un pequeño kiosco rodeado de árboles y luces. Era un pequeño lugar hermoso e íntimo.

Victor sonrió mientras se acercaba a su esposo. -Disculpe que lo interrumpa señor Nikiforov, pero su esposo lo esta buscando.

Yuri se sorprendió un poco y después soltó una pequeña risita. -No se preocupe señor Katsuki, yo solo quería tomar un poco de aire.

Ambos sonrieron y Victor tomo a su esposo por la cintura y lo beso dulcemente.

-Que malo señor Nikiforov, yo que tenía tantas ganas de tenerlo entre mis brazos. -Soltó Victor. -Además creí que me dejarías plantado en el altar.

-Nunca te haría eso amor. Lamento haber llegado un poco tarde.

-¿Paso algo amor? ¿Te sentiste mal?

-No amor, es solo que... -Hizo una pausa. -Me había quedado dormido.

Victor sonrió aliviado al confirmar que nada malo le había pasado a su esposo.

-Enserio me preocupe por ti amor.

-P-perdón, trate de avisarle a alguien cuando salí de la casa, pero había olvidado mi celular...

-Bueno, lo que importa ahora es que al fin eres mi hermoso esposo. -Sonrió. -Te extrañaba mucho y extrañaba a mi príncipe. -Victor se agacho y beso el vientre de su amado.

-Nosotros tambien te extrañamos cariño.

Victor se levantó y beso a su esposo. -Gracias por hacerme el hombre más feliz del mundo.

-Gracias a ti amor, por compartir tu vida conmigo.

Ambos se abrazaron, quizá su vida con el nombre de "casados" apenas comenzaba, pero ellos ya sabían que esa vida ya la habían empezado.

La luna de miel fue simplemente asombrosa. Victor se encargó de cuidar muy bien de su esposo y su hijo.

Los días, semanas y meses pasaban muy rápido. Yuri llego a tener algunas complicaciones o molestias, pero todo se pudo controlar a tiempo. Cuando Yuri le mencionaba a Victor que se sentía mal, el ruso inmediatamente tomaba el auto y lo llevaba al hospital.

Habían pasado ya varios meses desde su boda y cuando se supo la noticia de que Yuri estaba embarazado, fue como una bomba para el espectáculo. Revistas, periódicos, publicaciones en redes sociales, y todos estaban al tanto del matrimonio Nikiforov-Katsuki.

El japonés ya tenía 34 semanas de embarazo y estaba más que feliz. Su pansa estaba grande y eso le genero varias dificultades o inseguridades a la hora de tener intimidad con Victor. Pero el ruso simplemente lo llenaba de caricias, de besos y quitaba todas esas inseguridades de su esposo, pues para Victor, fuera como fuera, Yuri era lo más hermoso en el mundo.

Cuando ya estaba a punto de completar la semana 35 de embarazo, Yakov le llamo a Victor pidiéndole un favor. Quería que Victor hiciera una de sus presentaciones de exhibición en un evento que harían a beneficio de niños de bajos recursos. Iban a contar con la participación de Yurio, Otabek, Chris, Phichit, Mila y otros más.

Victor le comento a su esposo sobre dichoso evento y por supuesto decidieron apoyar. Aunque Yuri casi no quería salir, pues los paparazis estaban al tanto de cualquier movimiento que hicieran los dos, aun así estaba decidido a acompañar a su esposo. El evento era para una gran causa y ninguno de los dos quería rechazarla.

Así fue como ambos llegaron al famoso evento y por supuesto todas las cámaras apuntaban a la familia Nikiforov-Katsuki. Todos los periodistas querían acercarse a entrevistar a Yuri y a Victor, pero gracias a la seguridad bien establecida por órdenes de Yakov y Victor, nadie podía acercárseles por el momento. Yuri había prometido que daría una conferencia después de que haya pasado su embarazo.

Todos los patinadores estaban en los vestidores. Hablaban con Yuri sobre si ya sabían si su bebé era niño o niña, pero Victor y Yuri dijeron que no querían saberlo, querían esperar hasta el momento que naciera para que quedara en 'sorpresa'.

-Voy al baño amor. -Dijo Yuri mientras trataba de aguantarse un poco las náuseas.

Victor noto la incomodidad de su esposo y decidió seguirlo.

Una vez que llego al baño se encontró con Yuri lavándose la cara.

-¿Estas bien amor?

-Si amor, solo que quería refrescarme un poco. -Sonrió mientras se limpiaba la cara.

-¿Estás seguro amor? Si no estás cómodo podemos regresarnos.

-Estoy bien cariño. -El japonés se acercó a su esposo y lo beso lentamente. Victor hizo el beso más profundo y sus lenguas comenzaron esa batalla interminable.

Yuri se había vuelto un poco más atrevido y eso enloquecía a su esposo. El sexo entre ellos era de lo más placentero y maravilloso, además el ruso siempre estaba teniendo extremo cuidado para que Yuri no sintiera ninguna incomodidad.

Que el azabache pasara las manos alrededor del cuello de Victor basto para que el ruso lo levantara delicadamente de los muslos y la cintura para sentarlo con cuidado en la repisa donde están los lavabos.

El cuerpo de ambos estaba subiendo rápidamente de temperatura y poco les importaba que los vieran en esa posición, pero por más que no quisieran aceptarlo, ambos sabían que ese no era el lugar ni el momento.

-Victor. -Dijo Yuri al fin despegando sus labios de los ajenos. -Sabemos que este no es el lugar...

El ruso sonrió. -Diablos, ya quiero regresar a nuestra casa amor.

Escucharon los gritos de Yurio resonar por todos lados, así que decidieron salir del baño. La presentación de Victor estaba a punto de comenzar.

Quizá ellos no lo sabían, pero ese día, la vida les jugaría una muy mala broma.

---------------------------------------------------------

Hola -la matan- :'v

Lose, tardo años en actualizar... Disculpen...

Les traigo dos noticias (si, se que no les interesa mi vida :'v pero igual les dire xd)

1- Si todo marcha bien, lo mas seguro es que asista a la Concomics de Guadalajara y posiblemente hare cosplay de nuestro lindo katsudon.

2- Hice una pagina de fb Alice Js Art -del malo :v ahi estare publicando tonterias como esta:

Gracias por leerme, las amo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro