"te parece bien entonces"

Sumin asintió ante las palabras del mayor, Yoongi le ha propuesto tener tres veces por semana clases para ayudarla a entender mejor los temas que han estado dando, además de que los temas que pronto comenzarán para así ella pueda ir algo más adelantada y comprenda mejor las cosas.

El sabe cuanto le cuesta a la pequeña.

"Si, ¿hablaste con papá por el dinero?"

Yoongi sonrie y asiente.

Oh vaya que si lo ha hablado.

"Si, por eso no te preocupes, tú tranquila"

Sumin asiente.

"Es que no quiero que papá gaste mucho dinero con esto"

Dice un poco apenada la niña.

"Si es por eso, déjame decirte que no estoy cobrando le con dinero"

Sonrie, no iba a decirle que le cobraba de una manera más romántica por así decirlo.

"¿entonces cómo?"

Su ceño se frunce levemente e inclina la cabeza con curiosidad.

"El me ayuda con un proyecto que estoy preparando para el año que viene"

Sumin asiente, pero no muy convencida por las palabras del ojinegro, de alguna manera está sospechando que entre su padre y su profesor esta pasando algo más allá de lo laboral.

Y eso le encanta.

"¿sumin?"

La voz de su padre se escucha y ambos voltean a ver al castaño quien sonrie a ambos y camina hasta donde se encuentra su hija, se coloca al lado de la pequeña y besa su mejilla en forma de saludo, Yoongi los mira y únicamente sonrie mordiéndose el labio.

Le encanta ver cómo jimin les demuestra amor a sus seres queridos.

"Ya arreglamos los días que le dare clases"

Jimin levanta la mirada y mira a Yoongi.

"Oh bueno... ¿Qué días?"

"Lunes, miércoles y viernes a las siete"

Jimin asiente y agarra la mochila de la pequeña castaña.

"Bueno, sería después de que tengas natación Sumin"

La niña asiente.

"¿En mi casa?"

Jimin se dirige al mayor quien asiente.

Ambos saben que el ojinegro iría mucho antes para estar a solas con su novio y poder disfrutarlo cuanto el quisiese, pero eso es algo que Sumin no tiene porque saber.

Por ahora...

"Sumin ve al auto tengo que hablar de algo con yoongi"

La castaña asiente y corre fuera del salón, pero no sin antes agarrar el celular de su padre para jugar a sepeto, ese juego que se ha vuelto tan adictivo para ella.

"Por tu mirada se que esos días vendrás antes"

El ojinegro asiente y se acerca rodeándo con sus brazos la cintura del menor quien sonrie y besa cortamente los labios del semi rubio.

"Entonces tendré sorpresas para ti"

Susurra en el oído del mayor, una risa traviesa se escapa de sus labios y Yoongi toca su trasero levemente.

"Oh, vaya, entonces iré más que preparado para esas clases, necesitaré mucha energía, ¿no crees?"

Jimin se separa y asiente mientras muerde su labio inferior, comienza a caminar y voltea mirandolo a los ojos.

"Lo espero mañana profesor"

Le guiña un ojo y sale del salón riendo mientras que Yoongi mira hacia el techo y traga saliva, su mano se cuela en su pantalón y acomoda su ereccion.

"Maldito, eres un maldito, mi amor"

Rie y sale del salón con su maletín.

Ama tanto a ese castaño que daría lo que fuera para verlo sonreír todos los días de su vida.

"Papá, ¿cuando iremos a ver a la abuela Park?"

Jimin voltea y deja de cortar las verduras que está cortando y la mira.

"En las vacaciones, amor" sonrie "¿la extrañas no?"

Ella asiente y hace un puchero, esos pucheros que lo compran cada vez que ella quiere algo.

"Si, al igual que el tío seokjin"

"Tu tío vendrá de quince días a verte, el también te extraña y ya que tiene que venir por una consulta médica dijo que pasaría por aquí unos días antes y se quedaría contigo"

Sus ojitos se iluminan y sonrie.

"¿encerio?"

El ojis de avellana asiente.

"Si amor, ¿porque mentiría?"

"Necesito llamarlo"

El castaño suspira y le hace seña para que agarre la computadora.

"Trae la computadora lo llamaremos por Skype"

Sumin se baja de la mesada y corre hasta el sillón donde posa la laptop.

"¿cual es la nueva contraseña papá?"

El oji avellana sonrie al momento que escucha la pregunta de su hija.

"13 de junio, amor"

La niña teclea la fecha y llama a su tío quien comienza a gritar y decir cuán grande ella se encuentra, al igual de lo hermosa que está, jimin escucha la conversación de ambos y rie al escuchar los malos chistes que su hija hace.

Igual que los suyos.

Son pésimos, pero todos ríen para no hacerla sentir mal a la niña.

Una vez coloca las verduras en una asadera y la coloca en el horno camina hasta donde está Sumin y comienza a charlar con seokjin planeando bien que día y a que hora el llegará, después de que el le haya dado todos los datos y hayan hablado un poco más la llamada de corta.

Sumin y jimin caminan de la mano hasta la cocina para ver cuánto le falta a la comida.

"¿por qué pusiste esa fecha de contraseña papá?"

La pregunta lo toma por sorpresa y el sonrie.

"Pronto sabrás amor, pronto"

Sumin se encoje de hombros y abre la heladera (refrigeradora) sacando jugo de naranja.

Jimin la observa y suspira, sabe que tarde o temprano tiene que decirle de su relación con yoongi.

Espera que ella lo tome bien.

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