4- Solo quiero estar contigo.
—Joven…
—¡Bienve... —no termino la frase al ver quien pedía sus servicios—. Profesor Kana…
—Aquí no soy su profesor joven Suppasit
—contesta Kana.
—Ni yo su alumno para que me llame joven Suppasit —responde Mew.
—Tienes razón “Mew” —dice Kana con ironía.
—Así está mejor “Gulf” —responde Mew.
—Veo que sabe mi nombre.
—Gulf Kanawut Traipipattanapong, 4 años enamorado, es importante saber de quién lo hice.
—¿Me trae un mojito? —se sentó.
—En seguida se lo traigo.
Kana mira fijamente a Mew como este iba a la barra por su tragó y después de minutos volvió y se lo sirvió.
—Aquí tiene —le entrego el trago.
—Gracias, ¿A qué hora sale? —pregunta Kana bebiendo un poco de su trago.
—En una hora más —responde Mew.
—Entonces lo espero, debemos hablar.
—Se equivocó de persona, yo no soy su «Prometida».
—¿Celos?
—No pregunte estupideces, sabe perfectamente que sí —responde Mew algo molestó—. Idiota.
—Muy atrevido, supongo que le falta que me ponga serio para qué me respeté.
—Eso está en sus clases, aquí no tiene autoridad.
—Mi madre falleció hace unas horas —jugaba con su tragó.
—¿Ah? ¡Mis condolencias!
—No es necesario, fui a verla y decirle la verdad, usted tenía razón, no podía vivir en engaños, estaba justamente Puifai y ella lo entendió bien.
—Pero… —duda en hablar primero y luego habla—. ¿Ya no está comprometido?
—Si lo estoy.
—Oh, bien… Iré a atender esa mesa, cualquier cosa me llama.
Mew estaba dando la vuelta.
—Con usted estoy comprometido.
—¿Qué ha dicho? —volteo a mirar nuevamente a su profesor—. ¿Conmigo?
—Desde hace 4 años lo estoy, estoy comprometido a que usted sea una mejor persona, a que logre graduarse y trabaje a mi lado.
—Debería dejar el mojito, ya está diciendo tonterías.
—No son tonterías, realmente estoy decidido a luchar por usted, ya no estoy con Puifai y la bruja de mi madre está muerta.
—Creo que no tenía buen vínculo con ella.
—Hasta antes de morir me maldijo, le dijo al médico que me muriera y que jamás fui digno de ella como hijo. Menos ahora que soy homosexual.
—Palabras duras de su madre.
—Sí, pero no me sorprende, ella era así, espero se esté quemando en el infierno.
—Seguiré atendiendo y en unos 50 minutos más hablamos más tranquilo,
—¿Le parece? —interroga Mew.
—Sí —responde Gulf para seguir bebiendo su trago.
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Horas después.
★★ Casa Gulf ★★
Kana llevo a Mew a su casa para conversar más tranquilamente.
—Wow, qué hermosa casa —dice Mew sorprendido.
—Gracias, bajé, estacionaré el auto.
—Sí —Mew baja y miraba detalladamente la casa.
Después de estacionar el auto, Kana baja junto a su bolso.
—Entremos, está haciendo frío.
—Lo sigo.
Ambos entran a la casa y son recibidos por una señora de unos 50 años.
—Bienvenido a casa mi Niño, llegas más tarde hoy —habla la señora.
—Hola Nana —saluda Kana a su Nana—. Han pasado varias cosas, mira él es Mew Suppasit.
—¡Oh! Así que él es Mew Suppasit.
—Un gusto saludarla —la reverencia—. Así es, soy Mew Suppasit, ¿Puedo saber su nombre dama?
—Soy Leya, pero me dicen Nana. Dígame así también.
—hermoso nombre, Nana.
—Encantador… —¿Que te trae tan tarde a casa? Ya estaba preocupada.
—Mi mamá falleció.
—¡Ah! Qué pena mi niño, ¿Estás bien?
—Superbién, sabes como era nuestra relación, e incluso antes de morir me maldijo y que jamás fui digno de ella como hijo.
—¡Ojalá este en el infierno! Espero no le hagas funeral.
—No, ¿Quién la iría a ver? Yo no, a la fosa común se fue, no gastaría dinero por ella, menos después que me hizo un infierno en mi vida.
—¡Muy bien! ¿Ya comieron? Tengo la cena lista.
—¿Quieres comer? —Le pregunta Kana a Mew.
—Sí, si ya está lista, no la dejaré con la cena hecha.
—Tan encantador, iré a servir.
Nana dio la vuelta y se fue a la cocina.
—¿Deseas una ducha?
—¿Ah? —se huele—. ¿Apesto?
—Nada de eso, solo preguntaba, para que estés más cómodo.
—Bueno.
—Sígueme, te llevaré a una habitación de invitados, así estás cómodo y te dejaré ropa para cambiarte.
—Gracias —responde fríamente Mew.
—Deje de ser tan frío —dice Kana—. No este jugando mis juegos, que le diré que al verlo serio…
—¿Al verlo serio? —interroga Mew— ¿Qué?
—Es muy sensual.
—¡Oiga!
—No es el único que desnuda con la mirada.
—No juegue, que puedo saltar la cena e ir directo al postre —dice Mew mirando fijamente a Gulf.
—Quien sabe si es mejor eso ahora.
Gulf lo Mira de forma coqueta y empieza a caminar sabiendo las escaleras.
—¿Es un sueño? —pellizco su mano—. Auch… Es muy real.
—¿Se quedará parado Allí? —grita Kana de las escaleras.
—Voy… Voy… —corre Mew.
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★★ Habitación Invitados ★★
—Pase aquí, báñese, encontrará toallas limpias ya le traigo ropa limpia.
—Qué hermosa habitación, ¿Es la de invitado? No pareciera que lo fuera.
—Sí, la mía está al lado, lo llevaría, pero no quiero que este incómodo.
—¿Puede dejar de ser tan formal? No estamos en la universidad, aquí no es mi profesor.
—Es la costumbre, supongo.
—Realmente, ¿Qué quiere? ¿Por qué vinimos aquí? —interroga Mew.
—Ya le dije, estoy comprometido a que usted sea una mejor persona, a que logre graduarse y trabaje a mi lado —responde Kana.
—Ya me lo dijo, ¿Pero qué será de ambos?
—La única persona que impedía mis sentimientos ya no está, y antes de morir supo que era homosexual y que me gustaba un alumno hace 4 años.
—Sonrojado. —De verdad que aún no lo creo.
—Créalo porque es así —se acerca a Mew y queda frente a frente—. Solo quiero estar contigo Mew, no quiero oprimir mis emociones ya, realmente necesito tenerlo cerca de mí.
—También lo quiero cerca de mí —responde Mew—. Si esto es un sueño, no quiero despertar.
—No es un sueño.
Kana solo se deja llevar por lo que siente en el momento y se acerca a Mew y lo empieza a besar. Kana invita a Mew a unir sus lenguas en una lucha para saber quien es más dominante.
Ambas lenguas salen a sus encuentros, Mew muerde levemente en labio inferior de Gulf y lo hace gemir, sus besos los llevaban a otro universo, universo que se ve interrumpido por la falta de oxígeno en ambos.
—¿Es un sueño? —dice Kana abrazado a Mew.
—No —responde Mew sorprendido—. Este ha sido mi sueño desde que lo conocí, tus labios y besos me han llevado al paraiso, usted realmente es maravilloso.
—¿Y yo soy el que habla formalmente?
—También es la costumbre —responde Mew.
—Mejor toma una ducha y después hablamos.
—Está bien.
Kana deja un último beso en Mew y sabe de la habitación.
—¿Realmente está pasando? Realmente parece un sueño, un sueño del que no quiero despertar.
Mew caminó a la cama y empezó a quitar su camisa y la dejo sobre la cama, cuando iba a soltar el pantalón la puerta es golpeada y abierta por Kana.
—¡Perdón! Te estás desvistiendo, te traje la ropa.
—No te preocupes, no tengo nada extraño. ¿O si?
Mew seguía quitando su pantalón y lo dejo caer y dejo a la vista su bóxer.
—Traga grueso y muy sonrojado estaba Kana. —Tenga.
—Gracias —recibió—. Vaya a ducharse, ¿o lo quiere hacer conmigo?
—Eso sí, suéñalo, no dejaría que me toques ni yo te tocaría, primero te gradúas.
—Nada perdía con intentar, he esperado 4 años, puedo esperar un poco más, supongo —dice Mew caminando al baño.
—Nos vemos abajo.
—Pronto iré.
Rápidamente, Kana sale de la habitación y Mew sonríe.
—Así que también se sonroja —sonríe.
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★★ Habitación Kana ★★
Gulf llega a su habitación y se empieza a desvestir.
—Realmente Mew quiere matarme, ¿cómo puede tan sensual? Pero por fin estoy feliz, por fin puedo amarlo sin problemas.
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10 minutos después.
★★Comedor ★★
Mew y Gulf estaban comiendo y Nana recargada sobre sus nudillos mirando fijamente a Mew.
—¿Tengo algo en el rostro Nana? —Interroga Mew al sentirse incómodo.
—Nada, solo te miró, para saber que tipo de chico eres.
—Nana, déjalo en Paz —regaña Kana.
—¡Mi niño! Es tu felicidad, quiero saber cómo es realmente.
—¿Y mirándome lo sabrá? —interroga Mew.
—No, estaba esperando que comieras para interrogarte.
—dejo de comer. —Pregunte entonces.
—¡Nana! ¿No puedes ser menos descortés? Yo sé cómo es Mew, yo convivo con el de lunes a viernes de 8:00 h a 14:30 h o más.
—Pero solo lo conoces en la universidad.
—Nana… ¡Por favor! Es algo que a mí me toca descubrir, déjalo comer tranquilo.
—Déjala, ella te cuida y si tiene preguntas puede hacerlas nada escondo.
—Mew, no le sigas el juego, además aún no comes y se está haciendo tarde, debes descansar para la universidad.
—Me he dormido más tarde y ya te dije que no voy a estudiar más.
—Mew, eso era por tus sentimientos y ya está aclarado, no tienes por qué abandonar la universidad ahora, estamos bien.
—¡Qué tonto soy! —cubrió su cara.
—¿A qué te refieres? —interroga Kana a Mew al ver que este cubrió su rostro.
—Es por eso que me dices que te gusto seguramente.
—¿Puedes ser más claro? —interroga Kana al estar confundido.
—Seguro por eso me dijiste todo esto, para que no abandoné la universidad y no te sientas culpable —dice Mew mirando a Gulf.
—Dejo de comer y corrió su plato. —¿De qué estás hablando Suppasit?
—Tranquilos… —dice Nana sintiendo la tensión.
—De que me dijiste que te gustaba y todo eso para que no deje la universidad, para no sentirte culpable de que me fui por quererte 4 años.
—¿¡Estás demente?! ¡Si te quieres ir largo! ¿¡Culpable por qué?! ¿¡Yo te obligué a quererme 4 años?! —grita molesto Kana.
—Tranquilo mi niño.
—¡No me obligaste!
—¡Exacto! ¡No te obligue! —grita nuevamente Kana—. ¡Yo no le ruego a nadie y menos haría de mis sentimientos un juego! ¿¡Que ganó yo al retenerte de tu decisión?!
—Nada —responde Mew.
—¡Exacto! ¡Nada! ¡Sí que no inventes historias en tu cabeza Suppasit!
—¿¡No pensarías como yo?! ¡De pronto te digo que me iré de la universidad y tú me sales con tus sentimientos, después de 4 largos años! ¡Todo parece un juego!
—¡Y seguramente mi madre se murió por juego también! ¡Rompí mi compromiso con Puifai por juegos! ¡Y estás en mi casa por juego!
—Gulf… Detente… —dice Nana al ver a Gulf muy enfurecido.
—Permiso, me retiro —dice Mew—. Estaba muy rico. ¡Gracias!
Mew se levanta de su lugar y va a la habitación por sus cosas.
—¡Gulf Kanawut! —regaña su nana—. ¿¡Estás loco?! ¿Por qué le gritas?
—Suspiró. —Porque no entiende que lo amo.
—¿Y a gritos va a entender?
—No, ya no me digas nada, ve a dormir.
—Está bien, pero Mew no debe salir de aquí.
—Yo sabré qué hacer, buenas noches.
—Buenas noches.
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★★Habitación Invitados ★★
Mew estaba sentado en la cama muy molestó, levanta su vista a la puerta que se abre y se deja ver a Kana.
—Ya me voy —dice Mew fríamente.
—¿Por qué no entiendes mis sentimientos?
—dice Kana y se sienta a su lado dejando un beso en el cuello de Mew.
—No hagas eso.
—Lo miro fijamente. —Te amo desde hace años, no sabes lo difícil que es para mí ser tu profesor, ver como otros te coquetean, te invitan a salir o toman tu mano.
—¿Es en serio?
—Sí, si sigo siendo Profesor es solo por ti, ¿Crees que me gusta serlo? ¿Crees que me gusta escuchar que soy el ogro de la universidad?
—Supongo que no.
—Claro que no, solo quiero que termines la universidad y que estés a mi lado en la empresa, eres como una obsesión para mí.
—Realmente siento que es todo irreal.
—Pero no lo es, ¿Crees que con todo el dinero que tengo necesito ser profesor?
—No, claro que no.
—Exacto, por eso cuando te escuche decir que abandonarías la universidad me lleno de frustración, eres muy brillante Mew, no puedo ir y demostrar mi interés hacia ti, a mí no me importa ser apuntado, pero tú tienes que cuidar tu imagen, hoy en día los jóvenes son crueles con sus comentarios.
—Es verdad —responde Mew—. Pero jamás me hablo de sus sentimientos.
—Si se los decía, quizás se podía distraer de sus estudios y no quería eso —responde Kana.
—¿Está seguro que puede estar conmigo? Usted es brillante, talentoso y yo…
—No me haga enojar otra vez, ya me duele la cabeza, creo que le he dado motivos suficientes para que entienda mis sentimientos por usted y que tú también lo eres —responde Kana dejándose caer en la cama—. Estoy cansado.
—Se dejó caer en la cama Mew. —Solo quiero estar contigo Gulf, pero no por dinero ni nada de eso.
—Lo sé, solo hoy sabia de mi empresa y desde el primer día lo he escuchado sincero.
—Volveré a la universidad mañana, como si nada paso, no voy a desperdiciar sus años estando a mi lado.
—Como decida, ¿Termino la tarea de contabilidad?
—Sí, ya está hecha.
—Me parece bien, hora de dormir.
—¿Quiere que duerma aquí en su casa? —interroga Mew.
—¿Dónde más? No se va a ir tan tarde, duerma aquí, mañana temprano lo llevo a su casa a cambiarse —se levanta.
—Está bien.
—Pero no aquí, en mi habitación —sonríe Kana.
—¿Ah? —dice sorprendido Mew.
—Pero ya le dije, nada de tocar hasta que se gradúe.
—Lo sé.
Mew se levanta y ambos caminan a la habitación de Gulf donde se acomodan para dormir.
—Buenas noches, joven Suppasit.
—Buenas noches, profesor Kana.
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Perdón por la falta de ortografía 🙏
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Gracias por tomarte el tiempo de leer mi historia.
Bendiciónes ☀️🌻
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