— ¿Olivia? —la rubia dio un respingo cuando tocaron su hombro. SooBin estaba llamándola— ¿Te sientes bien?

— ¿Qué?, ah, sí, estoy bien—le restó importancia— ¿Ya llegó el profesor de biología?

El chico no pudo responder, todos guardaron silencio en el salón cuando el director Kim apareció. Éste miró el salón encontrando una cabellera rubia en una esquina.

—El profesor de biología no vendrá hoy, se le presentó una emergencia en su casa. Les pediré que esperen a su próxima hora de clases.

Ante eso todos se levantaron recogiendo sus cosas. Olivia al pasar junto al director se detuvo por su seña de que se quedara allí, una vez solos en el laboratorio, NamJoon habló:

— ¿Cómo se ha sentido, señorita Miller?

—Intento adaptarme, director Kim.

Algunos mechones de su cabello oscuro caían por su frente, vestía con traje y corbata. Olivia sentía que quería decirle algo más por su manera de mirarla.

—Supongo que su clase favorita es literatura—ella no dijo nada—Sé la clase de relación que mantienen el profesor Jeon y usted—tomó una bocanada de aire—Quería hacer caso omiso a lo que pasaba, le advertí al profesor Jeon sobre la relación de alumna y profesor, pero veo que la ignoró—miró hacia la puerta y luego a Liv—No traigas más problemas a su vida, ¿Sí?

— ¿Qué?

—Señorita Miller, una relación entre los dos no sería bien visto por el hecho de saber cómo inició y cómo es ahora—habló de manera honesta—No tendrá un buen final...

— ¿Lo dice por la atrofia óptica?, ya me comentó de eso—asintió—Le dije que lo ayudaría a evitar que fuera más traumático de lo que ya es.

—No necesita su ayuda, señorita Miller.

—Director Kim, entiendo que se preocupe por el profesor Jeon, es su amigo desde hace mucho y...

— ¿El profesor Jeon le dijo cómo nos conocimos? —recostó su cintura del escritorio—Supongo que no por su silencio, conocí a JungKook en el hospital cuando debía asistir al tratamiento que le daban a mi padre debido a su cáncer, JungKook intentaba buscar una cura para su problema de la vista, lo conocí cuando estaba desesperado, sofocado y angustiado por saber que en unos pocos años perdería la visión—Olivia se imaginó la escena sintiendo un nudo en la garganta—Habrán momentos en los que necesitará más que una simple aventura, ¿Entiende mi punto? JungKook necesita más que una ayuda para lo que viene.

—Prometí ayudarlo.

—¿Y sus padres la dejarán?

—Mis padres no deben aceptar nada, es mi decisión.

—Señorita Miller.

—Director Kim, sé lo que le espera a JungKook, lo entiendo y quisiera estar a su lado para ayudarlo—hizo una pausa para luego añadir—A estas alturas, siento que esto es más que una simple aventura.

...

Las clases habían culminado, JungKook caminaba a su auto respondiendo un mensaje de su madre, cuando abrió la puerta al quitar la alarma distinguió a la profesora Park. Su cabello rubio caía completamente liso por su espalda, sonrió un poco sin saber cómo hablar.

—Profesora Park—saludó.

— ¿Tiene un momento, profesor Jeon?

— ¿Ocurrió algo malo?

—No sabría decirlo—miró hacia la escuela—La mayoría del personal y los alumnos se han ido, ¿Le importaría si hablamos en otro lugar?

...

Las palabras fueron difíciles de asimilar, JungKook no podía ver las cosas más graves de lo que estaban. Respiró profundo perdiendo el apetito por completo, si la profesora Park lo sabía el resto se enteraría.

— ¿Dice que escuchó al director Kim y la señorita Miller hablando?

—En el laboratorio de biología, nadie sabe de esto, no debe asustarse, no pienso decir nada.

— ¿Y por qué me dice esto?

—Porque este tipo de cosas son graves y usted es un buen profesor desde mi punto de vista—indicó—Una relación...

—Profesora Park, no creo que deba contarle mis cosas a usted.

—Profesor Jeon, ¿Por qué no dijo nada sobre su enfermedad?

JungKook respiró profundo, quizás Rosé si estaba actuando con buenas intenciones, pero le parecía que estaba siendo muy entrometida. Parpadeó varias veces sintiendo ardor en su vista, incluso ésta se tornó un poco borrosa. Su respiración se agitó un poco, debía calmarse.

—Voy a agradecerle que no le diga a nadie más, si tanto respeto y admiración me tiene apreciaría que esto quedara aquí—pidió.

—No le diré a nadie, sólo sean cuidadosos en la escuela—aquello le tomó desprevenido.

— ¿No va a reprocharme por lo que hice?

—Es escandaloso, claro que sí, pero...quizás estoy loca, no me parece de gravedad—sonrió avergonzada—Las personas hacen cosas peores y más graves, en esos casos nadie juzga, pero en este si lo hacen.

—En ese caso...gracias por no...juzgarme ni juzgar a Olivia.

Rosé se sonrojó por la mirada del profesor. Siempre había tenido un interés romántico por el profesor Jeon, nunca se lo confesó ni se lo confesaría, si él era feliz con otra chica lo respetaría, incluso si ésta era menor que ella.

—La señorita Miller es muy hermosa para ser tan joven—alagó—La escuché decirle al director Kim que quería ayudarlo fuera como fuera, esa chica tiene buenas intenciones, profesor. A simple vista se nota.

JungKook recordó su manera de tratarla en la mañana, se sintió mal, Olivia no tenía la culpa de su enojo, ella era inocente de todo. Lo más correcto y sensato sería pedirle disculpas.

...

—Pero dijiste que hablarías con el director.

—Y se me presentó una emergencia en la oficina—el señor Miller conducía su auto. Había pasado a recoger a Liv de la escuela.

—Siempre hay una emergencia, ¿No? —bufó cruzándose de brazos—Hablaré yo misma con el director.

—No hablarás con nadie, deja que tu madre y yo nos ocupemos de eso.

No estaba de acuerdo, claro que no, sus padres seguían queriendo que recibiera clases presenciales. Su teléfono vibró en el bolsillo de su chaleco, al revisar su enojo disminuyó al ver de quien se trataba.

JungKook:
¿Podemos vernos?

Olivia:

Estoy con mi padre ahora mismo.

JungKook:
Pensé que ya estabas en casa.

Olivia:

Ya ves que no. ¿Sigues molesto conmigo?

JungKook:
Quería hablarte de eso, me parece más maduro hablarlo en persona.

Liv frunció ligeramente el ceño.

Olivia:¿Te parece si nos vemos en dos horas?, dime dónde e iré allí.

—Tu madre me dijo que saliste con unas amigas ayer—la chica miró a su padre— ¿Ves?, no es difícil hacer amistades, Olivia, sólo hay que tener paciencia, cielo.

"Mamá no le dijo la verdad. ¿Debo tomarlo a mi favor o en mi contra?, sea lo que sea, me siento mal mintiéndoles"

—Papá.

— ¿Sí? —mantuvo sus ojos azules en el camino.

— ¿Qué piensas de las relaciones a distancia? —quiso saber—Ya sabes que hoy en día muchas personas se conocen por Internet y...encajan con esa persona.

El señor Miller pareció pensarlo, pero la manera de su hija de preguntarlo le hizo sospechar un poco.

—¿Conociste a alguien por Internet?

—No. No es eso, sólo...tocaron ese tema en clases el día de hoy—guardó su teléfono—Quería saber que pensaban tú y mamá del tema.

—Bueno...es peligroso, por supuesto, nunca sabes si la otra persona es lo que dice ser.

—Pero existen las video llamadas, puedes ver su físico.

—Cierto, pero las personas mienten de alguna manera, hay relaciones a distancia que funcionan, aun así, no todas lo hacen—giró el volante en una curva—Prefiero una relación estable y segura.

—Ninguna relación es estable ni segura, es como pedir una relación perfecta.

—Son cosas diferentes. Estable y seguro no significa perfecto. Ninguna relación es perfecta, pero puede ser estable si ambos saben lo que quieren y puede ser seguro si ambos saben lo que sienten por el otro.

Con esas palabras Liv se quedó un tanto pensativa.