Namjoon se encontraba muy inquieto. Seokjin le había comentado que saldría un rato de su hogar, pero al estar tan ocupado con un proyecto que tenía pendiente para su trabajo, se le pasó preguntarle a dónde iba.

Sin embargo, ahora que estaba libre, lo primero que se le cruzó por la mente fue escribirle. Tenía un mal presentimiento y no estaría en paz hasta descubrir si era o no una falsa alarma.

Hoy a las 5:20 PM

Yo:

¡Jinnie! ¿Dónde estás? Ya me dejaste abandonado por mucho tiempo.

Solo no tardes, ¿sí? 🥺

Quería ver si me adelantaba pidiendo comida en tu restaurante favorito para hacer noche de películas 🍿📽️

Nos lo tenemos muy merecido por toda esta semana de trabajo 😢

Jinnie:

Nam, eso no se va a poder.

En estos momentos estoy con Jungkook, aferrado a mí, llorando desde hace una hora.

Es una larga historia, así que haré un grupo para explicarles a Hobi y a ti.

Yo:

😧 ¿?

En menos de diez segundos, la notificación de un nuevo grupo al que fue ingresado por su pareja, saltó en la pantalla de su móvil. El título del chat lo angustió en demasía, pues no tenía la más mínima idea de lo que estaba sucediendo. Pero el que más emociones desbordaba era Seokjin, quien como pudo agarró su móvil para informarle a su pareja y a su amigo sobre el estado del joven docente.

Jungkook triste 😓

Hoy a las 5:30 PM

Hobi:

Hyung, ¿qué pasó?

¿Cómo que Jungkook triste?

Namu:

Sí, mi amor. ¿Qué está pasando?

Estoy tan preocupado.

Yo:

Jungkook está muy mal.

Al parecer el chico con el que estaba saliendo (en plan amoroso) resultó ser una escoria igual o peor que el idiota de su relación anterior.

Hobi:

¿Ehhh?

¿Jungkookie salía con alguien?

Nunca nos lo contó 😶

Yo:

Obviamente no lo hizo porque se trata de su estudiante.

Hobi:

¿Qué?

No puede ser.

Yo:

Para empeorarlo todo, tiene novio, o sea jugó con Jungkook como le dio la gana.

Y de ese detalle acabamos de enterarnos, por eso, les necesitó aquí, porque requiero que me ayuden en unas cuantas cosas.

Namu:

¿A qué te refieres, Jinnie?

Yo:

Jungkook se va de Seúl, irá a Busan para ser maestro en la universidad de Dongseo.

Namu:

¿Cómo?

Yo:

Ustedes vengan y les explicaré todo.

Jungkook ya se quedó dormido por suerte, pero supongo que será una larga noche para él 🙁

Hobi:

Claro, ahí voy, hyungs.

Namu:

Sí, yo igual.

Espéranos.

Yo:

Gracias, chicos.

Espero que su presencia lo anime un poco, me destroza verlo tan devastado.

Hobi:

Debe ser, pero ya vamos para allá.

Kook no se salvará de que le dé mimos 😚

Yo:

Le será muy necesario, Hobi.

Los espero.

Después de ese último mensaje de su pareja, Namjoon salió disparado hacia su armario para ponerse una ropa más casual que reemplazara a la vestimenta holgada que estuvo portando al estar en la comodidad de su vivienda.

Lo que estaba sucediendo era una mierda, no tenía razón para ser así, pero lo era y eso le dolía bastante. Maldición, justo ahora se sentía culpable por apoyar a Jungkook con esa relación que terminó tan mal. Seokjin se enojaría tanto con él, ya se lo veía venir y no lo juzgaba, porque se lo merecía.

Fue muy tonto creer que el amor que el resto de personas profesaban era igual de sincero al que compartía con su pareja. Eso no sucedía con tanta frecuencia en la actualidad y esto solo se lo confirmaba con creces.

Por eso, si podía ayudar a su dongsaeng de cualquier manera, lo haría sin pensárselo dos veces No merecía sufrir más de lo que ya lo estaba haciendo.

El sonido de una notificación en su móvil lo sacó de su trance antes de salir de su casa para ir a la de Jungkook.

—Oh, mierda—murmuró al comprobar que el remitente era Seokjin.

Valió, de esta no se salvaba tan fácil.

Hoy a las 5:45 PM

Jinnie:

Nam, tú sabias algo, ¿verdad?

Yo:

¿Por qué lo dices?

Jinnie:

Prácticamente no dijiste nada en el otro chat.

Me dio esa impresión porque no lucías sorprendido como Hobi.

Yo:

Te seré sincero, Jinnie.

Jinnie:

Te leo.

Yo:

Lo sabía todo desde un principio para ser preciso.

Jinnie:

¡Por un demonio, Kim Namjoon!
¿Por qué no me dijiste nada?

Yo:

Kook me dijo que no te lo tomaste bien, y si decidió confiármelo es porque también soy su hyung.

Perdón, amor, pero esto era un asunto personal de Jungkookie.

Y no deberíamos de meternos, justo como te lo dije ese día en el que viste esos tweets.

Ya es un adulto y tendrá que seguir su camino respecto a las decisiones tome a lo largo de su vida.

Él se seguirá equivocando como cualquier ser humano, pero lo que tenemos que hacer es estar ahí para apoyarle y no atormentarle.

Debemos hacerlo sentir mejor, no peor.

Jinnie:

Qué fácil, ¿no?

Eres un insensible, Namjoon.

¿Acaso olvidaste que su vida casi se va al carajo por la traición de Yugyeom?

Yo:

Claro que lo recuerdo, jamás lo olvidaría.

Pero Jungkook logró salir adelante.

Jinnie:

Sí, después de tocar fondo. Cuando estuvo a punto de perder todo por lo que había luchado.

Mira, no quiero enojarme más de lo que ya estoy. Mucho menos contigo.

Porque parece que soy el único que está interesado en su bienestar.

Quiero evitarle más dolor, y lo haré sin importarme nada.

Yo:

Yo igual, Jinnie, pero esa no es la manera y lo sabes.

Tampoco es bueno que quieras tenerlo encerrado en una cajita de cristal.

Por esa misma razón es que le daré la libertad de que se sienta conforme con decirnos su opinión acerca de todo lo que siente.

Y si llega a tomar una decisión en particular, la respetaré y apoyare, pues es lo que más necesita justo ahora.

Jinnie:

Como sea, ven rápido por favor.

Yo:

Ya estoy de salida.

Namjoon guardó su móvil en el bolsillo de su pantalón, soltando un largo suspiro cansino. Detestaba discutir con Seokjin, porque rara vez lo hacían, pero no le quedaba de otra.

Debía hacerle entender cuál era su verdadero papel como el hyung de Jungkook. No era junto que siguiera tratándolo como a un niño que requiere de protección ante cualquier situación.

Entendía que su dongsaeng fuera alguien muy sensible, y lo menos que quería era verlo en ese estado por una persona que se aprovechó de su corazón de oro, pero tenía presente lo inteligente y luchador que era, como para demostrarles que saldría adelante sin mayor dificultad.

Su pareja también debía dejar de ser tan terco y darse cuente de que a pesar de todo lo que Jungkook experimentó en el pasado, creció para volverse muy fuerte.

Encontraría la forma de superarlo y ellos estarían a su lado para motivarlo como buenos amigos.

Seokjin no distaba mucho de ese pensamiento, tampoco le gustaba discutir con Namjoon, pero en su mente, suponía que cada una de sus acciones estaban justificadas. Jungkook tenía que irse de Seúl para alejarse del daño que representaba Taehyung y su relación con él.

Por lo que movería cielo y tierra para que se mudara a Busan con el objetivo claro de no mendigar amor de una persona que no supo valorarlo y darle un amor con reciprocidad.

Pero solo el tiempo le demostraría si esa fue la elección correcta.

Mientras tanto, Yoongi se encontraba viendo videos en YouTube para distraerse cuando llegó un momento en el que ni siquiera eso fue de ayuda. Su mente seguía tan perdida en Jimin, que era incapaz de concentrarse en otra cosa.

No obstante, resistiría hasta que el mismo joven le escribiera. Pero en lo que eso sucedía, le escribiría a la única persona que lo soportaba a cualquier hora.

Hoy a las 6:30 PM

Yo:

Hobiiiii

Hoseok

Jung Hoseok

¿Estás por ahí?

¿Hola?

Hobi:

Dios, ¿Qué pasa, Yoongi?

¿Por qué tanta insistencia?

Yo:

Esa amabilidad 🙄

Ni un hola.

Hobi:

Perdón, Yoon.

Estoy en las nubes.

Me alegra leerte.

Yo:

¿Cuándo no? Jajaja

Es que eres como un ☀️

Hobi:

Solo por ese cumplido no me enojaré.

Aunque indirectamente me dijeras que soy despistado.

Yo:

Quería ver si estabas libre para salir un rato o algo así.

Estoy que me muero del aburrimiento.

Hobi:

Lo lamento, pero no puedo esta vez, Yoon.

Yo:

¿Cómo así, Hobi?

Nunca rechazas un plan 😣

Hobi:

Es una larga historia, pero te la resumiré lo más que pueda.

A un amigo lo engañó su pareja (?) y está muy triste (es que es muy sensible, además de que nunca tuvo buenas experiencias en relaciones), por eso, estoy yendo camino a su casa para darle apoyo moral.

Yo:

Que mal 🙁

Y que hijo de...

La verdad no entiendo que ganan engañando a sus parejas.

Si no los quieren de verdad, no los hagan perder el tiempo y déjenlos libres para que sean felices con parejas que sí estén dispuestas a quererlos y respetarlos.

Me imagino como debe sentirse. Tan traicionado, dolido, y engañado.

Y es comprensible, porque muchos odiamos las mentiras, no importa de que sea.

Es una total decepción.

Hobi:

Sí, por esa razón voy a ir a animarlo y descubrir cual será la decisión que tomará.

Yo:

Ya veo. Ve con cuidado, Hobi.

Y de mi parte dile que mucho ánimo, que no se deje caer por esto y que la persona que le hizo aquello no merece nada de él, ni de sus lágrimas, ni sus pensamientos, mucho menos su sufrir.

En otro momento salimos, igual ya estamos en vacaciones y eso nos garantiza organizar algo bueno.

Hobi:

Bueno, eso le diré.

Espero se le pase y que no se culpe por nada.

Él es una masita que no merece sufrir.

Gracias, y ya estaremos conversamos, porque ahora que contamos con libertad, debemos disfrutar como se debe.

Adiós, Yoon.

Yo:

Así será.

Hasta luego, Hobi.

A Yoongi le pareció muy feo, lo que Hoseok le contó en confianza. De verdad espera que su el amigo del susodicho pudiera salir de ese hoyo en el que seguro se encontraba. Un dolor así no se lo deseaba ni a su peor enemigo.

Con eso en mente, decidió ir a la cocina para preparar algo delicioso y de paso, dejar de pensar en ese tipo de cosas.

Por otro lado, Jimin apenas se estaba obligando a enfrentar su realidad. Hace unos minutos se armó de valentía para levantarse de su cama y tomar su móvil para revisar cualquier tipo de notificación que prefirió ignorar deliberadamente por un largo tiempo, más específicamente desde la noche de la fiesta.

Seguía nervioso por lo que hizo hace unas cuantas horas, pero quería convencerse a sí mismo de que entretenerse con su teléfono inteligente lo ayudaría en algo.

Porque después de la conversación con Jungkook, lo primero que se le ocurrió fue esconderse en su habitación, mientras rogaba que la situación no se saliera de control. O más bien, que sus acciones no derivaran en consecuencias que lo perjudicaran con Taehyung.

Se pasó la mano por su cabello alborotado en lo que esperaba que el dispositivo se encendiera por completo. Lo primero que llamó la atención cuando la pantalla le mostró el fondo de pantalla con un diseño tierno de pollitos fueron los mensajes de Yoongi.

Cierto, su amigo debía estar preocupado por él al no verle conectado por tanto tiempo.

Lo mejor era responderle lo más rápido posible.

Hoy a las 7:00 PM

Yo:

Hola, Yoongie.

Perdón por aparecer tan tarde.

No estaba en mi mejor momento para responder.

Yoon:

Hola, Minnie.

No te preocupes por eso, pero no te voy a negar que me tenías angustiado.

Me hacía falta conversar contigo.

Yo:

A mí igual.

Yoon:

Ya veo, pero, ¿estás bien?

Me dices que no te encuentras en tu mejor momento y me siento mal por eso, ¿puedo ayudarte en algo?

Yo:

No, lo hecho, hecho está y así se quedará.

Tomé una decisión muy radical de la que espero no arrepentirme 😔

Porque ahora que lo hice no puedo evitar atormentarme.

No sé si me estoy dando a entender, pero estoy hecho un lío.

Yoon:

Lo haces, Minnie. Lo entiendo.

Supongo que fue algo en un principio te pareció lo mejor, pero ahora te hace dudar, ¿no?

Sin embargo, ya elegiste ese camino y ahora tendrás que hacerte responsable de lo que pueda traer consigo.

Pero no te sientas mal antes de tiempo, supongo que si lo hiciste es por una razón de peso.

Yo:

¡Por supuesto! Lo hago por un bien mayor.

Yoon:

¿Ya ves?

Quédate con eso por ahora. Si llega el momento de arrepentimiento, tendrás que remediarlo para redimirte.

Yo:

Gracias por leerme, Yoon.

Es increíble como me puedes hacer sentir mejor con tus palabras tan sabias y comprensivas en cada conversación compartida 💖

Yoon:

No me des tanto crédito que si no luego me siento especial y se me subiré el ego.

Yo:

Lo eres, para mí lo eres. No lo dudes nunca.

Yoon:

Igual, Minnie. Quiero que sepas que siempre estaré para ti.

No te sientas afligido, porque no quiero ver ninguna mueca triste en tu lindo rostro, ¿sí?

Porque no me cabe dudad de que mereces mantener tu sonrisa y tus ojos convertidos en unas tiernas medias lunas.

Yo:

Ah, me voy a sonrojas de la vergüenza, Min Yoongi.

Gracias por esto, ya me estoy sintiendo mejor 😊

Yoon:

Entonces he cumplido con mi cometido, bonito 😎

Tus mejillitas todas coloraditas son todo lo que está bien en este mundo.

Yo:

Claro que sí, gatito 😸

Gracias una vez más por todo, te dejo porque tengo que ir a hacer unas cosas.

Prometo no desaparecerme más.

Yoon:

Bien, te quiero mucho, Jiminnie.

Adiós.

Yo:

Yo también te quiero mucho, Yoon.

Hasta pronto.

Jimin ni siquiera se imaginaba que ese lado tan cursi de Yoongi solo hacía acto de presencia por él. Porque como el susodicho se repetía a diario, el chico de labios pomposos sacaba sus mejores cualidades a luz. Además, nadie podría juzgarlo al estar tan enamorado, pues hasta el apodo que le regaló, removió tantas cosas en él que serían indescriptibles de describir.

Porque si Jimin lo consideraba un gatito, Yoongi lo consideraría como un pollito.

Pero dejando ese tema de lado, el joven estudiante de psicología deseaba que cuál fuera el problema que atormentaba a Park, no fuera tan grave como para afectarlo en demasía. Aunque no negaría su felicidad al ser tratado como alguien de tanta confianza como para enterarse de ese tipo de cosas. Y ahora que se le presentó la oportunidad de recalcarle que sería su apoyo incondicional, se sentía más en paz consigo mismo.

A pesar de que Jimin eso lo sabía de sobra, porque sin querer Yoongi se volvió un confidente para él y agradecía tenerlo a su lado. Esperando que siguiera así por mucho tiempo en el futuro, pues era tan especial para él y no quería perderlo por nada del mundo.

Dos horas más tarde, la tensión era palpable en la vivienda de Jungkook. El grupo de amigos del profesor lo habían dejado en su habitación para que tomara una pequeña siesta, mientras ellos organizaban sus cosas y compraban los boletos para su viaje a Busan en la sala.

Tan concentrados estaban en eso, que ni siquiera sintieron cuando el castaño cruzó por el pasillo para ir en búsqueda de una botella de vodka que guardaba en la alacena de su cocina.

Por ese motivo, se sintieron aún peor cuando lo descubrieron bebiéndola.

Lo único bueno era que todos los detalles de su mudanza fueron resueltos durante ese tiempo, a excepción de la conversación con Byulyi para que iniciara los trámites pertinentes de la salida de Jeon de la universidad. O eso es lo que Namjoon creía, por lo que quería encargarse de forma personal.

Una pena que las cosas no resultaran como uno quisiera.

—Oh, parece que ya lo sabe—susurró al leer el mensaje que apareció en menos de cinco segundos cuando estuvo dispuesto a hablarle a la prima de su pareja.

Hoy a las 7:15 PM

Byul:

Mierda, Joon.

¿Qué carajos fue lo que sucedió?

Yo:

Hola Byulyi, supongo que Jinnie ya te lo contó.

Byul:

Sí, y me quedé de una pieza cuando me dijo que lo ayudé con los documentos para la salida de Kook.

No me dio detalles, pero me insinuó que de esa manera Jungkook no arriesgaría todo por lo que ha estado luchando, así que deduzco que tiene que ver con Taehyung.

Yo:

Engañó a Jungkook, porque su novio llegó a su casa cuando Jinnie estaba ahí y le montó una escena, en la que lo amenazó con decirle al director que se está aprovechando de su alumno.

Byul:

Demonios, pero, ¿cómo es eso posible?

Taehyung no tiene pareja.

Yo:

Al parecer se lo tenía muy guardadito.

Kook está tan triste, ya sabes lo mal que lo ha pasado con estos temas.

Byul:

No sé, hay algo que no me cuadra.

Aunque supongo que ya no hay vuelta atrás.

Lo extrañaré un montón.

Pero ya conversaré con él y si puedo, lo iré a despedir.

Yo:

Sería bueno. Estamos en las mismas, pero ya ves cómo es Jinnie.

Lo terminó convenciendo, pero espero que el mismo Jungkook crea que es lo mejor y no se arrepienta por ceder a esta decisión tan apresurada sin antes conversar con Taehyung.

Yo no lo conozco, así que tampoco pondría mis manos en el fuego por él.

Byul:

Me imagino. Yo lo conozco y no creo que será para el caso, pero tiene fama de ser un rompecorazones. Por eso, no sé que pensar.

Ojalá que esto no lo dañe más de lo que parece que ya lo está haciendo.

Igual yo lo ayudaré con todo lo que necesite para su traslado.

Yo:

Muchas gracias. Lo aprecio bastante.

Namjoon soltó un suspiro después de su último mensaje, guardando su móvil en su bolsillo para salir a la calle a tomar un poco de aire, porque esto lo estaba poniendo de los nervios. Al mismo tiempo, Seokjin acariciaba los cabellos de Jungkook, quien por fin cayó dormido gracias al alcohol.

Hoseok estuvo acompañándole por unos minutos, pero este le comentó que saldría de la habitación en búsqueda de Namjoon. Ya que quería comentarle acerca del estado actual de Jungkook.

El biólogo no le dio detalles específicos a su prima, por más que esta le preguntó al respecto, con la justificación de que mientras menos gente supiera de la desgracia de su dongsaeng, sería mejor. A fin de cuentas, uno de sus mayores objetivos era evitar una humillación hacia su persona a toda costa.

Por ese motivo, también optó por esconderle el móvil a Jungkook. Porque no quería que cometiera alguna estupidez en su estado tan vulnerable si cualquiera de ellos llegaba a despistarse y descuidarlo.

Tampoco le reclamó que bebiera, porque eso no serviría de nada. Además, a la mañana siguiente tendría que empezar a adaptarse a la idea de su nueva vida en Busan.

Hoseok se devolvía a su hogar en taxi luego de acompañar a despedir a Jungkook. No era ni una hora desde el último abrazo que le dio y ya lo extrañaba. Siendo honesto, Jung creyó que su amigo estaría sin ganas de hacer nada, pero si lo pensaba bien, lo más probable es que su comportamiento fuera pura actuación.

Una máscara que ocultaba su tristeza.

El día de ayer el vodka lo noqueó, pero ni siquiera se levantó con resaca.

Ah, debió encariñarse bastante con el tal Taehyung como para ponerse en ese estado.

Le daba mucha pena.

Sus hyungs estuvieron en vela organizando su mudanza, por lo que Jeon no tendría que preocuparse por nada. Porque cuando estuviera en su nuevo apartamento, gran parte de sus cosas también estarían ahí.

Pues su hogar en Seúl ahora yacía vacío como si nunca nadie lo hubiera habitado.

Todo había pasado tan rápido que no parecía real, prácticamente fue de la noche a la mañana. Sin embargo, su deseo más genuino era que este cambio le sentara bien a Jungkook, porque era una de las personas más hermosas que tuvo el gusto de conocer y merecía ser feliz, a pesar de lo mucho que les haría falta.

Pero cuando amas, también dejas ir.

Y si algún día regresa, es porque siempre estuvo destinado a estar a tu lado.

📚

La emoción brotaba por cada uno de los poros de Taehyung. Hoy era un día especial, porque compartir un tiempo de calidad con el castaño al que quería significaba tanto para él. Por eso, no escatimó esfuerzos para elegir un conjunto de ropa bonito para la ocasión.

Cuando estuvo contento con el resultado, subió una foto para su Twitter y en menos de un minuto recibió halagos por parte de sus queridos amigos. Aunque lo que más le llamó la atención al pelinegro fue no recibir un comentario de Jimin.

Le parecía raro, pero tal vez estaba ocupado o su móvil no tenía batería.

No importaba lo que fuera, luego podría descubrirlo.

En ese preciso instante lo único que le interesaba era ir en búsqueda de su profesor.

Sus amigos le dieron buenos deseos al suponer que su apariencia se debía a algo bueno, y eso fue suficiente para cargar de valentía a Kim, quien se sentía capaz de ir con todo en esa improvisada cita.

Porque si Jungkook no daba el siguiente paso, él lo haría con gusto. Ya estaba listo para enfrentar lo que se viniera gracias a la decisión que tomaría en esa bella tarde.

Dos horas pasaron para que la sonrisa desapareciera del rostro de Taehyung y la confusión lo embargara con intensidad. No entendía absolutamente nada.

Jungkook lo citó en su lugar de siempre, en ese parque tan especial para ellos dos, pero nunca apareció, a pesar de que le dijo que quería reunirse con él de forma urgente.

La intriga y el estado de shock iban de la mano en esta situación.

Sin embargo, quería confiar y no sacar conclusiones apresuradas a pesar del dolor que sufrió su corazón por su ausencia.

Sacó su móvil para enviarle un mensaje, esperando una respuesta que mencionara algún improvisto por el que tuvo que dejarlo plantado. Sin embargo, la preocupación lo invadió cuando comprobó que el número no estaba disponible, ni tampoco le llegaban los mensajes.

Ahora si no entendía nada.

Pero lo que terminó de volver su mente un caos fueron las notificaciones constantes en el chat grupal de sus compañeros de universidad.

¿Qué pasaba? ¿Por qué tantos mensajes?

Esto no le daba buena espina.

Taehyung se arrepentiría tanto de leer lo que escribían ahí.

Los mejores de informática 🧑‍💻👩‍💻

Hoy a las 5:45 PM

Miyeon:

¡Les tengo que contar tremendo chisme del que me acabo de enterar!

No sé si la mayoría me vaya a leer, porque supongo que gran parte de ustedes silenciaron el grupo porque ya acabamos el semestre y no querrán saber de la universidad hasta nuevo aviso, pero aquí les va a los que sigan al pendiente de este chat.

Todo inició cuando me fui a la universidad a ver unos papeles donde el director de la carrera, llegué a su oficina, y lo encontré con la profesora Moon, conversando acerca de la renuncia del maestro Jeon.

¡Se nos va uno de nuestros mejores docentes!

Soy llanto.

Soyeon:

¿Qué?

¿Cómo puede ser eso?

Este semestre fue el mejor que tuvimos gracias a la materia del profe Jeon.

Debe ser una broma, me niego.

Hyungsik:

Literal. El profesor Jeon era muy bueno explicando, sus clases eran geniales.

Miyeon:

Para que vean, yo todavía no salgo de la impresión.

Nunca me lo esperé.

Minho:

¿Por qué?

Yuqi:

Tengo la misma duda de Minho, pero supongo le preguntaste a la profe.

Miyeon:

Lo único que me dijo fue que le salió una mejor oferta de trabajo que no podía desaprovechar en otra ciudad, que estaba muy agradecido con todos, porque confiaron en él a pesar de ser muy joven y que nos extrañaría mucho por haber sido su primer grupo de estudiantes 😥

Yo:

¿Es en serio?

Miyeon:

Oh, Tae. Sí, lo es. Yo supuse que tenía conocimiento de esto porque eras cercano a él.

Yo:

Para nada.

Estoy tan sorprendido como ustedes.

Es una noticia repentina.

Miyeon:

Sí, es algo muy impactante.

Fue bueno mientras duró, ojalá nuestro próximo profesor sea igual o mejor que él.

Yo:

¿Y sabes cuándo se fue?

Miyeon:

Al parecer hoy mismo.

Pero como les digo, la profe no me dio la información con lujo de detalles.

Al principio parecía no querer decir nada de nada, pero supongo que sabía que tarde o temprano le preguntaríamos al respecto. Así que supongo que mejor me lo contó desde ahora porque sabía que yo se los iba a comunicar. Además, eso ayudaba a que no nos lleváramos una gran sorpresa mayor el próximo semestre.

Hyungsik:

Debe ser.

Yuqi:

Wow, se lo extrañará un montón 😓

Minho:

Ojalá lo hubiéramos invitado más tragos el día del baile, se lo merecía por ser tan linda persona con nosotros.

Me gustaba mucho su método de enseñanza, se nos fue un grande 😭

Miyeon:

Sí, pero no se puede hacer nada ahora.

Espero lo volvamos a ver en el futuro.

Hyungsik:

Cuando los demás lean esto se quedarán de una pieza.

Yuqi:

Si te creo, Sik.

Donde sea que el profe vaya, lo único que pido es que lo valoren por el magnífico docente que es.

Sin duda, un ejemplo a seguir.

Minho:

No queda más que anhelar eso.

Miyeon:

Exacto.

Taehyung cerró de forma abrupta el chat de sus compañeros. No quería leer más, con eso había sido más que suficiente. Pero necesitaba desahogarse con urgencia o colapsaría a tal punto de querer romper algo.

Y no quería que su pobre móvil sufriera las consecuencias. Por ese motivo, Kim hablaría con su mejor amiga sobre esto, pues era la única persona que en estos momentos podría traer un poco de calma a su atormentado ser.

Trató de relajarse para no lucir angustiado frente a su familia, mientras tomaba un taxi que lo llevara devuelta a su casa lo más pronto posible.

Gracias a sus buenos dotes actorales, nadie notó lo afectado que se encontraba, pero cuando sacó su teléfono de su bolsillo al estar en la privacidad de su habitación, sus manos temblaban como si estuviera a punto de sufrir una crisis de ansiedad.

Hoy a las 6:50 PM

Yo:

Wheein.

Mi bestie de la suerte:

Hey, galán. ¿Acaso te ibas a ver con tu querido profe que por eso estabas tan arreglado?

Lo digo por tus tweets que no pude responder al instante, pero igual pensaba comentártelo por aquí para no levantar sospechas.

De lo último que me contaste, me dijiste que todo iba de maravilla con él y eso me alegra mucho.

Yo:

Todo esto es una mierda.

Whee, me siento del asco.

Quiero llorar.

Estoy tratando de no hacerlo porque mi mamá está cerca de mi habitación, por lo que podría entrar al escucharme y lo menos que quiero es que me pregunte.

Mi bestie de la suerte:

¿Qué sucedió, Taehyungie?

En tus tweets parecías tan feliz 🙁

Yo:

Me dejó plantado en nuestra cita y me voy enterando por una de mis compañeras que renunció a su puesto. ¿Cómo crees que me siento?

Por un instante pensé que le surgió algo importante y por eso no se presentó, pero se fue y sin siquiera despedirse.

Quedé como un idiota.

Me ilusioné y al parecer fui su distracción por mientras ganaba experiencia en la universidad.

Hoy quise arriesgarme a pedirle que fuéramos novios, porque el día del baile por el fin de semestres las cosas entre nosotros subieron otro nivel y no quería que pensara que solo lo quería para eso.

Tú sabes la fama que me cargo, así que no quería crearle alguna inseguridad por no demostrarle que lo que más quería para los dos es que fuéramos una relación seria y exclusiva.

Nunca antes me sentía así con nadie. Y el hecho de que él mismo (con mucha insistencia), me dijera que quería verme lo antes posible, me dio a entender una vez más que yo no era el único que se sentía de la misma manera. Pero tal parece que construí castillos en el aire, porque soy un iluso.

Ya sabía yo que no soy bueno para tener una relación con nadie, porque por mi propia personalidad parece que nunca nadie me tomará en serio.

Y no lo juzgo por eso, yo soy el culpable.

Nadie más que yo.

Mi bestie de la suerte:

No, bebé. No digas esas cosas tan feas.

¡Eres un amor de persona!

Y si Jungkook fue un estúpido que se dejó influenciar por lo que decían de ti, él se lo pierde por no valorarte.

Yo:

Ay, princesa. Estoy tan mal.

Justo ahora no me puedo creer nada. Me engañaron, hasta parece que me bloqueo, porque no le llegaron ni los mensajes ni las llamadas que le hice cuando estaba en el taxi que me traía a mi casa.

No me dio una explicación.

No aguanto este dolor en el pecho.

Mi bestie de la suerte:

Ay, Tae, no sé ni qué decirte para hacerte sentir un poco mejor.

Yo:

Ya me despedí de mi madre desde dentro de mi habitación, porque mi padre no está en casa, así que podré llorar en paz desde ahora.

Mi bestie de la suerte:

Hazlo, lindo.

Mereces sacar toda esa tristeza que llevas dentro.

Yo:

Tranquila, solo quería contártelo. Que me leas y que me dediques lindas palabras ya es suficiente para calmarme.

Mañana espero estar tranquilo.

Mi bestie de la suerte:

Me imagino, trata de descansar también.

Yo:

Lo intentaré, te quiero.

Mi bestie de la suerte:

Yo te quiero más.

Aquí estoy por si me necesitas para algo más, Tae💜

Yo:

Lo sé, linda. Gracias 💜

Luego de esa conversación, el joven se envolvió entre las sábanas y lloró hasta quedarse dormido. Lo que se le venía sería duro de enfrentar, pero trataría de hacerlo a como diera lugar por su propio bien.

Tres días habían pasado y Taehyung pensaba con ingenuidad que mediante sus lágrimas soltó toda la tristeza que lo agobió desde la partida de Jungkook. No quería estancarse en esta situación, por eso, se esforzaría en plantarle buena cara a las malas circunstancias.

Por otra parte, Jimin no tenía cara para hablar con su amigo por la vergüenza que le daba saber que era el causante de la ruptura con Jeon. Sin embargo, quería convencerse de que, con lo poco que vio en la salida que tuvieron el día anterior con sus amigos, a Kim no le afectó tanto como pensó que lo haría.

Lo que provocó que siguiera encerrado en la idea de que lo hizo por su bienestar.

Sin saber lo equivocado que estaba por sus acciones egoístas.

Kim se encontraba viendo un vídeo en YouTube cuando un mensaje desconocido le llegó. Extrañado, le puso pause al documental que tuvo su mente ocupada por un rato con la intención de revisar de qué se trataba.

Hoy a las 7:30 PM

Número sin registrar:

Hola, Taehyung, soy Park Seojoon.

Tengo algo que entregarte.

¿Puedes ir mañana a la universidad?

Lamento incomodarte durante tus vacaciones.

Yo:

Hola, Seojoon-ssi, no hay problema.

Me toma por sorpresa, pero ahí estaré.

Taehyung se dio un momento para registrar el número del amable secretario en su teléfono, a pesar de no salir de su impresión inicial por el mensaje tan raro que le había enviado.

Seojoon-ssi:

Gracias, te espero mañana a las 9:00 AM en mi oficina.

Yo:

Claro, ahí estaré.

Tenga buenas noches.

Seojoon-ssi:

Igualmente, hasta mañana.

Yo:

Adiós.

Taehyung soltó un largo suspiro, dejándose caer en su cama para divagar en sus pensamientos.

—Genial, ahora solo falta que me digan que hubo un error y en realidad reprobé este semestre para que se me termine de arreglar la vida.

Pero por más que pensara en varias posibilidades, solo al día siguiente se enteraría lo que sucedería.

Y así fue, llegó a la hora pactada a la oficina del secretario, quien lo recibió con un semblante triste. No quiso indagar sobre la razón de su expresión, pero era capaz de imaginar la razón. A fin de cuentas, era demasiado obvio.

—¿Sucede algo malo con mis calificaciones? —se atrevió a preguntar.

—No, para nada. Tengo que darte algo.

Acto seguido, del cajón de su escritorio extrajo un sobre con diseño de flores, el cual fue extendido casi de inmediato al universitario.

—Esto es...

Se mordió el labio inferior, presintiendo lo que sucedería a continuación cuando esa carta fuera abierta por él. El nudo en su garganta delataba lo inevitable, pues quería romper a llorar una vez más.

—Lo mejor es que lo leas solo, Tae.

—Entonces me voy.

—Gracias por venir.

Taehyung asintió, marchándose hacia el campus desierto de su institución. Se sentó en una de las bancas del recinto y tomando aire por la boca, se dispuso a leer el contenido de lo que sería el último mensaje que leería por parte de Jungkook.

Querido Taehyung:

Estoy muy nervioso al escribirte esta carta, es más que obvio que ya conoces la razón por la que no pude ir aquel día a tu encuentro.

Me ofrecieron un trabajo y es algo con lo que siempre soñé, por ese motivo tomé la decisión de irme a Seúl. Quiero agradecerte por todos los buenos momentos que compartimos juntos. Te volviste alguien muy especial para mí y espero que, a pesar de todo, esto fuera de la misma forma para ti.

Tu personalidad es muy única y cautivadora, no lo olvides nunca. Sigue adelante, tienes un futuro espectacular, pues gozas de varias cualidades que te harán un gran profesional. No las desaproveches, ¿sí?

Atesoraré las grandes experiencias que tuve en la universidad de Seúl, yo era un completo novato, pero estoy seguro de que lo hice bien, o al menos eso era lo que siempre me decías cuando teníamos charlas profundas.

Extrañaré mucho tu voz, que parece hecha de terciopelo por lo suave que es.

Y me quedaré con las ganas de que me hables al oído, animándome después de un día agotador.

De la misma forma, en la que no podré recibirte con una deliciosa comida para distraerte de cualquier preocupación o para felicitarle por algún logro, así sea el más pequeño.

Los extrañaré a todos en general, porque ellos también formaron parte de una aventura imposible de olvidar.

Espero me guardes como un buen recuerdo y que algún día podamos volvernos a ver, porque justo ahora no es nuestro tiempo. Pero por más feo que sea el panorama, ruego que encuentres la felicidad, aunque estemos separados.

Con mucho cariño, Jeon Jungkook.

—Ya veo, no era nuestro tiempo—cerró la carta con el corazón en la mano, mientras las lágrimas empapaban sus mejillas—. Entonces, yo también desearé que encuentres la felicidad a pesar de no ser aquí, a mi lado, justo como hubiera querido.

Acercó el sobre de papel a su pecho, acariciándolo en el proceso. Porque por más que existieran muchas cosas en la carta que lo dejaran intranquilo, no podía negar que notaba la sinceridad que el mayor le puso al escribirla.

El tiempo sería el único que les diría cual sería el resultado definitivo de su fugaz historia.

—Porque nunca te olvidaré, mi primer verdadero amor.

Continuará...

Gracias por leer, en el próximo capítulo volvemos a la actualidad, lo que eso significa que también entramos a la recta final, corazones. Espero leerlos en comentarios.