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24. Más cartas y Capturado

Los cambios en la escuela de magia y hechicería eran sumamente notorios, y es que desde la salida de Albus Dumbledore, se sabía que habría cambios en aquel castillo, pero los alumnos de Hogwarts no esperaban que fueran tan drasticos.

El ministro de magia, Cornelius Fudge, asignó a Dolores Umbridge como la nueva directora de Hogwarts. Eso era algo que tanto alumnos y profesores lamentaban. Umbridge era un gran fastidio en el castillo, había sacado más decretos de enseñanza con muchas reglas absurdas.

Sobre el paradero de Dumbledore, nadie sabía donde estaba o donde ubicarlo. No había absolutamente ninguna noticia sobre el antiguo director.

Todos los alumnos odiaban a Umbridge como directora, a execpción de los Slytherin, ya que de cierta manera la nueva directora solía beneficiarlos cada vez que podía. Los que estaban más satisfechos con el puesto de Umbridge como directora, eran la brígada inquisitorial, debido a que eran los alumnos con mayores beneficios, con trato especial y con mayor poder sobre el resto de los alumnos, incluso por encima de los prefectos y premios anuales.

— Hoy haremos la poción crecepelo —dijo Snape pasando por los escritorios donde se encontraban sus alumnos en el aula de pociones— La poción crecepelo provoca al que la bebe que su pelo se ponga de punta —explicó deteniendose en el centro del aula— las indicaciones de como preparar la poción viene en el capítulo siete del libro. Los ingredientes que necesitaran son la cola de rata, púas de puercoespín y aguíjones de billywig, podrán encontrar los ingredientes en el armario —realizó un movimiento de varita quitandole el seguro al armario para que los alumnos pudieran sacar los ingredientes que necesitarían para realizar la poción— pueden comenzar.

Los estudiantes se pusieron de pie para dirigirse a aquel armario de ingredientes. Skyler logró llegar primero que todos, por lo que no batalló para tomar los ingredientes y devolverse rápidamente a su mesa de trabajo. La pelinegra prendió el caldero y lo puso a fuego lento, después le dió una leída a las indicaciones del libro, y comenzó a añadir los ingredientes como el texto lo marcaba, mezclo lentamente el contenido en el caldero y lo dejó reposar unos minutos hasta que la poción adquirió un color verde, que era el color que debía aparecer cuando la poción estuviera finalizada y bien hecha.

— Profesor Snape —lo llamó— He terminado mi poción.

Snape caminó hasta su lugar y analizó la poción, le tomó un par de segundos darse cuenta que la poción estaba muy bien hecha.

— Si pudiera tomar un sorbo para verificar que funciona tan bien como se ve, por favor —pidió Snape.

Skyler tomó el cucharón y tomó un sorbo. Su cabello negro ahora estaba de puntas en dirección al techo.

— Felicitaciones señorita Beckett, está poción esta perfecta —la felicitó— como siempre usted hace un excelente trabajo,  la mejor de mi clase junto al señor Malfoy.

— Gracias, Profesor —agradeció orgullosa, a Skyler le encantaba que elogiaran su inteligencia y su capacidad para hacer las cosas. La pelinegra chasqueó los dedos y su cabello volvió a la normalidad.

— De usted no puedo decir lo mismo, Potter —caminó hasta llegar a él. Observó su caldero y notó que el color de la poción era roja y burbujeaba, Snape hizo una mueca de disgusto— Usted es el peor alumno que he tenido en todos mis años dando clases. Cinco puntos menos por tan pécimo trabajo. No me quiero ni imaginar que podría pasarle si ingiere tan solo un sorbo de esa poción, si es que se le puede llamar así.

Snape pasó por el lugar de cada alumno para checar sus pociones, eran contados a los que les decía bien hecho, a la gran mayoría les decía cosas como: "asqueroso" "que desastre" "una basura" "un troll lo haría mejor" "decepcionante". Al acabar la hora de clase, lo alumnos que fueron regañados por el profesor de pociones suspiraron de alivio y guardaron sus cosas con prisa para salir lo más rápido posible de ahí. Aunque su próxima clase no sería mejor, ya que les tocaba Defensa Contra las Artes Oscuras con Dolores Umbridge.

Se dirigían al Gran Comedor, pues cuando Umbridge tomó el puesto de directora, decidió que sus clases se llevarían a cabo en el gran comedor. El quinteto esmeralda tomó asiento en su respectivo pupitre. Umbridge estaba sentada en una gran silla hasta el frente y justo al centro del gran comedor, observaba a sus alumnos tomar sus asientos y sacar sus libros, pergaminos y plumas, listos para comenzar la clase.

Umbridge les había dado la indicación de hacer un ensayo de tres pergaminos completos, por lo que todos se apuraron a abrir el libro en el capítulo indicado, leerlo y sacar la información para comenzar a redactar en sus pergaminos.





















●●●


















Se encontraban en el gran comedor, era hora de la cena, y a decir verdad, el quinteto esmeralda no podía esperar para ingerir algún alimento. Había sido un día largo y agotador, tenían demasiada hambre y sueño. Una vez que Umbridge termino de dar su discurso aburrido, todos se dispusieron a servirse los alimentos que iban a cenar. La cena pasó entre charlas y tranquilidad, hasta que observaron como las lechuzas ingresaron al comedor.

— No recordaba que hoy era día de correo —Dijo Theo viendo como la lechuza de su familia volaba directo a él.

— Yo tampoco me acordaba —comentó Skyler recibiendo las cartas que su lechuza Nyx le había dejado caer en sus manos. Eran tres cartas, miro las dedicatorias y una era de su familia, una de A.G.G y la última no tenía dedicatoria.  Decidió que las abriría cuando estuviera en su habitación, por lo que se las guardo en la túnica del uniforme.

— Sky, mi madre mando nuestra ración de dulces semanales —le dijo Draco entregandole una caja de dulces.

— Como amo a mi suegrita hermosa —soltó Skyler maravillada al ver los dulces.

La cena había acabado y los prefectos dirigían a los alumnos a sus respectivas casas. Cuando el quinteto esmeralda llegó a la sala común, se despidieron y subieron a sus habitaciones, estaban muy cansados, ya que por los TIMOS, los profesores les exigían más estudios y practicas.

Skyler entró a su habitación y cerro la puerta una vez que Shadow también estaba dentro. La pelinegra se acostó sobre su cama e inmediatamente su serpiente se acomodó en un lado de la cama. Skyler tomó la carta que era de su familia y la abrió.

"Querida Skyler:

Esperamos que te encuentres bien cariño, te extrañamos mucho.

Skyler, pronto terminará el curso, y la verdad nos gustaría verte. Sabemos que la última vez que nos vimos, las cosas no terminaron de la mejor forma. Lamentamos profundamente cualquier molestia que pudimos causarte.

Todo esto ha sido muy díficil para todos, adaptarnos a esta situación. Sabemos que aún es más dificil para ti, ya que practicamente aparecimos en tu vida de repente siendo unos perfectos desconocidos a pesar de que somos familia. Queremos que sepas que pase lo que pase ante cualquier situación, nosotros siempre vamos a estar para ti. Nunca dudes en pedir nuestro apoyo cuando lo necesites.

Brillito también te extraña muchisímo, ustedes no han tenido ese gran lazo de hermanas debido a la falta de tiempo, pero creemos que si le das una oportunidad, te darías cuenta que es una chica muy linda y noble que estaría dispuesta a dar todo por ti. Ella también sabría lo increíble que eres, si se conocieran mejor, después de todo son hermanas.

Esperamos que al final todo este bien y podamos ser esa familia que tanto necesitamos ser. Nos perdimos catorce años de tu vida, no queremos perdernos más. Ojala que vengas a casa en vacaciones.

Te amamos con todo el corazón,

Mamá y Papá"

Skyler término de leer la carta de sus padres y rodó los ojos, le aburría y le molestaba a la vez que su familia nunca se rindierá con ella. ¿Por qué intentaban ganar su cariño? ¿Por qué la querían en su familia? Ella les había hecho daño, ella los había rechazado, ¿Por qué insistían tanto? Era algo que la pelinegra no se podía explicar, no entendía porque  ellos se aferraban a ella. Después de todo ella había sido una mala hija y una mala hermana, aunque la verdad a Skyler no le importaba en lo más mínimo jugar a la familia con ellos, pero aun así le costaba entender esa situación.

Dejó la carta sobre la cama y tomó la de A.G.G.

" Si eres lo suficientemente lista como creo que eres, entonces ya habrás decifrado lo de los pecados capitales.

En caso de que me haya equivocado y no seas lo suficientemente lista, te daré la respuesta, tus amigos Blaise, Astoria y Theo y tu novio Draco son los pecados capitales.

Te preguntarás, ¿Cómo sabe que ellos son mis amigos y mi novio?, pues bueno, yo todo lo sé, de todo me entero y me informo. No me gusta estar desinformada, y menos si se trata de algo interesante para mí.

Y a decir verdad, tú me resultas interesante, más bien, tu oscuridad es la que me resulta interesante, y por eso voy a ayudarte con ella. Voy a ayudarte a resolver los misterios que guarda tu oscuridad. Pues que tu oscuridad se complete es de mi interes, ya que me veré como persona beneficiada si eso resulta como exito.

También se que te ocultan secretos, muchas personas lo hacen. Secretos que yo sé y que te revelaré cuando yo crea que es oportuno.

Por cierto, tus amigos y tu novio son fundamentales en tu destino, a falta de al menos uno de ellos tu oscuridad se verá afectada. No permitas que alguien los dañe o que ellos se alejen, debes tenerlos de tu lado.

A.G.G"

— ¿Secretos? —susurró Skyler confundida— ¿Quién o quienés  me ocultan secretos? ¿De que secretos habla? —se preguntó a si misma, moría por saber que era lo que le ocultaban y también moría por saber quien era A.G.G y que era lo que tenía que ver con ella y su oscuridad.

La slytherin tomó la tercera carta, la que no tenía dedicatoria y la abrió.

" Ya esta todo listo para la misión "

Era lo único que decía en la carta, ya sabía de quién era y sobre a que se refería. Siempre le hacían llegar la información y las novedades aunque ella estuviera todos los días en ese castillo. Despúes de todo ella era la mejor mortífaga que había en las filas y la mano derecha de Lord Voldemort.





















●●●






























Había llegado el día que los alumnos de quinto año tanto temían, había llegado el día de la aplicación de uno de los T.I.M.O, estaban presentando encantamientos. Los alumnos se escontraban en su respectivos pupitres que estaban dispersos por el gran comedor, todos estaban concentrados en contestar sus examenes. La gran mayoría estaban nerviosos, a pesar de que la mayoría había estudiado día y noche y se habían desvelado estudiando, temían que no fuera suficiente y no se supieran todo o que se les olvidará lo que habían estudiando. Claro que había sus excepciones, como por ejemplo el quinteto esmeralda y Hermione Granger. Pues del quinteto esmeralda, Skyler y Theodore eran los que mayor inteligencia tenían, por lo cual los T.I.M.O no eran una complicación para ellos. Draco y Tori tenían una gran capacidad para memorizar lo que estudiaban aparte de que razonaban y comprendían todo. Blaise era un caso particular, pues él no era muy dedicado al estudió, pero lo que el moreno tenía a su beneficio, era que él con solo leer una o dos veces el tema lo entendía a la perfeccion. Por otro lado estaba Hermione Granger, quien siempre había resultado a ser una cerebrito y una persona apasionada por los estudios, por lo cual no se le dificultaban ese tipo de pruebas.

Todos estaban en silencio, soló se escuchaban las plumas al momento de escribir en los pergaminos. Los alumos eran supervisados por la Directora. Umbridge observaba a sus alumnos y disfrutaba de sobre manera el profundo silencio que habitaba en el lugar.

El silenció se vió interrumpido por extraños ruidos que provenían fuera del lugar. Todos giraron a ver hacia la puerta, tratando de entender que era lo que se escuchaba. Umbridge con una ceja alzada y disgustada por el ruido, comenzó a caminar hacia la puerta atravesando todo el Salón. Al llegar a las puertas, las abrió y miró a los lados buscando de donde provenía el ruido. De repente, una especie de bola con chispas de fuego revoloteó frente a su cara y despúes salió disparada hacia el salón explotando como fuegos artificiales. La directora confundida giró de nuevo la cabeza hacia fuera del salón buscando que o quién era el responsable de eso, dió un par de pasos hacia el frente, cuando los gemelos Weasley aparecieron sobre sus escobas pasando de ella y entrando al salón haciendo volar todos los examenes y causando que todos los demás alumnos soltaran gritos de emoción y festejo.

Los Gemelos Weasley soltarón más fuegos artificiales sobre el salón, Umbridge parecía confundida y molesta a la vez. Todos se habían levantado de sus asientos. Skyler tomó a Shadow del suelo para que nadie la fuera a pisar y se la colocó sobre los hombros. El conserje Filch entró al salón y observó lo que estaba pasando y se pusó al lado de la directora.

Uno de los gemelos soltó otro fuego articicial, pero este era especial, ya que formaba un gran dragón y lo mejor es que se dirigía hacia Umbridge acechandola. Umbridge soltó un gritó de miedo y espantada salió corriendo hacia la salida con el dragón siguiendola por detrás. En un momento el dragón la alcanzó atravesandola y dispersando los fuegos artificiales a los alrededores, causando que impactaran en todos los decretos institucionales provocando que todos se desplomaran sobre el suelo rompiendose.

Los gemelos Weasley salieron volando sobre sus escobas hacia fuera del castillo con todos los alumnos de quinto año gritando euforicos tras ellos. Los pelirrojos seguían lanzando fuegos artificiales mientras volaban, causando que los estudiantes festejarán. Incluso el Profesor Flitwick festejó discretamente el acto de los gemelos. Pues no solo los alumnos odiaban a Umbridge, si no también los profesores.

Lanzaron otros fuegos artificiales que hicieron que se formará una gran "W" en el cielo.

Skyler observaba el acto junto a sus amigos, a decir verdad los gemelos Weasley no le importaban, pero le parecían menos irritantes que el resto de su familia. En un instante, la pelinegra se percató de que Harry Potter cayó al suelo, parecía mareado. Aunque la pelinegra no lo ponía mucho en practica, ella sabía usar la legeremancia, pues Tom le había enseñado a usarla. Se concentró un poco más y logró adentrarse en la mente de Potter. Rápidamente se dio cuenta porque se había desplomado en el suelo, pues estaba teniendo una especie de visión donde Lord Voldemort tenía capturado a Sirius Black mientras lo torturaba para sacarle información.

Skyler sonrió, el plan se estaba llevando a cabo perfectamente.

Harry, Ron, Aisha y Hermione subían por las escaleras mientras Harry les contaba apresurado sobre lo que había visto. Aisha se les había sumado cuando los gemelos montaron aquel espectaculo fuera del castillo, pues al hacer todo ese alboroto todo el castillo fue a ver que era lo que ocurría.

— ¡Lo ví! —exclamó Potter— Igual que con el señor Weasley.  Es la misma puerta que he soñado por meses, sólo que no recordaba donde la había visto —comentó apresurado subiendo las escaleras con sus amigos detrás— Sirius dijo que Voldemort buscaba algo, algo que no tuvo la última vez y esta en el departamento de misterios.

— Harry, por favor escucha —le pidió Hermione causando que se detuvieran— ¿Qué tal si Voldemort quería que vieras eso? ¿Si solo tortura a Sirius porque quiere llegar a ti?

— No hay diferencia —respondió Potter mirandola— ¿Debo dejar que muera? Hermione, es la única familia que me queda.

Hermione, Ron y Aisha giraron a verse.

— ¿Y ahora que hacemos? —preguntó Ron

— Tendremos que usar la red flu —respondió Harry terminando de subir las escaleras.

— Umbridge tiene las chimeneas vigiladas —le dijo Aisha siguiendolo junto a Ron y Hermione.

— La suya no —respondió Harry.

Se apresuraron a llegar al despacho de Umbridge.

¡alohomora! —dijó Potter apuntando con su varita a la puerta causando que se abriera.

Se adentraron en el despacho, cerrando la puerta tras ellos y acercandose a la chimenea.

— Alerten a los de la orden —les pidió Potter.

— ¿Estás loco? ¡Iremos contigo! —le dijo Ron mirandolo.

— Es muy peligroso —le respondió el niño que vivió agachandose frente a la chimenea.

— ¿Cuando lo vas a poder entender? —preguntó la castaña tambien agachandose— Estamos juntos en esto.

— ¡Eso es cierto! —exclamó Umbridge observandolos desde la puerta acusadoramente.

— ¡Ví a este ayudando a la chica Weasley! —dijo Draco entrando al despacho sujetando a Neville con fuerza y poniendolo junto a la pared. Después empezaron a llegar los miembros de la brígada inquisitorial con los miembros del ejercito de Dumbledore. Los amigos de Skyler estaban ahí sujetando a los alumnos que tenían detenidos. Pero ella se había quedado en su habitación con Shadow.

Umbridge había mandado llamar a Snape para más veritaserum, pero ya se lo había acabado. La directora intentaría sacarle la información a través de la maldición cruciatus, hasta que Hermione intervinó diciendole que Dumbledore tenía un arma y ellos sabían donde estaba, así que Umbridge los obligó a guiarla hacia esa supuesta arma.

En otra parte del castillo, Se encontraba una chica pelinegra sintiendose aburrida en su habitación junto a su serpiente. Skyler quería estar con sus amigos pero estos estaban ocupados en la brígada inquisitorial. La Slytherin no perdió más el tiempo, se levantó de su cama y observó a su serpiente que dormía plácidamente, decidió no molestarla y dejarla dormir tranquila. Salió de la habitación, bajo a la sala común para ir directo a la salida de la sala común. Skyler no quería perder el tiempo buscandolos pasillo por pasillo, por lo que decidió ir directamente al despacho de la directora, donde la pelinegra sabía que era muy probable que sus amigos se encontrarán ahí. Y no se equivocaba, ahí estaban sus amigos, pero no de la manera que ella esperaba verlos.

— ¿Pero qué les paso? —preguntó preocupada y confundida al verlos vomitar continuamente en diversas partes del despacho.

— Caímos en una trampa —respondió Tori para después volver a agacharse a vomitar en el rincón donde se encontraba.

— Teníamos resguardados aquí a Weasley y al ejercito de Dumbledore —dijo esta vez Blaise— Nos engañaron con los dulces, empezamos a vomitar y ellos escaparon.

— Van en busca de el cara rajada y la sangre sucia —habló Draco con malestar— Umbridge se los llevó para que le mostrarán donde se encontraba la supuesta arma secreta de Dumbledore.

— Iré a buscarlos —les respondió Skyler. La pelinegra chasqueó los dedos y automaticamente sus amigos pararon de vomitar y de sentirse mal— Nos vemos al rato, cuiden a Shadow, esta en mi habitación.

Skyler les dió un último vistazo y salió de ahí. Palmeo los bolsillos de su pantalón para verificar que su varita se encontraba con ella y se dió cuenta que efectivamente así era. Salió a los jardines del castillo y logró observar a Weasley y al ejercito de Dumbledore correr en dirección al puente. La pelinegra comenzó a correr hacia ellos pero asegurandose de que no la descubrieran. A lo lejos localizó que se acercaban a ellos Potter y Granger.

— ¿¡Cómo escaparon!? —logró escuchar a la nacida de muggles.

— Con pastillas de vomito —respondió la menor de los Weasley— no fue agradable.

— Les dije que tenía hambre y que quería mis dulces —contó el pelirrojo dandoles sus varitas— Me dijeron que me callará y se los comieron ellos.

— Que bien, Ron —felicitó Granger asombrada.

— Sí tu lo dices.

— Fue brillante —dijo Neville— ¿Y cómo llegaremos a Londres?

— Oigan, no es que no aprecie todo lo que ustedes han hecho —comenzó a decir Potter—, Pero ya los metí en suficientes problemas.

— El ejército de Dumbledore era para algo bueno —respondió Longbottom— ¿O sólo eran palabras?

— Tal vez no debas hacerlos tu sólo, Harry —le dijo su mejor amigo.

Harry Potter los observó a todos, decidiendo si lo correcto era llevarlos con él o no.

— ¿Cómo llegaremos a Londres? —soltó finalmente.

— Volando es obvio —dijo Luna sonriendo.

— ¿Interrumpo algo, chicos? —preguntó Skyler acercandose lentamente al grupo.

— ¿Qué haces aquí? —preguntó Granger a la defensiva.

— Esa pregunta se las debería de hacer a ustedes —respondió Skyler— Ya que ustedes deberían estar en el despacho de Umbridge ahora mismo, si no me equivoco.

— Tuvimos que escapar, Skyler. Porque...—comenzó a decir Potter mirandola.

— Harry, no le digas, no confíes en ella —le dijo Ron sujetandole el hombro.

— Tengo que advertirle, Ron —le dijo a su amigo— Despúes de todo, Sirius la aprecia.

— ¿Qué pasa con Sirius? —preguntó fingiendo interes. La verdad lo que pasará con Sirius le importaba en lo más mínimo.

— Voldemort lo tiene secuestrado en el departamento de misterios en el ministerio —contó Potter— Iremos a salvarlo.

— Va, voy con ustedes —dijo posicionandose a su lado.

— Harry, creo que no debería acompañarnos —le susurró Aisha pero aun así Skyler logró escucharla.

— Escucha cariño, iré con ustedes les guste o no —le sonrió falsamente— así que andando, que no sabemos en que condiciones lo tengan al pobre.

Todos siguieron a Luna, quién los guiaba hacia donde encontrarían lo que los transportaría a Londres.























☠️Kazel☠️

Aquí les dejo un capítulo más sobre la quinta temporada de esta saga. Espero que les guste.

Y quería comentarles que ya solo quedan como tres capítulos para terminar por fin el quinto libro, Profecías!


Estoy muy emocionada por por fin ya casi acabar el libro. La próxima temporada se viene dura y no puedo esperar a sacarla.

Gracias por leer y apoyar la saga! Los amo❤️‍🩹.










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