Capitulo 46
-¿No necesitas ayuda, Nam?
-La verdad no, esta pobre chica está mas delgada que un esparrago. Me da miedo que se caiga y se rompa.
Namjoon cargaba a Sunhe, la cual habia caido rendida al no tener la misma energía que Jimin. Era comprensible, Sunhe estaba muy débil y cansada ante cualquier acción.
-¿Quieres que la cargue?- preguntó Hoseok, extendiendo sus brazos en dirección a Nam.
-Eh tranquilo tigre. Recuerda que tiene 17- dijo burlón Jungkook.
-¡Ya! Solo trato de ayudar.
Terminó por dejar caer sus brazos rendido, logrando que todos rieramos ante su petición.
Ya era tarde, era momento de que todos nos fueramos a casa y descansaramos. Jimin seguia restregandose en mi brazo, bostezando continuamente y cerrando sus ojos de a ratos.
Tuvimos un largo, preocupante y estresante dia.
-¿Quieren ir a mi casa?- ofrecí inconcientemente, cargando a Jimin para que pudiera dormir comodamente en mis brazos.
No tenía un plan sobre qué hacer ahí, pero sinceramente mi casa era el lugar mas segura que teniamos hasta el momento.
Ahora teniamos a dos fugitivos en nuestras manos.
-Claro, seria bueno deses... ¡¿por qué sigue llamandome?!- gritó Jin furioso, mirando y moviendo su teléfono dramáticamente.
Harto de la constante ostigación por parte de su padre, decidió contestar totalmente molesto y cansado.
-¡¿Qué demonios quieres?!
-Jin. Tienes que regresar a 17305 es muy pelig-
-¡Dejanos en paz! ¡Su nombre es Sunhe, no un puto número!- colgó frustrado, antes de arrojar y estrellar su teléfono contra la pared, sobresaltando a todos los presentes.
Suspiró agotado, con sus ojos vidriosos y el rostro rojizo de la rabia.
-N-namjoon, ¿me das un abrazo?- estiró sus brazos como un niño pequeño.
-Jinnie, no tienes ni que preguntarmelo. Estas de suerte Hoseok- pasó a una dormida Sunhe al hombre de su lado, listo para estrechar a Jin entre sus brazos.
Acariciando sus cabellos y dejando que su traje se empapara, Jin lloró a todo pulmón en su pecho hasta cansarse.
El escandalo despertó a Jimin, mirando la escena triste y tensa que se habia formado derrepente.
-¿qué está pasando Yoonie?- susurro en mi oido, recargando su cabeza entre mi hombro y cuello.
-Jin y su papá pelearon pequeño. Nam está consolandolo porque se siente triste- contesté en voz baja, acariciando su cabello y mirandolo a los ojos.
Sus ojos eran preciosos, brillaban cuando miraban algo que le gustaba o cuando me miran a mi. Tiene la mirada mas sincera y pura del mundo, llena de amor y alegría.
No importa si estos se miraban cansados o llorosos, yo seguiria amando su mirada sin importa nada.
Ahora solo podía mirarlo a él y a nadie más.
Es parte de mi ahora, es mi todo y a la vez mi nada, es mi felicidad, mis razones y motivos...
Es mi Jiminie.
-Taehyung, a mi también dame un abrazo- suplicó Jungkook.
-Ven aquí mi pequeño genio.
-No soy pequeño.
-Lo eres a mis ojos.
Los 7 reimos en voz baja, tratando de no despertar a Sunhe.
El ambiente se calmó un poco, dejandonos en un silencio tranquilizante y nostalgico.
Caminamos en dirección a la salida de la pasteleria, concordando en ir a mi casa y tener una noche agradable y pacifica sin el ajetreo de la ciudad.
-¡Esperen! Olvidé mi telef... olvidenlo, recordé que lo rompí.- habló Jin, regresando a su trabajo de apagar las luces y cerrar las puertas del negocio.
-No te preocupes Jinnie, te compraré otro mañana.- ese era Namjoon, tal como un sugar daddy consintiendo a su baby con regalos caros.
-Viendo como vives me dan ganas de rebajar tu sueldo- bromeé detrás de él, haciendo que volteara asustado en mi dirección.
-¡No! Tengo que darle una vida de rey a Jin y nuestra hija.
-No es tu hija Nam- interrumpió Jungkook.- ¿Podemos irnos ya? Hace mucho frío y tengo sueño.
Todos caminamos en dirección a los autos, observando incredulos como Hoseok recostaba a Sunhe en el asiento trasero de SU auto.
Namjoon lo miró mal, listo para reprocharle sus acciones; sin embargo, el hombre detras de Hoseok no se lo permitió.
Justo al cerrar la puerta y poner el seguro de su auto, el tipo le tocó el hombro.
Hoseok reaccionó como todo recién guardado de la academia, tomandolo por el brazo y derribandolo al piso.
Reconocí al bastardo.
-¡¿Papá?!- preguntó/gritó Jin detrás de Nam.
-¡Kim seokjin! Necesitas nuevos amig-
El padre de Jin, mejor conocido como doctor Lee, dejó de hablar en el momento que me vió a mi.
Jimin estaba en mis brazos totalmente dormido, importandole poco el nuevo ruido y el escandalo frente a nosotros.
Reaccioné con rapidez, lanzando y encerrando a Jimin en el auto.
Ese tipo no iba a llevarselo.
El doctor Lee miró a todas direcciones, ubicando a Sunhe en el auto de su agresor.
-¿Tú sabias de esto Jin?... ¡¿Sabias donde estuvo 311002 todo este maldito tiempo?!- gritó el hombre aún en el suelo.
-¡Su nombre es Jimin!
Tomé al hombre por el cuello de su camisa, haciendo que se levantara nervioso y asustado.
-No te acerques a ninguno de nosotros, ¿entendiste?- amenazé en su cara.
-Esas cosas solo son experimentos, no son nada.
-¡Cállate!
El doctor Lee volvió al suelo una vez mas, gracias al puñetaso en la nariz que recibió como obsequio de mi parte.
Retomamos nuestro camino de volver a los autos, pero ese tipo seguia molestando.
Todos le ignoramos, dejando al padre de Jin solo y adolorido frente a la pasteleria.
-¡Demonios!- grité desesperado, golpeando el volante frustrado.
Mi acción asustó a Jimin, logrando que se despertara llorando.- no, no, no. Lo siento bebé, ven aquí.
-Yoongi...
-Lamento haberte despertado, porfavor vuelve a dormir.
Sus lágrimas fueron retiradas con delicadeza de su rostro por mis manos.
Se acomodó en el asiento del coopiloto y recostó su cabeza, mirandome en todo momento mientras empezaba a conducir. Al parecer lo de ir a casa seguia en pié, las 2 camionetas y el auto de Hoseok me seguían desde atrás.
-Bebé, ¿puedes llamar a Namjoon porfavor?
Este asintió, rebuscando el teléfono en el bolsillo de mi saco.
-¿Yoon?- resonó la voz de nam por el altavoz.
-¿Cómo está Jin y Sunhe?
-Jin está bien, Sunhe sigue dormida en el auto de Hoseok. Pero, tenemos un problema...
¿Problema?
-Hay otro auto siguiendonos. Justo detrás de la camioneta de Tae y Kook, creo que es el padre de Jin.
Ese maldito no iba a parar de insistir.
Miré a Jimin un momento, notando como su rostro se volvió pálido ante la mensión del doctor Lee.
No iba a dejar que volvieran a lastimarlo, teniamos que hacer algo.
-Nam, escuchame muy bien. En la siguiente calle vas a doblar a la derecha y Hoseok a la izquiera, ¿Okay?
-Te escucho.
-Hoseok te entregará a Sunhe y le pediras a Jin que vaya con él. Después seguiras por la ruta de siempre, ¿Sabes cual es?
-¿La del parque central?
-Si, ahí voy a estar yo. Te entregaré a Jimin y te lo llevaras contigo. Debes tomar el atajo entre el bosque, por el camino rocoso. Vas a entrar a mi casa, subiras al segundo piso y caminarás hasta el fondo. Encontrarás un baño al final del pasillo, Jimin te explicará lo demás una vez adentro.
-De acuerdo, llamaré a Hoseok.
La llamada fue terminada y los autos se separaron tal y como se les ordenó.
Era hora de que Jimin y yo nos apuraramos.
Un mensaje de advertencia para Taehyung y Jungkook fue enviado, avisando que debian de ir mas despacio para atrazar al auto detrás.
-Quiero quedarme contigo Yoonie- suplicó Jimin, aferrado a mi brazo y temblando de miedo.
-Debes ir con Namjoon, él te esconderá junto a Sunhe en el cuarto escondido. ¿Recuerdas como abrirlo?
-Jalando la llave de la regadera- contestó en un susurro.
-Así es.
Una notificación llegó al teléfono, indicando que Hoseok junto a Jin habian regresado al camino y que Sunhe se encontraba con Namjoon.
Conduje por una calle del cual no recuerdo el nombre, justo a la esquina del parque donde ya estaba la camioneta de Nam estacionada.
-¡Yoon!- gritó desde la ventana, sacudiendo su brazo para poder ubicarlo.
-Ve con él Jiminnie, te veré en casa.
-¿Lo prometes?- preguntó con sus ojos vidriosos al borde de llorar.
-Lo prometo. Siempre estaré contigo, soy tu cielo y te protegeré siempre que pueda. Porfavor ve con Namjoon.
Un beso fue depositado en mis labios, justo antes de que saliera por la puerta y subiera al auto contrario.
🌿🌺🌿🌺🌿🌺🌿🌺🌿🌺🌿
¿Los dejaré con el suspenso de qué pasará?
Mmmm...
Si.
Nos leemos el domingo. Habrá doble actualización
¡Gracias por leer!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro