Existen cosas que a veces no queremos recordar, no importa que sea, preferimos enterrarlas en nuestra mente y encerrarlas con llave, pero a veces esas cosas vuelven a nosotros, como fantasmas en medio de la noche que nos atemorizan. A Louis realmente no le sorprende encontrarse a aquel chico de cabello azul y ojos grises, su cara siempre en un atisbe de dureza y sus labios puestos en una dura línea que se vuelve una sonrisa socarrona de vez en cuando, a Louis realmente no le sorprende, de hecho lo esperaba, imaginaba que él lo buscaría pero no pensó que fuese tan lento.

—Scott — la mirada grisácea se posó en su ropa detallando cada cambio y terminando en su rostro, impactando miradas de cielos despejados y días nublados, a Louis siempre le gustaron sus ojos

—Me habían dicho que te amaestraron como un buen perro pero no creí que hubiese sido tan radical el cambio — el castaño se encoge de hombros

—Pintaste tu pelo — el azul eléctrico brillando aun en la poca luz del callejón donde se encontraban, Louis recuerda cuando su cabello paso de negro a gris

—No cambies el tema Lou, siempre he pensado que eres listo, por favor no lo arruines, sabes a que vine ¿por qué no hacemos esto más rápido para los dos?

—Ya no existe algo que tú y yo debamos tratar o negociar — el peliazul  soltó una carcajada más que nada fingida

—Tú y yo siempre vamos a tener asuntos pendientes Tommo — Louis se estremeció al escuchar el apodo — escuche que coges con el hijo de Des ¿tan rápido se acabo tu amor?

—Estuve un año en la cárcel por tu culpa e incluso si no hubiesen sido así las cosas el amor se acabo más pronto de tu parte ¿lo recuerdas?

—Evan fue un pequeño desliz, un error. Todos los cometemos

—¿Y Yoshua? ¿Daniel? ¿Ryan? ¿Thomas? Incluso la zorra de Sandy logró colarse en tus pantalones

—Más errores — Scott sonrió con suficiencia — no puedes borrar lo que fue Tommo

—No... Pero puedo mejorarlo

—¿Cuanto crees que dure tu teatro? Ese niño es un mimado, no soportará toda la mierda ¿ya le dijiste si quiera porque te encarcelaron? — Louis miro sus zapatos encontrando ese lugar el más interesante — eso pensé — Scott prendió un cigarrillo y dio una calada mientras miraba a Louis detenidamente — debo irme... Espero verte de nuevo — Louis escucho los pasos detenerse — y deberías reconsiderarlo, cuando todos se den cuenta de quien eres van a alejarse y te dejarán solo, vuelve a donde perteneces antes de que eso suceda, velo como un consejo. Solo intento ahorrarte el dolor, ya sabes lo que se siente que te abandonen . No quisiera que volvieses a pasar por eso — Louis rio seco

—No sabes nada Scott, incluso cuando crees ser el dueño del mundo no sabes ni la mitad de mierda que existe fuera de tus malditas cuatro paredes o tus líneas de cocaína. Saluda a Emmet de mi parte

—¿Como sabes eso?

—Te revuelcas con todo mundo, era cuestión de tiempo para que fuera parte de tu juego. Me sorprende que a pesar de saber la clase de mierda que eres aceptara si quiera la primer cita que seguro le ofreciste

—Tu hermano es diferente

—Claro, es más idiota — Louis se alejó lentamente

~

Louis se encontraba en su habitación, sentado sobre el escritorio mientras fumaba un cigarrillo y exhalaba el humo en la ventana, la puerta de su habitación se abrió dejando ver una mata de rizos y trayendo consigo el olor a comida china

—Traje la cena, fue un mal día ¿cierto? — Harry hablo mientras Louis apagaba el cigarrillo y tomaba la caja que contenía su cena

—¿Como lo sabes?

—Siempre que fumas es porque algo sucedió, siempre que usas sudaderas es porque necesitas esconderte y siempre que me miras de esa forma es porque sabes que tengo razón — Louis desvió la mirada y agarraba las mangas de su sudadera con mas fuerza — ¿que fue lo que paso que necesitas esconderte?

—Me aterra que en tan poco tiempo hayas aprendido a leerme — Harry pudo notar que intentaba cambiar el tema así que solo suspiro

—Es bueno, en cierta forma me ayuda a saber que hacer, como ayudarte

—¿Y cómo crees poder ayudarme ahora?

—Te estoy alimentando, no me pidas más — Louis sonrió mientras asentía — pero ya en serio siempre puedes contarme que pasa ¿lo sabes no?

—Claro Harry y lo agradezco

Esa noche Louis se despertó en la madrugada y se dirigió hasta la habitación de Harry quien lo abrazo automáticamente al sentir su cuerpo en la cama, pronto se quedo dormido con el calor de Harry envolviéndolo.