Nodoka había hecho su trabajo, el cual fue motivar a ambos chicos a que arreglaran sus diferencias, su instinto de madre le decía que algún problema grave tenía y que las cosas serían mejores si resolvían esas inconformidades, Ranma se había decidido a contarle toda la verdad a Ryoga, aunque después de eso el volviera con Ukyo, pero ese malentendido iba a solucionarse y con suerte volverían a ser los de antes

-Ryoga… puedo pasar- llamo la pelirroja a la puerta llena de inseguridad y apenada por su actitud, pero su determinación la hico entrar a la habitación sin esperar invitación

-Lo siento Ranma, me iré esta tarde a China y no te molestare más- respondió mientras ponía sus pertenecías en la mochila sin verla, no quería llorar con esa despedida -Quiero que me despidas de los gemelos, tienes unos hermosos hijo- se puso de pie poniéndose la mochila en la espalda, frente a la mirada culpable de la chica

-No…- dijo en voz baja y agachando la cabeza para no dejar ver su tristeza (Soy una estúpida, por mi culpa se va) pensaba y se sentía aun peor

-Claro… lo siento, no debí pedirte eso, después de todo ellos me olvidaran en un tiempo- se sintió mal de solo saber que Saotome no le diría nada a Rokuro y Ryota de su partida, había logrado un cariño por ellos en ese corto tiempo pero es que ella no se refería a eso con el no que dijo

-No…- repitió tomando fuerza para tragarse su orgullo -No quiero que te vayas- pidió por fin ante una mirada llena de ilusión del Hibiki pero que duro solo unos momento no quería tener falsas esperanzas -Quédate por favor- insistió viéndolo a los ojos y dejándole ver las escasas lagrimas que había derramado de solo pensar que el colmilludo volvería a irse

-¿Quieres que me quede?- pregunto incrédulo (Seguro por el golpe ya comienzo a alucinar) pensó por un momento pero volvió a escucharlo

-Si, quiero que te quedes y que no vuelvas a irte- aseguro muy avergonzada y viendo a otro lado, esperaba el rechazo del chico del pañuelo, pero en lugar de eso, el sonrió y se acercó a abrazarla

-No me iré Ranma, al menos que vuelvas a correrme- la sostenía en sus brazos con fuerza como con miedo de que se fuera de su lado

-Necesito que sepas algunas cosas- dijo algo nerviosa, esta vez sí le diría toda la verdad, ambos se tensaron con esas palabras, sabían lo que venia

-Te escucho- la animo, por fin respondería todas sus dudas

-No sé por dónde empezar- dijo mientras se sentaban sobre el futón

-¿Qué paso contigo cuando volviste a Nerima?- pregunto para que ella supiera por donde comenzar

-Bueno… Cuando llegue estaba muy confundida no recordaba lo que había pasado en esa semana en las montañas, Akane me dijo que fui hipnotizada y que por eso era normal que no recordara pero, me sentía mal de no saber lo que paso, por eso te deje ir con Ukyo, pero algunas noches despertaba triste y muy confundida supongo que ñoñaba contigo- comenzó a contar, recordando lo mas importante, Ryoga la veía atento, esta vez no se distraería con nada

-Ahora entiendo, no sabía nada y por eso te fuiste- comento tristes pero la verdad era que él no la detuvo en ese momento, tampoco entendía nada

-Pero no fue mi culpa yo no tenia idea de lo que habíamos planeado…- no quiso entrar en detalles con sus planes de la familia feliz, hubo un silencio y decidió continuar -El tiempo paso y seguí mi vida con Akane, sin saber nada del pasado, sentía que lo que hacía estaba bien, ella me dijo que estaba embarazada y me hizo el hombre más feliz del mundo, ella es la verdadera mamá de los gemelos yo soy su papá pero ellos no pueden saberlo- conto por fin, rompiendo la esperanza de Ryoga de ser el papá de Ryota y Rokuro, pero aun había una gran duda

-¿Dónde está Akane y porque los gemelos te llaman mamá?- pregunto muy ansioso por saberlo, pero esa pregunta fue muy dolora y la expresión de tristeza volvió al rostro de Ranma

-El día que mis hijos nacieron todo se complicó…- respiro profundo para poder decirlo -Y Akane… murió ese día…- Fue inevitable que las lágrimas salieran de esos bellos ojos azules y el chico del pañuelo volva a abrazarla

-Lo siento… yo no tenía idea- se sintió muy culpable por no apoyarla en esos momentos y por no despedirse de la peli azul quien siempre seria su primer amor

-Yo debía cuidarlos y les prometí que tendría una mamá pero volverme a casar no era una opción… así que volví a Jussenkyo- confeso honestamente ante la mirada atónita del Hibiki

-¿Qué hiciste que?- pregunto muy sorprendido por esa revelación
-Yo mejor que nadie se que es mas importante estar con una mamá, la mía me hizo mucha falta, por eso no lo pensé y volví al estanque maldito de la chica ahoga, pero las cosas saldrían mal otra vez, por culpa de las aguas encantadas de Kaiketsusaku la maldición se hizo permanente y no pude volver a ser un hombre pero no me importo- termino de decir ahora un poco aliviada por confesar la verdad

-Eres una gran mamá Ranma y supongo que tomaste la decisión correcta- acariciaba su cabello rojo intentando darle consuelo -Yo en cambio… hui como un cobarde, sin saber que ibas a necesitarme- se sintió la peor persona por no apoyar a su chica en esos momentos, aunque él no sabía nada al respecto

-No fue culpa tuya, era mi responsabilidad hacerme cargo- no le echaba la culpa, después de todo la muerte de la menor de las Tendo fue cosas del destino al igual que su decisión (Pero ahora estas a mi lado y no volverás a irte) pensaba para sí misma sintiéndose más tranquila

-Yo me fui con Ukyo a China sin esperar una explicación, las cosas no funcionaron y ella se fue a estudiar a una empresa muy famosa, y estos últimos 3 años me la pasé solo en las montañas, no tuve el valor de buscarte- confeso apenado de no tener la mitad de la valentía de su amigo

-Creo que ambos nos equivocamos…- dijo levemente sin soltarse del Hibiki

-¿Qué pasara ahora?- pregunto curioso por saber que pasaría con ellos y sobre todo si tenía una oportunidad

-No lo sé…- no tenía idea no esperaba que las cosas llegaran tan lejos

-¿Qué saben Ryota y Rokuro de su papá?- le interesaba saber si sabían algo del Ranma que el conoció en la secundaria

-Nada… afortunadamente no me han hecho preguntas pero aún no sé qué voy a responderles- ese era otro problema que tenía la pelirroja y que no se solucionaría fácilmente -Quizá les diga que también murió- dijo como una solución aunque en realidad solo era otro problema

-Tal vez yo…- se sonrojo de solo pensarlo (Vamos Ryoga esta vez no seas cobarde y dile de una  vez) se regañaba mentalmente -Quiero decir, los gemelos tampoco pueden crecer sin un papá…- no encontraba las palabras correctas y su nerviosismo aumentaba, la pelirroja se dio cuenta de eso y sonrió al ver lo lindo que era (¿De verdad aun quieres formar una familia conmigo?) preguntaba Ranma en su mente como si hablara con Ryoga

-Pero no hay nadie que pueda serlo ¿O tu tienes a alguien mente?- fingía no saber sus intenciones para divertirse un rato

-Ranma yo…aun siento algo por ti y… si tú quieres, podemos ser la familia que tanto habíamos planeado- dijo algo dudoso pero seguro al mismo tiempo, sorprendiendo a Saotome por sus palabras, quien se lanzó a sus labios luego de escuchar eso

-Primero demuéstrame que serás un buen esposo- respondió con picardía y una mirada seductora

-Te lo demostrare las veces que sea necesario- volvió a besarla esta vez con más urgencia, no había probado sus labios en años y volver a sentirlos era la gloria

Acomodo a la chica de ojos azules en el futón, abría su clásica camisa China sin dejar de besarla, había necesitado tanto su cuerpo en esos años que ahora probaría cada rincón para satisfacerse, una vez que se deshizo de aquella fastidiosa camisa quito el sostén que llevaba, esta vez era una mujer y una mamá así que no podía andar por la vida con los senos sin sujetador, quedo fascinado con la vista, los años le habían pasado de maravilla a la chica, dándole mejores atributos que antes, se veía mas femenina, gracias a que su maldición era permanente

-¿Me extrañaste P-Chan?- pregunto divertida al ver que no apartaba la vista de sus pechos y esa estrecha cintura

-Ni te imaginas cuanto, pero estoy seguro de que tu extrañaste más nuestros encuentros- respondió con una sonrisa para después lamer los enormes y perfectos pechos de Ranma

-mmm no tanto como tu- hecho una mirada al pantalón de él y su miembro ya estaba erecto, se sentía de maravilla volver a sentir su lengua en su cuerpo y en poco tiempo ya estaba suspirando de gusto

-No puedes culparme estas mas hermosa que nunca- halago en ese momento de intimidad, que esta vez no solo era sexo por deseos, aunque si había mucha pasión, pero también amor

El Hibiki se quitó los pantalones, para estar más cómodo, en esos momento la ropa solo le apretaba, la pelirroja se dejó en manos de él, había esperado mucho por volver a estar íntimamente con el muchacho, el colmilludo fue bajando por su abdomen plano y quito los pantalones de ella acompañados por su ropa interior, separo sus bien formadas piernas y se concentró en la humada intimidad de la muchacha

-Aaaahhh Ryoga…. No debiste irte tanto tiempo….- sabia que Nodoka estaba en casa y corrían el riesgo de ser descubiertos, pero no podía evitar dejar salir un gemido, afortunadamente Genma y Soun habían salido muy temprano a retar un dojo quienes más les preocupaba que los encontraran en esa situación

La lengua de Ryoga no se detenía en la intimidad de Saotome pero el también necesitaba sentirse así de bien, así que mientras introducía su lengua y jugaba en el clítoris de la chica, acariciaba a su miembro ansioso por entrar en ella, no pudo resistirlo más, aprovecho la humedad de Ranma y se introdujo en ella, obteniendo como respuesta un grito de placer

-Dime ¿Con quién más estuviste en mi ausencia?- pregunto muy excitado y queriendo escuchar que era el único

-Con nadie maaaaas que tuuuu- admitió honestamente y con mucha dificultad al sentir como entraba y salía de su interior

-¿Segura?- insistió para elevar su ego y saber que era el único hombre que pudo poseer el cuerpo de la pelirroja pero también por su inseguridad y deseo de ser el único a quien ame

-Siiiii Ryogaaa, tu… tú has sido el único- después de decir esas palabras ambos llegaron al orgasmo quedando muy cansados pero satisfechos

-¿Ya crees que seré un buen esposo?- pregunto después de unos segundos de silencio y de estar abrazados

-Si per aun te falta demostrar que serás un buen papá- sonrió pues esa era la verdadera prueba, ganarse el cariño de los gemelos, aunque como había visto las cosas no sería algo difícil

-Y lo seré tenlo por seguro…- respondió besando su frente

-Los gemelos…-susurro poniéndose de pie

-¿Qué pasa con ellos?- pregunto sorprendido y sin entender la prisa de Ranma

-¿Qué hora es?- cuestiono mientras se vestía a toda prisa
-Las 11:50 ¿Por qué?- solo veía como ella se ponía la ropa intentando ponerse todo a la vez

-¡Demonios! Debo ir por ellos a las 12- explico pues era su responsabilidad ir por ellos a la escuela -¡¿Qué haces ahí?! ¡Apúrate a vestirte! ¡¿No vas a acompañarme?!- dijo desesperada y recogiendo un poco su cabello mientras salía por la puerta

El colmilludo tomo rápido su ropa y se vistió nuevamente, corriendo tras la mamá de los niños, quien ya estaba saliendo de la casa, tenia practica pues algunas veces llegaba tarde a la escuela para recoger a Rokuro y Ryota, cuando el Hibiki salió de la casa volteo a todos lados y con trabajo veía a Ranma desaparecer en la lejanía

-¡Espéreme señora Hibiki!- grito para detenerla y si funciono, cuando la pelirroja escucho esas palabras sintió un vuelco en el corazón haciendo que se detuviera y sonriera con ternura

Hola!!! Como estan? Espero les haya gustado el capitulo, que pasará ahora que Ranma y Ryoga volvieron a estar juntos? Como tomaran los gemelos la noticia? Que harán Soun y Genma? Averiguenlo en el próximo capitulo aquí en el mismo canal y a la misma hora 😂