-Por favor- pedía. Me había ido a mi cuarto y esta vociferaba como loca, no me dejaba dormir. -Si intento huir de nuevo puede hacer lo que quiera.

Arrojé una de las almohadas y salí del cuarto.

Entré al mío y esta estaba sentada pegada a la pared, he ahí el porque la escuchaba tan cerca. -Quítate la ropa- se puso roja -Dijiste que lo que sea- negó.

-Eso no

-Ya quisieras. Camina, será solo un puto paseo, 5 minutos y me dejas dormir.- la esperé en la puerta mientras salía. -¿Piensas ir con el culo al aire?

-Es muy irrespetuoso. No tengo mi ropa y sus pantalones me quedan muy grande

-Haberlo pensado antes de andar escapando.- dije de mala gana para después tomar camino y comenzar a abrir cerrojos. -Si tu idea de paseos es para ver cuál llave abre qué cosa lamento desilusionarte, pero..- coloqué mi mano en la nueva manilla. -Solo funciona con mi huella.

-Dije que no escaparía. Lo entendí ¿si?

-¿A ver?¿qué cosa entendió caperucita?

-Que no puedo llevar la vida que llevaba antes.- la alenté a continuar -Que debo alimentarme

-No parecías muy consciente de eso hace media hora

-Lo siento. No volveré a escapar. Tenía miedo.

-¿De?- claro que sabía que de mi. Pero me gustaba escucharla hablar.

-Me gustan estos jardines- dijo para luego tomar asiento a pies descalzos sobre el césped.

Continué de pie cerca suyo, había usado mi jabón recientemente, olía mejor en ella.

-¿Porque me da frío?, pensaba que los vampiros no sentían.

-No porque nuestro corazón no funcione quiere decir que estemos muertos del todo. Puedes sentir frío, pero si no te abrigas no te vas a enfermar.

-Pero es incomoda la sensación. Anoche no podía dormir, no hay nada abrigadero en su cuarto tampoco.

-¿Y?

-¿Puedo dormir con usted?- salió de su boca y bufé. Luego llevé mi vista a los árboles.

-¿A que juegas Roja? No soy un puto gato jugando con un ratón. Y no caeré más en tu jueguitos de niña consentida. Nos vamos.- negó -Te llevaré a rastras- se encogió de hombros.

-Si eso garantiza que me toque no me importa.

Algo anda mal.

Tomé mi teléfono y marqué a Namjoon. Esta continuaba con las piernas flexionadas mientras mordía su labio. Ella no es así.

-¿Ahora que?

-Llamaré todo lo que quiera imbecil.- mordisquee mi labio. -Ella me está provocando

-Lo se, pero no puedes enojarnarte por todo, solo debe..- lo corté

-No, me pidió que la tocara y me está provocando para que la toque.

-Su deseo sexual aumentó por el tiempo separados, por eso te dije que la tomarás ya. Si lo sigues postergando será peor.

-Fue solo un día y medio. Y luego me odiará cuando esté consciente.

-Ya te odia. Solo hazlo o dale algo de placer, eso calmará sus hormonas. Adiós.

-Vamos a tu cuarto- No se movió -No estoy para juegos.

Se puso de pie y se acercó a mi, - Con los trajes que acostumbraba a usar se veía bastante guapo. Pero con esta ropa deportiva se ve sexy- tomó la tela de mi camiseta en sus manos y tiró de ella para acercarme hacia sí.

-¿Me vas a besar?- asintió -¿Y si yo no quiero?- claro que lo deseaba pero quería ver que tan consiente estaba de que básicamente me estaba pidiendo hacerla mía.

No estoy en condiciones de detenerme.

Acercó su boca a la mía y la tomé desde el trasero para mantenernos juntos.

Técnicamente había cumplido mi cometido, ella me lo había pedido, así que puedo dejar mi orgullo a un lado para disfrutar de ella tal y como deseo.

Sus labios eran cada vez más dulces, era como si con cada roce estos desprendieran el dulce con más facilidad.

Mi creciente erección tomó camino entre nosotros.

¿Y si era otra alucinación?

No

No la había visto a los ojos, me alejé de ella y en efecto no lo era, -Tóqueme- pidió volviendo a mi boca.

La tomé en brazos y la dirigí a la banqueta del jardín. Tomé asiento y abrí un poco la camisa que llevaba para verla mejor, su piel brillaba a la luz de la luna, era hermosa.

Deslicé su ropa interior y enterré mi cara en ella. Se encontraba de pie y así la quería. No la iba a hacer acabar con mi boca, si así era podría con solo eso saciarse y yo quería más, yo la quería tener rodeándome como tanto deseaba.

Cuando mi lengua se posó en su clitoris esta apresó mi cabello con fuerza. Gimió alto y claro, sin nada de restricciones.

Alejé mi rostro y me puse de pie para quitar la camisa.

Desnuda a la oscuridad de la noche, así la quería.

Se acabaron los juegos ✌️

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