Eren intentaba mantenerse despierto, las horas habían pasado y Levi no despertaba, su pequeña en protesta ante la posición en la que estaba su padre le incómodaba a la bebé.

Eren: Ya entendí, estas incómoda, vamos a caminar un poco.

Cuando el castaño iba saliendo choco co alguien, la persona se disculpó enseguida.

Eren: No se disculpe, fue un accidente.

- Lo pude lástimar, ¿en verdad está bien?

Eren: Si, ¿viene a revisarlo?

- Si, cuando regrese le diré como sigue.

Eren: Gracias.

Eren salió dejando que el médico revisará a Levi, cuando paso por la sala de espera Petra seguía ahí.

Eren: Petra.

Petra: ¿Qué?

Eren: Dejaré que pases a verlo.

Petra: ¿De verdad?

Eren: Si, yo iré a comer, aprovecha para verlo un momento.

La chica no perdió tiempo, en cuanto el doctor salió de la habitación Petra entró, Eren por su parte disfrutaba de un sandwich, cuando terminó Petra estaba fuera de la habitación.

Petra: Mañana yo sere quien lo cuide, por hoy dejaré que lo cuides tu, es lo menos que puedes hacer.

Eren: Si.

Cuando la chica desapareció Eren entró de nuevo, está vez en lugar de estar en la silla junto a la cama y Levi se quedó en el pequeño sillón que estaba junto a la ventana, sus ojos se cerraron inevitablemente.
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Sentía los párpados pesados y la garganta seca, al abrir por completo los ojos pudo ver que estaba en una habitación de hospital.

Inspeccionó todo hasta que vio a Eren dormido en el sillón, intentó moverse pero un inmenso dolor en las costillas se lo impidió haciendo que soltara un quejido.

Eren despertó cuando lo escucho, inmediatamente se puso de pie para ir junto al azabache.

Eren: ¿Te duele algo?

Levi: Las costillas, ¿qué haces aquí?

Eren: Yo, estoy cuidandote.

Levi: No deberías.

Eren: Es lo mínimo que puedo hacer, iré por el doctor.

Levi: Espera, tenemos que hablar.