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Capítulo 5: ¿Quién está detrás de la máscara?

"Máscara".

Con dificultad lograron sacar aquel bloque de la pared, Hermione dio un vistazo al hoyo que quedó mientras Draco sostenía el bloque que cabía en una de sus manos.

-Por lo poco que alcanzo a ver desde aquí, está demasiado alto- confirmo alejándose, entonces fue el turno de él. Logró ver como las olas del mar golpeaban con gran fuerza una de las paredes laterales de la prisión.

-Calculo unos 20 metros de altura, quizá 25-. Draco se siguió calculando distancias e ideando un plan de escape cuando percibió una sombra negra pasar muy cerca de ellos, pero por fuera de la prisión. El rubio palideció y colocó rápidamente de nuevo el bloque en su lugar.

-Qué pasó- Preguntó con interés la castaña.

-Shhh..- dijo agitando una mano tratando de callarla. -Un dementor- Fue todo lo que logro articular. Había perdido el habla ¿es que nada podía salirles bien?

Hermione abrió los ojos sorprendida, Sabía que desde hace años los dementores eran guardias de Azkaban, pero creyó que estarían en otro lugar ahora que se habían aliado con Voldemort. De pronto comenzó a sentir frio con mayor intensidad, Observó como salía vaho de la boca de Draco, quien también rápidamente se dio cuenta del peligro en el que se encontraban.

Hermione fue a colocarse en una de las esquinas mas alejadas de la ventana, por donde creía se encontraba aquel ser, creyó que tal vez las sábanas que había colocado entre los barrotes podrían ayudarles. Claramente se equivocó cuando comenzó a sentir una tristeza infinita, pensamientos del día en que les borró la memoria a sus padres comenzaron a arremolinarse en su cabeza, como susurró un obliviate mientras ellos estaban viendo con alegría el álbum de fotos familiar, como ella comenzó a borrarse de aquellas fotos y recuerdos que conservaban sus padres, como implantó nuevos recuerdos y planes de viajar a Australia ya que su madre encontraba encantador el clima y los animales exóticos que habitan en ese país. Recuerda como utilizando la capa de invisibilidad que Harry le había prestado en las vacaciones se alejo de ellos con sus maletas para nunca volver.

De pronto sintió un tirón, Draco la había jalado hacia su cuerpo y se colocó frente a ella agachándose en el frio suelo.

La castaña abrió los ojos ¿en qué momento los había cerrado? No lo sabía, solo se había percatado de las lagrimas que caían sin control de sus ojos.

-Qué sucedió- preguntó en un susurro.

-Al parecer el dementor se alimento de tus recuerdos y tu sufrimiento-. Le confirmó el chico.

-Cómo es que a ti no te sucedió nada-. Cuestionó con intriga Hermione, dándose cuenta que él había sufrido más que ella en tan poco tiempo.

-Quizá porque practiqué oclumancia, no lo sé con certeza- expresó alejándose de ella, brindándole espacio.

-Eso quiere decir que estarán atacándome solo a mí y ni siquiera tengo varita para conjurar un Patronus con el cual alejarlo- suspiro con resignación tomando lugar en la mullida cama y cerrando los ojos, esperando que no regresara aquel ser de nuevo ¿es que no podía tener un respiro ni encerrada en ese lugar?

Unos pasos comenzaron a resonar en el pasillo y Draco se puso rígido, esperando que no fuera Greyback de nuevo molestando.

Hermione se sentó muy derecha en la cama, estaba intrigada pero más que nada asustada, la ultima vez aquel hombre lobo le había amenazado con ir por ella. No era tonta ya sabía lo que le esperaba si Greyback volvía y no deseaba eso, primero muerta, aunque sea por su propia mano.

Aquellos pasos se acercaban cada vez más haciendo eco con cada pisada. De pronto un hombre alto con túnica negra y mascara plateada hizo acto de presencia, llevando consigo una bandeja de alimentos. Abrió con cuidado la puerta de la celda y envió flotando la bandeja. Volvió a cerrar la puerta y cuando la bandeja se colocó sobre la cama donde estaba la castaña, quien se asomo a ver la bandeja de comida, percibiendo que tan solo contenía dos piezas de pan y dos vasos de agua. Agitó su varita cambiando los alimentos de aquella bandeja. Hermione vio con asombrada como las piezas de pan se transformaban en platos con piezas de carne con lo que parecía salsa de champiñón, puré de papas y ensalada, algunas piezas de pan, dos vasos con agua y ¿dos copas de vino?

Draco volteó a ver la bandeja sobre la cama y alzó la ceja hacia aquel hombre.

-¿Quién eres?- Cuestionó de manera defensiva.- ¿A caso pretendes envenenarnos con ésta comida?

El mortífago volteo a ambos lados del pasillo antes de mirar fijamente al rubio y colocar un dedo sobre la boca de su máscara, haciendo un gesto para que guardara silencio. Lentamente se retiró la mascara de su rostro dejando ver su apiñonada piel.

-Qué demon... Blaise ¿qué se supone que haces aquí? ¿Cuándo te uniste a ellos? Maldición ¿por qué lo hiciste? -Preguntó con desesperación tomando al mago cerrando el puño sobre la túnica de éste.

-Por ti compañero, hace días que no sabemos nada de ti, ni de tu familia, estábamos preocupados. Confirmó el moreno volteando a los pasillos temiendo que alguien lo viera.

-¿Estábamos? ¿Quién más está en esto Blaise?- Susurró con frustración Draco.

-Theo y yo hermano.

-Por qué lo hicieron, no debían, miren como estoy ahora.

-Porque vamos a ayudarte, te dijimos que no estarías solo, que siempre contarías con nuestro apoyo ¿lo recuerdas?

Draco asintió con firmeza.

-Escucha, apenas hace unas horas Theo escuchó que te tenían aquí encerrado, logramos convencer al guardia en turno de poder entrar para evaluar la situación y ver cómo te encontrabas. En este momento no puedo sacarlos, pero Theo y yo estamos armando un plan con ayuda de Snape...

-¿El profesor Snape?- interrumpió la castaña por primera vez en la conversación. -Pero él...- Guardó silencio al verla cara seria de ambos Slytherins.

-Blaise, Tengo que salir de aquí, quiero la cabeza de Greyback, el mató a mi madre-. Confesó Draco con voz ronca, carraspeo intentando deshacerse del nudo en su garganta al confesarle a su mejor amigo lo ocurrido.

-Y la tendrás compañero, escucha- lanzó un muffliato alrededor suyo y comentó- Theo está contactando a la Orden-, Draco y Hermione abrieron la boca con sorpresa al enterarse de tal acción. -Seremos espías, pero necesito saber si estas con nosotros, te ayudaremos Draco, pero somos Slytherins y sabemos que, si el Señor oscuro pierde, nosotros estaremos condenados.

Draco asintió con vehemencia, mientras Hermione interesada en la conversación se unía al par.

-Estamos juntos en esto, ustedes se arriesgaron por mí, somos familia, así que cuenten conmigo. Dijo tomando la mano del moreno con fuerza.

-Tengo que irme Draco, pero espera noticias de nosotros pronto-. Mencionó Blaise alejándose de las rejas, dio un asentimiento dirigido a Hermione y le dijo, -Potter y Weasly están muy interesados en ti, nuestro amigo Theo esta hablando con ellos, ahora ya deben saber donde estás. Provecho a los dos y nos vemos pronto.

-Muchas gracias- expresó Hermione con una pequeña sonrisa en su rostro.

-Gracias Blaise-. Dijo el rubio dirigiéndose hacia aquella bandeja con comida, Blaise volvió a asentir y se colocó de nuevo la máscara, alejándose del lugar.

Por primera vez Draco y Hermione disfrutaron su primer alimento en paz.

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