Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 33

(Narro io)
Tanto el almuerzo como la cena pasaron rápido, ninguno había notado que ya los encaminaban hasta sus habitaciones para descansar.

—Pero todavía es temprano, ¿Por qué nos llevan ahora?— Preguntó Marco mientras se iba de lado con Finn.

Este solo levantó los hombros en señal de no saber, pero para el moreno algo malo iba a pasar, últimamente había tenido esos presentimientos muy seguido lo cual le preocupaba.

(...)
—Buenas noches...— Se despidió primero Wirt al estar en su puerta y entrar dejando a los otros dos solos.

—Descansa...— Dijeron estos al unísono.

Ambos tenían que seguir por unos metros mas, pero el ambiente era un poco tenso, aunque Will no sabía la razón de tal comportamiento.

—Mañana vendrán Phill y Bill...— Susurró el castaño.

El peli-azul se sorprendió un poco por las palabras del mayor quien solo sonrió de lado dando a entender que no había nada de que preocuparse.

—¿H-Habrán arreglado algo?— Preguntó temeroso el menor.

—No sé, se supone que me lo dirán mañana, pero aún si es así. ¿Crees que los chicos puedan acusar a los oficiales?— Preguntó con cierta esperanza en su rostro, pero Will estaba consiente de que eso sería algo imposible.

No respondió a la pregunta, dando a entender su opinión, un sonoro suspiro se dejo oír por parte del castaño quien apenas entraba a su cuarto.

—B-Buenas noches...— Dijo el peli-azul esperando que el mayor le respondiese, pero no fue así. Simplemente entró a su cuarto dejando al otro en la inmenso pasillo.

El menor camino hasta su habitación.

Tal vez no le sería de ayuda a aquel que le necesitaba mas que nadie en ese momento ya que intentaba salvar, no sólo a él, si no a otros 3 reos.

Si tan solo no fueran tan apegados a ellos... Si realmente los odiaran como en un principio, todo sería mas fácil.

(...)
Todos los menores estaban dormidos, ya era bastante tarde a decir verdad, pero algunos policías seguían al alba.

Tom y Beast caminaban uno al lado del otro, la diferencia de estaturas era notoria pero eso no importaba ahora, si no que la seriedad de ambos era algo fuera de lo común.

Llegaron hasta el piso D, donde se dirigieron a la habitación D12 perteneciente a un castaño.

El menor estaba plácidamente dormido, le fue difícil lograrlo ya que la emoción por ver a un rubio el día siguiente no lo había dejado descansar.

Pero, el sonido de metales chocando hicieron que despertara de golpe quedando sentado en la cama.

Tenuemente una luz en el pasillo fue visible, dejando así ver a dos sujetos

—Levantate y siguenos.— Habló serio uno, por la voz se podría decir que fue Tom. Por el miedo, la impresión y confusión, Dipper no obedeció, logrando así que el pelirrosa se enfureciera y caminara hasta él halándolo del brazo obligándole a levantarse.

Ni siquiera tiempo le dieron para ponerse los zapatos, simplemente lo levantaron y sacaron de ahí.

El castaño no renegaba ni nada ya que eso podría hacer que le fuera peor. —¿A d-dónde me llevan?— Preguntó curioso mientras era casi arrastrado por los otros.

Ninguno si quiera se digno a verlo, solo caminaban uno al lado del otro con Dipper siguiéndolos.

(Narra Dipper)
Digamos que por mis salidas nocturnas ya conocía bastante bien el complejo, pero el camino por donde ellos me llevaban me resultaba distinto a cualquier otro.

Al principio supuse que me llevarían a la oficina de Gleeful, pero tras hacerme bajar por unas escaleras hacía lo que creo yo era el sótano, deshice esa idea.

—Repito: ¿A donde me llevan?— Pregunté, se podría decir que con los minutos había dejado el miedo atrás.

—Tal parece que alguien por fin ha dejado de tartamudear, ¡Bien hecho!— Se burlo el estúpido de cabello rosado. Aunque Beast seguía igual de serio que siempre.

Nunca había tenido la oportunidad de bajar al sótano, una vez Stan me dijo que al principio era una gran red laberintos ya que en la década de los '20, si un reo llegaba a escapar de su celda, jamás podría salir sin un mapa.

Los largos pasillos tenían una pinta de ladrillos y varios tubos de presión circulaban por estos, solo iluminados por una serie de bombillos ya viejos que tintineaban dando a entender que no durarían mucho.

(...)
Era obvio que Tom no conocía el camino ya que el iba detrás de mi vigilandome, mientras que Beast era el guía, teníamos buen rato caminando, tanto que se podría decir que ya no estábamos en el área de la cárcel.

De un momento a otro, el peliblanco paró en seco mirando hacía todos lados, como tratando de recordar a donde tenía que ir.

—¡No me digas que nos perdimos!— Se quejó Lucitor, pero al no recibir respuesta llevó ambas manos a su cabeza. —¡DIOS, BENDICE A ESTE IDIOTA PARA QUE NO HAGA QUE NOS PERDAMOS!— Era imposible no reírme de ese comentario.

Solté una sonora carcajada, aunque no fue nada agradable para el mayor quien se giro y literalmente me miraba con odio.

Ya había parado de reír, pero eso no eliminó la sensación de castigo que tenía.

Beast camino hasta mi, con un rápido movimiento me golpeó el abdomen haciéndome caer mientras mi respiración se aceleraba y empezaba a toser.

El agudo dolor se extendía por todo mi torso, no podía mantenerme de pie ya que se me dificultaba el erguirme.

—Wow... Hasta a mi me dolió...— Dijo Tom llevándose una mano a la nuca, lo mire con odio, el hizo la broma y yo solo le seguí como un idiota.

—Levantalo...— Dijo el peliblanco sin siquiera mirarme. —Recordé por donde era...— Se dio la vuelta y empezó a caminar frente a nosotros de nuevo.

Sin cuidado alguno, otra vez el pelirrosa me jaló de la camisa obligándome a pararme, pero aún tenía un punzante dolor abdominal.

(...)
Caminamos nuevamente por varios minutos, ya no estaba tan molesto como hace rato, pero si tenía gran curiosidad por saber que sucedería conmigo.

Beast se detuvo frente a una gran puerta de metal, entró primero y después hizo la señal para que Tom entrara junto a mi cerrando la puerta detrás.

La oscura habitación me ocasionó un escalofrío de ultratumba, podía sentir el piso frío y un ambiente igual de helado.

Había un extraño olor, creo que era ¿Suciedad?, o ¿Podrido?... No lo sé, pero ese aroma inundo mis fosas nasales como una oleada.

Como no podía ver nada, no note cuando alguno de los oficiales me tomó por los brazos uniéndolos con lo que creo yo eran esposas.

El frío metal chocar con mis muñecas hicieron que tuviera un dolor, ya que no sólo era eso, si no que también las habían apretado lo suficiente como para no sentir la circulación.

Me hicieron sentar en una silla, por suerte no me dolió el trasero, pero eso no evitaba que no tuviera miedo.

Escuche un "Click" para después ver como es que una tenue luz era encendida.

—Creí que era broma que podías ver en la oscuridad...— Dijo Tom mientras se alejaba del apagador acercándose al peliblanco.

—Te dije que era cierto. Es una especie de capacidad única o algo así.— Respondió el otro mientras se retiraba el gorro y se alejaba hasta una pared del cuarto y dejando su sombrero en un clavo.

—Por cierto... ¿Cuándo llegará Gleeful?— Preguntó el pelirrosa sin dejar de verme. —Espero que no tarde porque me voy a aburrir.—

—Tranquilo, llegará en cualquier mom-...—

La puerta se empezó a abrir poco a poco, ninguno de los oficiales se inmutó al ver al castaño entrar, pero yo me congele del miedo.

De hecho, podría decirse que era la primera vez que lo veía tan cerca, pero... También note algo muy extraño.

Parecía que tenía una marca en la frente, pero trataba de ocultarla con su sombrero y cabello, aunque esa misma marca era igual a la de Mason, ¿Por qué?...

—¿Qué tanto han hecho?— Preguntó el recién llegado.

—Nada, apenas entramos.— Dijo Beast acercándose a su Jefe.

—Ok, comencemos.— Agregó el castaño mientras me miraba de pies a cabeza.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro