---Ishi---

No quiero apartarme de Kyo.

Él es mi todo.

Me ofrece todo su amor.

Me da todo lo que necesito.

Toda su atención.

Sus brazos me ofrecen tanta calidez.

Tanta protección.

-Kyo.
-Lamento haberte dejado.
-No pasa nada. –susurre.
-Lo siento mi amor.
-Estoy bien.
-No te dejaré ni un segundo.
-Me agrada tu idea.

Me tomo del mentón y me beso.

-¿Quieres ir al pueblo?
-Siempre y cuando vengas conmigo.
-Claro.

Me tomo de la mano y salimos del lugar.

Aun me sonrojo con cada pequeña acción.

En verdad lo amo.

Estoy enamorado de Kyo.

Completamente.

Nos subimos en su auto y empezó a manejar.

En todo el momento comenzó a decirme lo que le transmitía mi niña.

Que está ansiosa por verme.

Por dormir en mis brazos.

Por conocer a sus dos papás.

En verdad me siento feliz.

Al llegar al pueblo, bajamos del auto y empezamos a caminar.

Yo tome su brazo y él sonreía.

Kyo siempre se ha esforzado por mí.

Quiere darme todo. Que nada nos falte.

Él es tan lindo.

-Ishi...
-¿Qué sucede?
-Gracias. –sonrió.
-¿Huh?
-Agradezco que me aceptarás, que me ames como yo a ti, eres lo mejor de mi existencia.
-K-Kyo.
-Quiero vivir eternamente contigo.

Mi corazón se acelera y mis lágrimas comienzan a caer.

-Te amo tanto Ishi, quiero que compartas cada momento conmigo, ser felices y formar una gran familia, amarte, protegerte y cuidarte.

Él se arrodillo y beso mi mano.

-¿Quieres casarte conmigo?

Las palabras no salen de mi boca, así que solo asentí y él colocó el anillo en mi dedo. Se levantó y lo abrace fuertemente.

-Quiero e-estar contigo siempre.
-Ishi.
-P-Por favor, e-en cuanto nazca mi niña, -me sonroje- quiero que me transformes.
-¿Estás seguro?
-S-Sí.
-Ishi mi amor. –me tomo del mentón y en cuanto estaba a punto de besarme sentí unos brazos en mi cintura alejándome de él.
-MALDITO DEMONIO, NO TE LE ACERQUES MÁS A ISHI.
-¿A-Akihiko? –me sorprendí.

---Yukio----

Me aferre al lomo de Genji.

Él corre a toda velocidad.

Después de unos minutos se detuvo.

No comprendo.

¿Por qué Luka se transformó?

¿Por qué decidió ser un vampiro?

Él ser que más a odiado.

Como él lo dijo.

Una abominación.

Incluso.

Trato de matarme.

¿POR QUÉ LO HIZO?

Y se presenta ante mí como si nada.

Él...

Es lo peor.

Después de unos minutos Genji volvió a ser un humano con solo un short puesto.

Siento como si mis mejillas se sonrojaran de solo verlo.

Tiene un cuerpo tan...

Pero que estoy pensando.

No debería.

-¿Estás bien?
-S-Sí. –murmure.

Él se acercó a mí y tomo mi mentón.

-Ese imbécil ¿te hizo algo?
-No...
-Tus ojos me dicen lo contrario.
-...
-Está bien si no quieres contármelo.
-Gracias Genji.

Él beso mi mejilla y desvié la mirada.

-Tal vez deberías besarme como agradecimiento.
-¿Eh? –lo mire.
-Jejeje, -rio- es una broma.
-E-Eres un baka.

Él me abrazo fuertemente y mi corazón empezó a latir como nunca.

¿Qué es este sentimiento?

-Hueles bien.

Mi mirada se encontró con la de Genji.

Él esta sonrojado y me mira como si...

Oh no...

¿Este lobo está en celo?

Mis encías comienzan a arder.

Mis colmillos aparecen y mis ojos se vuelven rojos.

Maldición...

Este ardor en la garganta.

-Tienes sed, ¿verdad?

Estaba a punto de separarme cuando él me volteo y sonrió.

-Bebe mi sangre, será lo mejor.
-Y-Yo no...
-Hazlo, no te preocupes que mi celo no sea un impedimento, puedo controlarme.
-Genji.
-Estás muy débil, además no te preocupes, -sonrió- comí demasiado, como si hubiera devorado una vaca.

¿Por qué este lobo es tan bueno?

A pesar de que somos dos especies enemigas.

Él...

-Gracias. –susurre y me acerque a su cuello.

---Shinobu---

Nunca pensé que Miyagi fuera tan fuerte.

Me sorprendió como se deshizo de Shido.

Aunque...

Él regresará.

Shido no se da por vencido.

Y eso me da miedo.

Ya que cuando creamos a un vampiro se forma un vínculo.

Pero estoy seguro que el mío se rompió cuando mordí a Miyagi.

Maldición.

Abrace a Miyagi y él me beso.

-Ahora que tengo estás habilidades no voy a permitir que te lastimen.
-M-Miyagi.
-Te amo.
-Y yo a ti.
-Ven, tengo un jaguar y una pantera.
-Delicioso –murmure.
-Y después podemos seguir con lo pendiente.
-¿Eh?
-¿Te lo explico a detalle?
-P-Pervertido.

Nos adentramos al bosque y vi a los animales.

Sonreí y lo abrace.

-Hace mucho que no lo consumo.
-Puedes tomarlos amor.
-¿Enserio?
-Me encanta como te brillan los ojos.
-Baka.

Empecé a tomar la sangre del jaguar.

-Tomate las dos, -me miro- yo prefiero...
-Lo entiendo. –reí.

Seguí tomando la sangre de los animales.

Al terminar camine hacía Miyagi y descubrí mi cuello.

-Eso se ve tan erótico.
-Eres un pervertido de lo peor.
-Pero así me amas ¿no? –me abrazo.
-S-Sí.

Me dio un beso apasionado y empezó a lamer mi cuello.

Siento como mi cuerpo se estremece.

-Lamento si soy un poco brusco.
-No pasa nada.

Él empezó a encajar sus colmillos en mi cuello.

Yo acaricie su cabello.

Estoy tan enamorado.

Miyagi es lo único que necesito.

Es lo que más quiero.

Mordí mi labio para no poder quejarme.

Se siente un poco doloroso.

Pero...

En cierto punto...

Hay placer.

Me tomo de la cintura.

-Tan delicioso. –sonrió.
-M-Miyagi.
-Estoy satisfecho, -comento- ¿Ahora... continuamos?
-Hablas sobre...
-Sí, vamos al rio a probar cosas nuevas.
-Eres de lo peor, -murmure- pero bueno...

---Hiroki---

Después de su escena de celos Nowaki me preparo algo de comer.

Me quede sentado en la cama.

Recordando lo que escuche.

¿Ese lobo me hablo?

¿Estaré enloqueciendo?

No...

Eso no puede ser cierto.

Eso...

Es tan raro.

Maldición.

¿Qué es verdad?

¿Qué es mentira?

Pero...

Dijo que sabría todo si iba con él.

Tal vez debería.

Quiero saber más de él.

Conocer mi pasado.

Pero...

¿Cómo es que él lo sabe?

Mi origen.

Joder.

¿Qué hago?

Tengo que ir.

No sé como pero...

Necesito una explicación.

Y sí él tiene las respuestas.

Entonces iré.

Aunque...

Debo aprovechar el momento de distracción.

Sé que Nowaki se molestara.

Pero necesito respuestas.

Y si nadie las tiene...

Entonces tengo que buscarlas.

-¿Hiro-san?

Nowaki entró con una charola de comida, la coloco en la mesa y nos sentamos.

-¿Pasa algo amor?
-Yo...
-¿Sí?
-Solo me siento un poco cansado, y algo estresado.

Él acaricio mi cabello y beso mi rostro.

-Es mejor que comas.
-Hai.

Empecé a comer, incluso él también comenzaba a comer.

Ya me ha explicado que puede sentir el sabor de los alimento.

Pero no lo satisface por completo.

-Hiro-san.
-¿Huh?
-Voy a salir un rato, debo ir a alimentarme.

Estaba a punto de decirle que lo acompañaba.

Que no quería quedarme estando su padre.

Pero recordé al lobo plateado.

Sus palabras y el sentimiento.

-¿Tardarás? –pregunte.
-Espero que no...
-Ya veo.
-Hiro-san.
-Está bien Nowaki, es necesario. –sonreí.
-Gracias por entenderme. –me beso.

Al terminar de comer nos recostamos en la cama.

Él acaricio mi espalda.

Sé lo que quiere hacer.

Quiere que duerma tranquilamente.

Así que fingí que dormía.

Sentí los labios de Nowaki en mi frente.

Y luego escuche un te amo.

Siento mi corazón acelerarse cada vez que me dice esas palabras.

Me espere como veinte minutos y me levante.

Me coloque un abrigo porque la temperatura estaba más baja.

Baje las escaleras y salí por la puerta.

Por un momento pensé que me encontraría con alguien.

Pero seguramente el padre de Nowaki fue con él.

Empecé a caminar hacía el bosque.

Mi corazón se acelera.

No sé porque pero...

Algo en él me llama.

No puedo negarme

¿Qué es esto?

Vi la cascada y en una roca descansaba un lobo plateado.

Me quede al borde el rio.

Ese lobo me miró fijamente y se volvió a transformar.

-Viniste.

Es un hombre atractivo.

No...

No pienses eso ahora Hiroki.

-Vine por respuestas.
-Y te daré lo que buscas.

---Vald---

Así es el amor ¿eh?

Con altas y bajas.

Verdadero e irreal.

Mis lágrimas comienzan a caer.

Solo...

Estoy solo.

Yo...

Me deje caer de rodillas y tape mi cara con mis manos.

Y pensar que...

Estaríamos juntos.

Que seríamos una pareja.

Que tonto fui.

Tan tonto.

Lo amo.

Pero...

Él no me acepto.

Pensó lo peor.

Yo jamás lo he seducido

Jamás hice nada malo.

Yo solo lo ame en silencio.

Al final de cuentas.

No siente nada por mí.

-Vaya, no creí que pudiera ser muy cruel.
-¿C-Cadis? –murmure.
-Te dije que los humanos son seres muy...
-Sí, -susurre- tienes razón.

Mis lágrimas siguieron cayendo.

-Me iré contigo, -lo mire- volveré a mi hogar.
-¿Estás aceptando que...?
-No me queda nada más, -suspire- cumpliré con mi palabra.

Él sonrió y tomo mi mano.

-Con este anillo estamos comprometidos.

Deslizo el anillo en mi dedo y beso mi mano.

Es lo mejor.

Nunca debí irme de ese lugar.

Soy un tonto.

No quiero casarme pero...

No es como si tuviera más opciones.

-Vamos.
-S-Sí.

Tomo mi cintura y nos desplazamos al aeropuerto.

Al menos...

Puedo ver a mis otros amigos.

Tal vez encuentre paz.

---Zen---

Maldición.

En cuanto vi a Yokozawa no pude detenerme.

Comencé a besarlo.

Lo sé-

Mi celo ha llegado.

Y por lo menos son 3 días.

Mi hermano se marchó y prácticamente rompí su boca.

-E-Espera.

Le di un beso tan fogoso y empecé a lamer mis dedos.

Con paciencia que no sé de dónde la saque fui metiendo mi dedo en su linda entradita.

Se ve tan linda.

Como si esperara por mí.

Empecé a dilatarlo, metiendo el segundo y luego el tercer dedo mientras seguía masturbándolo.

-Ahhh Z-Zen.
-Ya no aguanto.

Quite mis dedos de su interior.

Tome las pequeñas botellitas que preparo mi hermano y le di una.

Ambos tomamos ese brebaje y sin esperar nada entre de una embestida.

Él se aferró a mis hombros mientras comenzaba a moverme.

Esa deliciosa calidez.

Tan tranquila.

Lo amo tanto.

Siento como si el lazo se hiciera.

De nuevo...

Una calidez en mi pecho.

Coloque mi mano en su vientre y siento a nuestros cachorros.

MIOS.

MIOS...

Sonreí feliz y seguí haciéndolo mío.

Mi hermoso osito.

Mi vampiro sexy.

Mordí su hombro y seguí moviéndome desenfrenadamente.

No puedo calmarme.

Takafumi es mi pareja ideal.

Y más ahora que seremos una familia feliz.

Solo mío.

-Z-Zen m-me vengo. –exclamo.
-Hazlo amor, está es la primera vez de muchas.
-B-Baka.
-Te amo.

Seguí embistiéndolo hasta que me corrí en su interior.

Maldición.

No puedo detenerme.

Ese lindo cuerpo hermoso.

Solo mío.

-Hagamos otra camada.

Me dio un golpe y gruñó.

-AUN NO TENGO A NUESTRO HIJOS ¿Y PIENSAS EN TENER MÁS?

---Alucard---

Mi hijo se ve distraído.

Me pregunto...

¿Qué tiene ese castaño?

A pesar de tener su sangre tan deliciosa.

Tan dulce.

¿Será por eso?

Aunque...

¿Será un buen amante en la cama?

Ya que teniendo un poder como el mío puedo obligarlo a lo que quiera.

Puedo manipularlo para que se acueste conmigo.

Jojojo nada mal.

-¿Padre?
-¿Qué decías?
-¿Y Arthur?
-Llegará mañana.
-Ya veo.

Debo de volver a mi hijo sanguinario como era antes.

También debo enfocarme en Eitan, ese lobo es astuto.

Pero no tanto como yo...