---Alucard---

Ver de nuevo a ese perro pulguiento me entretiene.

Su sola presencia es molesta.

Pero tenía que venir.

Debo tratar asuntos obligatorios con él.

Puag... apesta a perro mojado.

Quiero matarlo.

Pero aún.

Lo necesito para mis negocios.

-Me he enterado de algo. –tome un poco de té.
-¿De qué? –se dejó caer en el sofá.
-De que tienes a un... ¿amante?
-...
-Bueno alguien que es de tu sangre.
-Es algo que no te interesa.
-¿Por qué tanta agresividad?
-Porque no quiero que te le acerques, ES MÍO. –gruñó.


De nuevo ese brillo plata en sus ojos.

Debo de mantenerlo en calma.

Aún sigo débil.

Maldita sea dormí mucho y debo tener más sangre.

Sangre poderosa.

A pesar de que me guste verlo enojar.

Tengo que mantenerlo en calma.

Lo miré y él aún seguía en una posición de ataque.

Mire la ventana y estaba oscureciendo.

-Calmado, vine en son de paz –levante mis manos mostrándolas vacías.

Él aun gruñí y poco a poco se fue acomodando en su silla.

No me conviene ser herido.

Si no él se dará cuenta de lo débil que soy.

Joder.

Debo mantener la calma.

Y parecer más fuerte que nunca.

-¿Y a qué debo tu visita?
-Pues, iré a ver a mi hijo y decidí venir a charlar.
-...
-Ya sabes, somos amigos.
-Sobre todo.
-Siempre hemos hecho negocios, y masacres.
-Eso fue hace muchísimos años.
-Lo siento debía dormir.
-Alucard no eres bien recibido aquí.
-¿Aún sigues molesto por esa pelinegra?
-Grrr m-maldito. –gruñó.
-Pues era toda una zorra, -reí- pero te di como tres mujeres.
-Es mejor que te vayas.
-Sí, iba a decir lo mismo.

Él se dio la vuelta y miro la ventana.

-Tus horas están contadas. –comento.
-Quiero ver eso lobito.
-Lo verás sanguijuela.

Salí de su casa y subí a mi auto.

-Vayamos a Transilvania.
-Sí señor.

Quiero conocer a esa persona que tiene su sangre.

Tal vez si la tomo primero seré más fuerte.

Gracias por el obsequio Eitan...

---Kyo---

Ahora Ishi me pertenece por completo.

Me siento feliz.

Por un momento pensé que Ishi se arrepentiría.

Y que volvería a su lado.

Estaba a punto de hacerme a un lado pero...

Lo amo tanto.

Ishi es tan perfecto.

Y lo quiero solo para mí.

Abrace a mi niño mientras él hundía su cabeza en mi pecho.

-¿Estás bien?
-Mejor que nunca. –me miro- Por fin hable con él, le dije lo que sentía.
-¿Estás arrepentido? –pregunte con temor.

Él pellizco mis mejillas y luego me dio un beso tierno.

-No Kyo, te amo.

Esas palabras siempre me hacen feliz.

Saber que yo soy su todo.

Como él es lo mío.

Y junto a esa pequeña.

Simplemente es perfecto.

-¿Seguimos con el paseo? –estire mi mano.
-S-Sí. –se sonrojo y la tomo.

Él se ve tan sonrojado y lindo.

-Kyo.
-¿Huh?
-Acepto. –murmuro.
-¿Cómo?
-L-Lo escuchaste.

Solté una carcajada y lo abrace.

-Solo quiero escucharte de nuevo.
-B-Baka, -desvió su mirada- a-acepto ser tu pareja.
-Mi Ishi. –lo bese- Te amo.

Caminamos por los puestos y él siguió comprando muchas cosas.

Me molesta que lo miren con compasión.

Con lastima.

Muchos lugareños saben que soy.

Y no basta recordar que...

Han tratado de matarme, fallando en sus intentos.

Ni un rasguño.

Deben de estar preocupados por Ishi.

Me pregunto si es bueno que esté a mi lado.

Lo amo.

He estado solo varios siglos

No lo apartaré.

Lo voy a proteger.

Lamento tanto que por mi culpa lo miren así.

-Kyo.
-¿Sí Ishi?
-¿Qué dice nuestra niña? –pregunto.

Acaricie su vientre y suspire.

-Dice que, le gustan muchos las manzanas acarameladas, también que quiere un poco de takoyaki.
-Wow.
-Ven mi amor, te daré lo que quiere.
-Me voy a ver como un pez globo.
-Jajaja, eres tan gracioso.
-Baka.

Lo cargue y lo bese.

-Te amo Ishi, juro que te haré muy feliz.

---Zen---

¿Una prueba de resistencia?

¿De fuerza?

Eso realmente es impresionante.

No puedo dejar que lo haga.

No quiero que se lastime.

Son mi familia.

Mi amado y mis cachorros.

No puedo permitirlo.

Algo que debo evitar.

Isaac es un viejo tonto.

Hasta cree que lo permitiré.

-Isaac pero que mierdas estás diciendo.
-Si quiere romper el lazo debe demostrarlo.
-Pero acaso estás loco, -gruñí- pondrás en peligro a mi familia.
-No los pondré en peligro, solo...
-LO SIENTO PERO NO.
-Zen no te pongas terco. –exclamo Yokozawa.
-Eres mi amado y debo cuidarte.


Él se acercó a mi y acaricio mi mejilla.

-Debo hacerlo Zen, por ti y por nuestros c-cachorros. –se sonrojo.
-Lo dijiste. –exclame.
-C-Cállate.
-Te amo tanto.
-Waaaa m-me vas a romper. –murmuro.
-Es lo que deseo pero en privado. –le guiñe un ojo.
-Pervertido. –se sonrojo.
-¿Te lo imaginaste?
-I-Idiota, ya cállate.

Lo abrace con fuerza.

-¿Ya dejaron de estar de empalagosos? –pregunto Isaac.

Ambos lo volteamos a bien.

-La prueba será en la próxima luna roja.
-¿Luna roja? –pregunto mi amado.
-Es cuando los lobos somos más débiles y los vampiros nos atacan.
-¿ESA ES LA PUTA PRUEBA? –exclame.
-Sí, él nos protegerá,
-PERO DIJISTE QUE...
-ÉL siendo un vampiro de sangre pura tal vez esos vampiros lo escuchen.
-No y no eso es muy peligroso.
-Pero cada vampiro tiene una habilidad única ¿no?

Mi amado bajo la mirada.

-Isaac.
-No estará solo, -comento- lo acompañaran nuestros mejores guerreros.
-Yo también lo...
-No Zen, tu estarás a lado de Sakura.
-¿Ah?
-En lo que le pasa la prueba estarás comprometido con Sakura.

Mi vampirito rechino los dientes

-Esto no. –gruñí.
-Es mi última palabra si quieren mi ayuda.

Pude ver el semblante triste de mi amado.

-Sí no hacen la prueba esos cachorros jamás te verán como su padre, a lo mejor uno solo porque los otros dos si están más enlazados con Atsushi.

Maldición, esto es lo peor

No quiero que mis amados...

-Lo haré, -suspiro mi amado- los protegeré, porque yo amo a Zen y quiero que nuestros cachorros le digan papá.
-Osito, cada día me enamoro más de ti.





---Hiroki---

Nada ha cambiado.

No hay duda en lo que siento.

Pero...

Aun me cuesta admitirlo.

Todo esto me tiene confundido.

Me acurruque en los brazos de Nowaki mientras él acariciaba mi espalda.

-¿Cómo te sientes? –murmuro.
-Tu pregunta es muy estúpida.
-Lo siento –rio
-Estoy mejor, -murmure- solo cansado.
-Entonces duerme.
-¿Te irás?
-¿Y después de tu confesión? –suspiro- DI gracias que solo te soltaré para que vayas al baño.
-Baka.
-¿Quieres que me quede?
-Sí, -murmure- no me dejes solo.
-No te dejaré jamás, porque a partir de hoy te proclamo como mío.
-D-Dices cosas sin sentido.
-Yo le veo mucho sentido a este amor inmortal.
-Eres ridículo, muy romántico para está época.
-Tal vez porque conozco mucho.
-Quien sabe.

Me abrazo y yo recargue mi cabeza en su pecho.

Huele al exterior.

A flores y frutos frescos.

Me es muy gratificante.

En verdad Nowaki...

Él seguirá siendo el mismo, solo que vivirá más

Cerré los ojos y me dormí profundamente.

-Hiroki.
¿Huh?

-Mi amor, ve a mí.

Abrí los ojos y estaba en un oscuro bosque.

Me levante de golpe y mire a mi alrededor.

¿Dónde estoy?

Camine hacia una luz tenue que parpadeaba a lo lejos.

Siento como mi piel se eriza.

-Nowaki. –murmure.

Pero no escuchaba nada.

Esto me está dando miedo.

-¡¡¡Nowaki!!! –grite- No es gracioso.
-¿Qué no es gracioso?

Voltee hacía atrás y vi a ese hombre de nuevo.

Me sonreía plácidamente.

Realmente.

Me casa escalofríos.

-Hiroki eres hermoso.

En un parpadeo ese tipo estaba frente a mí.

-¿Me recuerdas?
-E-Eitan. –murmure.
-Veo que sí, -me tomo del mentón- este es el único método para verte, antes de encontrarnos como es debido.
-¿Eh?
-No comas ansias mi amor, -comento- pronto te tomaré como es debido.
-E-Eso...
-ME perteneces, eres solo mío.

De nuevo coloco sus labios en los míos.

Pero esta vez fue tan real...

Abrí los ojos y estaba solo en la habitación.

¿Qué es todo esto?

¿Por qué tengo estos sueños?

Me levante de la cama y me dio un baño.

Esto es un poco raro.

Me cuesta trabajo.

En verdad trato de aceptar la realidad pero...

Después de vivir en un mundo en el cual los vampiros y hombres lobos son solo pequeñeces, solo tonterías...

Y que de un día para el otro sean verdad.

Realmente me dejan confundido.

¿Qué más me falta por descubrir?

No lo sé.

Y no sé si quiero descubrirlo.

Me termine de bañar y me coloque ropa holgada.

Al salir de la habitación me encontré con Nowaki.

-El desayuno está listo.
-Me agrada la idea de tener un sirviente personal.
-Pareja, -sonrió- a partir de hoy eres mi pareja.
-Jamás he aceptado algo así.
-Hiroki, ¿quieres ser mi novio?
-No.
-¿Eh?
-Quiero pensarlo un poco.
-¡Hiro-san!
-Es mi última palabra.

Él resoplo y me beso.

-Entonces haré que cambies de opinión.

---Ryu---

No puedo creerlo.

¿Me está besando?

¿Por qué lo hace?

Yo...

No pude más.

Rodee su cuello con mis brazos.

El beso se hizo más profundo.

Sus manos apretaron más mi cintura.

Me siento tan débil con solo un beso suyo.

Realmente es...

Tan perfecto.

No quiero separarme.

Que este hechizo nunca se acabe.

No se cuanto tiempo hemos estado besándonos.

Nos separamos por falta de oxígeno y me miro.

-¿P-Por qué lo hiciste? –jadee.
-No lo sé.
-Oh, -murmure- querías solamente probar ¿no?
-Ryu...
-Ya mejor vete yo...

De nuevo no me dejo hablar y me beso.

Él...

¿Está enamorado de mí?

No...

Lo estoy malinterpretando.

Él jamás...

-N-No lo hagas o yo...
-Ryu...
-T-Tú...
-Quiero intentarlo.
-¿Eh?
-Ryu me siento atraído por ti, por favor permíteme...
-N-No, eso...
-Hagamos un intento.
-¿Eso?
-Permíteme enamorarme de ti.

Me sonroje y lo mire a los ojos.

-¿Hablas enserio?
-Sí. –dijo seriamente.
-...
-Te lo ruego.

¿Cómo decirle que no?

No puedo yo...

Estoy enamorado de este tipo.

-Sí.
-Gracias Ryu, daré lo mejor de mí.
-Lo sé Kaoru.
-¿Puedo be...

No lo deje terminar y me aventé a sus brazos.

Lo bese con anhelo y él no me rechazo.

Realmente tengo suerte.

Espero ser lo suficientemente bueno para él.

-Te invitaré a comer.
-Gracias, -sonreí- muero de hambre.

Él coloco su brazo y lo tome.

Mi sueño se ha vuelto realidad.

Voy a luchar porque se quede a mi lado.

---Akihiko---

Ha pasado una semana.

Una larga semana.

Después de haber hablado con Ishi.

Una parte de mi sé más tranquila.

Y más al saber que tendré una hija.

Pero...

Algo me falta.

Algo muy importante.

Y sé lo que es.

Vald...

Ese chico...

Estoy atraído hacia su belleza y personalidad.

Pero...

Después de lo que me dijo ese hombre y lo que escuche yo...

Me siento tan raro.

Tan mal.

Como si hubiera cometido el peor de los crímenes.

Necesito verlo.

Yo...

¿Estoy enamorado de él?

No lo sé.

Pero...

Tengo que hablar con él.

Tal vez...

Malinterprete las cosas.

¿O no?

Esto, es una pesadez.

Camine hacía el pequeño manantial que había en el bosque y me detuve al escuchar el chapoteo del agua.

Me adentre al bosque y me quede sorprendido ante la vista.

Vald estaba en el agua.

Nadando y desnudo.

Realmente no salgo de la impresión.

Es tan hermoso, simplemente perfecto.

¿Cómo deje ir a alguien como él?

Alguien tan hermoso y perfecto.

Tan puro.

Creo que lo juzgue mal.


-¿QUIÉN ANDA AHÍ? –exclamo.

Respire profundamente y salí de mi escondite.

-Soy yo Vald.
-¿A-Akihiko?
-Tenemos que hablar.

---Shinobu---

Miyagi ya lleva una semana y no hay cambios.

Tengo miedo.

Necesito que despierte.

Yo...

Me muero si...

-Miyagi por favor amor, no me dejes.
-Jamás lo haré.
-¿M-Miyagi? –me sorprendí.

Sus colmillos y sus ojos color vino lo hacen ver más apuesto.

Me aventé a sus brazos y me aferre a él.

-Pensé que tú...
-Aquí estoy mi amor, y ahora para siempre.