---Akihiko---

Ese hombre llamado Genji.

Sonríe con descaro.

Pude verlo mover su silla más cerca de Vald.

Me molesta.

Siento que mi cuerpo hierve de coraje.

No me agrada nada.

Es desagradable.

No me gusta que esté a su lado.

¿Por qué estaban juntos?

¿Acaso están saliendo?

No...

Eso no puede ser verdad.

No puedo permitirlo.

Yo quiero a Vald...

Espera...

¿Qué?

Esto...

Esto no está bien.

Yo tengo a Ishi.

Entonces...

¿Por qué pienso de esa manera?

Esto está mal.

-¿Usami? –dijo Vald colocando su mano sobre la mía.

La quite de inmediato y él me miro un segundo y desvió su mirada.

Quise decirle algo pero Genji soltó un bufido y se acercó al oído de Vald.

¿Qué tonterías le estará diciendo?

-Vald, -trate de llamar su atención- yo...

La mesera llego con algunos platillos, y comenzamos a comer.

En todo el tiempo Vald no me miro.

Es como si me ignorará.

Fue muy malo de mi parte actuar así.

Maldición.

Fui muy imprudente.

Joder.

Ese hombre a cada rato se recargaba en Vald.

Parecía como si fuera su perro fiel.

Maldición.

Yo también estoy aquí.

-¿Y cómo vas con el libro? –pregunto Vald.

Me miro por unos segundos y luego volvió la vista a su platillo.

-Bien, ya lo he acabado, me gustaría que lo leyeras y me dieras tu opinión.
-¿Enserio? –sonrió.

Esa sonrisa.

Quiero verlo más.

-Sí, tú serás mi lector oficial, es más, quiero que trabajes conmigo.
-¿Eh?
-Como mi asistente, sé que tengo a Aikawa pero ella es mi editora, te quiero a ti Vald, que me ayudes.
-Yo... –comenzó a decir.
-No puede, -dijo ese idiota- porque nos iremos de luna de miel.
-¿Ah? –me queje.
-Genji.
-Lo prometiste Vald. –hizo un puchero.

Maldito, lo está haciendo a propósito.

-Te ayudaré cuando pueda.

Sonreí y bese su mano.

---Yokozawa----

Tres...

¿¿¿¿¿TRES CACHORROS????

Esto debe ser una broma.

No...

Es un maldito sueño.

Eso es...

Cuando despierte estaré en el avión rumbo a Singapur.

Si...

Eso pasará...

-No es un sueño Yokozawa, estás embarazado de Zen.
-...
-Y sinceramente los embarazos de este tipo llegan a durar de 4 a 5 meses, aunque como serán 3 y son como "mestizos" no sé cuánto dure.
-A-Atsushi...
-¿Huh?
-¿Es una broma?
-No.
-¡¡¡JODER!!!
-Relájate...
-¿CÓMO ME PIDES ESO?

Él se sentó frente a mí y tomo mis manos.

-Sé que es difícil de asimilar Yokozawa, pero lo siento, -coloco su mano en mi vientre- son tres cachorros.
-E-Esto no...
-No los rechaces, necesitan formar un vínculo con su madre, que eres tú y su padre.
-Z-Zen... -murmure.
-No necesariamente él. –susurro.
-¿Huh?
-No es nada, ahora solo acéptalos, dales amor, que se sientan protegidos.
-Atsushi...
-Prepararé algo de comer, -sonrió- piénsalo.

Me quede en el sofá y me recosté un rato.

Me abrí un poco la camisa y comencé a acariciar mi vientre.

Se siente muy cálido.

Tanto.

Jamás lo había sentido así.

Mi piel es muy fría.

Entonces...

Cachorros ¿eh?

No suena mal la idea.

Tendré 3 hijos.

¿Serán lobos o vampiros?

Sean lo que sean los voy a proteger.

Son míos.

Aunque...

Lo mejor es no buscar a Zen.

Dejarlo ser feliz con esa chica.

Aunque me preocupa eso del vínculo.

Después de una hora Atsushi llego con una charola de comida.

Sonreí y lo mire.

-Sabes que no como eso, solo es apariencia. –comente.
-Lo sé, pero tus hijos necesitan alimentos, no solo sangre.

Suspire.

Tiene razón, a pesar de no saber si serán de mi especie o la de Zen ellos deben alimentarse bien.

-Gracias.

Él sonrió y beso mi mano.

-¿Quieres que busque a Zen?
-Yo... no lo sé.
-Para serte sincero, -me miro- desde el día que nos encontramos yo quise estar siempre contigo.
-¿Huh?
-Digo que te amo Takafumi. –susurro- Y me gustaría cuidar a estos cachorros como míos.

---Shinobu---

No puede ser.

¿Por qué él?

Tatsuhiko Shido.

¿Por qué vuelve a aparecer?

No quiero esto.

Yo...

Maldición.

¿Por qué?

¿Por qué ahora?

No quiero que nada malo le pase a Miyagi.

Y más ahora por su advertencia hace unos minutos.

***Flash-back***

-Shinobu-chin se quedará, -gruñó Miyagi- usted no tiene por qué obligarlo.
-Que humano tan curioso, -rio- se ve que es un gran alimento.
-NI TE ATREVAS A TOCARLO. –grite desesperado.
-Oh~ así que... -bajo su voz- ese humano es muy importante para ti ¿no?

Mierda...

Esto no...

-Supongo que no desearías que nada malo le pasara o ¿sí?

Joder...

-En ese caso sabes que debes de hacer ¿cierto?
-Maldito... -masculle.
-Iré a ver a Nowaki, así que ve a empacar tus cosas. –rio y se fue.
-No te dejaré ir, te amo, así que permíteme cuidarte. –me abrazo fuertemente Miyagi.

***Fin del flash-back***

Yo...

Maldición.

Por eso no quería darle una oportunidad.

Lo puse en peligro.

Shido es de armas tomar.

Aunque se muestre vulnerable y amable.

Es más loco.

Más sádico.

Maldición.

Debo cuidar a Miyagi.

Tengo que protegerlo.

-¡Shinobu!

Mire a Miyagi y él suspiro.

-No me asustes así, pensé que estabas en shock.
-Lo siento.
-¿Qué pasa amor?

Tal vez deba...

Borrar sus memorias.

Esa es mi habilidad.

Poder manipular en cierta forma los recuerdos.

Debo mantenerlo a salvo.

No quiero que le pase nada.

No otra vez.

-Tranquilo Shinobu, te protegeré.
-No puedes, ese tipo es muy poderoso tú...
-Conviérteme Shinobu-chin.
-¿Eh?
-Conviérteme en un vampiro como tú, -me miro- quiero protegerte.

---Nowaki----

Me sorprende la reacción de Hiroki.

¿En verdad no cree en los de mi especie?

Vaya...

A pesar de querer confesárselo...

Ese idiota lo arruino.

Y Hiroki...

Mi amado Hiro-san.

Será difícil que crea lo que le digo.

Realmente estoy en una situación difícil.

Y ahora peor aún.

Ese maldito rubio oxigenado.

Me molesta como ve a Hiroki.

Sus ojos iluminados.

Maldita sea.

Me siento enojado.

Tan frustrado.

Debo llevármelo lejos.

Cuando Hiroki se acercó conmigo suspire y lo mire.

-¿Un conocido? –pregunte.
-Sí, - un amigo de hace muchos años.
-Ya veo. –chasquee la lengua.
-¿pasa algo Nowaki?
-Solo me siento molesto.
-¿Huh?
-Ven Hiroki.
-¿A dónde vamos?
-Te llevaré a un lugar especial.
-Pero...
-Solo estaremos tú y yo...
-Nowaki.
-...
-¿Estás celoso?

Celoso...

Creo que esa palabra se queda corta con lo que siento.

Es algo mucho más fuerte.

Más visceral.

Joder...

Tome la mano de Hiroki y lo lleve hacía el jardín secreto.

Solo Kyo, Takafumi y yo lo conocemos.

-Nowaki.

No puedo hablar.

No quiero hacerlo.

Tengo muchas sensaciones que no sé cómo llamarlas.

Sensaciones humanas que no conozco.

Maldita sea.

Quiero descifrarlo.

Llegamos al jardín y lo lleve hasta una banca.

-Este lugar es...
-¿Te gusta?
-Es hermoso.
-Me alegro que te guste.

Mi castaño empezó a ver el lugar y sonrió.

Este jardín tiene todo tipo de flores.

Muchas que ni los humanos conocen.

Son especiales.

Simplemente así.

Y quiero compartirlo con alguien especial.

-No conocía que existían estas flores.

Suspire más calmado y lo abrace de la cintura.


-Sí estaba celoso.
-N-Nowaki.
-Me molesto mucho que ese tipo te hablara con confianza.
-Yo...
-Sé que es tu amigo, pero lo celoso nadie me lo quita. –sonrió.

Él se volteo y me miro.

Mi garganta comienza a arder.

Maldición, con todo lo que ha pasado no he tenido tiempo de alimentarme.

Joder.

No quiero atacar a Hiroki.

Esto.

-Esta flor roja huele muy dulce.

Es verdad.

Huele muy bien.

Tanto que...

La tome y comencé a masticarla.

-¿Nowaki? –sonrió divertido.

Siento alivio en mi garganta y una sensación de estar satisfecho.

Veo a mi castaño y lo beso apasionadamente.

Él se sorprende pero lentamente coloca sus brazos alrededor de mi cuello.

Creo que he encontrado un alimento que acaba con mi sed.

Pero lo que más necesito es a mi Hiro-san.

-Nowaki ¿Quién es él?

Al escuchar esa voz siento tanto coraje y resentimientos.

-Arashi. –escupo su nombre como si fuera el más vil de los insultos.
-Tanto tiempo. –sonrió.

Hiroki me sonríe a medias y trata de marcharse, pero no se lo permito porque lo sujeto de la cintura.

---Kyo---

No me esperaba que apareciera Katy, esa mujer.

En toda mi existencia.

Nunca conocí a una mujer tan más hostigosa.

Tan empalagosa.

La odio.

Y ahora que me beso.

El rostro de mi amado estaba triste.

Sin esperar más corrí a su lado y lo abrace.

-K-Kyo.
-Ella no es nadie importante para mí.
-...
-Eres malo Kyo, y yo que te amo tanto~

Gruñí y me aferre a mi amado.

Si ella está aquí es porque...

Ese chico.

No puede ser.

¿Habrá venido con Arashi?

Joder.

-¿CON QUIÉN VENISTE?
-¿Ahora si te intereso? –sonrió.

Maldita mujer.

-CONTESTA.
-No eres nada lindo conmigo, -hizo un puchero- vine con mi amo Shido y mi mejor amigo Arashi.

Maldición.

Las dos personas que no quería ver.

Mejor dicho...

Que nadie quería ver

Joder...

Ese chico será un dolor de muelas para Nowaki.

Y ahora que tiene a Hiroki.

Joder.

-C-Creo que me iré a dormir.
-Huele a humano, -sonrió- ¿es la cena?
-LE TOCAS UN SOLO CABELLO A ISHI Y TE JURO QUE TE V OY A DESCUARTIZAR, NO DEJARÉ QUE LO LASTIMES.

Ella me miro sorprendida y tome a mi amado de la mano.

-Velaré tu sueño Ishi, -susurre en su oído- mi dulce amor.
-K-Kyo. –se sonrojo.

Lo lleve hacía las escaleras y sin que pudiera decir nada me dio un beso casto.

---Ryu---

Me rechazo...

Kaoru me rechazo.

Debí haberlo sabido.

Creo que apresure las cosas.

No quería hacerlo pero...

No me gustaba verlo así, decaído, triste.

Lo amo tanto.

Pero mi lugar es solo su amigo de confianza.

Su paño de lágrimas.

Y apenas haríamos la mudanza.

A su departamento.

Creo que tendré que cuidarme solo.

No quiero que se aleje de mí.

Esto me pasa por acelerado.

Debí ocultar estos sentimientos.

Ahora debo enfrentar las consecuencias.