~Cierto día, en su ruin prisión... Cierto chico se enamoró... De una dama en libertad... fue un gran pesar... ¡Gran pesar!... Haaaah ..~

Un día en una penitenciaría, traían a varios prisióneros de guerra, entré ellos un grupo de adolescentes... Eran tres adolescentes, uno de cabello castaño claro, ojos color miel y una mirada que demostraba una gran tristeza por el infierno que había tenido que vivir pero a la vez amable, de fisionomía delgada recibía el nombre de Remus, el otro joven era de cabello castaño oscuro al igual que sus ojos y usaba lentes, tenía una mirada más dura pero sin llegar a ser cruel, más bien una mirada de fortaleza el nombre de ese joven era James, su fisionomía era más fornida que su antiguo compañero... Y el último joven era el que más resaltaba entre los demás... Un joven alto de cabello hondulado largo color negro azulado como las alas de un cuervo, ojos de un color negro y tonos plateados únicos y su mirada era desafiante, aquél jóven contaba con un cuerpo formado... El nombre de ese joven era Sirius Black.

Los tres jóvenes habían sidos capturados en un enfrentamiento de hace tres días y los habían llevado a aquella prisión para encerrarlos y ponerlos a trabajar.

Rector: Se encuentran aquí por ser prisióneros de guerra y trabajaran picando piedras y demás cosas... Será mejor que se comporten o me veré obligado a enseñarles disciplina, ya sea adiestrando los como simples animales...  [Pasando enfrente de todos los prisióneros y se detiene enfrente de aquél joven de ojos negros planteados y lo mira fijamente] fuí claro.

Sirius: .... [Mirando al piso y no contesta].

Rector: mírame a la cara cuando te hablé y responde [golpeándolo en el estómago con la macana].

Sirius: ¡AHG!  [Arrodillándose de dolor].

El joven de nombre James al ver cómo estaba su amigo quizo ir a socorrerlo pero fue detenido por su otro amigo Remus.

Prisionero James: ¿¡que hacés Remus!? ¡suéltame! [forcejeando y hablando en voz baja].

Prisionero Remus: no James... Sólo lo empeorarás [deteniendo a su amigo].

Rector: repito... SÍ, FUÍ CLARO [mirando al joven en el suelo]....

Sirius: [levantando la mirada y mirándolo con irá] ... COMO EL AGUA...

Rector: .... Lleven los a sus celdas [retirándose de ahí].

Fueron pasando los días en esa prisión, eran tan monótomos y sin esperanzas.  Todos los días se encontraba en la parte trasera junto a otros reos picando piedras, hasta que un día el joven prisionero se encontraba tan cansado y el momento que decidió tomar un descanso vió a un joven que se encontraba paseando acompañado de unos guardias del otro lado de la reja, Sirius se encontraba totalmente cautivado por aquel joven de cabello negro y piel de porcelana.

Sirius: [mirándolo cautivado] (es muy lindo)

Prisionero James: ¿Que ves canuto? [Dándole una palmada en la espalda].

Sirius: [desconcentrandose por el golpe] espera cornamenta [lo mira rápido y después voltea a ver de nuevo al joven y ya no lo encuentra] (maldición).

Prisionero James: ¿Qué veías? [Buscando algo con la mirada].

Sirius: nada James.... (Nah que importa) [volviendo a trabajar].

~Condenado y sin libertad... Mis heridas jamás sanarán... pues entre tú y el yo inmoral... barreras siempre habrán... Siempre habrán~

Sirius: AHG [quejándose de dólor].

Prisionero Remus: lo siento [curando las heridas de su amigo]... No debiste contestarle Sirius

Sirius: se le merecía el cabron... Sí cree que voy a dejar que me humille, se equivocó de sujeto [totalmente enojado y haciendo gestos de dólor].

Prisionero Remus: Sirius no vas a ganarles.... Sólo ignora sus provocaciones [terminando de venderlo su abdomen] listo terminé.

Sirius: [con los ojos cerrados].... (Ese chico...) [Recordando al joven de cabello oscuro]... (¿Quién será?).

Prisionero Remus: Sirius... Sirius... Sirius [llamándolo]  ¿Me estás escuchando?

Sirius: ¿¡eh!? ¿Que? ... lo siento moony... Estoy un poco distraído....

Prisionero Remus: ¿Ocurre algo? .... Sabes que puedes contar conmigo para lo que necesites [sonriéndole amablemente].

Sirius: .... Gracias Remus... Es que hace unos días ví a un joven del otro lado de la reja....

Prisionero Remus: ¿y? [Viéndolo con intriga]

Sirius: pues.... Que te puedo decir... Era la persona más hermosa que haya visto jamás... La más hermosa flor, que digo parecía un hermoso ángel custodiado por dos demonios [poniéndose de pie con euforia]...

Prisionero Remus: ¿Como puedes estar seguro de eso? Sólo lo viste una vez Sirius.... Es posible que jamás lo vuelvas a ver..

Sirius: [sentándose de nuevo deprimido] tienes razón... Es posible que jamás lo vuelva a ver... (Pero...me encantaría poder volver a verlo).

Así pasaron los días, los cuales siempre era igual, el iba a la parte de atrás sólo a picar piedras todas las tardes por castigo a no ser disciplinado.

Sirius: [se encontraba picando piedras maldiciendo al rector] (puta madre... Puto celador... sólo fue una pequeña broma... Necesita que alguien se lo coja para ver si así se le quita lo amargado...)... (¿Porque siento que alguien me mira?) [Detiene lo que hace y levanta la mirada y se sorprende a ver quién es la persona que lo mirá] ¿!.

Era aquél joven de cabello negro y piel de porcelana se encontraba observándolo fijamente lo cuál lo extraño y al mismo tiempo le alegró volver a verlo y que lo estuviera notando, vió que él joven se percató de fue descubierto que se encontraba viéndolo.

Sirius: [viendolo fijamente] (ya vió que lo descubrí... ¿Ahora que hago?)... [le dedicó una sonrisa coqueta].

Jóven en libertad: [sonrojo al notar aquella sonrisa]

Sirius: [viendo que el chico se sonrojo] (¿se sonrojo?... Sonrojado se ve más lindo) [sonriendo sinceramente].

Sirius tuvo tantas ganas de acercarse más a la reja y poder hablarle a  pero el temor de que alguien lo viera y le sancionarán otra vez y a la vez le ocasionará problemas a aquél joven lo detuvo en su lugar...

Pasaron unos minutos en que ambos jóvenes sólo se miraban entre sí...

Sirius: (rayos... Está es mi oportunidad para hablarle y solo me estoy quedando como idiota mirándolo...Quiero hablar con el... Ya a la chingada le hablaré... Pero... ¿Y si lo meto en problemas?) [Apretó con fuerza el pico de piedra y vio al joven a los ojos].

El joven prisionero vió como aquél joven abrió una libreta y empezó escribir a toda prisa en él.

Sirius: (¿Que está haciendo?).

Cuando el joven terminó de escribir arrancó la hoja y empezó a formar un avión de papel con él para después arrojarlo con todas sus fuerzas hacia la reja. El avión de papel pasó atraves de la reja y voló en dirección a aquél joven.

Sirius: ¿¡!? [Miranda con asombro el avión de papel] (¡es un avión de papel! ¿Para mí?) [soltó de prisa el pico para picar piedras y extendió sus brazos hacia aquel avión tomo aquél avión de papel entré sus manos y no dudó en desdoblar lo] (es... ¿Una carta?) [Comenzó a leer que había en él y al terminar de leer miro con asombro aquél joven] (¿Es encerio? ¿No está jugando me una broma?].

Joven en libertad: [le sonrió y en su mirada se notaba que esperaba una respuesta y no había malicia alguna en él] y le afirmaba con su cabeza]

Sirius: [le dió una sonrisa sincera asintió hacía el joven] (me encantaría).

Joven en libertad:  [sonrió enormemente hacia el prisionero y se despidió con la mano del joven y salió de ahí].

Sirius: [se despidió del joven y lo miro irse con una sonrisa en su rostro] (ya se va...) [Miro la carta en sus manos y la abrazo recordando lo que tenía escrito] { Me gusta tu sonrisa.... ¿Quieres ser mí amigo?}

En eso los guardias empezaron a llamar a todos de regreso a sus celdas.

Sirius: (¿ya es hora?)[vio por última vez por donde se fue aquél joven y se dirigió hacia dentro de la penitenciaría] (ojalá vuelvas mañana... Talvez ahora sea yo el que te contesté con una carta).

~Una carta te dedicaré... Tendrá forma de avión de papel... Así lo que siento cruzará está cruel pared, vuela y vé, ¡Vuela y vé!... Ahh... Seré libre un día... aunque sea una brutal... Ficción... Ficción... ¡¡SOY LIBRE DE SOÑAR!!

Durante todo ese día Sirius se encuentro de tan buen humor que ni siquiera le contesto a ninguna de las provocaciones de el rector... Incluyendo en la hora de la comida.

Prisionero James: ¿Que mosca te pico Sirius?

Sirius: [recordando al joven y la carta que tenía guardada entre sus ropas] .... [Suspirando como enamorado]

Prisionero James: ¡haz algo Remus, Sirius está más tarado que de costumbre y ni siquiera me hace caso! [Señalando a su amigo]

Prisionero Remus: tranquilo James... Horita despierto a Sirius:
... [Se acerca a su amigo y lo toma del hombro moviendo lo suavemente] Sirius.... Sirius... Despierta Sirius

Prisionero James: así nunca va a despertar Remus... Mira así se hace [se acerca a Sirius] ¡DESPIERTA DE UNA VEZ IDIOTA! [Le grita a todo pulmón en su oído y empieza a sangolotearlo violentamente].

Sirius: [despierta de su recuerdo] ¿¡Que te pasa James!? ¿Por qué tanta violencia? [Sobándose su oído].

Prisionero James: eso es lo que nosotros queremos saber, te quedaste como idiota por horas Sirius...

Sirius: no seas exagerado James.

Prisionero James: dile Remus [mirando a su amigo en busca de apoyo].

Prisionero Remus: James tiene razón Sirius, haz estado muy distraído desde que regresaste de tu castigo.... ¿Te encuentres bien? ¿No te paso nada?.

Prisionero James: ¡No me digas que te violaron y por eso estás así! Dime quién fué y le vamos a partir su cara.

Sirius: [mirándolo con mala cara] superaste tu nivel de estupidez James.... Nadie me violó...

Prisionero Remus: ¿entonces?... ¿Que ocurre Sirius? [Mirándolo con intriga]

Sirius: bien... Lo que ocurre- [se detiene al ver pasar un custodió cerca].

Prisionero James: ¿sucede?

Sirius: aquí no puedo decirles.... Vamos a la celda [susurrando en voz baja]

Sirius se puso de pie dejando su plato lleno y salió de ahí en dirección a su celda y atrás de él iban siguiéndole sus amigos.

Prisionero James: [entrando a la celda y sentándose en la cama] bueno ya estamos aquí, ahora sí puedes decirnos...

Sirius: a eso voy James.... Remus recuerdas que te conté del joven que ví al otro lado de la reja y que era tan hermoso que me cautivó.

Prisionero Remus: sí... Y eso que tiene que ver?

Sirius: hoy la volví a ver y hablamos.

Prisionero Remus: ¿Que? [Mirándolo con asombro]  ¿hablaste con él? ¿Como? ¿Cuando? ¿Que te dijo?

Prisionero James: wow wow wow tiempo fuera, no entiendo nada de lo que están hablando [mirando a ambos].

Prisionero Remus: lo siento James, horita te explico [le cuenta todo lo que la otra vez Sirius le dijo y lo que acaba de decir apenas] y pues al parecer Sirius hablo con él hoy.

Prisionero James: wowww.... Eso es genial Sirius, te la rifaste amigo ligas a quien sea aún estando en prisión [dándole ánimos] y bien ¿Que te digo? [Intrigado por la historia].

Sirius: bueno.... En realidad no hablamos.

Prisioneros James y Remus: ¿que?

Sirius: bueno si hablamos pero no como tal hablar... Más bien hablamos pero sin usar palabras [intentado explicarles].

Prisionero James: no entiendo, como que hablaron pero sin hablar.

Prisionero Remus: yo tampoco entiendo Sirius, ¿podrías ser más específico?

Sirius: bien.... Él habló conmigo mediante ésto [sacando el avión de papel de su camisa] ven.

Prisionero Remus: ¿Una carta? Muy ingenioso de su parte Sirius.

Sirius: lo sé, y lo que me escribió es fantástico, tiene una hermosa letra.

Prisionero Remus: me alegro mucho por ti Sirius.

Prisionero James: espera.... ¿Sabes leer Sirius?

Sirius y Remus se le quedan viendo cómo si le hubieran salido otra cabeza.

Sirius: claro que se leer cornamenta,  ¿Por qué dices eso?

Prisionero James: por que jamás te he visto agarrar un libro, pensé que era un deletreado.

Sirius: .... Idiota.... Dejando de lado las estupideces de cornamenta y regresando a lo de la carta de mi ángel.

Prisionero James: ¿tú ángel?

Sirius: sí, mi ángel así le puse... No sé cuál es su nombre así que le pondré ángel, ¿Alguna interrupción más James?

Prisionero James: Nop [sonriéndole a Sirius con burla]

Prisionero Remus: dejando de lado eso ... ¿Que dice la carta?

-Sirius: emmm.... Eso es confidencial [escondiendo la carta en su camisa]

-Prisioner James: nos vas a dejar con la intriga? [Ve que Sirius asienta con la cabeza] eso es cruel amigo...

-Prisionero Remus: ¿y le vas a contestar?

-Sirius: claro... Aunque aún no se con que... No tengo papel ni lápiz donde escribir... Se acabó... [Deprimido].

-Prisionero James: eso déjamelo a mí [le sonrió a su amigo saliendo del lugar].

~Si te quedas aquí conmigo aunque sea una ilusión... Librerías mí pobre y prisiónero corazón... Por favor déjame aunque sea conocer tu voz... Aunque el rumbo de esta emoción sea la perdición... Desde mi adversidad... Te puedo contemplar... Y fuerzas me das... para un poco feliz estar...~

Así paso las horas y justo a la hora en que todos se retiraban a sus celdas a descansar, James llegó a la celda de su amigo Sirius.

-Prisionero James: Canuto toma [le avienta una libreta y un lapicero].

-Sirius: ¡James! [Tomando las cosas en sus manos] ¿De dónde sacaste ésto? [Mirando a su amigo con incógnita].

-Prisionero James: digamos que llegue a un arreglo con un guardia que no deja de coquetearme... Me debes una grande.

-Sirius: ¿¡Que!?  James ésto... No puedo aceptarlo.

-Prisionero James: vamos Sirius no hagas que el dolor en mi tracero sea  embalde... Además no fue tan malos ese Riddle es ardiente [retirándose con dirección a su celda].

-Sirius: [viendo a su amigo ir sé] gracias James... [Empieza a escribir una contestacion a su ángel].

Al día siguiente Sirius espero en el mismo lugar de trabajo con esperanzas a que su ángel apareciera, sonrió enormemente cuando lo vió aparecer con un avión de papel en mano y sin esperar a más el sacó de sus ropas su carta que ya tenía forma de avión de papel y la arrojó con fuerza en dirección a él. Su cara se llenó de ternura al ver a su ángel asombrarse por su carta y ver cómo se esforzaba para atraparla con éxito.

~Cierto día de parte de tí... comencé yo a recibir... tus aviónes de papel que eran dicha para mí... Para mí... Pero de pronto un día... Me dijiste sin rodeos de más... Muy lejos me tengo que marchar así que bye bye... bye-bye... Ahh... con un dólor infernal... me queda la muerte esperar... jamás... Grité... hasta enronquecer ~

Así paso el tiempo ambos se escribían sin falta, cada vez más el amor entre ellos crecía a un grado que ninguna otra persona podría comprender... Pero el destino es tan cruel que la felicidad no duraría para siempre.

-Sirius: [se encontraba esperando a su pequeño ángel apareciera] (se está tardando un poco... ¿Le habrá pasado algo?... Vamos Sirius estás de paranoico) [a lo lejos lo vio llegando] (ahí está) [saludó con una sonrisa pero esa sonrisa desapareció al ver que su ángel no le regreso el saludo] (que!?)

Aquél joven lanzo su avión de papel a Sirius, sin saludar si quiera, tenía una mirada triste y cansada.

-Sirius: [mira extrañado al joven al ver que está vez no lo saludo] ¿¡!?  [Toma el avión de papel en mano y empieza a leer] .... [Al terminar de leer levanta la mirada y lo mira con sorpresa y espanto en su rostro] (no... Esto debe ser una broma... No es cierto) [mirando a su ángel en busca de respuestas].

-Joven en libertad: [le brinda una sonrisa falsa al joven y se da la vuelta para comenzar a avanzar] ....

-Sirius: [aprieta la carta entre su mano y lo ve alejarse] (¡No! ¿Por que te vas? ... No me abandones)... ¡No te vayas ángel mío! ¿Ya no vas a volver verdad? .... ¡Eh guardado todas las cartas que me haz dado.... Te lo prometo... Te esperaré hasta que vuelvas conmigo! [Gritando con todas sus fuerzas].

El joven de cabello negro se quedó totalmente quieto al escuchar la voz de Sirius  por primera vez...  Y más al oír todo lo que le había dicho... Al terminar de escucharlo trato de voltearse para verlo pero se detiene y comenzó a alejarse.

-Sirius: [lo ve alejarse y  hasta que lo pierde de vista, se deja caer al suelo de rodillas, empieza a llorar soltando un grito de dólor] ¡AHHHHHHHH! (no importa cuánto tiempo pasé o que ocurra... Te esperaré) [sin soltar aquella carta] {Lo siento.... Me voy a ir lejos a un lugar donde no me puedes seguir... Pero por favor, sin importar que pasé vive, sigue adelante y nunca dejes de sonreír}.

Ambos jóvenes se despidieron con lágrimas en sus ojos pero ambos con la ilusión de algún día cumplir esa promesa de volverse a encontrar y estar juntos para siempre, sin saber que un guardia había presenciado todo.

~Si estuvieras conmigo ya no sufriría más... Una bella sonrisa en mi podrías dibujar... Aunque ni siquiera se tú nombre te llegue a amar... Y sentí que mis oscuros días hacías brillar... No te puedo hablar, ni te puedo hallar... no puedo salir, no lo puedo resistir~

Desde el día en que se despidieron Sirius estaba decaído, había entrado en una depresión, aduras penas comía por que sus amigos lo obligaban.

-Prisionero Remus: vamos Sirius debes comer... [Intentando que coma un bocado] James ayúdame.

-Prisionero James: vamos Canuto lo vas a superar.

-Sirius: no James.... Él era todo para mí, era mi luz, mi esperanza, MI VIDA... Y ahora ya no está.

-Prisionero James: entonces por eso debes de comer, para poder verlo de nuevo.

-Prisionero Remus: exacto Sirius... Debes comer por él...

-Sirius: .... [Empezando a comer lentamente].

Así fueron pasando los días, hasta que un día se encontraba  sentado en su celda releyendo las cartas que le había enviado su pequeño ángel... Tenía la esperanza de que algún día volverían a reencontrarse y al fin poder ser felices juntos.

-Sirius: [leyendo una carta] .... (Mi pequeño ángel... No hay día ni noche que no piense en tí).... [Voltea al escuchar que alguien entra a su celda]... ¿¡Eh!? (¿Ellos quienes son?).

Entraron a la celda cinco hombres uniformados y entré ellos se encontraba el Jefe de la prisión.

-General (Tobías): [acercándose al joven] (así que tú eres el que enamoró a mi hijo)... [Le arrebata la carta que tiene en sus manos]

-Sirius: ¡No! [Intentando recuperar la pero es sujetado por los otros cuatro] ¡Devuelvamela!... Eso me pertenece [luchando para soltarse].

-General (Tobías): [mirándolo con odió al muchacho] .... Denle una lección.

Los cuatro soldados empezaron a golpear a Sirius con saña, el intentaba defenderse pero eran muchos contra él, sumando que se encontraba débil por haber dejado de comer y dormir acabo cayendo al suelo donde lo empezaron a patear.

-Sirius: [protegiendo su cara y cabeza de las patatas] (¿Porque hacen ésto? ¿Quienes son ellos?)

Los soldados dejaron de golpearlo al ver que ya empezaba a sangrar y ya no se movía mucho.

-Sirius: [subió su mirada a la persona que tenía su carta, empezó a moverse con dificultad] Devuelvame la.... Devuélveme la... Es lo único que me queda de él... [Arrastrándose para llegar a su carta].

-General (Tobías): [mirándolo con malicia y burla] (así que es tan importante para tí)... [Toma la carta con las dos manos y la rompe en pedazos enfrente del muchacho] ya no te queda nada....

-Sirius: [mirando con horror como desaparecía el único recuerdo de su ángel y de su confesión de amor] ¿¡!? (No...) ¡AHHHHHHHH! [Gritando a todo pulmón].

Sirius lleno de irá se pone de pie sin importarle el dólor que su cuerpo sentía y se dirigió a Tobías con irá y le inserto un puñetazo con todas sus fuerzas en el rostro al grado que hizo que él General Tobías perdiera el equilibrio tirandolo... los demás oficiales se encontraba asombrados por lo que había hecho y prosiguieron a sostenerlo de nuevo.

-General (Tobías): [en el suelo, se limpia su boca con su muñeca y descubre que tiene sangre] (¡Tú! .... Maldito mocoso) [apunto de golpearlo pero se detiene ya que le llega el recuerdo de su hijo que era aquél joven del cual Sirius se había enamorado] .... Saquenlo de mi vista.... Ya saben que castigo tiene agreder a un oficial [retirándose de ahí, mientras los demás oficiales escoltaban a un lugar al prisionero].

~Hasta que llegó mi condena final... ahora sé que junto a tí no podré estar... este mundo me da absolutamente igual... Destrozado ¿Mi corazón por que ha gritado?... Quisiera tener un poco más de vida ya que ahora ha empezado a sanar mí herida, te quisiera ver aunque sea una vez más, te extraño... te extraño... Te extraño...~

Unos soldados  llevaban arrastrando en una mala condición a Sirius, los amigos al ver que se llevaban a Sirius en mal estado intentaron hacer algo sin poder conseguirlo.

-Prisionero James: [al ver que se llevan a su amigo intenta correr hacia] ¿¡Que hacen!? ¿¡Adónde se lo llevan!? ¡Sirius! [Siendo detenido por un oficial].

-Oficial (Riddle): ¡detente! [Sosteniendo lo] ¡suficiente James! ¡No puedes ayudarlo!

-Prisionero James: [viendo con impotencia y con lágrimas en los ojos como se llevan a su amigo].

-Prisionero Remus: [llorando en brazos del doctor de la prisión que lo había detenido]

Los oficiales entraron a una celda oscura y aventaron sin compasión al prisionero al suelo, Sirius empezó a moverse con dolor para quedar arrodillado.

-Sirius: [arrodillado con la cabeza agachada] (¿Porque ocurrió ésto?)...

-Oficiales: Esperó te guste tú nueva celda... En esta celda no existe ninguna ventana... Morirás en este lugar sin volver a ver la luz del sol... [ambos oficiales empezaron a cerrar una enorme puerta].

-Sirius: (¿Qué?... No... ¡No puedo morir aquí¡... ¡El puede volver, se lo prometí!) [Se pone de pie y voltea a ver a los guardias que cierran la puerta en su presencia quedando en total oscuridad] ¡No! [Empezando a golpear la puerta] ¡Déjenme salir! .... ¡Le prometí que lo esperaría! [Empezando a golpear más débil y dejándose caer al suelo]  se... Se lo prometí... [Empezando a derramar lágrimas].

~Todo lo que vivimos nunca más regresará... Muchos recuerdos dulces recorrieron mi mirar... Momentos que uno a uno me brindaste con bondad... Son el alimento que mí alma en mi vida nutriran... Y aunque la maldad de este clima arrase con el pastizal... Una flor algún día florecer tu mirarás...  Aunque viví en un mundo diferente a los demás... Intenté alcanzarla de una forma irracional...~

Fueron pasando los días en los que Sirius se encontraba herido y encerrado en una total oscuridad en la cual no había momento en que no recordara a su pequeño ángel de ojos negros.

-Sirius: .... [Sentado en el suelo recargado en una pared] cuántos días han pasado... Ya no recuerdo... Por el hambre que tengo deduzco que dos semanas.... Voy a morir... [Su mano siente una hoja de papel en el suelo] ¿eh? [La levanta para con la poca luz existente poder ver qué era una de las cartas que aquél joven le había dado] (es su...) No... No puedo morir... Le prometí que nos volveríamos a ver... Yo sé que estaremos juntos... [Sonriendo mientras abraza contra su pecho la carta como si fuera su mayor tesoro].

Los días se convirtieron en semanas, en los que él seguía ahí encerrado sin luz, alimento o contacto con otras personas... Sirius empezaba a desmayarse con mayor frecuencia, por las pocas fuerzas que tenía se encontraba tirado en el suelo.

-Sirius: [tirado en el suelo] debo... Volver... [Empezando a cerrar sus ojos] a su lado... [Cierra sus ojos cayendo desmayado].

El joven había caído desmayado pero soñando que se encontrabaen un campo lleno de pasto verde.

-Sirius: ¿Eh? [Viendo al rededor] ¿En donde éstoy? [Al ver al frente una luz le ciega y hasta que sus ojos se acostumbran a la luz del sol, lograr ver a lo lejos a su ángel parado dandole la espalda] ¡TÚ! [Empezando a correr hacia él con desesperación en alcanzarlo] ¡No te vayas!...

Cuando estuvo apunto de alcanzarlo, aquella imagen se desvaneció haciendo despertar al prisionero.

-Sirius: [despertando mientras respira agitado con lágrimas en sus ojos].

~Por favor aunque mí final esté por suceder... Llévame para hablar con ella por última vez... Solo estoy en un cuarto oscuro y sin ventilación... Ya no quedan ni huellas de esta mancillada voz... Y aunque en mi interior... Me quema este dólor... sí quiera déjame, el consuelo de saber... DE TÚ NOMBRE...~

-Sirius: [de rodillas escupiendo sangré] No... Por favor... Quiero hablar con él... Por una última vez [poniéndose lentamente de pie y acercándose a la puerta empezando a golpear la]... ¡SÓLO UNA ÚLTIMA VEZ! [Gritando con todas sus últimas fuerzas mientras empezaba a ver borroso].

El joven empezó a arrastrarse hasta el lugar donde se encontraba la carta de su ángel, tomándola en sus manos empezó a llorar sin control.

-Sirius: Te lo prometí... No importa cuánto tiempo pasé... Te voy a esperar... [Sonríe con tristeza] me hubiera gustado saber tu nombre al menos antes de....

El cuerpo sin vida del joven cae al suelo dando un sonoro golpe... Apesar de tener su ropa rota y su cuerpo lastimado, tiene una leve sonrisa en sus labios y entre sus manos se encuentra una carta.

~Fin~....