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Capítulo 38: Problemas internos


1 semana después de los eventos sucedidos en la base.

En un pent-house, el cual es grande y espacioso, los muros de color blanco y el piso de madera, muebles de color café oscuro, un ventanal que lleva al balcón en donde hay 2 muebles individuales de color azul oscuro y una pequeña mesa de madera, también hay escaleras que llevan a otros cuartos, hay una pantalla plana en la sala y hay varias ventanas que permiten ver la ciudad y en el techo hay una piscina.

Alan: Si, lo sé-Está hablando por teléfono en el balcón mientras ve el cielo nocturno-Ellos 5 se quedaran conmigo... Ernesto y Mérida también... entiendo... suerte con los tuyos, Gin-Cuelga y se le acerca Mérida usando un vestido azul celeste.

Mérida: ¿Estás bien?-Pregunta preocupada.

Alan: Si-Por unos momentos recuerda su encuentro con Robín en la base-¿Cómo andan los chicos?

Mérida: No tan bien.

Alan: ¿Enserio? Debieron pasarlo muy mal ahí, ojala hubiera estado con ellos para ayudarlos ¿Dónde están?

Mérida: Mei salió a alguna parte y no ha vuelto, Loki está en el sótano del hotel entrenando, Adrián está en la cocina, y Anne y Diego están en sus cuartos y no han salido desde que vinimos.

Alan: ¿Y Ernesto?

Mérida: En el bar.

Alan: ¿Dónde más estaría?

015: ¡Alan! ¡Tengo hambre!-Gritó desde la sala mientras ve televisión.

Alan: Ve a la cocina y dile a Adrian que te sirva algo.

015: ¡Tengo flojera!

Alan: Ese es tu problema.

Mérida: ¿En serio nos quedaremos con él? Es uno de los apóstoles e intentó matarte.

Alan: Le dije que pausáramos la pelea, eventualmente lo olvidara y todo resuelto.

Mérida: ¿Y qué haremos con el asunto del mesías y los apóstoles?-Luse preocupada y asustada.

Alan: Arasto y los otros científicos se están encargando de eso-Pone su mano en el hombro de la chica y la mira fijamente a los ojos-Tranquila, no te preocupes.

Mérida: ¿Cómo no hacerlo con todo lo que ha pasado?

Alan: Faltan unos días para navidad, deberíamos decorar todo el pent-house y hacer un intercambio de regalos.

Mérida: Suena bien-La joven sonríe, pero aun sigue reflejando algo de tristeza-Nos vemos, tengo que regresar a casa.

Alan: Puedes quedarte aquí con nosotros si quieres.

Mérida: No, quiero estar con mi hermanita ¿Quién sabe cuánto tiempo me quede con ella?

Alan: ¿Quieres que te abra algún portal o algo para que llegues más rápido?

Mérida: Gracias-Aparece un portal junto a la pelirroja, esta se despide y pasa por el portal-Habla con ellos, necesitan a alguien.

Alan: Muy bien, lo haré.

Mérida: Suerte-El portal se cierra.

Alan: Necesito mas que suerte-Camina hasta la sala y ve a 015 arrastrándose con una mano hasta la cocina-¡¿Qué se supone que haces?!

015: Tengo flojera.

Alan: Ah-Suspira mientras se sienta en el sofá.

015: ¿Te sucede algo, Alan?

Alan: No es a mí al que le sucede algo, es a los chicos, necesito hablar con ellos, son muy jovenes para esto, no se en que pensé cuando los metí en esto.

015: Te ayudare con eso.

Alan: Gracias-Frente al enmascarado aparece una hamburguesa del tamaño de su cabeza-Ahi tienes.

015: ¡Gracias!-Grita de emoción.

Frente al cuarto de Diego.

Anne: Diego, abreme, por favor-Dice mientras toca la puerta-Diego... lo siento, enserio, lo siento mucho ¿Me puedes perdonar?

Diego estaba acostado en su cama tapado por la sabana en posición fetal ignorando lo que decía Anne.

Anne: Muy bien-Se retira a su cuarto.

Al día siguiente, en la cocina.

Alan: Buenos días-Entra a la cocina usando un mono gris y una camisa blanca.

Al entrar ve que solo están Adrián que está sirviendo la comida, Ernesto, 015 y Anne.

Adrian: Buenos días ¿Durmió bien?-Dice con su gran sonrisa.

Alan: ¿Y los demás? ¿Qué hora es?-Se sienta en la mesa.

Adrian: Loki está en el sótano, le mande su desayuno, creo que no ha dormido en toda la noche; Mei tampoco ha vuelto desde ayer y Diego no ha salido de su cuarto.

De repente llega Diego con una mirada seria y neutral, todos se le quedan viendo hasta que se sienta en la mesa y Adrián le entrega su desayuno.

Adrian: Provecho-El desayuno era pan tostado con huevo frito, fresas y waffles con miel enzima.

Anne: Am... Diego...

Diego: ¡No me hables!-Dice serio con un tono molesto y empieza a comer.

Adrián: ¿Cómo está tu ojo?

Diego: Bien-Su ojo izquierdo se había vuelto amarillo por tomar la sangre negra del mesías.

Alan: ¿Saben? Pronto será navidad, traeré algunos adornos y haremos un intercambio de regalos ¿Qué les parece?-Todos estaban en silencio-¿Nada?

Ernesto: Iré con mi esposa a celebrar navidad con ella, no cuenten conmigo.

Alan: Saludamela de mi parte.

Adrian: ¿No celebraras navidad con tu familia, Alan?

Alan: No los pienso dejar solos, ellos pueden pasar una navidad sin mí (Además que ustedes no pueden estar solos en momentos como estos).

En el sótano.

Loki está golpeando un saco de boxeo, el joven está muy sudado, no tiene camisa y desprende un mal olor, anda golpeando el saco con ira y apenas logra moverlo.

015: Lo haces mal.

Loki: ¿Eh?-Le da un escalofrío y voltea hacia atrás-Eres tu ¿Qué haces aquí?

015: Alan está preocupado por ustedes, le hacen daño, y yo soy el único que lo lastimara.

Loki: Déjame, estoy entrenando-Vuelve a golpear el saco.

El enmascarado empuja al joven castaño, se pone en posición y golpea el saco rompiéndolo a la mitad y haciendo que se saliera su relleno de paja y aserrín.

Loki: ¿Qué te sucede? ¡Lo estaba utilizando! ¿Con que quieres que entrene ahora?-Pregunta molesto.

015: Eso no te hará más fuerte, es inútil-Se acerca al castaño y este retrocede hasta ser acorralado en la pared-Yo te entrenare.

Loki: ¿Cómo? ¿Estás loco?

015:...Tal vez, pero sé lo que digo.

Loki: No, gracias, sé que puedo hacerlo por mi cuenta-Empuja a 015 para salir del rincón e ir por otro saco, pero el enmascarado agarra su hombro y el castaño voltea-¿Qué?

015: Pelea contra mi sino crees que puedo entrenarte.

Loki: ¿Por qué la obsesión por entrenarme?

015: No tolero ver a alguien débil como tú, te ayudare a hacerte más fuerte.

Loki: Puedo hacerlo solo, no necesito ayuda de...-Se detiene al darse cuenta que el puño de 015 está a 1 centímetro de su cara-¡Wow!-Salta hacia atrás sorprendido.

015: Con un solo golpe pude haberte matado, Alan lo pudo haber evitado o se hubiera protegido, tú no pudiste hacer nada, ni verlo.

Loki: Es que... es Guardián el que pelea, yo solo me quedo detrás de él.

015: ¡Sin excusas!-Le da un suave golpe en la cabeza.

Loki: ¡Aich! Tu mano es muy dura-Sangre le sale de la cabeza-Eh...-Se desmaya y 015 lo atrapa.

015: Ups-Mira alrededor-Tomaré tu silencio como que aceptas que te entrene.

En el balcón.

Diego está sentado en la orilla del balcón, está mirando a las personas abajo con una mirada indiferente.

Adrian: ¿Piensas saltar?-Llega con 2 vasos con jugo de fresa.

Diego: No, esas sillas son incómodas-El castaño le entrega uno de los vasos y el pelinegro lo agarra.

Adrian: Creo que las fresas le hacen bien al corazón, eso creo, no me acuerdo.

Diego: Gracias-Toma un sorbo-Sabe bien.

Adrian: Aprendiste modales, buen chico.

Diego: No soy un perro.

Adrian: ¿Tu ojo está bien?

Diego: Deja de preguntarme eso-Suelta el vaso por accidente y cae junto a una mujer la cual casi le pega y brinca de un susto.

Adrian: Metete, entra, rápido-Agarra al pelinegro del torso y lo mete arrastrándolo a la en donde se encuentran con Anne conectando un play 4 a la pantalla plana.

Anne: Oh... em...-Trataba de no mirar a Diego.

Diego: Gracias por la bebida, Adrián-Se retira a su cuarto.

Anne: Adrian ¿Jugamos?-Pregunta entregándole un control.

Adrián: ¿Hasta cuándo estarán así?

Anne: No lo sé-Dice triste-Se que hice lo correcto, lo salve de ser controlado por el mesías ¿Por qué me siento tan mal?

Adrian: Juguemos, te pondrá de buen humor-Su sonrisa contagio a la castaña.

Anne: Ok ¡Te venceré!

Adrián: Ya veremos.

En el cuarto de Alan.

Alan: Necesito apoyo, no puedo hacer esto solo ¿Segura que no puedes?-Habla por teléfono con Mérida.

Mérida: Lo siento, no puedo ¿Que hay de tus amigos?

Alan: Carter está en quien sabe donde, Alicia está ocupada en la escuela de arte y Yemen salio del pais-Tocan el timbre del pent-house-Te llamo más tarde, saludame a tu hermana, adios.

Mérida: ¡Bye-Bye!-Cuelga.

Alan va a abrir la puerta, al abrirla una chica salta a sus brazos a abrazarla y el chico sorprendido le corresponde el abrazo.

Samantha: ¡Sorpresa!-Exclamó la chica de cabello azul con blanco y ojos cafes oscuro.

Alan: ¡¿Samantha?! ¿Cuando llegaste?-Le pregunta emocionado.

Samantha: ¿Creíste que te iba a dejar solo en navidad?

Alan: ¡Viniste en el momento perfecto!-Le da otro abrazo con más fuerza levantandola del piso y dando vueltas, luego la baja y le da un beso.

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