Capítulo 30: Goku
Goku jaló a Milk más cerca de él mientras la abrazaba en su cama. La noche se había pasado tan rápido y él se negaba a cerrar los ojos sabiendo que en la mañana ella se iría y no sería capaz de abrazarla de nuevo hasta después del desafío. Su aroma se arremolinaba en el aire alrededor de él, su corazón latía al ritmo del suyo. Mía, le dijo su lobo. Sí, aceptó él, es nuestra. Inconscientemente comenzó a tararear la misma canción que había estado tarareando los últimos dos días.
—¿Qué canción es esa? —oyó a Milk preguntar.
—Vas a reírte de mí si te lo digo —le dijo sonriéndose a sí mismo.
—¿Por qué habría de reírme de ti?
—Es una canción cantada por Willie Nelson y Kimmie Rhodes. Sí, soy rumano, soy un werewolf, y me gusta Willie Nelson —dijo Goku, sonando desamparado.
—Bueno admitirlo es la mitad de la batalla —bromeó Milk.
—Es una canción que me hace pensar en ti, en nosotros.
—¿Me la cantarías? —preguntó ella.
—Sólo si no te ríes —aceptó Goku.
Milk no dijo nada en respuesta y Goku tomó eso como su señal. Así que comenzó a cantar para ella.
Pon tus brazos alrededor de mí,
Ahora escucha mi corazón latir.
Si quieres amarme,
Bebé, puedo enseñarte cómo.
Ámame como a una canción,
Dulce como una melodía,
Aprende todas las palabras para mí,
Y cántalas.
Busca la armonía,
El ritmo y la rima para mí,
Una y otra vez,
Durante toda la noche,
Ámame como a una canción.
Quiero ser la melodía,
Que no puedes sacarte de la cabeza.
Piensa en mí como palabras de amor,
Que un poeta podría haber dicho y,
Ámame como a una canción,
Dulce como una melodía,
Aprende todas las palabras para mí,
Y cántalas,
Busca la armonía,
El ritmo y la rima para mí,
Una y otra vez,
Durante toda la noche,
Ámame como a una canción.
Mientras Goku había estado cantando, Milk había rodado de frente a él y estaba mirándolo y ella tenía lágrimas rodando por sus mejillas.
—Eso fue hermoso. Tu voz es absolutamente hermosa. Gracias —balbuceó ella y luego lloró incluso más fuerte.
Goku la apretó estrechamente contra él, besó su frente y entre besos le murmuró:
—*Frumos* (preciosa), *dragostea mea* (mi amor), *te rog nu plânge* (por favor no llores).
Pero Milk continuó llorando y sólo parecía ponerse peor.
—No sé qué rayos endemoniados estás diciendo, sólo sé que no se supone que suceda así. No se supone que conozcas al amor de tu vida sólo para tener que dejarlo ir a luchar con algún delirante werewolf, con la posibilidad de que muera. Maldita sea, no se supone que suceda así —ella sollozaba y sollozaba.
Goku finalmente sintió caer las lágrimas que habían estado escondiéndose en sus ojos, pudo sentir la humedad corriendo hacia abajo por sus sonrojadas mejillas. No sabía que decir. No sabía cómo remediarlo o hacerla sentir mejor. Así que decidió ser honesto.
—Estoy asustado —susurró—. Estoy tan asustado. ¿Qué pasa si pierdo? ¿Qué si los otros lobos atacan y si mi padre y la manada no son capaces de protegerte? ¿Y si te pierdo? No puedo perderte, eso me mataría. No quiero que estés allá mañana porque al menos si no estás ahí ellos no podrán herirte —le dijo Goku mientras dejaba caer sus lágrimas por completo y sin vergüenza. Esta era su compañera, apenas acababa de encontrarla, y la amaba, la atesoraba, haría cualquier cosa por protegerla. Milk alzó la mirada hasta él, y con su mano le enjuagó las lágrimas y luego se inclinó hacia adelante y besó cada uno de sus ojos. Por un momento simplemente se miraron el uno al otro, como si quisieran memorizar el rostro de cada uno.
—Yo también estoy asustada —le dijo Milk—. Si pudiera luchar contra Freezer por ti lo haría. No quiero verte herido; ni siquiera puedo comenzar a pensar en verte morir. ¿Cómo voy a hacer esto mañana Goku? Me aterra que no lleguemos a tener todas las cosas que he imaginado tener contigo.
Ante esas palabras Goku no pudo evitar las imágenes que pasaron a través de sus pensamientos y escuchó a Milk llorar mientras ella las veía en su mente.
Goku y ella en la ceremonia de vinculación, con sus familias alrededor de ellos. Luego la escena saltó a Goku y ella en una habitación a solas, una de sus manos acunando la cabeza de ella, la otra descansando en su cintura, él inclinándose hacia abajo y mordiéndole el cuello para completar los rituales de sangre. Milk se sacudía con sollozos mientras seguía viendo sus pensamientos. Ella y Goku estaban caminando a través de una hermosa casa, de la mano, luego estaban envueltos uno en los brazos del otro, enredados entre las sábanas de la cama con pasión en los ojos, luego Milk estaba en una cama que parecía estar en un hospital, Goku estaba sujetando su mano, su vientre hinchado con su hijo. Luego vio a Goku meciendo a un bebé para dormirlo mientras Milk se sentaba mirando. Luego estaban de nuevo envueltos uno en los brazos del otro, riendo, besándose, tocándose, amándose.
Los hombros de Goku temblaban mientras lloraba, lamentando lo que nunca podría llegar a ser.
—Lo lamento Luna; no debí permitir que vieras eso. Cuando mencionaste pensar en todo lo que podríamos tener eso me hizo pensar en las cosas que yo también he soñado contigo.
La próxima cosa que Goku escuchó fue un suspiro tan suave que casi se lo perdió.
—Goku, hazme el amor —dijo Milk casi demasiado suave incluso para que lo oyera los oídos de un lobo. Goku se congeló; estaba entre la espada y la pared donde ningún hombre quería estar con una mujer. Si decía que no entonces estaba rechazándola y ella estaría avergonzada. Si decía que sí, entonces era un asno insensible porque estaba aprovechándose de su vulnerabilidad. Milk no le habría pedido esto si sólo fuese otra noche cualquiera y él no le haría el amor hasta que ella se lo pidiera cuando no hubiese ninguna amenaza sobre ninguna vida y nada estuviese creando una pasión que pudiese no ser tan ardiente como parecía en ese momento. Ahora ¿cómo exactamente le explicabas eso a una hembra de 17 años que ya tenía problemas de pudor? Buena suerte con eso Goku, pensó él.
—Milk, mírame —le dijo Goku—, quiero hacerte el amor, ¿estamos claros con esa parte? —le preguntó.
—Sí, estamos claros, pero hay un "pero" viniendo ¿no es así? —preguntó ella.
—Ambos estamos realmente emotivos ahora mismo. No quiero que hagas algo de lo que te arrepentirás mañana en la noche después del desafío. Si gano y planeo hacerlo, estarás triste porque no esperamos. Quiero que la primera vez sea especial y perfecta para ambos. Por favor no pienses que estoy rechazándote porque no tienes ni la más mínima idea de cuán difícil es decirte que no —le dijo él honestamente.
—¡Vaya!, estoy impresionada —dijo Milk enjuagándose lo que había quedado de las lágrimas en sus mejillas.
—¿Estás enojada conmigo? —preguntó Goku cautelosamente.
—No, no lo estoy. Estoy un poco avergonzada porque sabes lo torpe que soy cuando se trata de todo el aspecto físico de una relación —le dijo ella.
—¿Por qué estas avergonzada por eso? Te das cuenta de que será divertido, ¿verdad? —le preguntó Goku sonriendo ampliamente.
—¿Por qué te gusta decir cosas como esa sabiendo que me harán sonrojar?
—Porque es lindo —le dijo Goku honestamente—, no voy a hacerte el amor Luna, pero ya que ambos estamos conscientes yo definitivamente voy a aprovecharme de tus hermosos labios —dijo Goku justo después de envolver un brazo alrededor de ella y voltearla sobre su espalda. Milk chillaba y reía mientras Goku se inclinaba sobre ella. Él se agachó y suavemente besó sus labios. Milk envolvió sus brazos alrededor de su cuello y tiró de él hacia ella; él retumbó en su pecho ante su atrevimiento. La mano izquierda de Goku estaba acunando la cabeza de Milk mientras la mano derecha estaba frotando gradualmente su muslo moviéndose hacia arriba lentamente en dirección a su cintura. Goku estaba bastante orgulloso de sí mismo por decirle a Milk que él no consumaría su relación, pero mientras yacía ahí en sus brazos, sintiendo sus labios en los suyos, con sus cuerpos presionados juntos, esperaba que ella no lo hiciera esperar mucho tiempo después de la vinculación. Ella probablemente querría una boda humana primero, gruñó ante esa idea; probablemente iba a pasar un buen tiempo antes de que se aparearan. En ese caso, lo mejor era que se detuviera. Se levantó poco a poco de ella y se alejó de sus labios. Ambos estaban respirando con dificultad.
—¿Pasa algo? —le preguntó Milk, luciendo muy preocupada.
—No, todo está muy bien. Sólo necesito frenar un poco; mi honor sólo llega hasta ahí. Lobo o no todavía soy un hombre y tú eres una chica muy hermosa —le dijo Goku sin pena alguna.
—Oh, ya veo. Te estabas poniendo todo excitado, sólo para darte cuenta de que estar excitado es todo lo que hay. ¿Tengo razón?
—Sí Luna, eres brutalmente exacta. ¿Puedo ser brutalmente franco? —le preguntó él.
—Claro que sí —respondió ella.
—¿En qué momento piensas hacer la misma oferta?
Milk se rió de eso.
—¿Estás preocupado por cuanto tiempo va a pasar antes de que hagamos el acto?
—Bueno, ya que lo pones de esa forma tan elocuente, sí eso es lo que estoy preguntando —respondió Goku y en realidad parecía avergonzado.
—Quiero estar casada primero —Milk levantó una mano para evitar que Goku dijera lo que sea que estaba preparándose para dejar sus labios—. Casada de la manera tradicional, no solo la cosita esa de la vinculación werewolf —explicó ella.
—¿Te das cuenta que nuestra cosita de vinculación werewolf es más vinculante que tu matrimonio humano verdad? —le dijo Goku con aire de suficiencia.
—Puede que así sea mi pequeña bola de pelos, pero aun así quiero que nuestra relación sea reconocida como legítima ante los ojos de las personas normales, ¿comprendes?
Goku le sonrió. —Como desees Luna.
—Eso es lo que me gusta oír hombre lobo —le dijo Milk mientras bostezaba.
—Trata de descansar un poco amor; mañana será un largo día —le dijo Goku y la besó en la cabeza.
Él comenzó a tararear la canción que le había cantado antes y a pesar de que deseaba desesperadamente permanecer despierto, su lobo sabía que ambos necesitaban descansar y lo empujó a un sueño profundo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro