Kakashi.

Regularmente el recuerdo de la muerte de Rin aparecía en mi mente atormentándome. Nunca olvidaré el cómo mi mano derecha atravesó su pecho, en como mi mano se manchaba de su sangre y ella mencionaba mi nombre agonizando.

A pesar que quería dejar esos recuerdos atrás, no podía y por eso intentaba distraerme la mayoría del tiempo en mis misiones.

Koharu me ha estado ayudando bastante, ella siempre se está preocupando por mí y agradecía bastante el que estuviera en esas misiones ayudándome. Si no fuera por ella, yo hubiera muerto en unas de esas misiones debido a los recuerdos que tenía de la muerte de mi compañera de equipo.

—¡Kakashi!

Escuchaba como Gai mencionaba mi nombre con desesperación mientras golpeaba la puerta de mi casa, yo he suspirado un poco para luego dirigirme a la entrada principal y una vez he abierto la puerta me encontré a Gai muy agitado.

—¿Qué sucede?

—¡____-chan se irá! —exclamó desesperado y ante sus palabras no me he sorprendido. Yo ya sabía que ____ se iría, lo escuché de Koharu. —¿Me escuchaste?

—Te escuché claramente. —solté un suspiro mientras miraba a Gai de manera desinteresada. —Ella se irá por un tiempo no para siempre.

—Aun así...todo esto es tan repentino. —comentaba Gai de manera triste. —No quiero que ella se vaya. Me sentiré solo sin ella.

—Como te he dicho. Ella volverá.

—Actúas tan calmado, Kakashi. —resopló enfadado. —¿No estás, aunque sea un poco triste del que ella se vaya?

—Si me pongo triste o no, eso no tiene nada que ver contigo. —comenté de manera neutra mientras me daba media vuelta con las intenciones de ingresar a mi hogar. —Además, ella debe de irse por su bien.

Ingresé a mi hogar sin escuchar una palabra más de Gai, yo he suspirado un poco para luego ver el techo de mi casa.

Koharu me había contado que ____ se iría por un tiempo para estar a salvo y también para sus entrenamientos como futura heredera. Era bueno que ella se alejara de la aldea, aún no recibimos respuestas sobre las demás aldeas para que dejen de intentar secuestrarla. Mientras ella esté aquí la aldea sería atacada, ella estaría en peligro y también los miembros de Konoha; por el bien de ella y de los demás, ____ debía de irse.

Solo esperaba que ella volviera sana y salva, si algo le llegara a suceder no me lo perdonaría nunca.

✴✴✴

Kurenai había organizado una despedida para la princesa del clan Hyuuga y de Konoha. En primer lugar, me había opuesto en ser partícipe de este encuentro, pero Asuma junto a Gai me arrastraron a esta despedida sin dejarme oponerme.

Podía ver claramente como Kurenai y Asuma conversaban entre sí, también en como Gai intentaba impresionar a ____ con distintas poses que yo encontraba algo graciosas.

—¿Te diviertes? —me preguntó Koharu mientras me extendía un vaso. Tomé aquel vaso de su mano haciendo contacto con ella y también notando que en ese momento Koharu se había sonrojado. —L-La princesa se irá por nuestro bien, ¿verdad?

—Sí.

—Esperemos que nada malo le suceda. —comentaba Koharu mientras miraba a ____ divertirse con Gai. Me era un tanto impresionante el actuar de Koharu, a pesar de que no le caía del todo bien ____, ella se preocupaba. —Oí que la acompañaran los mejores Jounin de Konoha.

—Sabes, deberías dejar de oír las conversaciones del Hokage.

—E-Eso fue por casualidad. —se defendió un tanto avergonzada. —Pero bueno. Al menos me tranquiliza que ella irá bien acompañada.

—Sí.

Miré a ____ por unos segundos, ella sonreía y reía al lado de Gai. El verla de esa forma me hizo sentir paz, esperaba que esa sonrisa nunca se borrara de su rostro, que nunca más volviera a sentir la perdida de una persona importante para ella.

En ese mismo instante ella me miró, cuando nuestras miradas se conectaron ella me dedicó una sonrisa. Su sonrisa hizo que mi corazón latiera más de lo normal, ella siempre causaba eso en mí y me gustaba.

El día en que se me confesó me sentí muy feliz de que ella compartiera los mismos sentimientos que yo, pero en ese momento yo no podía corresponderle. Yo no era el adecuado, no, aún no soy lo suficientemente adecuado para ella.

En el momento en que yo me vuelva más fuerte, en cuanto los pensamientos sobre la muerte de Rin dejen de afectarme y en cuanto yo ya no sea inestable...ese día le confesaré cuanto me gusta, en lo cual enamorado estaba de ella, porque estaba completamente seguro de que no habría otra persona de la cual yo pudiera enamorarme.

Ella estuvo siempre a mí lado, ella siempre supo ver lo mejor de mí e intentó arduamente hacerme sonreír.

—¡Kakashi! ¡Ten un desafío con nosotros! —exclamó Gai mientras abrazaba a ____. —¡Estoy seguro de que les ganaré a ambos!

—Veamos que puedes hacer contra un Byakugan, Gai.

—Y que puedes hacer contra un Sharingan.

Gai en el momento en que escuchó las palabras de ____ y mías tragó en seco. Kurenai, Asuma y Koharu rieron al ver a nuestro amigo de esa manera, pero inmediatamente comenzaron a apoyarnos en que los tres tuviéramos un desafío.

Y lo cumplimos, los tres nos sometimos a un desafío en dónde he salido ganador.

✴✴✴

Miraba atentamente mi mano derecha mientras los recuerdos sobre la muerte de Rin volvían a mi mente, recordar su muerte siempre me afectaba y me afectaba aún más el saber que yo fui el causante de eso.

—Es un bonito día, ¿verdad?

—Deberías de estar en tu clan. —comenté de manera calmada mientras bajaba mi mano para así concentrarme en ____. —¿Qué haces por aquí?

—Te vi con mi Byakugan y he venido aquí para que así podamos hablar. —me dijo con una dulce sonrisa. Ella se acomodó a mi lado para luego mirar el cielo. —Mañana me iré de aquí y no podremos hablar.

—Supongo que hablaremos nuevamente cuando vuelvas. —dije de manera tranquila y en ese momento se formó un gran silencio causando en mi interior una sensación para nada agradable. —Volverás, ¿verdad?

—No lo sé.

—¿No lo sabes? —pregunté desorientado mientras me ponía de pie para verla fijamente. Ella al igual que yo se colocó de pie y me miró con una media sonrisa. —¿No piensas volver?

—No sé por cuanto tiempo esté allá afuera. —comenzó hablando de manera entristecida mientras colocaba una mano en su pecho. —La decisión de volver o no, no está en mis manos...sino de mi padre. Además...no sé si llegaré al lugar donde me mandarán.

En el momento en que ella dijo eso se me vino a la mente la muerte de mis dos compañeros de equipo y comencé a alterarme, el que ella esté insinuando que posiblemente muera me estaba matando por dentro.

—No vuelvas a decir eso. Nunca más en la vida. —espeté con rabia. Ella se sorprendió ante mi tono de voz, pero fue algo que no me importó. —No insinúes que morirás.

—Kakashi. Uno nunca sabe cuándo será el día de su muerte. —decía mientras soltaba un suspiro. El que ella estuviera diciendo todo eso me estaba matando por dentro. —Pero sabes...hay algo que me gustaría hacer antes de irme.

—¿Qué cosa?

Ella comenzó a dar unos pasos hasta quedar completamente frente a mí, antes de que yo pudiera alejarme, ____ había bajado mi máscara para luego atrapar mis labios causando que ambos comenzáramos a besarnos. El sentir el contacto de sus labios sobre los míos causó una agradable sensación en mí y quería sentir más.

Sin embargo, el beso no duró demasiado debido a que ella se alejó. Ella me miró avergonzada mientras tocaba sus labios e iba a hablarme, pero se lo impedí atrapando sus labios tal como ella lo había hecho anteriormente, solo que estaba vez fue con más intensidad.

Sabía perfectamente que ella quería hacer este tipo de cosas debido a que no sabía si volvería y admito que ella tenía razón. Uno nunca sabe cuándo será nuestra muerte, en cualquier momento ella podía perder su vida o yo podía perder la mía y si eso alguna vez sucediera...esperaba que el que muriera primero fuera yo.

Odiaría y sentiría un gran vacío si ella llegara a morir.

—Gracias, Kakashi. —agradeció ella mientras juntaba nuestras frentes y formaba una media sonrisa. —Gracias por darme mi primer beso.

—Sabes, ese también ha sido mi primer beso. —confesé de manera tranquila haciéndola estremecer. En ese momento coloqué mis manos en sus mejillas acariciándolas con suavidad con las yemas de mis dedos. —Lo que estoy a punto de decirte quiero que lo recuerdes para siempre. Yo pensaba confesarte esto el día en que me sintiera seguro...seguro de que por fin podría ser el adecuado de protegerte y de estar a tu lado. —con cada palabra que decía ella se estremecía. —____ tú eres la persona que amaré por el resto de mi vida. Incluso más allá de eso.

El ver la sorpresa de su rostro y también en cómo sus ojos comenzaban a aguarse causaron que mi corazón comenzara a latir de manera descontrolada.

—También serás la persona que amaré por el resto de mi vida. —confesó con lágrimas en sus ojos y una gran sonrisa. El verla sonreír de esa manera y en como nuevamente confesó sus sentimientos por mí la he abrazado con dulzura.

Ella correspondió a mi abrazo sin problema alguno, ella mantenía su rostro en mi pecho y no me importaba si ella lograba oír los latidos acelerados de mi corazón, después de todo era ella la que causaba eso.

—Promete que volverás. —hablé con la voz algo ronca mientras la alejaba un poco para hacer que ella me mirara a los ojos. —No importa si tardas en volver. Prométeme que volverás a Konoha...prométeme que volverás conmigo.

—Lo prometo. Te aseguro que volveré y así finalmente podremos estar juntos. —decía con total seguridad. —Tan solo espérame.

—Te esperaré toda la vida si es necesario. —confesé mientras nuevamente juntaba nuestras frentes sintiendo una gran paz en mi interior. —Te quiero demasiado, ____.

—Yo también te quiero demasiado, Kakashi.

Acerqué mi rostro al de ella con las intenciones de besarla, ella en ningún momento intentó alejarse. La besé esta vez con suavidad, con delicadeza. Este sería uno de esos besos que no olvidaríamos nunca.

Esto no era una despedida, era un hasta pronto. Ella volvería a Konoha y yo estaría aquí esperándola con los brazos abiertos.