Oscuridad.

Eso era todo lo que podía ver MinHo al tener una venda obstruyéndole el paso a la vista, no pensó que al aceptar ser acompañado por Kim SeungMin a la escuela este terminaría noqueándolo y posiblemente secuestrándolo.

No entendía sus razones, nunca le había hecho algo malo, solían hablar en algunos recesos cuando Chan faltaba a Clases o las veces que se encontraban en la salida, simplemente era ilógico que quisiera hacerle daño. Probablemente si compañero de clases era un completo psicópata y quería matarlo o peor aún, hacerle lo mismo que Jeon.

Con aquel pensamiento, nuevamente intentó desatar los nudos de la cuerda alrededor de sus manos y pies sacudiéndose con fuerza.

Era completamente inútil, estaban muy apretados.

Quería gritar y pedir ayuda pero la mordaza dentro de su cavidad bucal impedía cualquier sonido que quisiera salir de sus labios.

Escuchó a lo lejos el tono que había colocado en su teléfono para saber cuando Felix estuviera llamando y empezó a arrastrarse por el suelo como pudo, buscando seguir el sonido de su celular; sonó unas diez veces más pero luego se detuvo.

Escuchó pasos y se alarmó, se arrastró de vuelta a la esquina en donde estaba y se volvió bolita intentando desaparecer con ese simple acto; sintió el rechinar de una puerta ser abierta no muy lejos de donde estaba y se colocó en alerta, cualquier error que cometiera el otro era una oportunidad de escape para él.

— ¿Qué tal, MinHonnie?

Esa no era la voz de Kim.

Necesitaba regresar a casa pronto.

JiSung caminaba a la escuela pasadas las 07:30 de la mañana y llevaba un sonrisa que ni siquiera el sermón que le darían por llegar tarde podría borrar, desde que Chan le había permitido estar cerca de MinHo no podía borrar la sonrisa boba que tenía en el rostro, incluso sus amigos lo habían molestado el día anterior por la tarde, para ellos, verlo tan enamorado era algo nuevo y sus expresiones causaban gracia.

Al ingresar luego de la segunda reprimenda del vigilante en la semana por llegar tarde se encontró con sus amigos no muy lejos de la entrada y caminó hasta ellos saludándolos al llegar, cinco minutos después encaminándose los cuatro juntos a sus aulas, sin embargo, a JiSung le extrañó ver a todos tan ajetreados, de aquí allá, murmurando cosas en los rincones. Era extraño, sin embargo prefirió ignorar eso, necesitaba ver a MinHo y aclarar su situación.

A tan solo metros de llegar al aula pudo ver cómo Chan salía junto al hermano menor de MinHo, el más pequeño tenía una expresión de pánico que logró transmitirle.

¿Acaso había pasado algo malo? Ahora que ponía real atención a ellos, ¿Donde putas estaba MinHo?

— Chan... — JiSung habló con miedo cuando estuvo lo suficientemente cerca de ambos. — ¿Y MinHo?

El silencio sepulcral que se sintió en el pasillo entero hizo que su corazón pesara, era un mal presentimiento, algo malo estaba pasando y temía que MinHo estuviera involucrado.

— No... No sabemos dónde está MinHo, estuvimos llamándolo y no contesta. Probablemente se haya quedado sin batería y esté en algún lugar o ya casi esté por llegar. El rumor de que MinHo desapareció se esparció rápidamente por los pasillos después de la llegada de Lix, pero estamos intentando mantener la calma.

¿Como que no saben donde está MinHo?

— Debe ser una jodida broma, ya, enserio hyung, ¿Donde está MinHo? ¿En el aula?

— MinHo hyung salió sin mí de casa por la mañana... — Felix interfirió en la conversación para expresarle al pelinegro lo que sabía, era obvio que MinHo no llevaba ni siquiera cinco horas sin aparecer pero le preocupaba en demasía su repentina ausencia. — Creí que tenía algo urgente que hacer y por la prisa no le dió tiempo de avisarme, pero... — hizo una pausa al escuchar como su voz se quebraba. — ... pero, cuando lo llamé no contestó, intenté más de diez veces y siempre me enviaba a buzón, cuando fui a su aula me dijeron que no estaba. Él no está en ningún lado.

Él no está. Esas simples palabras parecían no tener significado alguno dentro de la cabeza de JiSung, se negaba a pensar que había alguien tan cruel como para querer dañar al menor.

— Debemos mantener la calma, JiSung. — ChangBin colocó sus manos en los hombros del menor al notarlo tenso.

— Vamos a separarnos y buscar por todos los rincones de la escuela, nos vemos aquí al final de la primera clase. — dijo Chan antes de darle una mirada a cada uno de los presentes, esperanzado de que pudieran encontrarlo.

— Verás que lo vamos a encontrar, JiSung hyung. — el mencionado dirigió su mirada hasta el más pequeño e intentó corresponder la sonrisa que le regalaba.

Justo como Chan había dicho, se encontraron los seis luego de la campana que indicaba el final de la primera hora de clases, en el mismo lugar.

Ninguno tenía una buena expresión y eso solo significaba una cosa...

No encontraron a MinHo.

— ¿Y bien? ¿Alguno tiene noticias? — HyunJin rompió el silencio instaurado entre los seis chicos presentes.

— Nada, deberíamos buscar después de clases; probablemente para ese momento MinHo ya se habrá comunicado con alguno.

La expresión tan calmada de Christopher hacía a JiSung dudar sobre su aparente ignorancia sobre el paradero de Lee pero era su mejor amigo, el mismo que el día anterior le había hablado tan bonito y le permitió acercarse con la promesa de no hacerle daño.

No, no pienses eso JiSung. Chan es incapaz de hacerle algo así a MinHo.

— Bien, veámonos todos en la plaza de enfrente a la hora de la salida.

Todos corearon una afirmación y se despidieron encaminando sus pasos a la siguiente clase que le correspondía a cada uno, pero JiSung se desvío al baño, necesitaba drenar toda su frustración en algo y las latas caídas en los baños del segundo piso parecían la mejor opción.

Cuando llegó abrió la puerta en un estruendo y pateó lo primero que divisó en el suelo espantando a algunos chicos que habían que luego se fueron dejándolo en completa soledad.

Su princesa no estaba por ningún lado, debía estar asustado y con ganas de un abrazo cálido, tenían que encontrarlo lo más rápido posible.

Estaba por salir del cubículo donde había entrado para sentarse sobre la tapa del retrete, cuando la voz de una persona hablando por lo que parecía ser una llamada telefónica lo detuvo.

— Ya te dije, Jeon, el trabajo está hecho. Fuí a su casa, le dije que necesitaba ayuda con matemáticas y él se lo creyó aunque me haya costado convencerlo. Cuando íbamos por un callejón lo noqueé y lo dejé con Kim.

¿Que mierda…?

— ¿Qué?... No... Yo quiero mi pago... Ya te dije que fue difícil convencerlo, es demasiado desconfiado y como no, si lo violaste... ¿Hola? ¿Jeon? Hijo de perra.

Para ese punto JiSung veía todo en escala de rojos y negros, ¿Tan Imbécil era JungKook para rebajarse a algo así?

Salió del cubículo sorprendiendo al tipo, era uno de sus compañeros, la verdad a esas alturas le valía mierda quién era solo quería saber donde estaba MinHo. Lo tomó del cuello de la camiseta escolar y lo estampó contra la pared más cercana escuchando como un gemido de dolor abandonaba los labios del castaño.

— Me dirás donde carajos está MinHo o le diré a la directora que eres cómplice de un maldito secuestro.

Al fin salió esta cosa 🕴️
Se me va acabando la imaginación así que en cualquier momento le doy fin a esto 😔👍