Capítulo 7
Todos miramos impresionados cuando un carruaje estirado por pegasos había aterrizado en Hogwarts, y también un barco parecido al de los piratas igualmente ancló en las orillas. Nos llamaron al gran comedor, donde todos estaban ansiosos por los invitados y el gran espectáculo que ocurriría en estos días.
-Ahora que ya están sentados -Dumbledore llama nuestra atención-. Este castillo no solo será su hogar este años, sino también el de varios invitados especiales ya que Hogwarts ha sido elegido...
El señor Filch se acerca trotando al profesor para susurrar algo al oído. El profesor y él terminan de hablar y Filch vuelve a salir trotando por el pasillo.
-Decía... Hogwarts ha sido elegido como la cede de un legendario evento "El Torneo de los Tres Magos" para aquellos que no lo sepan, el torneo de los tres magos reúne a tres escuelas para una serie de pruebas mágicas y de cada escuela se selecciona a un estudiante para competir. Y que quede claro, si son elegidos estarán solos y créanme cuando les digo que este torneo no es para los asustadizos pero hablaremos luego. Por ahora, demos la bienvenida a las bellas señoritas de la academia de magia Beauxbatons y a su directora Madam Maxime.
Las puertas se abren dejando ver a varias chicas elegantes entrando al salón, saludando con suspiros a cada lado y corriendo hacia el frente. Noté que los amigos de Draco y él apuntaban y murmuraban por el movimiento que creaban en su parte trasera. Ellos ríen pero yo le di un golpe a Draco.
-¡Au! Oye -se queja él, solo le dediqué una mirada acusatoria antes de volver a mirar hacia el frente.
-¡Ahora nuestros amigos del norte! Recibamos a los orgullosos hijos de Durmstrang y a su director Igor Karkarov.
De nuevo las puertas se abren y entran unos tipos golpeando bastones que soltaban chispas contra el suelo. No estaban mal... Movían el bastón con maestría para luego soltarlo y correr hasta terminar en volteretas los primeros.
-La verdad yo sí estoy interesada -una compañera murmura a mi lado haciéndome reír.
-Totalmete, se ven bien -apoyé consiguiendo risas por parte de las chicas pero entonces sentí un jalón en mi brazo-. Ay, oye.
Draco me imita con una mueca, rodé los ojos y volví a prestar atención a los invitados con una sonrisa. Reconocí a Víctor Krum llegando junto a su Director quien saludó al profesor Dumbledore de inmediato al llegar junto a él. Todos tomaron lugares, comimos por un buen rato antes de que el profesor volviera a levantarse y acercarse al frente.
-Su atención por favor. Quisiera decir unas palabras, la gloria eterna es lo que le espera a los estudiantes que gane el torneo de los Tres Magos, pero para lograrlo deberá sobrevivir a tres pruebas, tres pruebas en extremo riesgosas.
-¿No te interesa, Malfoy? -cuestioné arqueando una ceja.
-¿A mí? Te he dicho que no -negó y volvió a apartar la mirada.
-¿Qué? ¿Tienes miedo?
-¿Miedo yo? Ja, que ridícula, Kingsley. Por supuesto que no.
-Por esta razón el ministerio decidió aplicar una nueva regla. Para explicar todo esto tenemos al director del departamento de cooperación Marina internacional. El señor Bartemius Crouch.
El nombrado pasa al frente pero entonces el techo mágico comenzó a enloquecer con una tormenta repentina, los estudiantes gritaron pero entonces alguien lanza un hechizo a este. Dándonos cuenta de que Ojo Loco Moody estaba aquí. Dumbledore se acerca a él para recibirlo antes de que el señor Crouch pasara al frente.
-Después de un largo análisis, el ministerio decidió que por su seguridad a ningún estudiante menor de diecisiete años se le permitirá postular su nombre para el torneo de Los Tres Magos y la decisión es definitiva.
Todos empezaron con sus quejas, pues la mayoría quería participar. Draco suspira con una sonrisa que intentó disimular pero yo me acerqué a su oído.
-Te has salvado, Draco. Tienes suerte.
-Lo que sea. Yo quería participar pero ahora ya no se podrá.
-Sí, claro.
Me reí mientras él intentaba no hacerlo. Dumbledore nos hizo callar a todos en ese momento para luego mostrar el gran Caliz de Fuego, y tiene sentido su nombre pues dejo ver fuego azul salir de arriba indicando que para participar había que poner un papel con el nombre de la persona en el cáliz.
***
***
-Alastor Moody. Ex cazador. Ministro inconforme y su maestro de defensa contra las artes oscuras. Vine porque Dumbledore me lo pidió, fin de la historia, se acabó ¡adiós! ¿Preguntas?
Me agrada su estilo.
Miré a mi lado, a Draco, yo reía levemente y él me miraba como si estuviera loca por querer reírme justo ahora. Pero es que cuando mis pensamientos graciosos me invaden apenas puedo no reírme.
-Cuando se trata de artes oscuras, aplico el método práctico -comentó haciendo que mi interés se volviera más grande-. Pero primero, ¿quién puede decirme cuantos maleficios imperdonables existen?
-Tres señor -dice Hermione primera.
-¿Por qué se llaman así?
-Porque son imperdonables -responde ahora Daphne haciéndome rodar los ojos-. Si un mago los usara...
-Se ganaría un boleto directo a Azkaban, correcto. El ministerio dice que son muy jóvenes para ver sus efectos pero yo opino lo contrario, necesitan saber a qué se enfrentan y necesitan estar preparados. Y creo que necesita encontrar otro lugar para poner su goma de mascar señor Finegan.
Todos volteamos a ver al chico que se veía impresionado porque pudiera ver eso aunque estuviera de espaldas a todos escribiendo en el pizarrón.
-Increíble. Creo que ese loco puede ver de espalda.
De repente el profesor se da vuelta y le lanza una tiza.
-¡Y escuchar todo lo que dicen! ¿Y? ¿Cuál analizamos primero? ¡Wesley!
-¿Sí?
-De pie -ordena el profesor, Ron se levanta temeroso de él-. Mencione un maleficio.
-Bueno... mi.. mi papá habló sobre uno. El maleficio Imperius.
-Ah sí, tu padre lo conoce muy bien, hace unos años le dio problemas al ministerio. Tal vez esto les muestre porqué.
Moody nos muestra que había traído una araña a la que pasó de ser pequeña a una grande, la puso sobre su mano y usó el maleficio sobre esta.
-Imperio.
La subió sobre varios estudiantes haciéndonos reír a varios y haciéndome preguntar... ¿será que la use con Daphne? Me reí más por mis pensamientos hasta que la araña salta sobre la nariz de Draco quien entró en pánico al igual que yo, me dio asco.
-¿Qué quieren que haga ahora? ¿Que salte por la ventana? ¿Que se ahogue? -todos guardan silencio y la araña vuelve a la mano de Moody-. Muchas brujas y magos afirman que solo siguieron las órdenes de ustedes saben quien por la influencia del maleficio imperius, pero este es el punto ¿cómo sabemos quién nos engaña? ¡Otro más, otro más!
Muchos levantamos la mano para decir otro maleficio pero de entre todos eligió a Neville que ni siquiera había levantado completamente la mano. Él menciona el maleficio cruciatus.
-¡Correcto, correcto! Ven, ven -lo lleva hasta el escritorio de en frente, deja a la araña en este-. Muy doloroso... El maleficio torturador. ¡Crucio!
Vimos como la araña se retorcía de dolor y Neville parecía afectarle... pues tengo información de que sus padres fueron torturados hasta la locura con ese mismo maleficio. A pesar de pensar en que sería un buen maleficio a usar en contra de Daphne... Neville sí me ha dado lástima.
-¡Basta! ¡¿No ve que lo hace sufrir?! -grita Hermione haciendo reaccionar a Moody.
El profesor sostiene a la araña y la deja sobre el libro de Hermione para mostrarnos el último maleficio.
-Tal vez pueda nombrarnos el último maleficio imperdonable -Hermione niega con la cabeza- ¿No? Avada Kedavra.
La araña finalmente muere allí. Dejé escapar un leve suspiro por lo denso de esta clase, me acomodé en mi lugar viendo hacia el profesor.
Pero es verdad que estos tres maleficios... no estarían mal para usarlos contra Daphne, después de todo se lo merece.
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