Capítulo 10: Nuevos sentimientos.
***NARRA ABRIL***
¿Les ha pasado que de la nada se sienten tristes? ¿Qué pareciera que nadie los entiende? ¿Qué de pronto su vida "perfecta" ya no está? ¿Qué sin previo aviso algo o alguien, la cambio? Porque a mí es lo que me está sucediendo en estos momentos, de pronto siento que todo mi mundo ha cambiado y no sé cómo enfrentar este cambio. Sé que te estarás cuestionando, ¿de qué habla está loca?... lo sé porque, yo también me lo cuestionaría. Bueno hace ya unas cuantas semanas que pasó lo del mal entendido con la policía o como ellos lo llamaron "El Secuestro", puede que tengas dudas de en qué termino todo ese pleito y bueno se resume algo así:
Al parecer Alex conocía al jefe de la policía—lo cual debo admitir ayudo bastante—después de que Fanny llegara al hospital—que para ser sincera no sé, ni como llegue—le aviso a mis padres, los cuales estaban en el ministerio público por ser los tutores de los tres chicos españoles, los jefes de Renata y los padres de Ángel; además con ellos estaba el señor Arturo Salazar—sobra decir que es el papá de Luke—así que cuando se enteraron por Fanny. María fue a vernos y al final de todo resulto que tengo principios de anemia y por eso surgió el desmayo, pero eso no es importante ahora; después de salir del hospital nos llevaron a declarar, nosotras dijimos que tenía que ser un mal entendido y que ellos solo jugaban con nosotras—pero el policía no nos creía, gracias a los golpes que traíamos—al final los liberaron gracias a que Sofía les dijo que les llevaría comida por 2 semanas a lo que respondieron que los liberarían después de 24 horas, y por más que les decíamos que los liberaran esa noche y al no ceder por su parte, termine por ofrecerles llevar nutella por esos 15 días—lo sé, lo sé, bendita sea la nutella—y para que terminaran de aceptar Alex les ofreció un auto—cabe aclarar que el auto era del año pasado y era el que nunca le había gustado, pero había sido su primer auto—así que sin dudarlo terminaron aceptando.
Después de todo ese alboroto mis padres casi nos matan, me quitaron mi patineta, le prohibieron a Renata que limpiara mi cuarto y por si no fuera poco me prohibieron salir de casa—o través—por un mes ah y me quitaron mí amada laptop. Por otra parte a Ángel le quitaron su consola privada, le prohibieron entrar al sótano y también le prohibieron salir por un mes y como a mí, Renata tampoco limpiaba su habitación.
A los chicos en realidad no les pudieron hacer mucho solo les prohibieron entrar al sótano como a mi hermano y salir a fiestas—las cuales al parecer habían sido bastantes, por el momento—pero no fue nada, prácticamente.
En fin, durante este tiempo he convivido más con Sofía y con los chicos, tanto Eduar como Jesús son unos chicos muy graciosos y muy amables, siempre me hacen reír con sus comentarios fuera de lugar; sin embargo con el que menos convivo es con Cris, él se mete mucho a la biblioteca ya sea en mi casa o en la escuela, lo cual no ayuda a que hablemos, es un buen chico no lo dudo, pero hay algo raro en él que para mí es un enigma, pero sé que algún día lo descifrare, lo más sorprendente es que desde que ellos llegaron a mi casa el dejo de acosarme y es algo que agradezco, ya que si algo siempre eh odiado es que los chicos me pretendan o en el peor de los casos me acosen.
Por otra parte en la escuela todo sigue casi igual, Gabriela nos ha intentado hacer varias bromas pero al final ella y Joce son las que las reciben, al parecer Maka Stons decidió ya no estar más con ellas pues ya no las eh visto juntas en ningún momento después de la broma de bienvenida que les dimos, pero creo que eso le afecto pues ahora se pintó el pelo de rojo—losé muy loco, ya que su melena rubia lucia mejor—pero un rojo como fuego y cambio todo su atuendo de niña mimada a chica ruda, ya que ahora se viste de negro siempre y al parecer está metida en muchas cosas de las cuales prefiero no saber, ya que de lo único que yo me entero es que todo lo consigue a base de golpes con los más indefensos o los abusivos del Frederick.
Por parte de Ángel, al parecer aún sigue mandándole cosas anónimas a Sofía lo cual es muy gracioso ya que vamos ¡vivimos bajo el mismo techo! y ya Sofía comienza a sospechar de quien son esos mensajes, cartas, chocolates, nutella, flores y libros "anónimos"—losé es patético y muy cursi por parte de mi hermano, aunque creo que Luke le da las ideas de todo eso... —por otro lado mis amigas están muy molestas conmigo desde hace unos días y sigo sin comprender la razón, pero bueno ya me han levantado el castigo y justo en estos momentos estoy terminando de arreglarme para ir al mall a comer con ellas.
Termino de colocarme bien las zapatillas deportivas y tomo mi bolso me lo cuelgo de lado—a travesando mi cuerpo con una diagonal—y bajo con mi patineta en la mano, voy a salir cuando una voz a mis espaldas provoca que me exalte y tire la patineta al suelo azul— ¿No lo había mencionado? Mi amado suelo es de loza azul eléctrico, es por eso que casi todo es blanco de los muebles.
— ¿Abril?, ¿A dónde vas?
— ¿¡Qué diablos te pasa!? ¡Casi me matas del susto!—le riño mientras me agacho a recoger mi amado pedazo de madera con ruedas.
—Lo lamento, solo quería saber a dónde ibas—dijo agachando la cabeza apenado.
—Voy ir a ver a mis amigas, hace tiempo que n...
— ¿Te puedo acompañar?—pregunto interrumpiéndome.
—Supongo que no hay problema, pero ¿por qué quieres ir Cristopher?—inquiero curiosa—No me lo tomes a mal, pero digamos que tú y yo no tenemos una muy linda relación.
—Lo sé, no tienes que recordármelo—dijo en tono apenado—Pero entonces ¿puedo ir?
—Sip, pero yo iré en patineta, tú... ¿en qué iras?—le cuestiono con la esperanza de que no tenga con que ir y se deba quedar.
—No se subirme a una patineta—dice pensativo, mientras se lleva una mano al mentón—Pero se usar los patines, creo que eso puede servir ¿no crees?—responde sonriente.
—Vale, pero apresúrate que se me hace tarde—bufo.
Él asiente para después correr escaleras arriba por sus patines mientras yo me siento en la escalera a esperarlo. Cuando baja no puedo reprimir una carcajada al ver que sus patines eran de esos que son zapatillas deportivas y que con un botón le salen rueditas, esos eran los tenis para niños y él parecía no importarle mis burlas y comentarios, ya que como si nada nos fuimos al mall el cual no está a más de 15 minutos de mi casa. Al llegar mis amigas se molestaron por llevarlo, pero al final al parecer a Ayarí no le molesto tanto, ya que no paraba de hablar con él en una manera un tanto coqueta, lo cual era algo molesto o por lo menos para mí—Oh vamos, ¿estás celosa?— ¿de qué hablas? Yo no soy celosa, solo me preocupo por lo que pueda pasar con mi amiga—Sí, si claro, tú amiga...
—Chicas, ¿qué tal si vamos de compras?—dijo de pronto Sinaí, interrumpiendo la "conversación" con mi conciencia y llamando la atención de todos en la mesa—Digo aprovechando que estamos aquí y que hay una fiesta hoy.
—Me parece buena idea—respondió Danítzi.
—Si... ¡vamos!—le siguió Stephanie.
—Hay si... ¿nos acompañaras Cris? ¿Verdad?—le dijo muy coqueta la castaña de ojos verdes.
—Yo... amm... pues... —comenzó a decir él aludido.
—Sí Cris, ¿nos acompañas?—dije reposando mis codos en la mesa y con un tono de diversión al ver que estaba incomodo, por el acercamiento de mi amiga.
—La verdad es... que no quiero molestarlas más.
—Oh vamos, no nos molesta, ¿Cierto chicas?
—Para nada, es más tú nos ayudaras a escoger los vestidos de esta noche—respondió la castaña con una sonrisa.
—Bueno, está bien vamos señoritas—dijo el chico levantándose y poniendo su brazo de tal manera que Ayarí lo envolviera.
Todas las demás nos levantamos, tiramos la basura de lo que habíamos pedido de comer—ya que estoy en tratamiento por mi anemia y me da más hambre de la habitual—tomamos nuestras patinetas—si amigos(as), las cinco siempre andamos en patinetas, son nuestra vida—y fuimos por la primera tienda de ropa.
(* * *)
Llevábamos aproximadamente dos horas—quizás más—entrando y saliendo de tiendas y ya todas tenían sus vestidos o shorts con blusa que llevarían, claro y como siempre yo aún no. Entramos a la décima tienda y mis amigas se dispersan por los pasillos en busca del vestido, por lo que yo camino en busca de uno, voy tranquila por los pasillos sin éxito en encontrar el perfecto, cuando de pronto veo a mi castaña amiga como con tres vestidos en la mano y detrás de ella viene el chico de ojos marrones como con cinco más.
—Toma, pruébate estos mientras voy a buscar a las demás—dijo entregándome los vestidos y sin dejarme contestar desapareció tras la ropa.
Estaba entretenida viendo los vestidos que mi amiga me entrego, que ni si quiera me había percatado que el chico que nos acompañaba—y el cual vive ahora en mi casa—estaba ahí parado frente a mí con más vestidos y brindándome una sonrisa.
— ¿Piensas quedarte ahí parado todo el día?—dije en broma y sonriendo.
—No es mala idea, pero... ¿por qué no mejor me modelas los vestidos?—dijo aun sonriendo, pero al ver que tenía el ceño fruncido agregó—Digo ya que tus amigas desaparecieron, puedo darte mi humilde opinión, ¿qué dices?
Lo pensé un momento pero me pareció buena idea, al final de algo debe de servir el que haya venido ¿no?
—Está bien, dame eso—dije señalando las prendas en sus manos, una vez que las tome lo guie a donde estaban los vestidores—Siéntate ahí—señale un sofá—Yo entrare a este vestidor—ahora señale la primer cortina, el solo se limitó a asentir con la cabeza y yo entre al vestidor.
Los vestidores eran bastante amplios, eran como un cubo grande con un espejo del tamaño exacto de la altura del cubo enfrente justamente en medio de las otras dos paredes, tenía un perchero en el lado izquierdo del espejo, una banquita en el centro del vestidor y además en la cortina había un tubo atravesado de lado a lado para colgar ahí las prendas que deseas probarte. De la parte exterior da de frente a dos sillones rojos que están separados por una pequeña mesa de vidrio con un florero en el centro, aun lado del primer vestidor hay cuatro cortinas más—es decir, 4 vestidores más.
Entre a este y coloque la variedad de vestidos—que mi amiga hizo favor de traer—en todo el tubo, coloque la bolsa que traía en el perchero y comencé a quitarme la ropa y decidí probarme en primer lugar el vestido color salmón el cual era demasiado corto para mi gusto y muy extravagante, decidí salir una vez ya acomodado, para que Cris me diera su opinión. Pero al abrir la cortina no sé como pero tropecé con mis propios pies y caí al frio mármol blanco, que era el piso.
— ¡Abril!—escuche la gruesa voz de Cristopher, cuando estaba en el suelo.
Al momento que iba a levantarme sentí unos brazos voltearme—ya que caí de cara, lastimándome con ello con los lentes—y después tomarme de la espalda y las piernas, levante la mirada para ver de quien se trataba y era justamente Cris el cual me llevo cargada a uno de los sofás rojos con una mirada de preocupación.
— ¿Abril? ¿Te hiciste daño?—pregunto unos segundos después de dejarme sentada en el sillón.
—No, tranquilo estoy... bien—dije en un susurro ya que me dolía horrible el tobillo.
— ¿Segura? Porque tú rostro dice lo contrario.
—Sí, segura es solo un pequeño dolor en el tobillo, nada grave—dije intentando pararme—odio verme débil o indefensa ante las personas y más ante un chico—pero como era de esperarse por poco me vuelco a caer, por lo que Cris me sostuvo de una mano y la cintura obligándome a sentar de nuevo.
—Déjame ver si es grave o no—dijo a la vez que se colocaba en cuclillas frente a mí— ¿Me permites?—señalo mi pie.
Al principio negué con la cabeza pero al final él ya estaba tomando el pie derecho, el cual estaba bien, así que le dije que era el otro y comenzó a sobarlo lentamente, ni si quiera me había percatado que no llevaba zapatos hasta que él toco mi tobillo con suma delicadeza, como si temiera que este se rompiera. Después de unos minutos reaccione que llevaba el vestido y que ya me ha de a ver visto mi tanga de Bob esponja, por lo que rápidamente me ruborice—maldito mini vestido de zorra que traigo puesto—y le dije que ya estaba bien.
— ¿Me juras que estas bien?—pregunto mientras tomaba asiento en el otro sofá.
—Si... solo fue un tropiezo, nada grave, siempre me pasa—dije algo rápido y mi voz se notaba nerviosa—Espera un momento... ¿estás nerviosa?— ¿¡Qué!? Claro que no, es solo que... no se... debió ver mi ridículo acto y mi hermosa tanga de Bob—Ya claro... recuerda soy tú conciencia y a mí no me engañas—Oh vamos cállate, eres igual de inaguantable que Gabriela.
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Hola, hola mis bellezas!!
Eh vuelto y que creen!!?? Llegamos a las 1000 leídas!!! Oh sii Enserio no saben lo feliz que me hicieron literalmente casi me da un paro cardíaco ayer que lo vi... Enserio los amo!!!!
Gracias por sus votos comentarios y bueno por ese regalo que me hicieron, les daré dos capítulos hoy y que creen? son largos!!! Enserio mil gracias!!
Bueno este es uno y el otro en unos minutos lo tendrán :3
Capitulo dedicado a: vxnxssaa y Nutella171
Gracias!! Los Ama: AlmitaGar
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