8- ¿Hilo rojo?

—Hola linda…

«Wow, pensé que no volvería a hablarme.»

—Oh... Lauren, ¿cierto? —asintió y una sonrisa se plasmó en sus labios.

—Si linda, ¿porque estás sola? —. Al instante sentí mis mejillas arder.

—Estoy... Esperando a mi mejor amigo.

«Quise decir "Novio" pero su sonrisa es tan hermosa que quedé tonta.»

—Ah vale hermosa…

«Oh no puede ser, me dijo hermosa»

—¿De casualidad tienes novio? —me preguntó.

—No, no tengo novio... ¿Por qué? —su sonrisa se amplió más.

—Me... Atraes. No sé cómo pero
estoy segura de lo que siento…

«OMG LE ATRAIGO QUE ALGUIEN ME
PELLIZQUE.»

—Eh bueno, no sé qué decirte —- Eh bueno, no sé qué decirte…

«¿Dónde se metió Lorenzo? Estoy  súper nerviosa.»

—Hermosa ya volví- salvada perla campana—¿Y tú eres?

–Oh, soy Lauren —ambos estrecharon las manos y sonrieron.

—Mucho gusto, soy Lorenzo…

«Que malo Lorenzo no me da lo que está comiendo.»

—Eh Loren... ¿Me das? —Lorenzo me
miraba extraño. Creo que ya reaccionó.

—AH cierto, esto es para tí —Lorenzo
me entregó una empanada y una
malta. Estaba rojito.

«Es tan lindo cuando
está así.»

—Gracias. Te amo —lo abracé y casi
lo tumbo. Parecía algo raro con ese
ataque de risa.

—Ja, ja, ja, ja, ay linda ten cuidado,
también te amo —Lorenzo me miró
con una sonrisa.

Estuvimos ahí en el patio por un rato
riendo y jugando Lauren me abrazaba e intentaba besarme, pero yo la esquivaba

Hoy mejoró mi día estar con Lauren, Verónica y Lorenzo me hizo bien. Aunque creo que a Verónica no le cayo bien Lauren.