Cada respirar era un pánico, parecía que sería el último. Que el cándido aire que lo había acompañado desde el principio, ahora se le iba. Y se despedían en tristísimos intentos de volver a respirar. 

Afuera del árbol se escuchaban los demás. Suspiros de terror lanzados con las últimas fuerzas. La nube se dispersaba, ya había terminado. Inti iba sintiéndose cada vez más débil. Mientras los parpados se le resbalaban por cerrarse, de su corazón salto el estambre. Intentaba salírsele pero no podía. Se volvía caos y maraña. Giraba la bola de estambre desesperada. Lanzando redes de hilos, tirando de las ramas. Las cambiaba sin saber que hacer, buscado escapar. 

Inti ya perdía el sentido, vio como las ramas se marchitaban cuando aún tenían frutos. Morían, volvían a otoñar. Se desmayo. 

Cuando volvió a despertar estaba en el suelo. Con el cuerpo sobre la hierba y la cabeza recargada sobre el tronco seco y gris. Volteo a su alrededor sin moverse, encontró la boina del muchacho que lo había apuñalado ¿Qué habría pasado con él? ¿Aún estaría ligado a su destino o ya habría pasado el mediodía? Inti no podía saberlo. 

Una mano delgada y rasposa como lana lo ayudo a levantarse. La gaviota marcada en Inti comenzó a brillar dorada. E Inti alzando la vista, se encontró con el comandante de voz retumbante y mirar azul. Pero no era el comandante, sino el muchacho que le ayudaba a levantarse:

-Ya se han ido todos, verdad? 

-Debieron tomarnos por estorbo - dijo el muchacho al tiempo que le arrebataba a Inti la boina y se la ponía.

-Ya no se ven nubes en el cielo ¿ahora que pasará? - pregunto Inti algo inquieto. El muchacho se quedo sin entender un instante : 

-Ah...yo pude ver lo que pasaría porque era mi muerte, mi destino. Pero por ahora el destino es tuyo. Así que agradecería que no me dejaras sin aire o destrozado por las siguientes nueve horas.

-No es como si yo pudiera verlo - se reconvino Inti. Luego pensó en la gaviota, acaso podría saber algo. Ernesto sabía y la mujer que le acompañaba también. Pero no le explicaron e Inti había preferido hacer como si supiera igual. Y señalándole la marca le pregunto- ¿Sabes que es esto? - El muchacho miro la marca y sonrió como si recordara:

-Ni idea, será fanatismo. De pequeño gustaba de asomarme al balcón. Me quedaba mirando las gaviotas a la orilla de la playa...Pero tu deberías averiguar que va a pasarnos! Anda, vamos!- Y cogiéndolo del brazo lo empujo para seguir caminando.