SELINA

Tras aguantar una reunión aburrida y sin sustancia en la que, con solo unas frases, conseguí cerrar el acuerdo de forma magistral, deseaba salir escopetada de allí. Tenía una enorme sed por lo que tenía que ir a por mi bolsa de sangre que guardaba en el bolso; no podía aguantarlo más.

Tras terminar, me excusé con todos y corrí escopetada al baño escondiendo mis ojos enrojecidos con mi pamela. Daba gracias al cielo que no había nadie por lo que suspiré aliviada y tomé la bolsa con gran alegría.

Me la tomé en menos de cinco minutos, si hubiera esperado unos minutos más, me hubiera merendado a medio personal sin control.

Cuando noté que mis colmillos volvían a la normalidad y mis ojos volvían a ser azulados como siempre, salí del cuarto de baño topándome con unas enormes tetas que golpearon mi cara.

Cuando por fin pude separarme de aquel muro de carne y silicona, me topé con una mujer morena con una mirada realmente incandescente de ira.

Su cuerpo estaba cubierto de ronchas rojizas que parecían ser bastante dolorosas; su mal humor salía por los poros de su piel.

- ¡Mira por donde caminas, gótica! -Me gritó antes de meterse al lavabo.

"¿Será idiota?" pensé para mis adentros. A pesar de que tenía ganas de darle una lección, no deseaba perder más tiempo con cosas innecesarias.

Al salir del baño divisé a Carter hablando con algunos miembros de la reunión de forma muy profesional. Al verme, se despidió de su interlocutor y caminó hasta mí.

-Debo de felicitarla señorita Waters; ha estado brillante en la reunión.

-Gracias Carter, me alegro que hayamos podido ponernos de acuerdo y así salgamos ganando ambos.

Por primera vez desde que lo conocí me dirigió una verdadera sonrisa que no tenía nada de seductora; era totalmente sincera. Mientras que ambos nos mirábamos en silencio, aquel chico moreno le dio una gran palmada en la espalda a Carter cuyo sonido hizo sobresaltar a todos los integrantes de la reunión que en ese momento estaban hablando en el pasillo.

-Matt, ¿Se puede saber qué es lo que quieres?-Dijo Carter con un suspiro molesto.

-Me he enterado del acuerdo que has firmado, ¡Hay que celebrarlo, tío!¡Miyamoto cosmetics es una marca muy conocida y respetada!

-Aprovechando que sacas el tema, aquí está la señorita que será la imagen de su próxima campaña publicitaria.

Aquel moreno con el tamaño de un armario empotrado, me miraba ahora con asombro. Yo le dirigí una sonrisa atenuada queriéndome marchar de una vez para descansar del cansado día que había tenido. Pero antes, tenía que conseguir una cita con Carter, pero él iba a ser el que me lo pidiera; no yo...

-Bueno, es un placer haberlos conocido, pero debo de volver al hotel y descansar; desde que vine en avión no he podido apenas descansar.

Cuando me giré dispuesta para irme, Carter me tomó de la muñeca, haciéndome girar hacia él lentamente. Sus ojos mostraban fascinación y un gran interés:

-Señorita Waters, mi compañero Matt tiene toda la razón; hay que celebrarlo, ¿Le gustaría acompañarnos esta noche a una cena de empresa?

"Mierda,¿Una cena?,¿No puede ser a una discoteca o algo?"

- ¿Y no sería mejor ir a bailar? -Le pregunté mostrando mi más seductora sonrisa.

-Bueno, eso será después de la cena...

-Pues entonces, le veré después de la cena; así podré arreglarme con mayor tranquilidad-Le dije guiñándole un ojo antes de irme y dejarle mi tarjeta con mi número de teléfono.

Salí del pasillo y me metí en el ascensor con una gran sensación de victoria. La mirada ardiente de Carter fue lo único que vi antes de que las puertas se cerrasen y yo comenzara a reír como si yo fuera la bruja mala de la película y me hubiera salido con la mía.

MATT

Durante el trayecto hasta llegar al restaurante, Lisa parecía que no estaba en la tierra sino en la mismísima luna. Estaba claro que había pasado algo más en el transcurso de la mañana y estaba dispuesto a hacerle cantar.

Al entrar, Felipe nos recibió con los brazos abiertos y mi estómago lo recibió con una alegría aún mayor. Daba gracias a la naturaleza y los genes además del gimnasio, que me mantenía totalmente en forma a pesar de las cantidades ingentes de comida que me metía entre pecho y espalda.

Tras sentarnos en la mesa, Lisa aún seguía absorta en sus pensamientos que parecían blindado hasta contra misiles anti persona.

- ¡Lisa dale! ¿Qué te ocurre?

El golpe que di en la mesa la hizo volver a la tierra de golpe mostrando una cara un tanto tímida nada típica de Lisa.

-Lo siento Matt, es que la mañana ha tenido bastante movimiento...y sorpresas.

"Mira...movimiento como el que ha tenido Carter esta mañana con aquella mujer misteriosa"

Sonreí para mis adentros para que Lisa no se molestase conmigo y me dejara sin saber sus peripecias esta mañana. Puse mi cara de interés más lograda con mis ojos mirándola atento.

-Maldita sea Matt, siempre logras enternecerme.

-Es mi don y mi maldición, muñequita.

Ambos comenzamos a reír siendo interrumpidos por Felipe con ambas cartas. Las tomamos y miramos atentamente el menú.

-Por supuesto yo quiero raviolis de carne y un buen postre-Dije sujetando mi barriga rugiente como un león.

-Pues yo quisiera una ensalada césar y unos espaguetis boloñesa.

Felipe apuntó nuestro pedido marchándose canturreando a la cocina.

Cuando nos quedamos solos, volví a mirar a Lisa mientras bebía un vaso de agua:

- ¿Y bien muñequita? -Le pregunté con una ceja levantada.

-Bueno, no es nada Matt; es solo que cuando salí a por los cafés de recursos humanos, me topé con un hombre bastante misterioso que quiso invitarme a un café. Pero por culpa de mi trabajo de mierda que apenas me deja descansar, le dije que no podía. Así que he perdido la oportunidad de volver a ver a ese chico.

Comencé a reírme mientras que daba golpes a la mesa; esta Lisa no cambiaba. Ella se puso de brazos cruzados mientras me enviaba rayos por los ojos; me estaba mandando puyas envenenadas.

- ¡No tiene gracia Matt, si hubieses visto lo bueno que estaba!

-Disculpa muñequita, pero de hombres no entiendo, así que me fío de tu criterio.

-Eres un gilipollas,Matt-Me dijo con un enfado falso mientras que las lágrimas brotaban de mis ojos por el ataque de risa que estaba teniendo.

-Oh vamos muñequita, para compensarte te invitaré a la comida.

-A la comida y a algo más; me lo debes.

-Está bien, a las copas de esta noche; Carter quiere que cenemos todos juntos esta noche para celebrar su reciente negocio cerrado.

- ¡Oh genial, después de lo de hoy tengo que cambiar mi manta y mi helado por una cena y un baile donde estará la maldita de Cassidy!

-No te preocupes, tu caballero andante estará contigo para protegerte.

-Eso espero Matt, como te alejes de mí te patearé el culo.

Y conociendo a Lisa eso no iba en broma; era totalmente cierto.