—Todo empezó cuando comencé a tener curiosidad por las personas de mi mismo sexo en la pre-adolescencia... Mis padres tienen mucho dinero, y soy hijo único. Ellos nunca estaban en casa, ni nunca estuvieron para mí, así que no soy muy cercano a ellos. Pensaban que su falta de presencia se recompensaría dándome bienes materiales que todo chico a mi edad deseaba. Cuando cumplí 20 años, les dije que quería independizarme, no quería que me mantenieran más, quería dejar de sentirme inútil.

> Había ingresado a una universidad muy costosa, pero meses después la abandoné pues la carrera que había escogido no fue de mi agrado. Ninguna de las que estaban me interesaba... Preferí buscar un trabajo y valerme por mi mismo. Al principio a mis padres no les pareció, no quería que su único hijo fuera pobre o tuviera un trabajo mediocre. Así que sin decirme nada, me compraron una gran casa, esta casa...

> No podía protestar, ya estaba comprada, así que tuve que aceptarla y mudarme aquí. Pero al cabo de unos meses me sentía demasiado sólo en esta gran casa... Me había identificado como bisexual años atrás, nunca se los dije a mis padres ni tampoco es que fuera a interesarles. Pero sabía que había mucha gente como yo afuera, diferentes a lo común y siendo excluidos. Así que secretamente, comencé a crear mi propio grupo.

> Yoongi fue el primero en integrarse, era el único amigo que había tenido en la universidad y nunca me había molestado su peculiar forma de vestir, hasta lo podría ver atractivo. Pero hasta allí, en fin, no tuvo problemas con su madre sobre su apariencia, pero con su padre sí, a él le incomodaba que se pintara las uñas o usará brillo, o falda. Sabía que Yoongi estaba cansado de aquella extraña tensión que tenía, así que le ofrecí vivir conmigo. Él no dudó en aceptar y días después ya estaba instalándose en uno de los tantos cuartos...

> En el caso de Hoseok, yo supe hasta tiempo después que era su pareja. Hoseok también era mi amigo, y me sorprendió mucho pues nunca me había dicho la relación que tenía con Yoongi, aún si me veía junto a él y así.
Hoseok nunca tuvo problemas con padres ni su hermana, todos eran de mente abierta y le aceptaron. Lo cuál es una gran ventaja, aún así, quería irse de su casa como todo adolescente, así que le ofrecí una estancia aquí.

> Luego siguió Jin, en el caso de Seokjin lo conocí por Internet, constantemente sufría violencia verbal e incluso física de personas homofóbicas en su ciudad. Nos hicimos amigos y un día aquellas personas se sobrepasaron con su acoso, llegándole a terminar en el hospital. Personalmente fui hasta su ciudad a verlo, estando allí, le dije que se viniera a vivir conmigo. Que aquí estaría mejor y nadie le rechazaría, pues todos éramos una pequeña familia. Él, después de pensarlo seriamente, aceptó.

> Taehyung, a él lo conocí en un club, estaba borracho y se me insinuó pero ese día no quería nada con nadie, sólo pasaba para estar el rato, así que lo rechacé. De igual manera él insistió, hasta que de improvisto vómito en el suelo, gracias que no a mí. Muchas personas le reclamaron pero yo de lo contrario sólo pude sentirme afligido al ver su rostro descompuesto y lo perdido que se veía.

> Así que lo guíe hasta los baños y lo limpié un poco, al principio se negó pues pensaba que iba a hacerle algo, pero le hice ver que no había ningún peligro y que sólo quería ayudarle. Ni siquiera podía ponerse de pie, aún recuerdo... —rió levemente— En resumen, al final me contó su historia, él cómo siempre le habían atraído las personas sin importar su sexo desde muy pequeño, a esa edad el pensaba que aquello era normal. Hasta que un día, vió como sus compañeros de clase molestaban a un niño sólo porque al parecer era abiertamente gay. Taehyung había sentido miedo, y se escondió por mucho tiempo hasta llegar a la adolescencia. Apenas había cumplido los 18 años, y sus padres ya le comenzaban a insistir en que buscará vida afuera, así que al igual que los anteriores, le ofrecí mi casa y aceptó.

> Luego, está Jimin... Creo que... La historia más triste de todas, estoy seguro que ya te habrá contado algo al respecto. Pero en resumen, sus padres era creyentes extremistas de Dios, odiaban con todo su ser y alma a los homosexuales, los creían casi demonios. Siempre demostraban su total desprecio, Jimin sabía que era gay desde temprana edad... Cuando cumplió 20 años y cansado de aquél estilo de vida que llevaba y de estar escondiéndose, se confesó ante sus padres.

> Estos pues... No lo tomaron nada bien, le gritaron cosas despreciables, su padre hasta le llegó a golpear... Y sin importarles nada, lo echaron de su casa, como un perro. Le dijeron que nunca se atreviera a volver, y que ya no era su hijo. Jimin aceptó fríamente y les dijo que pensaba lo mismo, pues se avergonzaba de tener a unos padres tan ignorantes...

> Ese día, estaba lloviendo y yo salía de mi trabajo. Las calles estaban colapsadas así que decidí ir caminado a casa, de camino, lo encontré sentando en la orilla de la acera, con una maleta al lado y llorando desconsoladamente, completamente empapado por la lluvia. Me acerqué a él y le ofrecí mi ayuda, él me alejó y me pidió que lo dejara en paz. Pero al ver su labio roto, su maleta y su rostro destrozando, supe que no estaba bien y pude deducir qué había pasando.
Después de unos minutos lo logré convencer y lo llevé a la casa donde todos lo recibieron como uno más.
Como era de esperarse, le ofrecí mi hogar como su nuevo hogar y aceptó sin poder creerlo y totalmente agradecido.

Namjoon miró a Jungkook y hasta ahora se había dado cuenta que desde hace rato estaba llorando.

—Y finalmente quedas tú, Jungkook, un chico que buscó desesperadamente en Internet a alguien que le pudiese ayudar y contestar sus dudas. Días atrás, coloqué un anuncio respecto a eso, sólo me quedaba una habitación. Y apareciste tú, un chico tímido pero decidido en saber sobre su sexualidad, hijo único y con padres común y corrientes. Me caíste bien y quise que estuvieras junto a nosotros.
Así que te invité a venir y tú aceptaste, ahora... ¿Qué haré contigo?

Jungkook levantó la mirada y sorbió su nariz.

—Jamás le haría daño a Jimin, ni estoy intentando nada con él. Sí, discutimos pero e intentando remediarlo, sin embargo me ignora. Justamente como hice con él, cómo me pediste que hiciera, me dijiste que me alejara de él...

—¿Así que todo esto es mi culpa?

—Sí... ¡Digo no! Es solo que... —suspiró— Yo no quería alejarme de él, Namjoon. Y al hacerlo, estoy automáticamente dañándole. Nunca fue mi intención, de lo contrario, te hice caso para no herirle.

—Entiendo, ¿Y funcionó?

—¿De qué hablas?

—La idea era que te alejara de Jimin y te concentrarás en ti, en descubrir tu verdadera sexualidad... ¿Funcionó? ¿Ya lo tienes claro?

Jungkook lo pensó unos minutos y suspiró temblorosamente, asintiendo con la cabeza.

—Sí, ya lo sé... Pero... Lo diré cuándo me sienta listo y a todos...

—Perfecto.

Namjoon sonrió levemente y se levantó de la silla caminado hasta la puerta, Jungkook le siguió con la mirada, espectante.

—Jimin irá a Rainbow Room esta noche —dijo el mayor y el menor abrió ampliamente sus ojos— Si quieres quedarte, quiero que vayas allí y arregles lo que sea que haya ocurrido entre ustedes dos. De paso, vigila que no haga nada estúpido...

Jungkook mantenía la boca abierta sin saber que responder. Namjoon avanzó hasta la salida, pero se detuvo para voltear y decir:

—Espero que hagas lo correcto, Jungkook. No rompas la regla más importante: no relaciones amorosas.
Ya sabes la razón... Lo hago por el bien de todos y espero que cooperes y lo entiendas... —suspiró levemente para finalmente salir y bajar al primer piso.

Jungkook soltó el aire que al parecer estaba conteniendo y pasó una mano por su rostro, pensando.

Minutos después, ya había tomado una decisión.

—Lo siento Nam, pero tendré que romper esa regla...

holaaaa~ feliz año adelantado! <3
Aquí un poco de la historia de cada personaje, espero le hayan gustado.
El siguiente cap se viene intenso :)