—La odio, la odio, la odio... —se quejó Gaeul echándose a un lado en el asiento donde también yacía su amiga pacíficamente jugando en su celular.

—¡Oye, me hiciste perder la partida! —Reclamó Rei con una cara de suma indignación pero Gaeul no le prestó la más mínima atención. —¿de quien te estas declarando hater ahora?

—De Jang Wonyoung. —soltó para luego cubrirse el rostro frustrada.

—Oh, entonces ya no te gusta, ¿acaso ya te le confesaste y te rechazo? Joder, tenias que llevarme contigo para ver tú cara. —se burló la japonesa.

—Ja-ja-ja, qué chistosa, pero no... No le he dicho nada, aún...

—¿Entonces por qué tan exaltada y llevándome a tu desgracia haciendo qué pierda el PvP? —Gaeul rodó la mirada, Rei realmente era una viciosa con ese juego.

—¡Porque cada vez que hablamos ella sonríe tan lindo que se le marca su hoyuelo y me es imposible hablar! ¡¿No has visto lo tierna que se ve?!

Rei emitió un ruido con su nariz al escuchar la excusa.

—¿Es eso? Eres una ridícula.

—¡Hablo enserio!

—Yo también, ni que fuera un osito cariñosito la que te gusta.

Gaeul la fulminó, e inmediato y se acomoda en la banqueta.

—¿Ah sí? ¿Y que me dices tu sobre JiWon? Ayer te vi bien melosa como gata en celo con sus mimos. —Rei abrió sus ojos sorprendida, tanto la japonesa como su novia habían encontrado un lugar clave para estar alejadas del resto y que nadie las pillara en esa... situación.

—Uh...

—Deberías haberte visto : Mmh Liz, tus manitos son tan suaves. ¡Me gusta cuando me tocas el cabello!... No espero a casarnos y me acicales todas las noches antes de dormir... Oh Liz, liz, liz...

Las mejillas de Rei se pintaron rápidamente de un tono rojizo y no era precisamente el rubor de su maquillaje.

—Oh mierda, que vergüenza. —Y Gaeul río. —¡Pero eso no tiene nada que ver con que tú no te confieses a Wonyoung aún! Llevas tres años en las mismas, en dos meses se acaba el semestre y quizá nunca más la vuelvas a ver.

Gaeul se asustó con escuchar aquello, pensar en no volver a ver a Wonyoung y su tierna existencia era la peor de las pesadillas.

—¡No digas eso, por supuesto que me confesaré a Wonyoung!

—¿Y cuando será eso? ¿Cuando tengas un tubo de oxígeno en tú garganta y un bastón a un lado?

—No, lo haré pronto, tenlo por seguro que lo haré... —dijo firme y decidida. —Solo ruega para que no caiga ante su sonrisa y su hoyuelo.

Rei palmeó su frente.

Esta historia NO es de Mi autoría, todos los créditos le pertenecen a kiuthlyz
Gracias por dejarme adaptar este fic súper lindo ♡