Al día siguiente Felix caminaba de un lado a otro en el pasillo frente a su salón, aún faltaban quince minutos para dar empezada la clase y estaba esperando al coreano muy decidido a declarar sus sentimientos.

Bueno, tal vez la idea de decirle que le gusta mientras su profesor les explicaba química no era la mejor opción, pero si lo hacía durante el receso posiblemente volvería a caer en los encantos de su adorable amigo y se tragaría las palabras nuevamente.

—¿Hay algo que te moleste?— y hablando del rey de Roma, haciendo su aparición llamándola con ese suave tono de voz.

Como no podía faltar la sonrisa, pero agradecía que está vez fuera más leve.

—Q-qué, no... Estaba esperándote y como me aburría quise matar el tiempo.

—¿Caminando de un lado a otro como si estuvieras preocupado? ¿No era mejor esperarme adentro? —Hyunjin preguntó divertido y Felix apretó sus labios.

—Si, bueno, ya sabes, dicen que caminar te ayuda a desestresarse.

—¿Entonces si hay algo que te trae mal?—Volvió a cuestionar el menor levantando ambas cejas.

Felix entonces supo que su respuesta no estuvo bien ejecutada y se había delatado...
Un poco.

Quería que alguien lo pellizque por tonto.

—N-no, lo que quiero decir es— Hyunjin esperó a que hablara.—ugh, olvídalo creo que ya me entiendes..

—N-

Hyunjin estaba por hablar pero justo detrás de él había llegado el maestro.

—Cotorreando afuera del salón antes de empiecen las clases, ¿Debería bajarles esa A en comportamiento?

Los chicos se miraron asustados y rápidamente corriendo dentro, mientras el hombre reía burlón, era bueno tener un profesor buena onda.

Pasó química, física y ahora iban a filosofía, luego el receso y Felix aún no se atrevía a decirle nada a Hyunjin .

A pesar de que compartían banca el coreano parecía haber entablado una amistad con Minho, un chico lindo de baja estatura que tenía un lindo lunar en la nariz. Todas las horas de clase pasaban a compartirse notitas e intercambiar de vez en cuando palabras, algo que Felix ignoró porque no quería saber de qué se trataba.

Y claro, esto la alertó de inmediato porque posiblemente el coreano podría tratarse de una rival.

—¿Nos vemos en receso?—le preguntó el azabache a Hyunjin y este se quedó pensando unos segundos.

Felix sabía muy en el fondo que Hwang no lo iba a dejar por irse con ese chico que apenas creó amistad.

—De acuerdo.

Oh..

Cualquier falta de ortografía o nombres no coincididos se editarán al finalizar la historia.